Roto para siempre
La muerte llega demasiado pronto,
Siempre demasiado fácil
Nunca demasiado genuina…
Y le vio caer
"Sherlock…"
Manoteando en el abismo que se extendía bajo sus pies, precipitándose al vacío.
Corrió hacia donde él estaba con horror. Todas sus emociones se agolparon en su pecho… en su garganta, atorándose como un nudo grueso imposible de tragar.
Mientras corre va dando tropezones como un borracho, una bicicleta le arrolla tirándolo al suelo, golpeándose la cabeza contra el pavimento con un "crack" que resonó en sus oídos, dolorido y con la vista desenfocada fue a él avanzando como un bebe que aprende a caminar, ignorando un poco el dolor físico y emocional que sentía con la adrenalina taladrándole los tímpanos.
La gente se agolpaba a su alrededor, convirtiendo aquello en un espectáculo mórbido, llamando con sus celulares y hablando entre ellos, empujo a unos cuantos diciendo:
"¡apártense soy médico! "
La primera imagen que tuvo fue la de la sangre se esparcía por el pavimento alaciando los rizos de su cabeza
Toco su muñeca entre sus dedos para comprobar lo que sus ojos le mostraban y la respuesta fue clara….sin pulso, su mente se lo dijo en fracción de segundos.
Una mujer le separo la mano de la muñeca mientras farfullaba algo que no alcanzo a escuchar, todo pasaba en cámara lenta, ¿o era el quien no alcanzaba a comprender por la velocidad en que se estaba desarrollando todo?
"no hay pulso, no hay pulso, no hay pulso..."- se repitió en su cabeza una y otra vez en un torbellino de confusión, los paramédicos aparecieron enseguida con una camilla, mientras sus piernas fallaban, sintió como una de las mujeres le sostenía y otra mas le llamaba, cayo al piso mareado de aquel torrente de emociones que se alzaron con fuerza agolpándose a la vez dejándolo indefenso al dolor y pánico, y solo entonces perdió el conocimiento mientras veía como ultima imagen como se lo llevaban perdiéndose en la negrura de la inconsciencia.
Despertó en el hospital, lo supo de inmediato al estar tan familiarizado con el olor a antiséptico y los tonos de las maquinas provenientes de otros cuartos
Le hubiera gustado que su cerebro no se hubiera aclarado tan rápido, que permaneciera obnubilado, ajeno a la realidad.
Los recuerdos trémulos se agolparon mientras sentía que los ojos se le empañaban, ¿Por qué resultaba tan difícil enfocar el techo?
Sintió exactamente el momento en que el dolor le llego, primero despacio, invadiéndole como ponzoña, amainando con fuerza en su ser, para trepar por su sistema e implantarse en su pecho, su respiración comenzó a alterarse al punto en que le fue casi imposible respirar, se aferro el pecho con un puño estrujándose el suéter que llevaba puesto, sintiendo un pinchazo agudo surgía del centro de su pecho, apretó los ojos y se obligo a levantarse de la camilla, con el único pensamiento que gobernaba en su ajetreada mente
"¡Sherlock!" El nombre surgió en su cabeza una y otra vez, consternándolo, apenas y fue consiente al tocar el suelo que no llevaba zapatos y estaba conectado a un suero
Lo despego de su mano sin mucho cuidado y con evidente confusión, la puerta se abrió cuando estaba a punto de avanzar, ahí estaba Lestrade
Se miraron el uno al otro a los ojos, Lestrade siguió con sus ojos los movimientos de John cuando se acercó a él, recorriendo el aspecto que ofrecía, las gotas de sangre en el antebrazo que pronto fueron cubiertas por el suéter crema, John observo detenidamente el rostro lívido de Lestrade y ambos supieron las intenciones del otro enseguida.
John sentía sus ojos que se tornaban vidriosos y tuvo que llevar una mano a su pecho de nueva cuenta por que las oleadas de dolor se volvían mas intensas
-John, ¡por favor cálmate!-le dijo mientras apoyaba su mano en su hombro estrujándole un poco para imponer sus palabras
Los labios de John temblaron mientras balbuceaba –She…Sher...lock- logro decir mientras tomaba los antebrazos de Lestrade enterrándole los dedos
-Sherlock...- la voz se le iba rompiendo con cada repetición haciéndosele mas ronca, ladeo su vista mientras las lágrimas luchaban por fluir de sus ojos y el nudo en su garganta se apretaba mas firmemente, respirar era incluso doloroso teniendo que jadear por oxigeno
-¡John! –le dijo asustado Lestrade
-Murió John…-le dijo lo más suave que pudo, mirando al rubio con pena, mientras John se iba debilitando, temblándole las piernas y ambos caían al suelo arrodillados, mientras por fin John se derrumbaba, una cosa era el hecho y otra expresarlo con palabras, por que eso lo hacia real y verdadero
-¡NOOO!...¡NOOOO!-grito y la voz que salió de su boca ya no era la suya, estaba rota y los sollozos se hicieron fuertes e incontrolables, desconsolado trato de levantarse con dificultad
-¡Moriarty!... ¡debemos atraparlo!, ¿donde esta?, ¿donde esta Sherlock?, ¡Sherlock tenia que atrapar a Moriarty!- dijo trastocado, diciendo las palabras entrecortadas mirando como un demente a Lestrade que solo negaba con la cabeza decepcionado
-No John…se acabó...-le dijo obligándole a soltarlo mientras se ponía de pie despacio
-Debo ir a la estación de policía –le dijo como si aquello fuera una disculpa, le apretó el hombro con fuerza tratando de trasmitirle algo que no llego a John, mirándole hacia abajo donde los ojos del médico le devolvieron la mirada suplicantes y rojos por las lágrimas que no dejaban de fluir.
John manoteo un poco para atrapar su brazo pero Lestrade retrocedió –Lo siento John…era una farsa –dijo al tiempo que John se arrastraba sobre sus rodillas tratando de alcanzarle negando diciendo bajo y frenéticamente "no…no…no…" tapándose los oídos negándose a escuchar esas palabras, esas mentiras…
¡Engaño a todos!-le dijo como si justificara algo abriendo sus brazos –Nadie puede ser tan inteligente
Negó con la cabeza al reconocer las palabras y mandarle un nuevo aguijonazo de dolor, se limpio las lágrimas que aun bajaban por su rostro negándose a creerlo, pero en su mente pasaba la misma imagen, Sherlock cayendo, Sherlock precipitándose al vacío, Sherlock al otro lado de la línea, Sherlock diciendo "esta es mi nota, la gente hace estas cosas ¿no?"
-¡Sherlock!-dijo en un grito agónico, mientras las paredes se estrechaban a su alrededor y trataba de atrapar algo de aire, la cabeza le dio vueltas, sintió unas tremendas ganas de vomitar y por ultimo se desplomo en el piso como un árbol caído.
Quizá si John no hubiera estado tan envuelto en sus emociones se abría percatado de sus propios síntomas, tal vez podría haber sido capaz de tomar el manejo de la situación, pero fue como si todo el control que poseía sobre si mismo se hubiera roto, como si después de aquel salto de la azotea del Barts quien hubiera caído, despedazado y en trizas, hubiera sido el, por que después de aquel momento, John…no pudo volver a recuperarse.
