Manos vacías.
Resumen: Después de casi quince años en Midgrad, Thor ha regresado a casa junto a Jane, a quien cree querer. Pero su regreso estará lleno de sorpresas, como la noticia de que su consorte no es más su consorte y que sus sentimientos no son los que creía. Ahora deberá luchar para recuperar lo que él mismo dejó ir.
Perdida en tu amor
Dormida en un sueño
Perdí la razón con tus besos
Y me amaste y te cansaste
Y me lanzaste al olvido
No duro más que un respiro.
Capítulo 1: La princesa de Asgard.
Loki corrió nuevamente al baño para vaciar su estómago, era la quinta vez en la mañana que iba y se sentía realmente exhausto, se lavó el rostro y los dientes antes de arrastrarse hacia la cama, se dejó caer sin elegancia en ella y se envolvió fuertemente en ellas mientras su cuerpo temblaba ligeramente. Escuchó unos toques en la puerta antes de que esta se abriera dejando pasar a Frandal, el rubio lo miró preocupado y se acercó rápidamente.
-¿Otra vez te sientes mal?-el pelinegro asintió levemente sin moverse ni un centímetro-deberíamos ve a los curanderos, ellos tienen hierbas, pueden ayudarte.
-No puedo ni moverme, Frandal… no te preocupes, ya pasará…-el rubio lo miró preocupado, Loki se sumió en un duermevela inquieto mientras Frandal veía por su tranquilidad.
-¿Cómo se encuentra?-preguntó la madre de todo, Frigga, mientras ingresaba al cuarto.
-Tiene vómitos, escalofríos y temblores-dijo el rubio con ademán preocupado-creo que también tiene debilidad y no quiere ir donde los curanderos.
-Esto por Thor, estoy segura… bueno, no importa, igual tiene que irse a ver, no puede seguir así, tiene apenas tres meses, el bebé puede estar en riesgo.
-Lo cargaré-el rubio alzó al pelinegro en brazos, Loki se removió un poco pero no se despertó. Frandal y Frigga lo llevaron hacia la sala de curanderos donde dejaron que uno de ellos lo atendiera.
-Le daremos un preparado para que recupere fuerzas y luego otro para los malestares, el rey estará bien pronto, señores-ambos asintieron mientras veían al chico descansar.
-No podemos dejar que siga así-musitó la mujer acariciando el ahora opaco cabello negro.
-Lo sé, mi señora, yo… en verdad me preocupo por él, quiero que sea feliz.
-¿Lo quieres, no?-el rubio asintió-Sé que lo cuidarás como mi hijo no quiso hacerlo, Frandal.
-Yo… realmente no entiendo a Thor, mi señora, siempre pareció que lo quería mucho y luego en Midgrad… esa mujer, me sorprendió saber que se había involucrado con ella, ha destrozado a una persona que no lo merecía.
-Yo tampoco lo entiendo querido… ahora Odín está sumido en su sueño y la orden de destierro puede ser removida, he sabido que El Destructor ha estado en Midgrad causando problemas ¿Sabes quién lo ha mandado?
-No, señora, El Destructor es parte de los Jotun ¿no?
-Sí pero no entiendo por qué Laufey querría destruir a Thor siendo que ahora Loki es el rey.
-Si me permite ser perfectamente honesto, mi señora, Thor ya no es para mí ese amigo que solía ser, dejar a su consorte solo, con un reino por guiar y un hijo en camino… no es el Thor que yo conocí.
-Según Loki él jamás tuvo la oportunidad de decirle de bebé.
-Tampoco quiere que se lo digamos, no quiere saber nada de él.
-Creo que es mejor, en parte, Loki necesitaba calma, paz y tranquilidad en su embarazo.
-Yo más bien creo que él necesita superar esto, necesita llorar una última vez para voltear de página, para poder desligarse del pasado y ganar esa paz que su alma tanto añora.
-Tal vez tengas razón…-Loki empezó a removerse en esos momentos y ambos dejaron su conversación inconclusa para ir a su lado.
Te amé con el alma
Creí en tus palabras
Que hoy ya no valen nada…
-No me siento seguro de estar aquí-musitó Loki vestido con ropas midgardianas.
-Es necesario, Loki, necesitas convencerte que Thor es una etapa que debes cerrar-le dijo Frandal a su lado, veían a Thor luchar con el Destructor, Loki se sentía preocupado a pesar de todo pero no podía dejar de notar como Thor protegía a esa mujer.
