Ohaio!

Bueno por motivos de fuerza comun, y mejor entendimiento de la historia, he cambia todos y cada uno de los capitulos a un formato de narración. Tambien aderi algunos detalles -no muchos-, espero y les guste.

Disclamer: La mayoría de los personajes son propiedad de la excelente mangaka Takahashi-senpai, onegai no me demanden, algunos de los personajes si son creación mía ya sabrán cuales conforme avance esta historia

"Que pasaría si descubrieras que han ocultado tu verdadero ser, y tuvieras que enfrentar una realidad mas cruel de la que vives? Esta es la historia de Izayoi, una joven de 16 años a la que le esperan grandes aventuras, pasen y dejen sus reviews..."

Acotaciones: (acciones) pensamientos GRITOS

Cáp. 1 "El secreto"

Una chica corre por el bosque, huye de un dragón que intenta devorarla, a pesar de su agilidad no puede dejar atrás al demonio y, ya que sus armas son inútiles y no le es posible defenderse. A llegado a un acantilado donde es acorralada por aquella bestia. Su única opción es saltar al río, es entonces que…

Izayoi: mi futuro esta en el pasado

Esta es mi historia, mi nombre es Izayoi Higurashi, tengo 16 años y voy en 1º de preparatoria, asisto a la Superior de Tokio. Esta es mi descripción: soy una joven de ojos púrpura intenso y cabello violeta largo hasta el tobillo, usualmente visto mi uniforme escolar (blusa marinerita y falda en tono azul cielo) pero desde hace tiempo uso el traje que me regalo mi madre. Vivo con mi madre y mi abuela en el templo de la familia; hasta hace unos días me creía una chica normal pero descubrí lo contrario.

Era un día como cualquiera, asistí a clases y como siempre se burlaron de mi cabello, no entendía por que era violeta, así que a la salida Sayo, Yumi y yo fuimos a tomar un helado para ahogar las penas, fue cuando la vi, a mi madre acompañada de un joven de cabello plata, extrañas vestimentas y una gorra; iban tomados de la mano. Me sorprendí mucho al verlos, no podía creer lo que mis ojos veían: mi madre con un hombre más joven, Salí de la nevaría dejando a mis amigas y comencé a seguirlos, se detuvieron en un parque así que me oculte detrás de unos arbustos a escuchar su conversación:

- a crecido bastante, mañana cumple 16 años- dijo mi madre observando hacia algun punto

-supongo se parece a ti- el albino la rodeo en un abrazo

- solo un poco, se parece más a ti en el carácter-

- están hablando de mí-

- dime ya le contaste de mi?- cuestiono el varón

- no, espero hacerlo hoy durante la cena- su voz era triste

- me parece perfecto, y… a mi no me invitas- dijo con entusiasmo

- sabes que no puedo, cuando ella lo sepa podrás quedarte más tiempo-

- que! Que se quedara más tiempo, eso no lo permitiré- estaba sorprendida, ella tenía un nuevo hombre y no lo aceptaría

- esta bien- el chico la beso con dulzura y ella se mostró feliz

- será mejor regresar al templo, no debe tardar en regresar-

- vamos entonces- él se pone de pie- sube- indica su espalda y ella se monta

- como en los viejos tiempos, vamonos- sonrió

Aquel muchacho comenzó a correr sobre las ramas de los árboles, su gorra cayó con el primer impulso dejando ver unas extrañas orejas. Me di prisa en llegar a casa para sorprenderlos antes que él su fuera. Al llegar a mi casa me percate que mi madre estaba en la puerta del templo del pozo, me acerque y fue entonces que:

- por cierto Aome, Kaede-sama dijo que el hechizo termina hoy- se escucho nuevamente la voz varonil

- que!- dijo ella con sorpresa- no puede ser, esto será un desastre-

- de que hechizo hablan- pensé- okaa-san con quien hablas?- me acerque, escuchando como algo caía dentro del pozo

- con nadie hija- me sonríe- como te fue en la escuela?- observe a todos lados sin encontrar a nadie mas

- donde esta?- sonreí para mi madre tratando de ocultar mi curiosidad- bien, como siempre-

- no me digas que se volvieron a burlar de ti?- lo dijo en su tono decepcionante, por que siempre me descubría?

- pues…- suspire resignada- si. Por que mi cabello es violeta okaa-san?- al cuestionarla se puso nerviosa, que es lo que se empeñaba en ocultarme

- pues…- miro a todos lados y dijo- mejor entremos a la casa y te explico-

Por que siempre me cambia el tema. Ambas entramos a la casa, donde la abuela preparaba una deliciosa cena. Cualquiera diría que tendríamos invitados.

- Tadaima- menciono mi madre al cruzar el umbral de la cocina, mi abuelita contesto con alegría

- Aome, hija se quedara a cenar…- no termino la frase pues mi madre le interrumpió

- ya llegó Izayoi-

- ups, hola hija como te fue- se acerco a mi y beso mi frente

- Bien, abuelita…- conteste feliz- quien se quedara a cenar?- otro nuevo nerviosismo ataco a mi madre

- por que no dejas tus cosas y bajas para cenar-

- esta bien ya vuelvo- me dispuse a salir- no lo aceptare, no aceptare un padre así estoy bien-

Subí las escaleras, deje mis cosas en mi habitación antes de mi madre en su infancia, me cambie y baje a cenar, comenzamos a comer; estaba desesperada por que me dijera lo que me tuviera que decir, quería dejar mis términos claros pero nunca espere la noticia que me dio, comenzó a oscurecer y la luna llena en el cielo nos miraba:

- Izayoi, tengo que hablar con tigo, acompáñame afuera- por fin pidio

- claro okaa-san- avanzamos a la salida- aquí vamos-

Antes de salir tomo una caja de la repisa, nos sentamos bajo el árbol sagrado, mi madre permanecía callada, un silencio incomodo nos rodeo, decidí que era tiempo de preguntar:

- que me querías decir okaa-san?- pregunte intrigada

- por donde empezar…- miro la caja que tenia en su regazo- recuerdas a tu padre?-

- sabes que no, el murió cuando era pequeña, se solo lo que me has contado, una persona fuerte, decidida. Que hay con eso?- entonces abrió la caja

- pues…- tomo una fotografía y me la entregó- él no esta muerto…- la sorpresa invadió mi rostro al ver aquella imagen

- es el joven que vi con ella- la mire con resentimiento- por que no me habías dicho… donde vive?...esta casado?...tengo hermanos?- muchas preguntas se aglutinaron en mi cabeza, mientras ella intentaba articular palabras

- yo…yo…- había confusión en su rostro

Me empecé a sentir mareada, me puse de pie y di unos pasos, sentía como el pozo me llamaba a él, de pronto caí al piso…y me desmaye.

- Izayoi… hija… estas bien…respóndeme….hi…ja…- sus voz preocupada se comenzó a desvanecer en el infinito.

.:o: Continuara:o:.

Espero y les halla gustado, no olviden dejar sus comentarios Mata ne!

Izayoi-san

El Destino es escrito por tu corazón.