Disclaimer: nada d esto es mio...solo algunos personajes inventados todo lo demas pertenece al mundo d JK Rowling.
Capitulo 1. MENUDA IDEA
Era un día soleado de finales de Junio. Lily Evans, una muchacha pelirroja y con los ojos de un verde intenso, estaba apoyada en la ventana de su habitación. Miraba a la calle de un barrio muggle.
Lily vivía con su hermana y su enferma madre que padecía cáncer.
Llamaron a la puerta de la habitación y después de que la pelirroja dijera "adelante" la puerta se abrió para que su hermana pasara con los ojos cansados y tristes y algunas marcas que solo podían significar que había llorado. Entro sin decir palabra y le dejo encima de la mesa una carta. Se marchó de la habitación dejando a su hermana entre triste y preocupada. Al final Lily no le dio importancia y fue hacia la mesa.
Lily no conocía a mucha gente. Desde que había entrado en Hogwarts solo tenía tres amigas, Julie, Lydia y Lucía. Pero ellas estaban de vacaciones y, aunque habían dicho que la escribirían, dijeron que lo harían de forma maga (es decir, mediante lechuzas).
Mientras se acercaba al sobre pensó que sería de alguien muggle, ya que había venido por correo y no por vía lechuza. Cogió el sobre y leyó en letras rojas:
Lily Evans
Calle de la Vida nº 5
Williamville
Londres.
En el reverso del sobre no ponía nada. Lily se extrañó mucho. Abrió el sobre y empezó a leer. Cuando terminó su cara se tornó del color de sus ojos para pasar después al de su pelo. Sus puños se cerraron y pasaron directamente al rojo. Tiró la carta al suelo, cogió un cojín, se puso de rodillas en el suelo y empezó a gritar amortiguando sus gritos con el cojín.
00000000000000000000000000000000000000000000000000
-¿Qué has hecho qué!-dijo una voz.
-No te pongas así, Prongs.- dijo la segunda voz.
-Sirius, lo que has hecho no ha estado bien- afirmó, por último, la tercera voz.
- ¿Cómo que no? Le he hecho un gran favor.
-Si, vamos, dime ¿qué entiendes tú por un favor?
James Potter, un chico castaño muy guapo con los ojos marrones se paseaba por su habitación mientras sus dos amigos le miraban sentados en su cama. Sirius Black y Remus Lupin miraban con precaución los pasos de su amigo.
-Monny, hazle saber a Sirius que como me vuelva a hablar de Lily Evans le tiro por la ventana.
-Sirius, dice James que...
-Ya lo he oído, Remus. ¡Venga tío! Seguro que en estos momentos está gritando de alegría.
-Yo no pensaría que esta gritando precisamente de alegría.
-¡Ya sé lo que té pasa, Prongs!
-A ver¿qué me pasa, listillo?
-tienes celos de mí porque no se te ocurrió hacer lo que yo he hecho por ti porque...
A Sirius no le dio tiempo a terminar pues James se le había lanzado a la yugular y Remus intentaba separarles.
Cuando por fin consiguió calmar a James le sentó en una silla mientras Sirius se frotaba la zona atacada por su amigo.
-Mirad, no creo que sea conveniente que te quedes así, Prongs. Lo mejor será arreglar lo ocurrido, sin que se entere Diana. Y tu, Padfoot, ya que tienes tantas ideas, piensa algo para arreglar lo que has hecho.
-¡Pero si yo no he hecho nada!
-Te equivocas.
-Bueno, vale...le he hecho un favor. Seguro que ahora se está muriendo por verte y darte un be...
Sirius fue interrumpido por segunda vez pero no por sus amigos, sino por una lechuza gris que tocaba con el pico el cristal de la ventana. James se levantó de la silla y abrió la ventana, cogió la nota que traía la lechuza y ésta salió volando. James abrió la nota y la leyó para sí. Luego dijo:
-Es de Evans.