-Ha recuperado a Mjolnir, pronto lo vencerá-ambos observaron cómo el martillo llegaba a su mano y con un solo golpe vencía finalmente al monstro, Thor sonrió cansado y Jane lo besó. Loki los observó con lágrimas en los ojos y se giró.
-Creo que ya vi suficiente-murmuró, Frandal tomó su mano y ambos desaparecieron del lugar. Al llegar Loki se dirigió a paso rápido a su habitación y no salió en lo que restaba del día, Frandal y Frigga se encontraban preocupados y habían decidido ir en su búsqueda cuando este entró al salón del trono vestido con túnicas azules, un color inusual en él.
-Por fin lo he entendido-dijo mirándolos a los dos, sus ojos estaban enrojecidos pero llenos de calma-Thor ahora ama a esa Midgardiana y… eso está bien, ha encontrado su felicidad en otro lado mientras yo tengo mi felicidad aquí, con ustedes, con…-puso una mano en su vientre-mi futuro hijo que será solo mío y con el reino. Los ropajes oscuros que usaba como si estuviera en luto se acabaron… quiero… quiero ser feliz ahora-Frandal se acercó a él con una sonrisa y lo envolvió en sus brazos, Frigga le sonrió, contenta.
-Es la más sabia decisión, hijo mío-Loki le sonrió débilmente.
Loki siempre había amado a Thor, esa era la realidad. Nunca había conocido a hombre antes de que él lo tomara en sus brazos e hiciera suya su alma con solo una mirada, Thor había conquistado a varias chicas antes (más que varias, en realidad) por lo que cuando posó sus ojos en Loki ¿Quién era el pelinegro para negarse a sus deseos? Siempre había sido débil ante él, trató de alejarse vanamente, con la excusa de que eran hermanos pero Loki sabía que eso no iba a servir, Odín, su padre, le había contado la verdad cuando era pequeño y aunque al principio se había sentido engañado, ahora era feliz porque sabía que los padres de Thor lo querían realmente como un hijo y lo habían amado tanto como a Thor.
Thor, con su cabello rubio rebelde y sus ojos del mismo color del cielo, destruyó sus defensas con rapidez y se coló ahí donde nadie había estado antes, su amor era completamente suyo, no podía imaginarse a nadie más, estar con nadie más. Cuando se enteró que esperaba un heredero la dicha se apoderó de su cuerpo, tenían que ir a la batalla en Jotun y él tenía que disimular no saber nada, quería que fuera una sorpresa pero cosa tras cosa fue mal y Odín estaba tan enfadado que lo mandó al exilio y a él lo nombró rey antes de caer en su sueño. Loki estaba desesperado, esperó prudentemente una semana antes de preguntarle a Heimdall por él; el guardián pareció dudar en responderle pero le indicó el lugar, Loki solicitó la compañía de Frandal y fueron a Midgrad.
No esperó ver lo que vio.
Thor reía junto a tres extraños, dos mujeres y un hombre algo mayor. Parecía divertirse mientras que la chica de cabello castaño se apega más hacia su costado, el rubio como al descuido deja caer su brazo alrededor de ella y la mira con los ojos sonrientes, ella le sonríe de igual manera. El dolor es demasiado para Loki, es demasiado porque él ya ha visto esa mirada antes, la ha visto cuando Thor lo observaba mientras cabalgaban en las tardes. Frandal toma su mano y de repente esa mano se convierte en su tabla de salvación, solo quiere huir, quiere alejarse de esa imagen, siente náuseas y Frandal lo ayuda a desaparecer hacia el reino. Cuando llega el pelinegro se inclina hacia el pasto y vomita todo lo que tiene en el estómago. Los siguientes días los pasa enfermo, sin querer comer mucho, sin apenas moverse de la cama o en el balcón, con la mente en blanco o saturada de recuerdos, demasiadas emociones para que él pueda manejarlas en ese momento.
Loki sabe que Frandal lo ha salvado, que Frigga también ha estado a cuidándolo todo lo que ha podido, encargándose de los deberes que se supone que ahora eran suyos. Frandal empezó a visitarlo más seguido en su habitación, los demás guerreros se han mantenido en respetable distancia sin saber que ha sucedido exactamente. Incluso Sif ha ido en su búsqueda porque de los amigos de Thor, la única que se podía decir que era amiga de ambos al mismo tiempo era ella. La chica ha intentado hacerlo hablar o comer pero no lo ha logrado, solo Frandal pudo sacarlo de su sopor haciéndolo enfrentarse a la realidad, hablándole con la verdad y diciéndole que no puede dejarse caer, que tiene a alguien a quien cuidar, alguien a quien amar incluso si Thor no regresa.
