Hope

Capítulo 1 – Realidad.

Una noche como cualquier otra, una pony de color lila se encontraba merodeando por un bosque oscuro, al parecer buscaba algo mientras dirigía su mirada atenta a todas partes como analizando cada detalle de la zona. El resplandor de su cuerno le ayudaba a ver a los alrededores destellando con una tenue luz.

No está, No esta! – Mencionaba la pony perdiendo la paciencia. – No puedo hacer más por hoy, será mejor que busque un lugar donde dormir. – Exclamo un poco molesta.

Más adelante, en el medio de cientos de árboles, se encontraba una planicie perfecta para encender una fogata sin provocar algún incendio. La poni hizo levitar algunos trozos de leños que encontraba a su alrededor y los apilo haciendo una especie de pirámide circular, de bajo, algo de yesca llenaba los espacios vacíos para mantener la combustión un poco más de tiempo. Con un hechizo dirigido, la yesca se encendió y una llama tenue iba adquiriendo fuerza alumbrando lentamente los arboles del alrededor.

La poni se recostó en el suelo frio y se cubrió con una manta que llevaba en una mochila de casi el mismo color que su pelaje.

-Espero que Spike no se preocupe, parece que estaré un día más fuera de poniville, tal vez debí aceptar su compañía pero todas se veían tan ocupadas. – Mencionaba para sí misma dejando escapar un suspiro, el lugar era muy oscuro y algo tétrico pero se había permitido investigar antes, al parecer no había animales peligrosos en las cercanías por lo que la poni se sentía segura.

Después de mirar un momento las llamas, empezó a sentir sueño, las llamas brindaban un sentimiento de sosiego y calma combinaba con el calor agradable que emanaban, los parpados le pesaban tanto que no lucho más por mantenerse despierta dejándose llevar lentamente por un profundo sueño.

Los sonidos a su alrededor eran comunes, el crujir de las ramas quemándose, el viento soplando entre las hojas de los árboles que producía un silbido muy particular, y uno que otro aullido de algún animal que brindaba su canto a la imponente luna que brillaba en lo más alto del cielo.

Después de algunas horas, la poni se levantó de golpe observando el último aliento de la tenue fogata.

-Por que estoy pensando en eso… ese sueño… - la poni se levantó lentamente si prestarle mayor importancia y fue a buscar algunos leños más, el frio podía notarse en su aliento, formando pequeños remolinos visibles al mezclarse el frio del ambiente y la calidez del vapor que emanaba de su boca.

No paso mucho tiempo para que notara la luna y las estrellas, sin duda era una noche bella, completamente despejada y sin luces que opacaran la clarides de los cielos. No pudo evitar mirar la luna por algunos momentos, y después contemplar algunas de las constelaciones que conocía a la perfección, a primera vista el arquero apuntando su arco al infinito, sin duda alguna Orión era imponente, sobretodo su estrella favorita que resplandecía en la parte baja limitando la pata del arquero.

– Rigel – Menciono con una sonrisa pensando que probablemente hubiera sido buena idea haber traído el telescopio, poco después un sonido la arranco de su letargo casi de forma agresiva.

La poni levanto sus orejas para escuchar mejor pero al parecer el sonido que parecía una voz, solo se encontraba en su imaginación. –Tonta… estas sintiendo miedo sin razón- menciono entre risitas nerviosas mientras caminaba de vuelta.

-Twilight!- Esta vez, la voz ronca y grave se escuchó perfectamente. Twilight reaccionó de inmediato dando un salto atrás de donde había escuchado la voz, tomando una postura defensiva.

-Qu… ¿Quién eres? – Mencionaba desafiante pero no podía evitar que su voz se cortara.

La voz se reía despacio pero de una forma amenazante que podía escucharse en todas direcciones.

-Muéstrate!- Ordeno Twilight esta vez reuniendo coraje.

- Así que… la mascota de Celestia no necesita guardias- menciono la voz de forma pausada con el mismo tono amenazador. Twilight se sintió ofendida de inmediato y lanzo un hechizo que destello con fuerza iluminando el paisaje, pero no logro ver nada diferente.