-¡Ves como quiere verte¿A qué dice que está loquita por...?
-¡No!-sirius se vio otra vez interrumpido, esta vez por James.-¿Sabes que dice? Escucha: "Mira, no sé quien te has creído que eres para decirme esas cosas. ¿Pero tú de qué vas? Estás muerto, imbécil." Si eso es estar loquita por mis huesos, es verdad, tienes razón.
-¡Ves!
-Sirius, creo que James se refiere a que lo que quiere no es exactamente muy bonito.
-¡Y encima mañana la voy a ver!
-No desesperes.
-Padfoot, te voy a matar.¿Pero a quien se le ocurre enviar a una chica una carta diciendo cosas no muy "educadas" y con proposiciones pervertidas y encima poniendo como emisor el nombre de un amigo¡Me va a matar!
00000000000000000000000000000000000000000000000000
-¿ Pero a quien se le ocurre enviarte esto!
-No lo sé. ¿Quizás, a Potter?-Lily estaba atacada.
-Bueno guapa, si mañana no te vemos tenemos dos opciones que pensar.
-¿A sí?
-Si, una es que estas matando a besos a Potter-Lily enrojeció al oír "besos" y "Potter"- y la segunda es que lo estas matando a secas.
-Creo que no tendríais que haber venido.
-¿Qué dices! A mí me encanta viajar con polvos flu.
-ja ja ja. Que graciosa.
-¿Y que piensas hacer, Lily?
-No lo sé, Lucía. Quiero matarle.
-¿Sabéis qué pienso yo?- dijo Julie
-A ver – dijeron al unísono Lucía y Lily.
-A mi todo esto me huele a Black.
-Es una posibilidad.
-Tendremos que investigar.
- Lucía, no solo hay que investigar, hay que buscarles, encontrarles, trazar un plan, seguirlos, vigilarles, obtener pruebas y más en menos de 24 horas. Son las nueve de la noche.
-Bueno, para eso os quedáis a dormir aquí. Yo estoy dispuesta a no dormir si hace falta con tal de pillar a Potter.
-Tengo un plan chicas. Aplaudidme.
-A ver, cuenta. Como sea malo, te aplaudiremos con tu cabeza entre nuestras manos.
00000000000000000000000000000000000000000000000000
James se despertó con un dolor intenso en la cabeza. Estiró un brazo para coger sus gafas y otra vez sintió ese mismo dolor pero en el brazo. Abrió los ojos y metió la mano debajo de la almohada para coger su varita. Pero un objeto redondo voló otra vez hacia su cabeza. Esta vez James utilizó sus magníficos reflejos para esquivar ese objeto todavía no identificado. Se oyó un grito de dolor proveniente del otro lado de la habitación. Era Sirius. Se habría despertado de la misma manera que James. Entonces con un gesto rápido, James cogió sus gafas y se las puso. Se incorporó en su cama y vio como Remus seguía durmiendo perfectamente y como Sirius hacía lo mismo que James, metía su mano bajo la almohada para coger la varita. Se miraron y después miraron al objeto. No era nada más que una pelota de goma espuma roja que volaba frenéticamente de un lado a otro de la habitación. Sirius y James volvieron a mirarse y como si hubiera sido telepáticamente, ambos supieron que quería decir el otro. ¿Qué demonios hacia en el cuarto de James una pelota como aquella?
Ambos se levantaron de un brinco y fueron a despertar a Remus, a ver que decía él de todo esto.
-¿Qué pasa?- dijo con voz soñolienta.
Pero no hizo falta explicarle nada pues la pelota le dio de lleno en la nuca a James, rebotó y le dio a Sirius, rebotó e iba a dar a Remus, pero se paro de golpe y salió volando otra vez antes de darle.
-¿Porqué a ti no te da?
-No lo sé, James. Pero sospecho algo...
-Tío, tu siempre lo sabes todo¿cómo lo haces?
-Padfoot, él piensa.
