Serie One Shot:
Capricho de los dioses
Fandom: Saint Seiya
Autor(a): Stormy Night Rain92
Disclaimer: Saint Seiya © Masami Kurumada
Tiempo: Manga~Anime /A.U. (Universo Alterno)
Summary:
Hades, señor del inframundo había visto como Atena desafío a todos los dioses y cada vez que encarnaba en un cuerpo humano.
Si la victoria venía con la mortalidad, que mejor que probar y arrebatarsela con sus propios movimientos.
Advertencia: Es mi primer fic para el fandom de Saint Seiya, que hacia mucho tiempo quería hacerlo después de volver a ver de nuevo la saga de Hades.
He tenido curiosidad por saber, como seria esta loca teoría, así que ni idea…(^w^)!3
Prólogo
Hades señor del inframundo, hermano de Zeus miraba en las aguas de Cronos el futuro y el pasado, atento a las burlas de su padre que solía regodearse en sus fracasos e incluso en la estupidez de creer en las palabras de su hermano, cuando vencieron a los titanes.
Pero lo humillante, no era recordar lo pasado con su hermano sino la desgracia de esperar 243 años para ser derrotado y que para él no eran más que meros días.
Pero, ver su derrota dos veces más era realmente humillante.
—¡Maldita sea!—Habia sido vencido tan estúpidamente, tomar un cuerpo humano solamente conllevaba a sobrecargar su enorme poder y con ello la fatiga del mismo, destruyendo con este las vidas a su alrededor.
Pero, la desgraciada Atena diosa de la sabiduría y la guerra también había muerto con él.
Por supuesto, la muy golfa regresaría y siempre solía regodearse cada vez que volvía, porque se criaba con el cuerpo de corazón puro que solía escoger.
Había ido al Tártaros, a ver a su padre Cronos para conocer los planes de su hermano Zeus.
Su padre había visto la poca lealtad a Zeus, por ello esta vez Hades había hecho un trato con su padre y el muy cínico odiaba tanto a su hermano como él.
Así que se encargaba de llevar a sus hijos por los caminos oscuros que transitaba indemne, pero no había esperado que él muy bastardo se metiera con una humana y la embarazada por orden de Hera—Su hermana y esposa del rey del Olimpo—Zeus La habia devorado.
«Si, la muy idiota había pensado que la amaba» pensó, mirando las almas de muchas mujeres en el inframundo mientras sus súbditos se inclinaban a su paso.
Pero, eso no había terminado ahí y el ingenio de su hermano había provocado un dolor de cabeza en el rey del olimpo que el muy idiota había creado una diosa en su cráneo.
Atena, una de las hijas de Zeus y una real manipuladora desde la misma historia ganando el corazón de los humanos.
Era una de sus sobrinos favoritos, pero la mujerzuela había tomado precaución y llevado a cabo un reclutamiento de Caballeros para su protección: "Aduciendo que amaba a la humanidad y que daría su vida por salvarlos"
Sabia que sus palabras eran tan falsas, porque la muy cínica ganaba su lealtad a tal grado de devoción que morían por ella sin recordarse que ella como diosa volvería nuevamente.
Cuando cruzó la barrera del espacio-tiempo para llegar a su morada en los Campos Elíseos.
«Si, ella encarnaba como humana después de someter a victoria en un cetro y luego se apoderaba del caballero de pegaso» pensó apretando los dientes y sintiendo al inframundo arriba en los 8 templos de su reino.
—Mi señor Hades—dijo un hombre rubio, vistiendo una armadura plateada y sus ojos tan grises, llenos de un interesante vacío que toca el arpa mientras jóvenes Nereidas que moraban en los campos estaban embelesadas viéndolo —¿Que perturba la mente infinitamente sabia de mi señor?
Hypnos, señor del mundo de los sueños lo miraba con la confianza absoluta y sabia que sus decisiones eran planeadas con total objetividad.
Pero, esta vez que tenía el conocimiento de su padre y al futuro antes que muchos olímpicos, incluyendo a su sobrina junto a sus movimientos.
—Mis queridos dioses gemelos, tenemos trabajo que hacer—dijo, su oscura armadura de 6 alas negras que se desplegaban; su piel clara como la hermosa porcelana junto al negro cabello y sus ojos verdes tan puros como la esmeralda dejaban claro su imponente presencia.
—Señor Hades, ¿En que tenemos el honor de ayudarlo?—dijo el señor de la muerte y gemelo de Hypnos : Thanatos, con su cabello negro aun más oscuro que la armadura que poseía.
Este miraba con indiferencia a las almas alrededor, que solían adularlos como lo que eran: sus más fieles servidores.
—Es hora de entrar en el mismo juego de mi querida sobrina, Atena—dijo, su cabello negro ondeando con la ráfaga de energía
