La autora recomienda leer la historia con la canción 'Gravity' de Sara Bareilles de fondo, ya que la inspiró a escribir este fic. A mi, particularmente, esa canción no me gusta y decidí poner 'Lay Me Down' de Sam Smith, al menos con el primer capitulo lo hice así.

Espero que os guste tanto como a mi.


Algo siempre me trae de vuelta a ti
Nunca lleva mucho tiempo
No importa lo que diga o haga
Aún te sentiré cerca hasta el momento en que me vaya
Me abrazas sin tocarme

Me mantienes sin cadenas
Nunca quise tanto algo
como ahogarme en tu amor y no sentir tu lluvia


1. Aférrate

Sus cabezas descansaban la una sobre la otra como lo hacían sus manos, sus dedos entrelazados descansaban entre sus cuerpos. La mano libre de Emma fue dibujando círculos en la espalda de Regina siguiendo el ritmo de la música.

''Me amabas porque soy frágil

Cuando yo pensaba que era fuerte

Pero me acaricias un ratito

y toda mi frágil fuerza se me va''

El aliento de Emma quedó atrapado en su garganta al oír el suave canto de Regina en su oído, su cálido aliento le hacia cosquillas, rozó con su nariz el cuello de la morena depositando un suave beso en la curva donde el cuello se encuentra con el hombro deleitándose con el escalofrío que recorrió el cuerpo de la morena mientras el brazo de esta rodeó la cintura de la rubia. No creía en la posibilidad de que pudiese sentirse más feliz de lo que lo hizo en ese momento, era imposible. Su dedo recorrió el diamante colocado en la banda de plata que adornaba la mano izquierda de Regina. Se separaron lentamente para mirarse la una a la otra, una suave sonrisa adornaban sus caras. La morena dejó escapar un suspiro de satisfacción mientras cerraba la distancia entre las dos dejando un suave, pero no por eso menos apasionado, beso en los labios de su novia, no, recordó interiormente, en los labios de su prometida.

''¿Cómo tuve tanta suerte?'' Preguntó, presionando su frente a la de la rubia mientras cerraba sus ojos, no podía creerse que después de la vida que había vivido, el dolor que había pasado y que se había causado a sí misma, aún era capaz de conseguir su final feliz, de empaparse de él y aceptar el amor que durante tanto tiempo le había sido negado.


Emma apartó el pelo de la morena de sus ojos con ternura y cuidadosamente, evitando la profunda laceración que decoraba su frente.

Regina forzó una pequeña sonrisa, la confusión en su hermoso rostro destrozó el corazón de Emma, más de lo que ya estaba, ''N-No puedo...'' Luchó para que sus palabras saliesen mientras la rubia contenía las lágrimas que amenazaban con caer. Tuvo que mantenerse fuerte por la mujer que había sido todo el tiempo en el que Emma le había conocido, pero que no podía más.

''Shh cariño, no necesitas hablar.'' Hizo una mueca cuando la sangre se deslizaba poco a poco de los labios entreabiertos de Regina que debido a su posición en el suelo corría horizontalmente por su ensuciada mejilla, y entre su oscuro pelo corto se abrió hacia fuera sobre la grava por debajo de ella. Emma notó como los ojos de la morena comenzaban a pestañear cada vez más despacio. ''Hey.. HEY! Necesito que te quedes conmigo, La ambulancia y los bomberos estarán pronto aquí, necesito que aferres a mi.'' La rubia forzó una dolorosa sonrisa, la visión de Regina atrapada bajo el coche estaba destrozando su corazón, tenía que sacarla, pero ella sola no podía –Se sentía completamente inútil-. La primera persona a la que había llamado fue a su padre, él siempre parecía saber que hacer en un crisis.


''Emma cielo, cálmate, no puedo entender lo que estás diciendo.' Le pilló con la guardia baja al contestar al teléfono a su histérica hija. Aquello no tenía sentido, hablaba tan rápido que se le haría imposible a cualquiera poder seguirla.

''Ella-yo-nosotras-entonces-atrapada-sangrando-no puedo-¡AYUDA!''. La rubia se encontraba sollozando al teléfono, apartando la mirada de la ruina en la que lentamente se estaba convirtiendo su vida, Regina no se movía y no tenía ni idea de cómo había llegado al otro lado de la carretera en vez de estar en su asiento junto a la morena, todo había sucedido muy rápido.