Y Loki decide seguir.
Y no es tan fácil
Contar tantas horas perdías
No es tan simple perder y olvidar
No es tan fácil
Salir con las manos vacías
No es tan fácil
Volver a empezar.
-Lo estás haciendo mal-se rio Loki, Frandal bufó.
-¡Pero si es el mismo movimiento de manos que tú haces!-exclamó con frustración, el pelinegro tomó sus manos para ponerlas en determinada posición y susurró un hechizo, una luz azul empezó a formarse en las manos de Frandal pero desapareció antes de hacerse más fuerte.
-Ves, esa es la posición-Frandal frunció el ceño y volvió a intentarlo, Loki se acomodó nuevamente su sillón para observarlo mientras acariciaba suavemente su vientre se seis meses, estaba dormitando cuando un movimiento lo despertó sobresaltado.
-Calma, solo soy yo, te estoy llevando a descansar en tu cuarto-musitó Frandal quien lo tenía cargado en sus brazos, Loki hubiera protestado si no fuera que se sentía cómodo en esa calidez; suspiró y envolvió sus manos en su cuello, Frandal sonrió.
Y tú con tu afán
Tu miedo a lo incierto
Te fuiste una noche en silencio
Te escapaste y enterraste
Tu cabeza en la arena
De nada valió tanta espera
Te amé con el alma
Creí en tus palabras
Y hoy ya no queda nada…
-¡NO!-gritó Loki levantándose sobresaltado, su respiración estaba agitada y su rostro estaba húmedo de las lágrimas que había derramado en sueños.
-¡Loki!-Frandal entró apresuradamente en el lugar, se acercó a él y lo abrazó, el pelinegro sollozó-Calma, solo fue una pesadilla, solo eso… todo está bien…-Loki se quedó calmado entre sus brazos, dejando que el calor y la seguridad prometida lo envuelvan y vanamente trata de sanarse en ese abrazo, trata de dejar de sentir ese dolor en su pecho, trata de dejar de amar a Thor como lo hacer porque solo lo lastima, solo lo tiene siempre al borde, sin poder vivir y sin poder morir, porque ahora hay alguien más en quien pensar, en quien preocuparse, alguien que no tiene la culpa de nada.
-No te vayas…-le susurra en voz baja-quédate… por favor…
-Siempre-musita Frandal-siempre estaré a tu lado, Loki.
Desde esa noche el rubio se traslada al cuarto de Loki.
Los meses pasan lentos pero Loki no se queja, le gusta que Frandal lo envuelva en sus brazos cada vez que puede, lo hace sentir seguro y ayuda a que ese hueco que tiene en el pecho se sienta menos vacío cada vez. Le gusta caminar por los jardines en los atardeceres o pasar mañanas en la biblioteca mientras intenta enseñarle a Frandal a hacer magia, riéndose, sonriendo, viviendo. Se encarga del reino con la ayuda de Frigga y pronto se gana el respeto de toda Asgard por su mandato, todos quieren visitarlo y tocar la barriga del futuro heredero aunque secretamente Loki piensa que será una niña. Loki cree que ha empezado a olvidar pero en realidad solo está metiendo sus recuerdos dentro de una cajita oscura que oculta en el último rincón de su mente, en donde se encuentran las cosas tristes de su vida que no tienen ningún interés en ver.
Ha llegado ya al octavo mes, se siente pesado y muy, muy grande, Frandal siempre le dice que se ve hermoso y ambos se han quedado muchas noches, despiertos y sienten al bebé patear dentro de la barriguita maravillados de sus movimientos. Loki extraña a Thor en esos momentos pero se repite que no está siendo egoísta, que ha sido Thor quien lo ha dejado y a veces se amarga cuando piensa que tal vez para ahora esté haciendo lo mismo con esa mujer, esperando un bebé con ella también. Loki sabe que no debe alimentar las esperanzas de Frandal, que es mezquino pero está tan destrozado… el amor del rubio, de su madre, de su bebé, son la única cosa que lo mantienen con vida y sabe que su bebé necesitará un padre más, alguien que lo ayude a cuidarlo, que lo quiera como no lo querrá su verdadero padre, que esté ahí para él.
