Disclaimer: Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, sólo la trama y aquello fuera de la saga es de mi completa autoría.
CHAPTER 1
BELLA POV.
Llegué a Port Ángeles y busqué un taxi que me llevara hasta Forks, después de trece años volvía al lugar en el que nací, nunca me hubiera imaginado que volvería aquí y mucho menos las circunstancias que me obligarían a hacerlo. Encontré un taxi y subí, esperando llegar a Forks antes de que Rosalie y Jasper se fueran al instituto, sino, no sé qué es lo que haré.
Mi nombre es Isabella Swan y viví en Forks hasta los cuatro años. Cuando mi padre, Charlie, murió mi mamá decidió que mudarnos era lo mejor para ambas, así que los últimos trece años hemos vivido en Jacksonville. Ahí fue donde conocí a Rosalie y Jasper Hale, nos hicimos amigos mi primer día en el jardín de niños y hace dos años ellos se mudaron a Forks.
Cuando tenía diez años mi madre conoció a alguien, su nombre es Phil Witherdale, él también era viudo y tenía un hijo: James.
Unos meses después decidieron casarse y se puede decir que todo era perfecto, James y yo nos llevábamos bien a pesar de que él era un par de años mayor que yo, pero todo comenzó a cambiar cuando cumplí dieciséis años; James se comportaba distinto conmigo, me miraba de una forma que me causaba escalofríos y mucho miedo. Un par de semanas atrás fue mi cumpleaños número diecisiete y mi mamá insistió en organizar una fiesta, a pesar de que no me gustaban mucho las fiestas y estar rodeaba de personas, tengo que admitir que me divertí, pero no me imaginaba el infierno que comenzaría esa misma noche.
—Señorita ya llegamos —la voz del taxista me sacó de mis pensamientos, parpadeé un tanto confundida al notar que, efectivamente, el coche estaba estacionado fuera de la casa de mi amigos.
Bajé del coche y el taxista me ayudó a sacar mi maleta de la cajuela, le pagué y un tanto titubeante caminé hasta la puerta de la casa, toqué el timbre con la esperanza de que aún no se hubieran ido al instituto, ellos eran la únicas personas que podían ayudarme en este momento y sino estaban no sabría a dónde más ir.
—¿Bella, qué haces aquí? —me preguntó una Rosalie demasiado confundida al abrir la puerta y verme frente a ella.
—Rose yo... ¿Podría quedarme unos días aquí? —contesté con otra pregunta y mis ojos se llenaron de lágrimas.
—Claro que sí, vamos pasa que te estás empapando —no me había dado cuenta de que llovía hasta que ella lo mencionó y, efectivamente, mis ropas comenzaban a humedecerse. Rose se hizo a un lado para dejarme entrar y cerró la puerta—. ¿Qué ocurrió Bella? ¿Vienes tú sola?
—Sí, vengo sola... yo... discutí con Renée y... me fui de la casa. No sabía a donde más ir —limpié mis lágrimas con el dorso de mi mano temblorosa, Rosalie notó mi estado de nerviosismo y su mirada se llenó de preocupación.
—Estás muy nerviosa, vamos arriba para que te seques y descanses un poco, ¿si? Ya cuando estés más tranquila me contaras todo ¿vale? —asentí y la seguí escaleras arriba.
Rosalie me llevó hasta una habitación, de forma mecánica me puse un pijama de franela que ella me prestó, me recosté y me cubrió con una manta.
—Ahora vuelvo, voy a prepararte un té de tila, te ayudará a descansar —asentí y tras suspirar pesadamente salió de la habitación.
Unos minutos después regresó con el té y un par de pastillas para dormir, me los entregó y se quedó conmigo hasta que terminé con el último sorbo del té, Rosalie me dijo que descansara, que ella estaría abajo para cualquier cosa que necesitara. Las pastillas comenzaron a hacer efecto y comencé a sentir mucho sueño, me volví a acostar esperando que las pesadillas no se hicieran presentes y poder dormir un poco.
Sólo espero que nadie sepa que estoy aquí... en especial él, con ese pensamiento, me quedé profundamente dormida.
Continuará...
Este Fic ya había sido publicado, pero he decidido editarlo (al igual que mis otros Fic's) así que he eliminado los capítulos y los iré subiendo conforme los vaya teniendo listos =)
