Tenia mucho miedo con la tormenta eléctrica que había afuera, había ido a la cocina pues recordaba que había una pequeña lámpara que me ayudaría ya que el resto de la luz de la casa se fue, pero no la encontré y el miedo me ha paralizado.
Veo una silueta entrar por la puerta de la cocina y un rayo iluminando por una fracción de segundo y lo veo ahí parado, no puedo evitar levantarme con la poca fuerza que tengo en las piernas y lanzarme a sus brazos los cuales me reciben inmediatamente.
-Pequeña miedosa, no te encontraba tonta-
Me abraza con tanta fuerza y mis lágrimas empiezan a salir mientras me carga, con sus manos en mi trasero me hace abrazar su cintura y mi cara termina en su cuello, cubriéndome yo misma de la tormenta. Siento perfectamente como da un largo suspiro y sus manos rosando mi piel directo pues el short de mi pijama al parecer no es tan largo como debería.
Se que pensaran que es estúpido el temerle a los rayos, a la lluvia, fantasmas, arañas, inyecciones. Pero ¿han sentido esa sensación de vacío cuando bajan una pendiente muy rápido o mejor aun, cuando estas en una montaña rusa? Si esa adrenalina, pues es parecido solo que no se termina, en esos momentos incluso puedo decir que es agradable sentirlo, pero sabes que terminara, que estas seguro o solo dura unos segundos. Pero cuando tienes miedo a algo… no, fobia a algo, esa sensación permanece ahí constantemente subiendo de intensidad y no puedes hacer nada para que se detenga, se te oprime el corazón e incluso sientes que podrías desmayarte y que no despertaras.
Pero asi estando en sus brazos siendo alivio se que el nunca dejaría que me pasara nada malo.
-No… no quiero dormir sola, por favor- digo en un susurro cerca de su oído cuando veo que me quiere llevar a mi habitación.
-¿Con tu hermano?-
-No-
-¿Con Tomoyo?-
-No-
-Sakura, no puede volver a pasar, lo siento pero esta vez no-
Y se escucha un trueno que alumbra la casa por completo con tanta intensidad que mis lagrimas vuelven a salir inconscientemente.
Y escucho un "Fuck" de su parte.
Entra a mi cuarto y me baja lentamente en mi cama arrastrando una silla a lado de mi cama.
-Escucha no podemos seguir con esto, eres la hermana de uno de mis mejores amigos y eres menor. Me quedare aquí hasta que te duermas ¿entiendes?-
Toma mi mano mientras hablamos y se sienta a mi lado.
Se a lo que se refiere y se que tiene razón pero no puedo evitarlo, me gusta, siempre me ha gustado, desde que tengo memoria.
No quiero arruinar su amistad de toda la vida de mi hermano con él, pero quiero algo mas de él, además me lo ha dicho, el siente lo mismo por mi.
-¿Shao?- ha bajado un poco la intensidad de la tormenta y jalo un poco su pijama, se esta quedando dormido ahí.
-¿Mm? -
-Metete a la cama conmigo, no puedes dormir ahí-
Lo veo despertar de golpe y verme con algo de reproche con un ligero sonrojo en su rostro y estoy segura de que yo estoy peor que un semáforo en alto.
Suelta mi mano y se levanta de la silla para empezar a irse.
Me levanto igual de rápido aun en mi cama y lo abrazo por la cintura jalándolo con todas mis fuerzas haciendo que caiga sobre mi y escucho un grito ahogado de su parte por la sorpresa.
Se voltea aun sobre mi quedando su cara justo en mis pechos y levanta la mirada.
-Sakura, demonios… ¿entiendes que soy un chico? ¿entiendes lo que estuvo por pasar la otra noche?-
Asiento lentamente.
-No soy ya una niña Shao, tengo 17 y se perfectamente lo que paso y pasara-
Agarra mis manos y las sujeta con fuerza sobre mi cabeza, mientras veo como mete a su boca uno de mis pechos aun con mi pijama puesta y no puedo evitar gemir y retorcerme bajo el, sentir su peso, su boca, su fuerza, su aroma… me excitan demasiado.
Veo como se pone a mi costado soltarme para poder usar su otra mano y la lleva a mis piernas jugando torturosamente en mis muslos, demasiado cerca de mi coño. Y no quiero que lo haga, no por que no lo desee si no por que notara lo humeda que estoy ya, solo con tenerlo cerca, solo con esos roses y por culpa de su boca. Y lo noto, su erección esta contra mi pierna y volteo a verlo rápidamente.
Lo único que logro fue que me soltara de repente, se levanta tan rápido y llega a la puerta que no me da tiempo de detenerlo esta vez.
-¿Vez a lo que me refiero?, la próxima vez no me podre contener tonta, no me pongas en estas situaciones lo suplico- Y su mirada confirma la suplica, solo sale de mi habitación y no alcanza a escuchar mi susurro.