David comenzaba a irritarse, podría decir que fuese lo que hubiese pasado no era para nada bueno, no podía ayudar si ella no se calmaba y se lo explicaba. ''Emma, voy a necesitar que respires hondo'', hizo una pausa mientras escuchaba como ella seguía sus instrucciones, exhaló dolorosamente estremeciéndolo ''Vale, ahora cuéntame otra vez qué ha pasado.''

''No..no lo sé'', volvió a sollozar pero esta vez habló a un ritmo normal, dándose cuenta finalmente de que si había alguna esperanza para ellas se tendría que obligar a relajarse para poder explicarle. ''Todo pasó tan rápido, papá'' Este inspiró fuertemente, haciendo uso a su titulo paterno, esto era serio. ''Ella está ahí tumbada, hay mucha sangre, no.. ¡No puedo llegar a ella!'' La rubia casi gritó en esta última parte. La realidad de la situación comenzaba a sacarla de su estado de shock. ''No se mueve, el coche.. está boca arriba.. Dios ¡No puedo moverlo!.. No puedo...'' Volvió a romperse de nuevo, era víctima de su impotencia, ¿Qué iba a hacer?

''Necesito que me digas dónde estás'' la rubia podía oir la puerta del coche cerrándose, estaba listo para encontrarlas.

La rubia miró a su alrededor captando detalles por primera vez. No se había dado cuenta de lo cerca que estaban de casa, eso hizo que todo se volviese más desesperante. El nudo en la garganta se volvió más denso y sofocante mientras sus lágrimas dejaban ardientes rastros por sus mejillas cuando estas caían. La rubia vió el cartel de ''Bienvenidos a Storybrooke'' y sintió como le daba un vuelco el corazón ¿Estaban por encima de la frontera?

''Estamos en el camino que conduce de nuevo a la ciudad'' Susurró mientras el pánico se volvía a apoderar de ella una vez más, estaban muy lejos de cualquier otro signo de civilización ¿Y si no pudiesen ayudarlas? Un equipo de rescate tardaría demasiado en encontrarlas.- Dios.

''Estoy de camino cielo, le diré a tu madre que reúna a la tropa y os sacaremos de esto, no te preocupes – Si hay algo que sé de Regina es que es una luchadora.''


''¿Recuerdas nuestro primer beso?'' Emma dejó que la lágrima cayese, no podía parar de todas formas, no cuando la mujer a la que amaba con cada centímetro de su ser estaba respirando irregularmente por debajo de ella, el coche de alquiler la mantenía fija en el suelo. –Ella iba a esta bien, tenía que estarlo. La morena intentó una pequeña risa, pero a Emma le sonó más a un jadeo. Regina frunció el ceño mientras un intenso dolor recorría su malherido cuerpo ''Sí'', logró decir en un forzado susurro.

Emma bajó tumbándose junta a Regina, la parte superior de su cabeza estaba tocando el lateral del coche volcado mientras su cuerpo le daba la espalda, la rubia volvió la cara para mirar a Regina, no podía entender cómo la morena lo estaba sobrellevando pero lo hacía, cabezota como siempre. Emma estaba pensando cuando vio el destello de dolor que pintó los rasgos de Regina, que se retorcía en frente de la rubia. El dolor era evidente en su cara no importa lo mucho que la morena intentó ocultarlo no podía; sus ojos desenfocados buscaban a Emma a través de una bruma de aturdimiento. Un pequeño gemido se escapó de sus labios mientras la rubia encontraba su mano tratando de darle a la morena algo a lo que anclarse, ''Te... Te quiero.''

''No.'' Dijo Emma firmemente, su voz se iba quebrando a medida que la palabra se desvanecía en sus labios, ''No te atrevas a hacerme esto a mi.'' Regina frunció la frente mientras sus ojos se cerraban una vez más, ''No tienes que decir adiós porque no te vas a ninguna parte, no estoy malgastando los últimos momentos de nuestra vidas tumbadas en la cuneta de alguna carretera.'' Esta abrió los ojos de nuevo cuando escuchó las palabras de la rubia.

''Nuestra...'' La morena respiró confusa, Emma acarició su mejilla suavemente teniendo en cuenta las posibles heridas internas que pudiese tener, su mejilla ya se había oscurecido notablemente a causa de los moratones que se dibujaban en su pómulo.

''Si,'' le susurró permitiendo que sus lágrimas cayeran, ''Me has oído bien, si te vas me voy contigo así que te sugiero que aferres por mi. Aun necesito casarme contigo.''