-Las princesas no deberían estar tan solas, o podría ocurrir algo realmente lamentable- Mencionaba la voz de nuevo con ese tono irritantemente aterrador, Twilight podía escucharlo muy cerca pero realmente no había nadie a su alrededor.

-¿Que quieres de mí? – Menciono alterada desafiando a la presencia la cual volvió a reírse de forma calmada.

-Responde! ¿Qué quieres de mí?!- Repitió Twilight ya enfadada.

Se tornó un silencio desesperante, Twilight se mantenía calma, no lograría asustarla, pero esta presencia no se sentía como algo o alguien con quien haya estado antes, esta presencia era simplemente amenazante.

-Responde!- Exigió la princesa.

- Tu vida mi querida princesa- Susurro la voz en la oreja de la princesa, haciendo que mantuviera una mirada de terror en ella que de inmediato se tornó desafiante.

- Si buscas hacerme daño no será tan fácil!- Respondió Twilight ahora muy molesta.

Una luz roja mesclada con negro se posiciono alrededor del cuerno de la princesa, Twilight se sacudió de prisa e intento lanzar otro hechizo pero solo logro recibirlo ella misma, del impacto callo unos segundos al suelo reponiéndose rápidamente.

Twilight se daba cuenta de lo que pasaba, un hechizo de barrera estaba bloqueando su cuerno, no podría usar su magia por lo menos en algunos minutos siguientes.

-Lo vez princesa, ahora eres tan inofensiva como un conejo huyendo de su depredador-

Twilight siguió en la misma postura intentando no tener miedo y analizando la situación.

-Calma Twilight piensa… si está usando un hechizo de barrera no puedo usar magia, pero el tampoco puede hacer algún hechizo por un tiempo, puedo escapar volando, no soy tan rápida pero no tendrá tiempo para evitarlo.

De inmediato Twilight extendió sus alas y voló por encima de los árboles, miro hacia abajo intentando detectar al agresor pero no pudo notar nada extraño, después de unos momentos un rayo de luz roja salió de entre los arboles impactando con fuerza en su ala derecha. Twilight no pudo evitar dejar escapar un grito de dolor.

- Es imposible, ¿puede usar hechizos de barrera y otro tipo de magia?- pensaba Twilight mientras se precipitaba al suelo, al no poder usar su magia y teniendo un ala herida solo pudo protegerse manteniendo los cascos cubriendo su rostro esperando el impacto contra las ramas de los densos árboles. Se podían escuchar las ramas romperse mientras detenían poco a poco pero de forma dolorosa su caída, al romperse la última rama aún quedaba una altura considerable hacia el suelo, Twilight siguió en la misma posición intentando soportar el impacto que se avecinaba inminente.

Al golpear el suelo, por poco pierde la conciencia pero el temor de ya no despertar la hizo levantarse soportando el dolor que sentía en su pata trasera, en la cual un líquido cálido comenzaba a descender en ella, en ese momento, se permitió voltear rápidamente, parecía grave, ahora estaba sangrando, al parecer había absorbido la mayor parte del golpe.

-lo vez, ahora solo estoy jugando contigo querida princesa-

Twilight sintió un escalofrió recorriendo su cuerpo, el coraje se estaba esfumando transformándose rápidamente en miedo.

-Ya no puedes hacer nada, tu presencia solo lastima a los que están cerca de ti, incluso ahora, apartándote de mi camino todas tus amigas correrán el mismo destino.

-Cállate!, mientras siga con vida no dejare que les hagas daño!- menciono Twilight en respuesta casi inmediata manteniendo una imagen fugas en su mente de todos a los que apreciaba.

-No es necesario que yo haga algo, Tú ya has hecho suficiente-

-¿Q-que quieres decir? – respondió Twilight intentando que su voz no se quebrara

-Destruyes la vida de los demás intentando proteger la tuya y algunas cuantas más. – menciono la voz firmemente, la cual se seguía escuchando en todas direcciones.

-No sé de qué estás hablando!- aseguro Twilight. –Yo nunca le he hecho daño a nadie, Nunca lo haría-

-En ese caso… ¿por qué te sientes culpable princesa?

Twilight abrió un poco más los ojos incrédula.

