Cap.1. Dolor:

Bella:

Muerte, una palabra a la cual todos les tenemos miedo, pero yo hoy no lo sentía, de alguna forma se había convertido en una simpleza para mí, no sentía ni el mínimo calosfríos cuando la oía.

De cierta forma, no podía evitar el pensar que al fín llegara, de esa forma, se eliminaría todo el tipo de Dolor que hoy sentía, sabía bien que Charlie estaría muy lastimado y eso no me hacia sentir orgullosa pero por otra parte sabia que al menos el estaría a salvo y eso me reconfortaba, sabía bien de Jacob en cualquier caso lo cuidaría y lograría que el saliera adelante.

Jacob, el solo pensar en él me hacía sentir aun mas peor, pues sabía lo triste e impotente que se sentiría si sabría que no pudo salvarme, que no estuvo allí para lograrlo, pero eso no era su culpa, nunca lo fué, ni siquiera el de los lobos que estaban a cargo durante las siguientes 12 horas, me sentía mal el solo pensar que yo ocupaba su tiempo, cuidando de cosas que tal vez son inevitables.

Justo ahora corría por el espeso bosque, aun no sabía hacia donde me dirigía pero aun así tenía algo en mente, si iba a morir ¿Qué mejor lugar en donde pase los mejores momentos de mi vida? Donde había vivido muchos momentos con él.

Edward, el pensar en él abría la fuerte herida que había en mi pecho, por un momento la sentí tal como el primer día, ese hueco tan profundo que nuevamente se abría paso en mí, por un momento pensé que no tenía ningún tipo de órgano, me sentía ligera, corría mas rápido de lo habitual a pesar de lo cansada que me sentía y lo poco alimentada que estaba, sabía bien que mi cuerpo podía desfallecer en algún momento pero no me importó. Necesitaba llegar con urgencia a aquel lugar que con solo verlo sabría que tendría paz, ese prado tan hermoso con el que siempre soñé, tal cual como la primera vez que fuí; cuando me encontré con Laurent, por un pequeño momento pensé que si iba a morir, pero gracias a los lobos aun estaba con vida, aunque no sé si fue lo mejor o lo peor que me pudo ocurrir, tal vez si ellos no hubieran llegado hoy estaría en mi lecho de muerte sin una pisca de dolor.

A pesar de que el prado esa vez estaba totalmente destruido, gracias a que todas las plantas hermosas y delicadas que alguna vez estuvieron allí desaparecieron, aunque yo sabia bien que quien las había arrancado había sido muy cuidadoso en no dejar ni la más mínima semilla en ella. Afortunadamente desde aquella vez tuve una idea. Tal vez no podía tener conmigo los viejos recuerdos salvo los de mi mente, pero eso no decía que no podía hacer nuevos, sin dar paso a mas una idea cruzo por mi mente y hasta el sol de hoy me dedique a hacerla realidad.

Decidí devolverle la vida a aquel precioso lugar, pues al fín y al cabo no tenía ni la más mínima culpa de todo lo que había sucedido, solo había sido una víctima de falsas ilusiones y quién, parte de unas cuantas "distracciones", aunque yo sabía muy en el fondo que no importaba cuanto yo tratara embellecer ese lugar, mientras él no este, solo será un prado hermosamente… simple.

No se como, ni en qué momento las lagrimas comenzaron a caer por mis mejillas, al parecer tenía tiempo en este estado puedo sentía mi cara empapada hasta el cuello pero no me importó, algo me decía que no estaba lejos y que ahora no era momento para rendirse.

Como si mi mente fuera una especie de brújula, acertadamente llegué. Allí estaba yo en todo el borde de él no pude evitar bajar la velocidad conforme me iba acercando que en el momento que estaba allí ya estaba caminando, cada vez más lento adentrándome en el, si es cierto que no estaba totalmente hermoso como la primera vez que estuve allí pero había recuperado aunque sea un poco, justo cuando estaba en el medio comencé a dar vueltas sobre mis talones, lentamente, admirando cada parte de él como si no lo hubiera hecho antes, pareciendo que era la primera vez que pisaba ese lugar, de repente todo el cansancio y el dolor me cayeron como 100 libras en mi cuerpo, trayéndome a la realidad, haciendo que a los segundos cayera rendida de rodillas en el suelo, poco a poco las lagrimas volvieron a aparecer, por más que lo quisiera mis ojos con tanto llorar jamás se secarían, cada vez me demostraban me tenían mas y mas, llevaba 6 meses llorando sin parar prácticamente y estaba segura que hoy no iba a ser la excepción.

- Bella…– dijo una voz demasiada conocida para mi, si, pues no era la primera vez en el mes que me la encontraba frente a frente, pero la diferencia de hoy es que estaba totalmente sola, había encontrado la forma para escabullirme de los lobos sin que me detectaran, difícil tarea, pero ella estaba cansada de jugar, llevaba meses jugando al Gato y al Ratón y hoy era el día en que la gran pantalla se apagaría después de decir Game Over.

- Victoria – dije con voz temblorosa, no podía evitar sentir un calosfrío atravesando mi columna vertebral cada vez que pronunciaba su nombre.