-Frandal-el rubio alza la mirada del libro que leía, Loki lo observa con sus hermosos ojos verdes-gracias.
-¿Por qué?-pregunta curiosamente y sus brazos vuelven a cerrarse a su alrededor, el pelinegro lo observa intensamente y luego despacio, con mucho cuidado, se inclina hacia él y presiona sus labios contra los del rubio. Frandal, a pesar de estar sorprendido, corresponde instantáneamente, porque él siempre ha querido a Loki, incluso desde antes de que "amigo" pusiera sus ojos en él, antes de que siquiera alguien advirtiera lo hermoso y divertido que es. Loki se separa algo agitado y apoya su frente en su pecho.
-Por estar conmigo-susurra, el rubio aprieta más su abrazo en él.
En donde quedo
Tú promesa de amarme
Porque se perdió en el tiempo
Intenta sentir
El dolor que dejaste
Por llenarte otra vez de miedo…
Y si te encuentro otra vez
Cuando sane mi herida
No te extrañes si no quiero hablar…
-Señor Frandal-el rubio hace un gesto de silencio señalando silenciosamente con la cabeza hacia Loki que se ha quedado dormido en el sillón de salón. Hace aparecer con un poco de magia una manta para cubrirlo y sale hacia un lado con el guardia.
-¿Qué sucede?
-El señor Heimdall ha mandado un mensaje señor, dice que el señor Thor está planeando venir a Asgard-el rubio abre los ojos sorprendido e inmediatamente mira hacia el pelinegro que descansa con calma.
-Bien, iré en este momento, llevaré al rey a su habitación y quiero que por nada del mundo le digas algo de esto ¿está bien?-el guardia asintió, Frandal se acercó a Loki y lo cargó en sus brazos para llevarlo a su cuarto, Loki ni se sacude, sus últimos meses de embarazo lo mantienen más dormido que despierto para que junte energías para el momento del parto. Frandal lo deja abrigado entre las mantas y parte inmediatamente hacia el puente para hablar con Heimdall.
-Joven Frandal-saluda el guardián.
-Heimdall-se inclina cortésmente-¿Me han dicho que Thor piensa venir?
-Sí, señor, está planeando venir a hablar con el señor Loki.
-Mira sus intenciones, por favor, que es exactamente lo que quiere decirle a nuestro rey-Heimdall cierra sus ojos unos instantes luego responde.
-Viene a hablarle de Jane Foster, joven, va a decirle lo que sucede con ella-Frandal aprieta la mandíbula y los puños con furia ¿Era posible tanto descaro?
-Abre el portal, por favor, Heimdall-el guardián obedece inmediatamente y Frandal siente como cae con fuerza en Midgrad.
-¿Frandal?-se gira y observa a sus amigos junto a Thor y tres extraños, entre ellos puede reconocer a la llamada Jane Foster, justo al lado de su amigo y tomando su mano. Thor nota hacia dónde va su mirada y se adelanta hacia él, Frandal lo atraviesa con una mirada dura.
-¿A qué has venido, Frandal?-pregunta Sif, alerta por si tiene que calmar las cosas.
-Ha impedir que… él… vaya a Asgard.
-Necesito hablar con Loki-dijo Thor en ese momento.
-Tus necesidades me importan un cuerno, Thor-le responde el rubio asesinándolo con la mirada-ya has hecho demasiado daño como para que vayas a hacerle más.
-Necesito explicarle…
-¿Explicarle qué? ¿O acaso quieres graficarle lo que tú y las Midgardiana han estado haciendo todo este tiempo?-Thor aprieta la mandíbula-no, Thor, nos tomó mucho tiempo devolver a Loki a un estado estable, a lograr que vuelva a parecerse al de antes y no a la sombra que tú dejaste-Thor ha abierto mucho los ojos antes esto y Frandal nota la mirada alarmada de sus amigos-¿Es que acaso no se lo han dicho?
-Loki no querría que lo hiciéramos, tiene orgullo, lo sabes-dijo Sif.
-¡Y un cuerno! Este desgraciado tiene que por una maldita vez asumir las consecuencias de los que hace, cada cosa que toca la destruye.
-¿Y tú por qué estás así tan de repente? Tú nunca fuiste cercano a Loki, solo Sif y yo estábamos a su lado-dijo Thor, asombrado y molesto al mismo tiempo.