-¿lo vez? Ni siquiera puedes responder-

- Y.. yo..-

-pon mucha atención princesa, esto te hará sentir mejor-

Una serie de imágenes se dibujaban alrededor, enumerando todos aquellos momentos en los que sentía haber hecho algo bien, pero atrás de ellos siempre había algunos ponis lastimados que no había notado y a los que no les había prestado atención alguna, en la última imagen Twilight no pudo evitar dar un salto cuando un escalofrió la recorrió, en esa imagen aparecía aquella hechicera presumida con la cual había soñado minutos atrás, alardeando de sus hechizos, al final la misma hechicera huía del lugar derramando algunas lágrimas.

Después de eso una segunda imagen apareció justo en el momento cuando esa hechicera fue derrotada, mientras Twilight era elogiada, la hechicera era agredida por algunos ponis que le lanzaban cosas haciéndola retirarse del lugar. Poco después la misma hechicera regreso para poderse disculpar con Twilight, una serie de imágenes más desfilaron, donde la hechicera estaba inmóvil sobre un escenario recibiendo toda clase de insultos, recibiendo los golpes de distintos objetos que volaban hacia ella, pasaba meses sin probar alimento salvo la yerba que crecía alrededor de un pequeño y desolado refugio, casi podía probar el sabor desagradable mirando el rostro de aquella hechicera.

-No… yo… yo nunca quise que le pasara eso…- menciono Twilight ahora con ausencia completa de su coraje, sintiendo el peso total de la culpa que en ella estaba creciendo.

-Pero hiciste que pasara-

-No! Yo quise ayudarla-

-Jamás lo intentaste en realidad, arruinaste su vida y ahora paga el precio por tus actos y no solo ella- menciono la presencia mostrando las imágenes de algunos ponis más.

La culpa de Twilight se incrementó de golpe, algo en ella no podía luchar contra esa afirmación, ahora unas cuantas lagrimas se desbordaban de sus ojos, preguntándose cómo fue posible hacerle eso… nadie se lo merecía sin importar que hubiera hecho.

-Ahora lo vez, solo son unas pocas vidas son las que te interesan-

Twilight dio un paso atrás sollozando

Entre la negrura del bosque una sombra tomaba forma delante de ella, unos ojos de color rojo brillante aparecían en medio de la oscuridad, la gran figura hacia crujir el suelo al avanzar hacia Twilight.

- corre, corree - se mencionaba así misma paralizada por el miedo y todas las emociones que se encontraban en ella en ese momento.

Twilight se dio la vuelta y corrió lo más rápido que pudo por entre los árboles, la presencia se sentía cada vez más cerca, se podía notar el miedo en los ojos de Twilight que no dejaban de derramar algunas lágrimas.

Poco después se detuvo de golpe al encontrarse al borde de un gran desfiladero, el sonido del rio en la profundidad era ensordecedor, Twilight volteo para mirar sobre sus pasos la figura que se acercaba.

-No puedes huir Twilight-

-¿Por qué haces esto?

-Solo te muestro la verdad, la culpa que te invade y el inevitable destino.

Un destello de color rojo salió disparado de la figura oscura arrojando a Twilight al desfiladero, Twilight solo podía mirar como sucedía todo casi con el tiempo detenido, una de sus alas posiblemente estaba rota, y su magia era inútil, su visión se nublo cuando sus ojos se llenaron de lágrimas.

-¿Por qué? – pregunto con una voz que se desvanecía rápidamente.

-Adiós Twilight- menciono la figura postrada en el borde del acantilado.

- Yo… lo siento… - Menciono la princesa antes de perderse en las oscuras aguas del rio.

Al día siguiente…

En medio de un bosque ubicado a las afueras de Ecuestria, una pony de pelaje azul y melena blanca caminaba arrastrando una carreta desgastada y chirriante al avanzar, hablaba consigo misma en voz alta intentando darse ánimos.

-Pff, Este día fue agotador, solo 2 ponis se quedaron hasta que termino el espectáculo, solo pagaron 2 monedas, se siente desaprobación en las miradas del resto y el refugio se está cayendo a pedazos, eso sin mencionar, que el estómago de Trixie esta vacío y la carreta lastima, pero vamos, la semana pasada fue mucho peor- sonrió unos momentos mientras se detenía delante del rio como intentando creer en lo que decía.

