La vida contigo

Capítulo 1: ¿qué pasa?

Todavía recuerdo lo que paso esa noche, como no recordarlo si fue lo que cambio mi vida para siempre, nada fue igual después de eso, y todavía me cuesta entender como el destino nos juega estas pasadas. No es que lo haya pasado mal, sino que ninguno de los sucesos que se desencadenaron encajan en lo que cualquier chica de 18 espera de su vida. Pero que maleducada soy, todavía no me presente, mi nombre es Luinil, aunque en esos tiempos me conocían como Lucía, y lo que voy a contarles es mi historia...

Esa era una mañana como cualquier otra, mi mamá y mi hermana discutian porque Maqui no quería ir a la escuela, las ignore por completo y pase directamente al baño, donde el espejo me mostró una extraña imagen, era mía, pero a la vez no lo era. Era yo misma, pero mucho mas bella, con la piel mas luminosa, el cabello mas oscuro, era como si una luz brotara desde mi interior y recordé que alguien me había que así se veía el alma. Cuando volví a concentrarme en el espejo descubrí que no tenía nada extraño, mostraba mi cara dormida de todos los días, ese mismo sueño que ya me estaba haciendo alucinar, no le di importancia y continué con mi salida al colegio.

Camine, y camine , por primera vez teniendo miedo a la oscuridad que me rodeaba, sentía algo oprimiendo mi corazón, pero nada se compara con lo que paso al llegar a la avenida. Un grito, un grito frio y atormentado paralizo mi alma, si alguien sintió alguna vez el verdadero miedo puede que sepa de que hablo, no el asco por algún ser, o los nervios por lo desconocido, lo que sentí fue angustia, angustia que colmo todo mi cuerpo, ese sabor avinagrado en mi boca, que salía de mis propias entrañas; pero eso no fue mas que el principio, sentí como la sombra cubría la ciudad, y la vos silbante resonó en mi mente.

"Este mundo caerá bajo el poder del Único" Las luces y el ruido de los autos me trajeron de nuevo a la realidad, nada parecía ocurrir en mi agitada ciudad, todos seguían como siempre corriendo para no llegar tarde, sin pensar, sin vivir. No llegar tarde... por Dios si yo misma lo estaba haciendo, llegaría tarde al colegio, de nuevo, y mi celadora ya no creía ninguna excusa ¬¬... Camine a toda velocidad hasta el colegio, pude entrar justo antes que cerraran las puertas, al verme mis amigas rieron con ganas

"Otra vez entras justo" rió Campe "Si seguís así vas a terminar con la mejor nota en gimnasia, con las carreras que tenes"

"Que simpática -murmuré entrando al salón- si no me equivoco vos no estas mejor que yo"

"Bueno una tiene que desquitarse con alguien" reímos mientras nos encontrábamos con Gisel y Coki

"Que raro uds. dos llegando tarde" se quejo la última "¿Qué Juan no te acompaño esta mañana?" – a Coki su novio la acompañaba todos los días a la escuela, y , como decirlo...les costaba trabajo despedirse, por lo que siempre entraba después que nosotras "no- contesto tímida- tenía que ir al médico"

Estaba roja como un tomate, fue de lo mas divertido que recuerdo paso en esos días. Xxxxx DDDDDddddd

"ya se dan cuenta este año estamos hechas un desastre" comentó Gisel entre risas.

"Es el último- repuse- hay que disfrutarlo" de la nada los miedos de la mañana volvieron a nacer, no podía ver nada, la oscuridad me rodeo por completo y la vos helada susurro

"Nada podes hacer, tu tierra ya esta condenada" sentí le miedo cubrir mi corazón, un puño feroz tomaba mi pecho y lo oprimía sin dejarme respirar. Cuando volví a la realidad mis amigas me veían espantadas.

"Lucía estas bien???"- preguntaba Gisel a mi lado

"Como va a estar bien- discutía Campe- no ves lo pálida que está, parece que vio un fantasma" Sentía como mi cuerpo no podía dejar de temblar, mi mirada permanecía fija al frente y no podía articular palabra alguna.

La Hermana directora entró de golpe y todas mis compañeras se sentaron, sabía que tenía que hacer lo mismo, pero juro por Dios que no podía, mis amigas me tiraban de la ropa pero mis piernas no respondían y mi mente no podía coordinar y ensamblar todo lo que en ella pasaba. La Hermana me miro y supo enseguida que algo grave pasaba (si alguno fue a un colegio religioso sabe que las monjas tienen un poder único de conocer a todas los alumnos por el nombre, toda su situación familiar y legajo) me conocía mas que a muchas otras alumnas ya que era parte del coro al que le tenía adoración, no dudó en un segundo de sacarme de la clase y llevarme a dirección. Después de darme un te con miel para calmar mis nervios alterados preguntó con vos paciente y temerosa

"¿Qué paso Lucía?- al ver que yo no respondía comenzo- ¿te peleaste con tu mamá? ¿hay alguien enfermo en tu casa?" yo solo moví la cabeza en forma negativa y la mire con temor, cualquiera podría pensar que me estaba volviendo loca, pero sabía que no tenía mas opcion. Le conté cada paso que había dado esa mañana y sentí lo increíbles que eran mis palabras, pero ella me escucho con la expresión preocupada, cada vez mas seria ante cada comentario, fue entonces cuando todo se termino de desquiciar.

espero que les guste, este es mi primer fic, sean compasivos y dejen reviews