-El caso es que creo que ya sé que pasa aquí, pero es mejor que no os lo cuente yo. El balón podría empezar a darme.
Y con un gesto rápido se levantó de la cama y fue corriendo al baño. A los dos segundos ya se oía el agua de la ducha corriendo. James y Sirius se quedaron anonadados.
00000000000000000000000000000000000000000000000000
Anteriormente...
-Esa es una gran idea. Darles con su propia arma. Me gusta.
-Bien, y ¿de dónde sacamos el balón?
-Yo tengo unos 15. No veis que me crié con muggles.
-Bueno, vale. A ver, trae uno.
Lily salió de la habitación corriendo y en tres minutos estaba de vuelta en la habitación con una pelota roja en la mano derecha y una azul en la izquierda. Ambas eran del mismo material, goma espuma.
-Esperad un segundo, ahora vuelvo.
Salió de la habitación para luego volver a entrar con otras dos pelotas, una verde y otra amarilla, esta vez, de plástico duro.
-Me quedan solo otras dos, esperad.
Regresó con otras dos pelotas, una de baloncesto y la otra de football. Las dos eran de reglamento.
-Mirad, he pensado que mejor con una de cada. Empezamos por aquellas-Lily señaló las de goma espuma- luego, cuando se hayan familiarizado con ellas y cuando Remus no esté, pues son más difíciles de dominar, podemos utilizar estas otras-señaló las de plástico- y por último, estas otras- movió en sus brazos las pelotas de reglamento- pero habrá que elegir una de cada. Lucía escogerá una, Julie, tú otra y yo otra.
-Yo creo que de las primeras podríamos utilizar la roja. No quiero hacer daño a Remus. Me cae bien.
-Muy bien, ahora elijo yo. La amarilla- dijo Julie.
-Y yo elijo la de football. Creo que es más dura.
-Ahora hay que descubrir dónde están.
-Eso es fácil, chicas- dijo Julie- están en casa de James.
-¿Cómo lo sabes!- dijeron a la vez Lily y Lucía.
-Me lo dijo mi madre-Jane vio que sus amigas seguían con caras de no entender nada, así que siguió- Esque mi madre trabajó en la casa de los Potter como camarera una noche en que hicieron una fiesta y los vio.
-Bueno, pues pongámonos en marcha.
00000000000000000000000000000000000000000000000000
-¡Rápido¡Cubre esa parte!
-¡James, no me puedo estirar más!
-¿Y crees que yo sí!
-¿Pero qué pasa...!
-¡Remus, agáchate!
Remus se agachó justo en el momento en que una pelota amarilla pasaba por el lugar donde un segundo antes estaba su cabeza.
-¿Nos vas a decir qué pasa o no!
-¡No puedo! Me han dicho que se ha descontrolado. Están intentando pararla.
-¿Pero quién!
-¡Qué no te lo puedo decir!
Remus se unió a James y a Sirius para poder ponerse a cubierto dentro de un armario. Remus estaba ya dentro y James tenía un pie dentro, cuando se dio la vuelta y vio parado a Sirius.
-¿Pero qué haces¡Ponte a cubierto en este armario!
-¡Nooo!
-¿Porqué no!
-¡Porque luego habrá que salir¡Y si nos ve alguien¡Fijaos lo que pensarían de tres chicos guapos saliendo del armario!
-¡Sirius, no hagas el tonto!
-No James, tiene razón. Si ya se querían burlar de vosotros con unas pelotas, que es vuestro fuerte, imaginaos como se pondrían al vernos salir del armario los tres juntos. No te das cuenta de que ese sería vuestro segundo fuerte. No pararían de ridiculizaros.
-Bueno, pues entonces ¿Qué hacemos?
-¡No lo sé!- justo en ese momento Sirius era alcanzado por la retaguardia por una pelota blanca con manchas negras.
-Creo que se les a escapado la tercera pelota.