- Agh – Gruño la poni azul – A quien quiero engañar con esto… Toda Ecuestria odia a Trixie, No he comido más que yerba en meses, 2 de los cuales enferme por lo mismo y ya ni siquiera me quieren contratar en la granja de rocas o en algún otro lugar. Trixie… tal vez sería mejor que desapareciera.

Un recuerdo nublado apareció en la mente de Trixie, Aquella poni lila aparecía para derrotarla una y otra vez.

-No! – Grito – Eso no pasara! La Gran y Poderosa Trixie jamás volverá a mentir! Y será tan fuerte en la magia como esa dichosa Twilight Sparkle, solo necesito tiempo!, solo un poco más de tiempo, Eso es todo!... Me escuchaste Twilight Sparkle! Trixie No volverá a ser derrotada por ti!

En ese momento bajo la mirada hacia el rio, entre el pasto crecido se notaba una figura extraña y en el agua un color rojizo que se diluía lentamente. Trixie cerró un poco los ojos para mirar un poco más enfocada.

-¿Qué es eso? – Se preguntó mientras se acercaba un poco más – Parece un poni- se mencionaba mientras aceleraba el paso dejando la carreta.

Sus ojos se abrieron de golpe al reconocer la figura.

-¿Sparkle!?- menciono sorprendida mientras un temor dolorosamente familiar le recorría el cuerpo.

Sacudió su cabeza para salir del asombro e intentar reaccionar rápido. De inmediato un destello emano de su cuerno envolviendo a la lastimada poni, retiro todo lo que pudo de la tierra que cubría sus heridas y la llevo directamente a la carreta.

Era un escenario aterrador que nunca se hubiera imaginado, pensó que la próxima vez que la viera solo seria para poder verla vencida, pero en ese momento solo podía sentir preocupación.

Sus heridas abarcaban la mayor parte de su cuerpo con profundos cortes probablemente ocasionados por las filosas rocas, una de sus alas se encontraba mal herida y posiblemente su pata trasera estaría rota.

Cuando la acomodaba en la carreta con mucho cuidado noto que su cuerpo temblaba sin control, tal vez provocado por el frio o por alguna infección que ya hubiera contraído.

-Ten esto te abrigara- cuidadosamente envolvió el cuerpo de la poni en su capa y se apresuró a arrastrar la carreta lo más rápido que pudo.

- Esto… no… esto no puede pasar…. Estas asustando a Trixie, Sparkle –mencionaba intentando no pensar en lo peor - estarás bien, estarás bien- Mencionaba una y otra vez.

Después de recorrer un largo camino, justo enfrente se encontraba una casa muy deteriorada, con algunos cristales rotos y huecos en el techo.

Trixie levanto de nuevo a Twilight y corrió dentro abriendo la puerta principal con fuerza, camino un poco hasta encontrarse con una segunda puerta que llevaba a un cuarto aparentemente mejor cuidado que el resto de la casa. Al entrar recostó a Twilight en una cama bastante limpia y arranco literalmente un pequeño botiquín que se encontraba en la pared, producto de los nervios que la invadían.

-¿Que hago, que hago?- menciono la unicornio mientras temblaba asustada.

-Tranquila Trixie, has hecho esto muchas veces cuando te lastiman, puedes hacerlo- mencionaba para sí misma mientras respiraba profundo.

Tomo un trapo húmedo y agrego un líquido sobre él, lentamente comenzó a limpiar toda la tierra que quedaba, después una por una empezó a desinfectar las heridas profundas, Twilight lanzaba un grito ahogado de vez en cuando.

-Disculpa, sé que te duele pero tengo que hacerlo- menciono Trixie intentando no desesperarse.

Cuando todas sus heridas estaban desinfectadas comenzó por poner gasas en ellas, poco después dejo escapar un suspiro antes de hacer lo más difícil.

-Esto, te dolerá mucho Sparkle, solo aguanta- por un momento sintió despacio la pata trasera de Twilight intentando saber si solo se encontraba dislocada o estaba fracturada, después de un momento suspiro aliviada.