-Yo siempre he estado ahí, Thor, siempre he cuidado de él, esperando a que cometas un solo error para arrancarlo de tus brazos, Loki ahora es mío y no necesita de tus estúpidas explicaciones, tú destruiste su corazón y yo lo estoy regenerando, él ya no te necesita Thor, no necesita nada de ti-Thor retrocede ante sus palabras, se queda unos instantes con la mirada perdida pero Jane aprieta levemente su mano, él la observa unos segundos, estudiando su rostro, dándose cuenta que quiere estar con ella y que cada vez recuerda menos a Loki, aunque su corazón se siente extrañamente medio vacío, como si no estuviera completamente lleno como debería.
-No iré-declara en voz baja.
-¿Lo juras por tu honor de dios, por el Mjolnir?
-Lo juro.
-Espero que sigas siendo un hombre de palabra, disfruta de esta vida, Thor, antes asgardiano y ahora midgardiano-Frandal llama por el puente y desaparece en un brillo azul. Thor siente que se hunde bajo el peso de su juramento y está muy seguro, muy en el fondo, que acaba de cometer una gran estupidez.
Pues...
No es tan fácil
Contar tantas horas perdías
No es tan simple perder y olvidar
No es tan fácil
Salir con las manos vacías
No es tan fácil
Volver a empezar…
Loki nunca se enteró de esa visita a Midgrad, para cuando él despierta Frandal se encuentra a su lado velando su sueño, lo siente algo tenso pero no dice nada. El tiempo sigue pasando de esa manera en Asgard. Es apenas una semana antes de que se cumplan los nueve meses cuando Loki empieza a sentir los dolores que de los que le habló su madre. El lugar se llena de actividad y pronto su cuarto está lleno con dos curanderos, dos doncellas, dos guardias de confianza, está Frigga dando instrucciones a su alrededor y a su lado se encuentra Frandal tomando su mano, consolándolo con palabras dulces, tratando de alejar su dolor con pequeñas bromas que hacen que Loki se relaje a medias.
-Ha llegado el momento, rey Loki-dice el curandero de manera sonriente, entonces el proceso inicia. La magia cubre todo el vientre redondeado de Loki, es una luz hermosa, de un azul brillante, más brillante que el de los hechizos de Frandal, un azul que a Loki le recuerdan a los ojos de Thor. Loki está mareado por el dolor pero no quiere perderse ni un momento, quiere escuchar el momento exacto en que su bebé empieza a vivir, quiere ser el primero en abrazar a su bebé contra su pecho y decirle que lo cuidará del mundo, que siempre lo amará, que tendrá todo lo que él tuvo y más.
El llanto de un bebé resuena por todo el espacio, Loki siente que las lágrimas se derraman de sus ojos con el sonido y el dolor pasa a segundo plano cuando ve a un curandero envolver a su bebé en unas mantas.
-Es una niña-dice y Loki sonríe porque él siempre lo supo.
-¿Cómo la llamarás?-preguntó Frigga mientras le alcanza la pequeña a su padre.
-Helena… ella será Helena, la princesa de Asgard-musitó cansadamente acunándola amorosamente entre sus brazos.
-Es realmente hermosa-dijo Frandal tomando con delicadeza una de las manos de la pequeña niña-tendrá tu cabello-dice mirando la pelusita oscura en su cabeza, la pequeña bebé se removió y mostró sus ojos azules grisáceos, Loki quiso llorar por el parecido que tenía con su padre.
-Ella será la princesa del cabello color noche y los ojos color cielo, será la más bella de las herederas que haya existido antes en Asgard.
-Por supuesto que lo será-dijo Frigga con una gran sonrisa-ahora la llevaré a alimentarse, descansa, hijo mío, haz hecho un gran trabajo-el pelinegro besó suavemente la cabeza de su hija antes de dejar que su madre se la llevara, Frandal lo ayudó a recostarse y le sonrió perezosamente.
-Enorgullécete, Loki, ella será la princesa del sol.
-Ella solo será mi hija y eso me bastará para siempre.
-Hija mía también si tú me lo permites-Loki le sonrió aún más, rozó sus labios con los suyos y se dejó sumergir en el mundo de los sueños. Su pequeña al fin estaba en casa.
Espero que les haya gustado el primer capítulo, saludos! :D
Letty Malfoy.