-Yo no quiero que te detengas-
Termino durmiendo profundamente después de acabar con lo que él empezó con mi cuerpo y darme cuenta que la tormenta a acabado totalmente.
-Saaaaakuuuu- Siento que me mueven y al abrir mis ojos veo a mi mejor amiga tan linda como siempre, aunque sea un año mayor que yo somos inseparables.
-Hola Tommy- y la abrazo volviendo a cerrar mis ojos.
Siendo como me empieza a hacer cosquillas y no puedo evitar empezar a reirme fuertemente y atacarla también a ella con cosquillas.
Ya es normal que pase es la única forma de que me levanten tan temprano en mis hermosas vacaciones.
-¿Me acompañas al bosque Sakurita? Vamos al lago, como anoche llovio seguro todo estará ¡hermoso!-
Y escuchamos que nos llaman a desayunar antes de que conteste si quiera y corremos a la cocina divertidas, jugando y solo me detengo cuando entro a la cocina y lo veo ahí nuevamente, sentado empezando a desayunar junto con el resto.
-Buenos días a todos-
-Apresurate monstruo para que vayamos al lago todos-
Solo asiento y tomo mi lugar, siempre junto a el y noto como me ve con algo de nerviosismo.
-Por cierto, no deberías usar esas pijamas aquí Monstruo y menos con la clase de pervertidos que trajiste-
-Que NO soy un monstruo, hermano, además no tiene nada de malo-
-Si, dejala Touya, aparte se ve lindísima ¿no Shaoran?-
Y lo veo atragantarse con su tostada y barriéndome con la mirada, sintiendo como si me desnudara, reviviendo sus caricas de anoche pues me ve los pechos con intensidad y luego se voltea a seguir comiendo rojo.
-La verdad si deberías usar otra clase de pijamas-
Y todos empiezan a discutir. Medio deprimida empiezo a comer mi desayuno ignorándolos pero alcanzo a escuchar solo yo a Shaoran hablando mas para si mismo que para mi estoy segura.
-Te vez hermosa y son fáciles de quitar, pero me daras un infarto de lo pequeñas que son-
Y no puedo evitar sonreir mientras seguimos comiendo, el dia paso rápidamente y nos dieron las 2 de la tarde cuando salimos al lago, con un picnic gigante.
Caminamos pues no estaba lejos de la casa.
-Eriol gracias por invitarnos es hermosa tu casa, un lago, un bosque, cocina, muchas habitaciones ¿Qué mas podemos pedir?-
Decia Tomoyo mientras se quitaba su ropa quedándose en bikini y abrazaba y besaba en los labios a Eriol y Shaoran viéndolos como apunto de matarlos.
Yo me quede tal cual estaba, en mi short y una playera larga blanca que hacia parecer que ni si quiera traiga el short abajo, me encantaba llevarlas asi, son cómodas.
Shaoran se sento a leer un libro junto a mi mientras el resto estaban tonteando, nadando, jugando volley y yo los observaba distraída, pensando en por que siempre terminaba rechazada.
-¿Te molesta la relación de Tomoyo y Eriol?-
Lo vi mirarme confundido, cerrar su libro y recostarse.
-Un poco, es mi hermanita después de todo-
-Lo sé, pero ellos se aman, estoy segura de que Eriol nunca haría nada que lastimara a Tommy-
-¿Qué a ti tambien te gusta Eriol? Que lo defiendes tanto siempre-
Eso eran ¿celos en su voz?
Y me rei suavemente mientras el volteaba a verme con el seño fruncido.
-Nop, me gusta otro chico pero siempre me rechaza-
-Sakura…- advirtió y sabia que me regañaría pero solo se quedo callado mientras me veía.
-Lo se, lo se, siempre me repites lo mismo, pero ¿hasta cuando dejare de ser menor para ti?, son 5 años de diferencia Shao o es por que acaso …¿ya no me quieres?-
Pregunte mientras contenia mis lagrimas con todas mis fuerzas.
-Tonta, tu sabes lo que siento por ti, pero simplemente no creo que se pueda Sakura, tu sabes que tu hermano es como un hermano para mi, aparte… necesito saber si tu en verdad me quieres o solo es como un hermano, como Eriol o como Yukito… no se Sakura no se-
-Tu sabes que yo te amo- Y lo veo levantarse, tenso y viéndome intensamente.
-No lo digas asi, pueden escucharte-
-Pues no me importa, nunca me ha importado Shaoran-
-Sakura por favor-
-Por favor ¿Qué? ¿Cuántos años mas tengo que esperar Shaoran? Desde los 10 años me gustas, NO, mejor dicho, siempre me haz gustado y a los 10 te lo confese y tu también, yo se lo que sientes por mi y solo te contienes por mi estúpido hermano-
Estaba llorando, sentía rabia, decepcion, y quería ocultar mi mirada por lo que me quite rápidamente mi ropa y me meti al lago nadando lejos de el, lo escuchaba gritarme pero preferí ignorarlo, ocupaba enfriar mi mente para soportar todo.