-Remus¿qué pasa aquí?
-James, no te lo puedo decir. Vamos a ayudar a Sirius.
Salieron corriendo y fueron a por Sirius. Le cogieron y los tres salieron de la habitación corriendo. James cerró la puerta y se giró hacia sus amigos.
-¿Y ahora qué? Van a destrozar la habitación.
-Ya se lo he dicho, pero no saben como controlarlo.
-¿Cuantos son?
-Tres.
-Bueno, por lo menos estamos empatados.
00000000000000000000000000000000000000000000000000
-¡ Lucía¡Corre¡Entra ya!
-Voy, voy.
-¡Venga¡Antes de que vuelvan a entrar!
-Lily, cubre aquella parte y encárgate de la pelota de feetboll. Lucía, tu cubre aquella y encárgate de la de goma espuma y yo me encargare de esta amarilla.
-¿Y se puede saber porqué yo no pue...Uhooo- Lily hizo una voltereta lateral para esquivar una pelota.- do encargarme de la de goma espuma!
-¡Pues porque fuiste tú la que trajo la de reglamento esa y además fuiste tú la que eligió esa! –dijeron a la vez Lucía y Julie.
-¡Para vuestra información se dice football, no feetboll!
-Listilla...
Las chicas tardaron cinco minutos en... bueno, ya os lo imaginareis, en darse por vencidas y agotadas por la cantidad de acrobacias y esfuerzos por contener a las pelotas y solo fueron capaces, bueno, más bien fue Lucía la que fue capaz de pensar un poco y en echar un hechizo para desinflar globos que desinfló a la pelota de football y a la de plástico. Pero eso fue después de haberse encerrado en el armario y haber estado allí metidas pensando (o eso pensaban cada una de las demás, pues en realidad todas estaban oliendo tocando, imaginando y muchas otras cosas más la ropa que estaba en el armario, es decir, la ropa de James, Sirius y Remus) durante media hora. Fue al cabo de esa media hora cuando a Lucía se le ocurrió desinflar las pelotas, así que fue ella la que salió del armario la primera y desinfló la pelota de football. Luego salió Julie y desinfló la amarilla, y luego le tocó a Lily desinflar la de goma espuma, pero como era de ese material, no se podía desinflar. Pero ella no se dio cuenta y se pasó 10 minutos haciendo reír a sus amigas mientras se desesperaba por desinflar la maldita pelota. Al final se dio por vencida y al ver las caras de sus amigas, se dio cuenta de su estupidez. Entonces terminó por coger la pelota de goma espuma con las dos manos pero lo único que consiguió fue hacer una visita aérea de la habitación, ya que pesaba tan poco que la pelota podía con su peso. Justo cuando estaba a punto de empotrarse contra un póster de Hogwarts, se soltó de la pelota la cual efectivamente dio en el póster y rebotó para luego salir volando otra vez en busca de nuevos objetivos que destrozar y Lily calló encima de una cama sin hacer todavía, ya que el póster estaba encima de una cama. Mientras se levantaba se preguntó de quien sería esa cama y lo único que consiguió fue desesperarse aún más, pues no quería que fuera la cama de Sirius y mucho menos la de James. La de Remus la daba igual, solo que ellas sabían cual era (lo sabía, sí, porque cuando ellas empezaron a vigilar su fechoría, solo James y Sirius estaban fuera de sus respectivas camas y Remus aún seguía en la suya, así que la cama en la que había caído Lily solo podía ser de Sirius o de James).
-Me doy por vencida. Creo que van a tener que convivir con esta maldita pelota, dios lo quiera por favor.
-Lily, no seas así. Encima de que nos hemos cargado media habitación de James y que seguro nos vamos a cargar la otra mitad antes o después, no creo que tengas derecho a ponerte así.
-Pero Lucía¿y él si tiene derecho a mandarme una carta en la que dice cosas...?
-Si Lily, eso puede molestar, pero imagínate como se sentirá él después de ver todo esto.
