¡Hola! Vengo aquí con mi nueva historia y mi primer fic de Bleach. Desde hace tanto tiempo quería escribir sobre Bleach porque bueno es mi anime/manga favorito pero nunca empece realmente, lo cual es raro porque todas mis ideas de borrador son de Bleach hahaha. Ayer en la noche me llego la inspiración y dije "¿porque no?" y aquí estoy después de como 2 horas escribiendo. No soy muy buena escribiendo (como tal vez algunos ya lo sabrán) pero la verdad lo disfruto mucho porque la verdad me gusta compartir gustos con la gente y porque no también mi loca imaginación. De verdad espero que les guste esta historia y la disfruten tanto como yo la disfruto escribiendo.

Disclaimer: Bleach es propiedad de Tite Kubo.

Capitulo I

Sus pulmones y piernas se estaban dando por vencidas, ya no podía correr más. Si su mente no le fallaba, lo cual dudaba pues correr así era muy tonto de su parte, ya llevaba por lo menos más de un kilómetro corriendo sin parar. Pero no podía evitarlo, su corazón estaba roto de tantas maneras que le era imposible llegar a otra conclusión que no fuera correr de sus problemas esperando tal vez que mágicamente estos se solucionaran.

Ya no pudo correr más y se apoyó en sus rodillas intentando recuperar el aliento. Volteo a todos lados intentando localizar el lugar donde se encontraba. Parecía que estaba a las orillas del bosque. Soltó un suspiro ya habiendo recuperado la respiración casi por completo.

—Orihime —alguien la llamo por detrás ocasionando que su cuerpo se tensara al haber sido encontrada. Lentamente se voltio encontrándose con su amiga pelinegra que la veía con preocupación.

—Tatsuki-chan —le sonrió fingiendo sorpresa y alegría de verla. —¿A pasado algo?

—Eso debería de preguntarlo yo —su semblante cambio a uno un poco más serio pero aun preocupado. —Saliste corriendo sin decir nada —Orihime comenzó a cambiar su peso de un pie a el otro nerviosamente mientras intentaba evitar la mirada de su amiga. —¿Es por lo que dijo Ichigo verdad?

—Para nada Tatsuki-chan —rio nerviosamente mientras agitaba ambas manos negándolo. —Lo que pasa es que comí tanto que me entro remordimiento y decidí salir corriendo para bajar la comida. Sabes que no estoy muy en forma —se rasco la nuca mientras seguía riendo.

—Orihime.

—Debería de hacer más ejercicio, una pequeña corrida y ya no puedo. Tal vez tú puedas enseñarme un poco más de artes marciales —hizo un par de movimientos y golpeo varias veces el aire.

—Orihime, está bien, puedes ser sincera conmigo —la nombrada dejo de golpear el aire y sonrió melancólicamente.

—Me siento como una idiota Tatsuki —se sentó acompañada de la pelinegra.

—Ichigo es un idiota —Orihime la interrumpió negando con su cabeza.

—No es eso —pauso por un momento viendo el horizonte. —Lo de Ichigo me dolió mucho, me duele, pero es algo que yo ya venía venir desde hace mucho tiempo —Tatsuki se limitó a escuchar todo lo que tenía que decir y solo la veía mientras hablaba. —Es solo que ya estoy cansada. Cansada de que todos piensen que soy una pequeña niña, casada de que piensen que soy una muñeca y que si me tocan me quebraran, cansada de que todos me protejan. —Tatsuki desvió su mirada de su amiga y la concentro en el mismo punto imaginario que esta estaba viendo. —Les estoy agradecía, en verdad lo estoy, y más a ti pero quiero aprender a valerme por mi misma.

—Podemos retomar las clases.

—No Tatsuki —la pelinegra volteo a verla algo sorprendida. —Quiero irme.

—¿Qué? —a pesar de casi haber gritado no logro conseguir la atención de la de cabellos naranja.

