Prologó.
Después de que él descarado de Mikage se esfumara durante veinte largos años, dejándome acargó de su templo y de dos niños de fuego que sólo lloriqueaban por su ausencia.
Ahora llega esta chica que no hace más que dar trabajo pero admitió que se esfuerza por ser una deidad digna y que trata de alguna forma encajar en el puesto.
Y por si fuera poco la chica que me convirtió en mensajero divino una vez más a la fuerza, aunque disfrutó de verla sonreír y cuidar de ella aveces se me pasan algunas cosas como aquélla vez en la que Mizuki la secuestro... Haaa! pero eso no le importó a la señorita para dejarlo ser su ¡familiar!.
-¡Ya son las 11.30! Y todavía no se despierta! - Grité
-Deberías dejarla en paz por un rato Tomoe - kun, ya que a sido dura la semana - dijo la inútil serpiente albina.
Era de suponerse que no le preste la mínima atención a su comentario y me dispuse a levantar a "la bella durmiente".
-!Nanami ¡ asta que hora piensas estar echadota ahí ¡Despierta!