-Aquí vamos, solo será un momento- menciono Trixie nerviosa, sujeto a Twilight con sus cascos mientras sujetaba su pata con un hechizo, respiro profundo y tiro de ella fuertemente hacia donde debía acomodarse el hueso.

Twilight soltó un alarido de dolor mientras el crujir de los huesos acomodándose parecía resonar en la habitación.

-Eso… fue todo… Tranquila- le mencionaba mientas sostenía su casco intentado calmarla.

Lentamente inmovilizo su pata trasera poniéndola de lado.

En este punto, no tenía idea de que hacer jamás había visto un ala herida, reviso con cuidado, no parecía grabe, después de desinfectar retrajo lentamente las alas para después levantarla apenas para poder envolverla con las vendas, de esta forma no las podría mover mientras sanaban.

Recostó a Twilight cubriéndola con algunas delgadas mantas.

-E-eso es todo Sparkle- Mencionaba con voz quebradiza.

Poco después puso su casco despacio sobre su frente.

-Estas Hirviendo!- Menciono Trixie sintiendo ese temor de nueva cuenta.

Galopo rápidamente hasta un viejo mueble el cual tenía 2 cajones pequeños en la parte superior, Trixie abrió el primero el cual contenía un franco vacío de antibiótico, un pañuelo color blanco y un extraño libro gastado que aparentaba cierta antigüedad, en el cual solo se podía ver la palabra Lulamoon en la portada.

Trixie ajito el frasco preocupada, Twilight necesitaba antibióticos o mejor aún, una poción de sanación, solo había un problema, Trixie solo había reunido 2 monedas las cuales posiblemente estaban destinadas para comer algo después, las pociones son muy caras y 2 monedas no alcanzaban ni siquiera para un antibiótico, y aunque pudiera comprarlos esa opción era muy lenta y peligrosa para Twilight.

-Que voy a hacer, ya vendí casi todo lo que tenía – menciono Trixie al borde de un ataque de pánico. –Solo… - menciono Trixie mientras una idea llegaba a su mente, era dolorosa para ella pero no tenía otra opción.

-Trixie no se encuentra en un buen momento… a decir verdad no tengo mucho que ofrecer… pero aun puedo hacer algo, pero no puedo llevarte conmigo, si te muevo podrías empeorar, el pueblo más cercano está a algunas horas de aquí, creí que apartarme tanto como pudiera sería bueno para Trixie… ya no parece una buena idea ahora – menciono entre risas nerviosas- Tampoco puedo tele transportarme, soy realmente mala en ese tipo de hechizos y es una gran distancia. Solo te pido que aguantes un poco, Trixie llegara a tiempo te lo prometo, no importa cómo pero llegara.

Trixie invoco un pequeño destello de luz sobre la mejilla de Twilight asemejando una leve caricia, Twilight respondió con una sonrisa casi de inmediato.

Trixie tomo un cofre de color azul adornado con un grabado en el frente que asimilaba una "L", una mochila doble y una túnica color negro que posteriormente vistió, está la cubría casi por completo, poco después salió de prisa.

Afuera, coloco el cofre en la carreta, era algo pesado para llevarlo cargando con magia, dio un último vistazo hacia la ventana de la habitación y menciono.

-Solo algunas horas Sparkle te lo prometo, Trixie jamás rompe una promesa- después de eso galopo con toda la fuerza que sus patas le permitían.

Mientras lo hacía, miles de imagenes desfilaban en su mente recordando todo lo que había hecho, desde la primera vez que vio a Twilight hasta su disculpa antes de irse con su vida destrozada.

-Sabes… sé que realmente Trixie no te conoce bien, pero se todo el daño que te he hecho a ti y a todos los que estuvieron cerca, Tengo que admitir que las veces que venciste a Trixie, la lastimaron, Es verdad, pero también le devolviste algo que creyó perdido hace tanto tiempo. La sonrisa de tus amigos, los ponis mirando asombrados tus hechizos, el sonido de los casco al golpear el suelo repetidas veces con emoción, Trixie volvió a vivir en ti aquellos días donde no eran necesarias las mentiras para lograrlo- La voz de Trixie comenzaba a quebrarse- Trixie quiere demostrarte que también es fuerte, que también puede hacer magia tan poderosa como la tuya, no quiero mentirme más, a nadie más!- Unas lágrimas brotaron de los ojos de Trixie siendo arrastradas por el viento. – Tenemos un duelo pendiente Sparkle, esta vez solo será Trixie Lulamoon, Tienes que esperar a Trixie, Tienes que ser fuerte… por favor… Resiste. – menciono Trixie apretando sus parpados y cambiando su mirada a una llana de determinación.

