¡Hola! Pues me volvió a salir la vena artística y pensé en escribir otro fic, para ver si esta vez tengo más suerte y le interesa a más gente.
Los personajes de Naruto no me pertenecen.
Y solo les deseo que les guste y que dejen sus reviews.
Comienza mi terror
-Tenten, ¿quieres jugar conmigo? Tenten, ¿quieres jugar conmigo? Tenten ¿quieres jugar conmigo?- Gritaba una niña de ojos negros y cabello del mismo color- Tenten, ¿porqué no juegas conmigo?- Repetía la niña cada vez más alto y cada vez que preguntaba un hilo de sangre salía de sus ojos y de su boca- Tenteeeen, estoy cerca de ti...
-¡Ah! Otra vez ese sueño... ¿Quién es?- Dijo la joven con la voz entrecortada- Es solo un sueño Tenten, tranquilízate.
Tenten miró el reloj que había en la mesita de noche.
-Solo son las tres de la mañana- Pensó Tenten mientras posaba una mano en su sudada frente.
Se levantó de su cama y se dirigió a la cocina, estaba realmente asustada, encendía todas las luces que se encontraba a su paso, hasta que llegó a la puerta de la cocina, intentó encender la luz, pero, no se encendía.
-¡Maldición! No tuvo tiempo de fundirse
-Tenten, ¿quieres jugar conmigo? ¡Jajaja!
-¿Quién anda ahí?- Preguntó Tenten con voz temblorosa
-Estoy aquí, ¿quieres jugar conmigo?
Tenten miró el comedor y vio como la tele se encendía sola, las imágenes la asustaron más, ¿pero que era todo eso?, el volumen del televisor subía caprichosamente, luego la radio se encendió, Tenten no podía creer todo lo que estaba viendo, ¿por qué le estaba pasando eso?
Unas lágrimas empezaron a brotar de sus ojos, no podía evitarlo, su corazón estaba muy acelerado, parecía que se le iba a salir del pecho y todo su cuerpo, no le respondía.
De repente todo quedó en silencio... en oscuridad, no se veía nada, no se escuchaba nada, hasta que se pudo vislumbrar una figura de una niña o quizás no tan niña, se empezó a escuchar unos pasos, pum... pum... pum... La figura se acercaba cada vez más a Tenten, estiró su brazo y una sonrisa se dibujó en su rostro manchado de sangre.
Tenten se dirigió a la salida, intentó abrir la puerta, pero entre el temblor de sus manos, las prisas y el miedo, hizo que Tenten fuese torpe y no pudiera abrir la puerta, los pasos se escuchaban más cerca, pum... pum... pum... Cada vez tenía más miedo y más ganas de gritar, pero no salía nada de esa boca, si algo salía de dentro de Tenten eran lágrimas, lágrimas de terror.
La niña se acercaba cada vez más con su brazo extendido, Tenten intentaba abrir la puerta, la golpeaba, nada, no podía abrirla.
-¡SOCORRO, AYUDA! POR FAVOR QUE ALGUIEN ME AYUDE ¡AYUDAAAAA!- Su última palabra fue más bien un grito desgarrador y a partir de ahí todo fue negro para Tenten.
*****
-Pero bueno, ¿dónde está Tenten? Habíamos quedado a las nueve y media y mira, las nueve y treinta y uno- Dijo Lee señalando su reloj, regalo de su sensei por su vigésimo cumpleaños.
-Es raro... ella siempre es puntual, quizás debamos buscarla a su casa o quizás es demasiado pronto, pareceríamos unos impacientes- Propuso Neji
-¡Tienes toda la razón! Pero primero esperemos a que pasen diez minutos y si no hay rastro de ella vamos a buscarla- Dijo Gai haciendo su típico gesto, el del pulgar arriba.
Esperaron más de diez minutos y Tenten no apareció, entonces los tres se dirigieron al piso de Tenten, no era lujoso, ni pobre, aunque todo eso no lo tenían en cuenta, llegaron al portal, todo tranquilo, la gente entraba y salía, hasta que un hombre salió, era un hombre de unos cincuenta años, regordete, de ojos verdes y sonrisa amplia, el equipo de Tenten ya lo conocía, ya que gracias a el Tenten se incorporó mejor a la comunidad y también porque la trataba como la hija que nunca tuvo
-¡Hola Souta! ¿Sabes algo de Tenten? Habíamos quedado y no ha aparecido, por eso nos hemos acercado- Preguntó Lee intrigado
-¡Hola! Pues la verdad es que iba a buscarles, anoche escuché algo raro, demasiado raro. Escuché a Tenten gritar desesperadamente, me despertó, no pude descifrar lo que decía, porque la verdad, eran gritos desgarradores. Me asomé a su puerta lo más rápido posible, pero no escuché nada más, llamé una y otra vez, pero no obtuve respuesta. Esta mañana he vuelto a intentarlo y nada... Por eso iba a buscarles, por si tienen llaves de su apartamento, que yo las tenía pero no las he encontrado y eso me ha parecido muy extraño y también por si sabían algo- Contó Souta
-No, no sabemos nada y yo no tengo llaves de su piso, pero mi prima Hinata si que las tiene, confía más en ella que no en mi- Comentó Neji con algo de furia por lo dicho al final.
-¡Pues iré yo lo más rápido posible!- Dijo Gai antes de desaparecer con un plof
Mientras, Lee, Neji y Souta subieron al segundo piso y se dirigieron a la puerta de Tenten.
Todo estaba en calma, no se escuchaba nada, todos estaban callados, hasta que se escuchó a alguien hablar.
-Ayudadme por favor...- Se escuchó a Tenten con un pequeño hilo de voz, eso demostraba que Tenten no tenía fuerzas
-¡TENTEN!- Gritó Neji golpeando la puerta- ¡Tenten aparta!
-Neji... ayúdame... ayu...
-¡APARTA!
Tenten se apoyó en una pared, no tenía fuerzas ninguna, estaba agotada, sus ojos se cerraban involuntariamente, se dormía, pero no quería, no quería dormir, tenía miedo, mucho miedo...
Neji abrió la puerta de un solo golpe y se acercó a Tenten lo más rápido posible, se arrodilló ante ella y la tocó.
-¿Pero qué?- Se preguntó Neji- Tiene la frente ardiendo y las manos heladas, Tenten, ¿qué te ha pasado?
-Neji...- Susurró Tenten mirando lo poco que podía a Neji, vio como este le hablaba, pero solo escuchaba un agudo piiiii no podía escuchar nada más.
Empezó a llorar y colocó sus manos en sus oídos y empezó a gritar...
***CONTINUARÁ***