-Pues yo estoy de acuerdo con Lily. ¿Quién le dijo a James que lo de escribir una carta como la que escribió a Lily no le iba a traer consecuencias¡Qué se hubiera dado cuenta antes y que no la hubiera ni mandado ni escrito!
-Eso digo yo.
-Como queráis, pero que sepáis que ESTO también os va a traer consecuencias.
-¿Cómo nos las va a traer si solo es Remus el que sabe quienes hemos sido y que estoy segura nunca les dirá quienes hemos sido?
-No sé...pero en eso tiene razón Lucía, Lily. Si Remus a confesado, no vendrá después a decirnos que lo ha hecho. Se lo callará.
-No sé, yo me sigo fiando de Remus.
-Yo también, Lily, pero no estamos seguras. Ni tu, ni Julie ni yo. Dios quiera que no lo haya dicho, por favor (pensó Lucía para sí misma)
00000000000000000000000000000000000000000000000000
-¿Se puede saber a dónde nos llevas, Remus?
-No, no se puede saber. Porque ni yo lo sé... (pensó para sí).
-Pues valla, tío...
-Remus, siento despistarte de nuestro itinerario desconocido, pero¿quién va a arreglar el desastre que han organizado las pelotitas de las narices?
-Pues quienes hicieron el desastre.
-¿Y quienes lo hicieron? Lo digo para luego poder matarles.
-Precisamente por eso no puedo decírtelo.
-¿Y tú como sabes quienes han sido?
-Porque cuando entré en el baño, estaban allí vigilando. Así que pusieron el agua de la ducha y me lo explicaron todo para que vosotros no lo supierais.
-¿Y por qué a ti te lo dijeron y a nosotros no?
-A ver Padfoot, déjame pensar... ¡Ah¡Pues porque se supone que no lo tendríais que saber ya que era una broma. O mejor dicho, una venganza...
-Joder, pues vamos listos...
-Joder, se me olvidó decirlas que no fue James, sino Sirius... Bueno, no me dio tiempo a hacerlo. James, no te desesperes...
-Bueno, espero que no te hayas equivocado, Remus.
-¿Cuándo sé a equivocado Remus?
-Bueno, vamos a calmarnos todos, vale. Yo tengo que volver, pero vosotros os tenéis que quedar. Tenéis que prometerme que no me seguiréis. James¿te dio tiempo a coger tu capa?
-Sí.
-Déjamela.
-Si nos dices quienes han sido.
-Si te lo digo ya no necesitaré la capa.
-Te la dejo y luego nos lo dices.
-Lo siento, pero no puedo, James.
-Que te lo has creído. Yo también sé pensar. (Pensó James)-Muy bien, vale. Te la dejo, pero porque eres mi amigo.
-Gracias tío.
-¿Pero que haces!-Le susurró Sirius a James mientras Remus se ponía la capa.
-Chhhh. Calla, ya verás...-James le devolvió el susurro.
-Hasta luego. Se despidió Remus.
-Adiós- dijeron a la vez James y Sirius.
00000000000000000000000000000000000000000000000000
-A ver si viene ya Lupin de una vez.
-Tranquila Lucía, concéntrate en la bola.
-Ya lo hago, pero...
-Mira, vamos a tranquilizarnos todas que yo también me estoy poniendo atacada. ¿Y sí no hacen caso a Lupin y no le siguen?
-Lupin es demasiado listo como para dejar pasar eso.
-Tienes razón, pero no sé...eso no me tranquiliza del todo, Lucía.
-Pero Lily...
-Mira, yo pienso así y punto. Cambiemos de tema mientras le esperamos.
-¿Porqué Lydia no ha venido?
-Ni idea. Yo hice lo mismo que con vosotras con ella. Estará "demasiado ocupada" con "asuntos hombrunos".
-Eso pienso yo también.
-Ya, pero esque tú no sabes pensar, solo copias ideas, Julie.