- ¿Por qué lloras? – dijo en un tono aparentado de preocupación

- ¿Es que acaso no puedo cumplir mi último deseo? – Dije vacilante – he hecho lo que me pediste, aunque sea déjame sufrir un poco por ello antes de morir.

- Esta bien, supongo que me gusta jugar con mi comida antes de deleitarla y créeme que estoy disfrutando cada segundo – dijo con una pequeña sonrisa de suficiencia para luego acercarse a mi – ¿Sabes? cuando James iba matarte, el iba a hacer algo muy creativo que me gustaría continuar y tal vez Edward después me lo agradezca – dijo ensanchando aun mas su sonrisa, el oír su nombre en sus labios solo fue como una patada en el estomago. A los segundos pude ver como de su pequeño bolso sacaba una Cámara de Video.

No pude evitar gemir en cuanto la vi, todos los recuerdos volvieron a mi mente como flashes aturdiéndome por completo

- Vamos Bella – dijo captando mi atención – diviértenos – su voz cantarina expresaba claramente diversión – dinos ¿por que estas aquí hoy? – solo la mire, sentía que no podía hablar – Bella, te lo diré por segunda vez a la tercera tal vez no vivirás para contarlo aunque de todas formas morirás, pero acaso ¿no quieres despedirte de Edward?

Escuchar su nombre de nuevo fue una abofeteada, no se daba cuenta el gran daño que me hacia el tan solo escucharlo, aun mas que el dolor físico.

- Oh Bella… es un gran Comienzo, continua llorando estoy segura que Edward amará eso – no me había dado cuenta de la forma tan furiosa que bajaban las lagrimas de mis mejillas, sentía que era imposible que pararan – Te daré una oportunidad más, pero tan solo porque Edward merece esto, cuéntame Bella ¿Por quién estas aquí? – de alguna forma ella tenía razón Edward vería esto en algún momento ella se lo haría llegar y aunque esta no era la mejor de la circunstancias, era un forma de despedida.

- Estoy… - dije con voz entrecortada – aquí por… mi culpa, supongo – sentía que no podía hablar mas

- No Bella, no nos mientas, sabes muy bien que esto es por culpa de Edward o acaso crees que ¿el dejarte sola es muy noble como para que tu lo cubras y te eches la culpa?

- No… comprendo

- Bella es obvio que esta era una simpleza de escusa para poder zafarse de ti, el que un vampiro le diga toda su verdad a un Humano, puede hasta costarle la inmortalidad y tu lo arriesgabas a él y a su familia ¿no crees que es lo más lógico, querida? – de alguna extraña forma, sabía que no podía creer en el ella, pero eso no quitaba la lógica en sus palabras, tal vez estaban inyectadas de veneno pero eso no le quitaba el beneficio de la duda, además ¿Cómo Victoria sabia que Edward no me amaba? Tal vez desde un principio todo fue muy claro que yo simplemente no lo quería ver.

- ¿Cómo llegaste a esa conclusión? Dudo que hayas hablado con Edward o alguno del clan

- en efecto – dijo y bajo la cámara – pero, yo tengo el triple de años que tu, tengo experiencias y se sobre vampiros… se lo tramposos que pueden ser, lo traicioneros que se pueden volver, lo grandes mentirosos que son y la forma tan natural en la que lo hacen – dijo con total seguridad – se todo aquello que una joven adolescente humana no puede ni imaginar en sus siguientes 10 vidas

- de ser así… entonces… - no pude terminar mi voz estaba muy quebrada, ella volvió a subir su cámara

- Exacto, el siempre te mintió – esas palabras parecían navajas cada una acuchillándome lentamente en mi cuerpo dejándome más débil de lo que me encontraba, cada vez que las recordaba volvían a producir el mismo dolor una y otra vez mientras retumbaban como eco en mi cabeza – ahora ¿tus últimos deseos antes de morir? – pregunto la Pelirroja, divirtiéndose cada segundo de la filmación, rápidamente respondí como acto reflejo

- Conviérteme en Vampiresa – dije con total seguridad, mi voz no tembló en ninguna de las palabras, pude notar a través de sus ojos la sorpresa, pero a los segundos volvieron a ser los mismos burlones rojos ojos con diversión en ellos, mientras que sus labios se convirtieron en una perfecta malévola sonrisa.


Hola a Todos y Todas

Bueno, esta es mi Segunda Historia, aunque creo que nadie ha leído la anterior, quiero publicar esta porque Amo Escribir y hacerlas me encanta además que se ha convertido en mi pasatiempo favorito,espero que alguien lo lea algún día y aunque sea saber Su Opinión como Siempre digo, es muy Importante para lo que piensen sobre la Historia.

Gracias Por Leer!

Cuídense, y Disfruten de las Fiesta, Mañana Año Nuevo Pásenla Excelente

Tratare de Actualizar Pronto

PD: La Historia es una Forma alternativa de Luna Nueva después de que Edward abandona a Bella, aquí ya han pasado 6 meses después de ese momento y desde aquí todo cambia y toma una ruta diferente. Les Prometo que No repetiré la misma trama y a Cambio solo les pido paciencia y una Oportunidad!(;