-Ugss- Twilight lanzo un leve quejido, su visión estaba completamente nublada y sentía tanto dolor en su cuerpo que no podía moverse. Cuando su vista se aclaró un poco, pudo observar una bandera pegada en el techo, parecía ser algo vieja pero muy bien cuidada.

- ¿Lula…moon? – menciono Twilight leyendo la inscripción en la bandera.

-¿Dónde estoy?- se preguntó desorientada – esa voz la he escuchado en alguna parte, pero casi no pude entender lo que decía.. ¿Qué es ese sonido?- se preguntó girando su vista lentamente hasta ver un balde a punto de desbordarse llenándose con el agua que provenía de las goteras en el techo.

-Estoy segura que era… no… ella seguramente ya está muy lejos, ¿Quién es Lulamoon?- poco después Twilight perdió el conocimiento nuevamente, desplomándose en la almohada.

Trixie corría rápidamente por un sendero casi olvidado, cuando escucho un sonido familiar que le hiso alzar la orejas, fue entonces cuando una idea loca y peligrosa cruzo su mente pero reduciría el tiempo de viaje a tan solo un cuarto. Dejo la carreta a un lado para después hacer levitar el cofre y la mochila, posteriormente camino hacia un costado de las vías del tren.

-Está a sido por mucho, la idea más tonta que has tenido Trixie!- Exclamo como regañándose ella misma.

Poco después a lo lejos apareció la figura de un tren de carga que se acercaba rápidamente.

-Está bien… todo perfecto, solo es abrir la puerta y saltar, solo eso Trixie- mencionaba mientras sus músculos se tensaban.

-Voy a morir…- menciono irónicamente.

El tren se acercaba cada vez más hasta que cruzo enfrente, Trixie comenzó a correr lo más rápido que pudo, esperando la oportunidad perfecta.

-Ahora!- sin pensarlo con un hechizo abrió la puerta del vagón y con otro diferente arrojo sus cosas dentro antes de saltar.

Cuando salto tropezó con una tabla en la entrada del vagón y callo de golpe dentro. Su túnica callo suavemente sobre su cabeza mientras una risita nerviosa salía de ella.

-La gran y… adolorida Trixie lo logro- menciono alegre.

Cuando logro reincorporarse, cerró la puerta rápidamente esperando que no la hubieran escuchado, Cuando miro hacia enfrente, el vagón estaba lleno de manzanas, lo cual hizo brillar los ojos de Trixie.

-Trixie muere de hambre… tal vez podría…- mencionaba titubeando mientras hacía levitar una manzana hacia ella.

-No se darán cuenta si tan solo toma una… ¿verdad?- menciono Trixie acercándola hasta casi darle una mordida.

-¿Que estoy haciendo?- gruño – humillas, mientes, esclavizas ponis…. ¿Y ahora robas?... No!, la gran y poderosa Trixie no se rebajara a esto… Nunca!- Menciono mientras regresaba la manzana al canasto donde la había tomado. Poco después su estómago comenzó a rugir – pero tengo tanta hambre… Tal vez si Trixie come las hojas no pase nada, las hojas no se venden- menciono mientras arrancaba las pocas hojas sobrantes de las ramas que habían quedado en algunas manzanas.

Las acerco a ella e introdujo una en su boca, seguida con una mueca de total desagrado.

-Son muy amargas- reprocho antes de comer la segunda.

Cuando termino su estómago aun le reclamaba por comida seguido de una punzada de dolor, solo se limitó a echarse en el frio suelo del vagón.

-*suspiro* solo… espero que estés bien, llegare más rápido de esta forma, Resiste Twilight- mencionaba mientras su parpados caían rendidos, perdiéndose en un profundo sueño.

DarkWolfMX