El resto de la tarde preferí ignorarlo, me la pase entre juegos con mi hermano, Yukito y Kaho, platicas con Yamasaki, Chiharu y Rika, con Tomoyo viendo películas, hice de todo con tal de no estar un solo segundo a solas con él.
Me intento buscar pero esta vez era yo la que no quería hablar, soy la mas chica del grupo y solo por eso siempre fui la bebe consentida de todos pero eso siempre fue una excusa a la vez para no dejarme hacer muchas cosas.
Incluso mi hermano, ese dia que nos declaramos Shaoran y yo, fue el dia que cumplio 15 y cuando nos vio abrazados y apunto de besarnos, solo era un beso casto un pico como lo llaman. Enfureció le dijo que como podía estar sonsacando a su pequeña hermana, todo frente de mi, lo golpeo y tuve que intervenir le dije que solo lo abrazaba por su cumpleaños y que lo besaría en la mejilla, que si lo quería pues lo conocía de toda la vida, como era posible que lo golpeara.
Shaoran no intento defenderse en ningún momento y en cambio su mirada era cada vez mas culposa, volteando a verme con cada golpe.
Mi hermano se tranquilizó y se disculpó con él, dijo que estaba preocupado por que pasábamos demasiado tiempo juntos y yo apenas era una niña de 10 años mientras que ellos… bueno ellos empezaban a hablar de otros temas y no querían que me pervirtiera o abusara de mi inocencia.
Desde ese dia Shaoran empezó a ser mas distante conmigo, seguíamos llendo a todos lados juntos pero ya no me abrazaba, no volvió a intentar besarme, no volvió a decirme que me quería como antes lo hacia, de besar mi mano de la nada cuando íbamos juntos caminando, cambio demasiado su relación conmigo.
Él era el único que sabia de mis mayores miedos ni si quiera mi hermano o mis papas lo sabían, desde que recuerdo pasaba mas tiempo en nuestra casa que en la suya. Empezo a vivir solo desde los 10 años y cuando mi madre lo supo lo obligo a vivir con nosotros, poco tiempo después llego su hermanita también de vacaciones y ambos prefirieron quedarse en su departamento, aunque seguido iban pasar varias noches en nuestra casa.
Cuando tenia mucho miedo siempre me cargaba en sus brazos ocultándome en su cuello y se quedaba conmigo hasta que pasaba mi miedo.
Pero hace unas semanas fue distinto, todavía en nuestra casa se logro escabullir a mi cuarto cuando inicio la tormenta y durmió abrazado a mi, en medio de la noche no se por que pero no resistir el deseo de darle un beso y eso lo despertó sorprendido. Me había contenido 7 años ese beso y aproveche su sorpresa para darle otro.
Enseguida empezó a contestarme, haciendo cada vez mas intensos los besos metiendo su lengua en mi boca y sus manos no se quedaron quietas.
Las paso por mi torso levantando mi playera, bajaban hasta mis piernas acariciando todo lo que podían, de repente intento separarse de mi y para evitarlo volvi a pegar mis labios a él quedando casi sobre su cuerpo, uso sus manos para acomodarme desde el trasero aprentandomelo.
Y cuando note algo duro debajo de mi empezó a moverme por las caderas, haciéndome mecerme contra él. Senti delicioso y cuando me solto yo continue el movimiento queriendo sentirlo mas.
Saco mis pechos de la pijama pues no traía nada abajo y no pude evitar sonrojarme al ver su mirada fija sobre mi y no pude evitar gemir con intensidad al notar su boca rodeando uno de mis pezones, mientras usaba una de sus manos para callarme y continuaba moviéndose fuertemente contra mi.
Senti algo delicioso que supuse yo era un orgasmo, asi solo con rosarnos mutuamente y sus manos que nunca se detuvieron y su boca que buscaba la mia y lamer cada parte de mi cuerpo.
Y entonces cometi mi error al parecer, quería hacerlo sentir tan bien a él como lo hizo conmigo y baje mis manos hasta su entrepierna, empecé a acariciar su abdomen y cuando puse mi mano justo en su pijama, cubriendo su erección, note como me miraba desconcertado.
Los ojos totalmente abiertos y se paro haciéndome caer aun lado, agarrando su cabeza sin creer lo que hacíamos.
Se me rompió el corazón pues me dio a entender que había sido un error, asi sin palabras.
Salio de mi cuarto dejándome sola y con la pijama mojada, de sus besos, sudor y de mi misma.
Note como continuo la tormenta la cual se hizo aun mas intensa y volvi a sentir ese miedo incontrolable. Trate de dormir pero no logre nada el resto de la noche.