—Quiero irme a otro lugar, aventurarme en la vida, conocer los demás reinos. Vivir por mí misma sin ser la carga y lastima de los demás.

—¿Eso es lo que crees que pensamos de ti? —frunció el ceño no solo porque era estúpido lo que decía si no porque su amiga aún no se dignaba a verla. Tal vez porque sabía que si lo hacía tal vez ya no tendría el valor para seguir hablando.

—Claro que no, eso es lo que yo siento.

—Podemos dejar de hacerlo, no tienes por qué irte —su ceño se relajó un poco. La verdad le parecía estúpido que se fuera así nada más.

—Si me quedo con ustedes sé que jamás seré capaz de llegar a donde quiero —por primera vez desde que comenzó a hablar volteo a ver a su amiga. La veía con tanta seriedad y determinación que Tatsuki perdió todas las intenciones de seguir insistiendo. —Es algo que quiero hacer Tatsuki y la verdad te agradecería que me apoyaras en esto porque aunque no lo hagas es algo que yo ya decidí y algo que hare lo apruebes o no.

La pelinegra suspiro y se paró sacudiendo el pasto de su vestido. La determinación de a su amiga le hizo entender que ya no tenía caso seguir discutiendo. Orihime era la persona con el mejor corazón que conocía y sabía que cuando se determinaba a hacer algo lo hacía con todo su corazón puesto en ello. Se estiro un poco intentando liberar la tensión que se había generado.

—Sera mejor que volvamos se está haciendo tarde y todos deben de estarse preguntando donde estamos —le extendió una mano para ayudarla pararse. —Podemos aprovechar y decirle a todos.

—No —Tatsuki volteo a verla. —, no quiero despedirme. Sabes que no me gustan las despedidas. Te lo dije a ti porque eres mi mejor amiga y para que una vez que ya no este tú les digas y no preocupen —se sacudió el pasto y comenzó a caminar.

—No creo que sea lo mejor pero si así lo quieres —la alcanzo y caminaron en silencio por un momento. —Te voy a extrañar.

—Y yo a ti —sonrió. —Prometo escribirte apenas llegue a una ciudad grande, lo haré lo más seguido posible.

—Sé que lo aras —le sonrió. En verdad extrañaría a su mejor amiga y hermana del alma. —Los demás también te extrañaran.

—Yo igual —levanto su mirada al aun cielo azul que poco a poco comenzaba a oscurecer. —Extrañare este lugar, extrañare las tardes que pasábamos junto al el lago, los días en los que íbamos a explorar, extrañare todo pero también estoy emocionada por ver que pasara —sus ojos demostraron aquel brillo que Tatsuki bien conocía y el cual hizo que sonriera inconscientemente.

Después de un rato de caminar y recordad historias por fin lograron ver la entrada al enorme castillo de la capital de Karakura. Las luces estaban encendidas en todo el castillo dándole un brillo casi mágico al ser acompañado por las luces de las estrellas en el ya oscurecido cielo. Ambas sonrieron y tomaron camino para la puerta y encontrarse con todos sus amigos en aquella reunión que había abandonado no hace más de dos horas.

—Otra cosa Tatsuki —la pelinegra se detuvo junto con ella en la entrada esperando que su amiga continuara. —Me voy mañana.

Antes de que pudiera decir siquiera una palabra su amiga abrió la puerta y entro con una gran sonrisa dejándola en shock en la entrada intentando asimilar lo que le había dicho.

Espero les haya gustado. Este primer capitulo es algo confuso pero ya en los próximosles explicare mejor las cosas, este es como el capitulo que llevaa la historia. Les daréun poco de informaciónpara que entiendan mejor. La historia se sitia en la épocamas colonia de un mundo en el cual gobiernala monarquíaen todos lados y el mundo esta dividido por reinos ya despuésen los demáscapítulosles explicare mejor como esta todo. Intentare subir la continuaciónlo mas rápidoposible, tal vez mañana. Si tienen alguna duda no duden en preguntar.

Gracias por leer y nos veremos pronto.