Las leyendas nos cuentan una cosa y la historia nos dice otra... pero de vez en cuando nos encontramos con algo que pertenece a ambas. De personas antes de la guerra, de personas que contaban con grandes cualidades de controlar los cuatro elementos: Agua, Tierra, Fuego, Aire. aquellas personas se les conocían como "Maestros".

La ventaja que estos maestros tenían era enorme en comparación con una persona normal, lo cual generó una desigualdad y desventaja en la sociedad. Pero con el paso del tiempo la tecnología poco a poco fue borrando esa desventaja, llegando a ser solo una línea delgada que los separaba.

También existieron personas que conformaban un gran grupo que buscaban la igualdad para todos, expandiéndose por todas las partes exigiendo la prohibición de todos los maestros, el arte de control sobre algún elemento. Poco a poco fueron ganando terreno. Orillando a los maestros al nerviosismo.

Las negociaciones se transformaron en discusiones, las discusiones se volvieron disputas, las disputas se tornaron en batallas y al final la batalla se convirtió en Guerra. La Gran Guerra Elemental dividió a todos en dos grupos: la Facción Elementalista (FE) y la Unión Revolucionaria (UR).

La facción elemental estaba conformada por la mayoría de los maestros elementales, pero también contaba con el apoyo de personas normales que creian que nuestro mundo necesitaba.

Mientras que la Unión Revolucionaria estaba totalmente conformada por no-elementalistas. A pesar de no poseer las habilidades de los maestros elementales, ellos superaban en número y armamento. hay rumores que dicen que la UR fue fundada por un antiguo movimiento revolucionario que existió mucho antes de la guerra llamado "igualitarios". Pues compartían los mismos ideales... una sociedad sin maestros elementales para de esa forma lograr la igualdad en el mundo.

La gran capacidad armamentista que poseía la UR era impresionante capaz de hacerle frente a la Facción Elementalista, las armas de esa época pudieron hacerles frente a los cuatro elementos, la ventaja sobre las personas normales ya no existía y la derrota de la FE fue inminente, el precio de la victoria de la UR fue grande... el olor de cenizas y la sangre de cubría todo el mundo, no era de extrañarse los resultados que deja la guerra. Desde ese día se quemó todo rastro del antiguo mundo y de las cenizas nació uno nuevo. Con nuevas naciones, nuevas leyes y nuevas esperanzas.

Como era de esperarse se declaró que el uso del control elemental como indebido y no había justificación alguna para su uso. Todos los maestros fueron tratados como criminales y también todo aquel que lo ayudara era castigado severamente. pero a pesar de estas leyes radicales sobre los maestros elementales se creó una alternativa para aquellos que quisieran vivir en paz. se les dio la opción por voluntad propia de remover su arte control por un método antiguo, asegurando su bloqueo con el elemento.

De esta forma poco a poco se redujo el control elemental en la sociedad, con el paso del tiempo nadie hablaba del control elemental y las nuevas generaciones no se las mencionan y ni siquiera les inculcan la existencia de estas habilidades. Llegando al punto que el tiempo lo arrancó de la historia transformándolo en simples leyendas urbanas.

Pero ... ¿Qué pasa cuando un residuo de estas leyendas se niega a morir?... ese sobrante tienta contra la paz de nuestro mundo y es aquí donde entro yo. Mi trabajo es encontrar los restos de la guerra elemental, todo lo del mundo antiguo y borrarlo por completo. Ese es mi deber, mi destino... mi venganza.