-¡No te pases!
-Cuando dije lo de "cambiar de tema" me refería a cambiar a un tema en el que no discutiéramos. No sé si me entendéis...
-Lily, no te hagas la...¡Oye!
-Lo hemos entendido perfectamente, gracias. Somos más listas que tú.
-¡Así que lo que pretendíais era confundirme para luego aliaros contra mi! Chicas, me habéis decepcionado.
-Lily...
-Era solo una bromita
-Venga, vamos a reírnos un rato ja ja ja.
-Por cierto, Lucía¿sabes algo de tu primo?
-No, y aunque lo supiera no te lo diría. Eres demasiado, no se como llamarlo, quizás inocente o demasiado pretenciosa. Pero creo que lo dejaré en cotilla, Julie.
-Mira quien fue e hablar, la que todos los días en las cartas me pone como posdata "ya sabes, cualquier novedad de donde sea cuenta"
-¿a ti también te lo dice?
Con estos dos últimos comentarios Lucía no hizo más que sonrojarse y hacer reír a Lily y a Julie.
-Venga, mujer, no es para tanto.
-Ya sabes como soy...
-Si, pero tienes que intentar dejar la vergüenza de lado y dar paso a la extravagancia.
-Mirad, por ahí llega Lupin.
-Hola chicas.
Las muchachas correspondieron al saludo.
-Antes de nada, Lily, la carta que recibiste no era de James, sino de Sirius, que la escribió creyendo que le hacía un favor a James, así que con quien te tienes que enfadar, en todo caso, es con Sirius. Y creo que también debes saber que James se cabreó mucho cuando se enteró de lo que había hecho Sirius.
-Oh. Bueno, pues ya me encargaré de darle su merecido a...
-Creo que no hace falta, pues creo que ya lo has hecho, y de manera bastante cruel.
-Ves, Lily, te dije que a mí me sonaba más a Black.
-Oye¿quiénes son esos de ahí?-intervino de improviso Lucía.
-¡No puede ser!- dijo Remus.
-Hay madre mía de mi vida. ¡Pero si son Black y Potter!
00000000000000000000000000000000000000000000000000
Bueno, aquí el primer capítulo de mi fic, que no es el primero pero creo que si va en serio. Espero que les guste y déjenme muchos rewies please, que me hacen muy feliz. Serían los primeros que recibo.
Les prometo que en el próximo capitulo habrá más diversión y aventuras. Hasta entonces.
Ciao!
besos a todos.
De una amargada estudiante que solo piensa en comer, internet y harry potter, amiga de la novia de Snape, de la persona más vergonzosa de la Tierra e ilustradora junto con mi mejor amiga del 6º libro de harry potter. Los dibujos se los debemos a la profesora de lengua en especial y también a otros profesores que al ponernos atrás tenemos libertad de dibujo y las clases de lengua se han convertido en las de plástica. En fin, que me enrollo.
Dew!
Posdata: este fic va dedicado para la novia de Snape (Mistral) la persona más vergonzosa de la tierra (XXX tu ya sabes que me refiero a ti, mi amiga de Canarias) y a Julia, mi mejor amiga desde que éramos canijillas (aunque hemos discutido muchas veces, una bastante gorda que nos separó durante un curso entero) bueno, espero que os guste mucho mis niñas. Quiero que sepáis que este fic se lo dedico a todos mis amigos hechos en internet y en los foros de HP, vosotros/as ya sabéis quienes sois y a todas mis amigas y amigos de Madrid y de mi insty, Marina, Sara, Ana, Cris, Beas y en fin, todos que os quiero muchisisimo. Y de Internet, sobretodo a XXX( ya sabes que me refiero a ti wapisima odio-el-rosa) a Mistral y por supuesto a Klaps y a Brendal que sois los que mas m apoyáis en el mundo y os quiero mas que a nadie. Para todos vosotros este fic y los demás que escriba.
