Descargo de responsabilidades: Ninguno de los personajes me pertenecen. Ellos son propiedad de Bryan Konietzko y Richard Dante DiMartino. Solo los uso sin fines de lucro.

Aviso junto al descargo de responsabilidades: Esta historia está basada parcialmente en hechos reales. Si están interesados en la versión original en la cual me inspiré esta historia, pueden mandarme un mensaje privado.

Relaciones: Asami/Korra (Jefa/Empleada)/Bolin/Korra (Amigos íntimos).

Categoría: Teen (T). Probabilidades de subir a Mature (M).

Cursiva: Pensamientos.

(Números entre paréntesis): Notas de Autor.


Esta historia transcurre dentro de una fábrica particular. Su nombre es Industrias Futuro, y quien la dirige hoy en día es una señorita, cuyo nombre es Asami Sato. Ella, hace poco, había cumplido veintisiete años. Es alta, de tez blanca y ojos verdes.

Ella está en su oficina. Es viernes, así que después del papeleo debe ir a hacer su recorrido semanal. Ella no lo toma como un control a sus empleados (aún cuando ellos crean que ella es una adicta al trabajo, cosa que no están del todo errados), sino más bien como una rutina en la que tanto el empleador como el trabajador pueden interactuar sin ningún tipo de prejuicio.

Asami termina el trabajo con una sonrisa. Ella no es una mujer de oficina, pero como debe dirigir esa compañía de automóviles, no tiene otra opción. Suelta un suspiro y camina hacia la salida de su oficina. Saluda a su secretaria, Opal, y ella le responde animadamente. Ambas se conocen desde hace años.

La ojiverde camina por los pasillos de su empresa. Piso por piso, ella interactúa con los demás miembros de la empresa. A medida que va bajando, ella va ideando nuevos planes para sus futuros planos, y eso la satisface internamente.

Cuando llega a la sección de ensamblaje, ella nota al instante una nueva cara. Es una joven de tez morena, con buen porte físico, un poco más baja que ella y de cabellos castaños. La mecánica esta tan concentrada en su labor que no nota la presencia de su jefa.

—¿En qué anda trabajando? —Pregunta Asami mientras se inclina un poco para ver las acciones de la otra chica.

Claramente ella estaba trabajando en el motor de uno de sus últimos modelos. Mas, la jefa solo busca un tema de conversación.

—Estoy tratando de ajustar la armadura (1) con la cubierta (2). Parece ser que el conmutador (3) no encaja a la perfección. —Comenta la castaña, muy centrada en el fallo.

—Deberías ver si puedes cambiar aquella pieza. Aún si una parte encaja con el resto del motor, puede ser que se cree un cortocircuito debido a la falla de los inductores (4). —Sugiere la ojiverde, a lo que la contraria afirma levemente.

—Tienes razón. —Comenta algo sorprendida, se endereza y mira a Asami.

Sus ojos se abren como platos. Esta joven, a quien muy pronto le dedicaremos tiempo, no podía creer que ese día viera a su jefa en persona.

—No tiene por qué sorprenderse. Suelo visitar a mis empleados los viernes. —Asegura la joven Sato.

—Mi nombre es Korra Summer. Mucho gusto. —Extiende la mano, nota que está llena de grasa y se la limpia con su playera blanca frenéticamente. —Lo siento. Cuando ando arreglando un auto, suelo ensuciarme, jefa.

—No tienes por qué disculparte. —Sonríe. —Siempre que se arregla un auto, uno debe estar arriesgado a llenarse de aceite.

—Muy cierto —La sonrisa de Korra es amplia, casi se le pueden ver todos los dientes —Me he criado con mecánicos, por lo que sé de qué va el oficio.

—Eso me agrada. —Admite Asami —Por cierto, seguiré con mi recorrido. Si necesitas algo, no dudes en solicitarme.

—De acuerdo. —Le responde mientras la otra joven se marcha.


Ya es de tarde. Korra firma su asistencia y se retira. Se dirige a su auto, un Ford Falcon de segunda mano. Saca las llaves, lo abre y prende motores. Dentro de su coche, suspira y cierra los ojos. Recuerda todo lo que vivió: ella se había enamorado de un chico apenas se mudó a Nueva York a sus diesiséis años; al poco tiempo, ella quedó embarazada. El padre se hizo cargo de ella y su hijo. A la larga, ella tuvo a una niña y las cosas se complicaron: sufrió de maltrato verbal por su parte, pero a sus hijos los trataba bien. Eso fue hasta que no volvió a casa, abandonándola a ella y a sus dos hijos.

Korra limpia sus lágrimas. Ella despeja toda duda de su mente. Sacude levemente su cabeza y se mantiene firme. Ella ahora tiene una familia a la cual cuidar y llevar el pan de cada día.

Conduce por la ciudad hasta llegar a su casa, en Brooklyn. Guarda el auto en su cochera. Sale y es recibida por el abrazo de su hija.

—¡Mami! ¡Bienvenida a casa! —Karic, de ocho años, casi la tacleó.

—Gracias, Karic. —La toma en brazos y la carga en su hombro —¿Cómo estuvo tu día?

—¡Genial! ¡El tío Bolin nos recogió a Tho y a mí y nos llevó a un centro de videojuegos! —Comenta entusiasmada.

—Me alegra saber que la pasaron bien. ¿Ellos dónde están? —Pregunta Korra mientras camina hacia la entrada de la casa.

—Están en la sala, jugando videojuegos. Tho no me deja jugar. —Dice mientras se cruza de brazos y hace puchero en el hombro de su madre.

—Ahora vamos a hablar con tu hermano. —Dice con una sonrisa.

Llegan a la sala. Baja a Karic de su hombro. Ve a su hijo, Thobert, y los compara. El mayor es quien más parecido posee a la madre: cabellos castaños, tez morena y ojos azules. Su rostro era una mezcla de ella en su niñez y su padre; su hija, mientras tanto, es el vivo calco de su padre: tez blanca, cabello cataño claro, ojos verde oliva y su rostro es un poco más circular que su hermano.

Sonríe apenas. Sin importar lo vivido, ella siempre está orgullosa de sus hijos.

—¡Bienvenida a casa, Korra! —La recibe Bolin, su amigo íntimo.

El joven es musculoso, alto, de cabello castaño oscuro y ojos verdes. Se levanta del sofá en el que hace momentos estaba sentado junto con Thobert (estaban jugando carreras de autos) y la abraza afusivamente.

—Gracias, Bolin. —Responde con una amplia sonrisa.

Lo abraza con fuerza, le da una suave palmada en su espalda y se aproxima al sofá. Su hijo la ve y sonríe ampliamente. Salta del sofá y se avalanza hacia su madre.

—¡Volviste! —Exclama muy feliz.

Korra entiende que sus hijos están traumados por lo de su padre, así que le acaricia el cabello y le susurra cariñosamente.

—Siempre regresaré.

—¿Lo prometes? —La mira a los ojos muy serio.

—Lo prometo. —Korra le asegura.

—Tho, tu madre seguro está cansada ¿Por qué no van a arreglar su cuarto? —Habla Bolin amistosamente.

—¿Vas a hablarle de la sorpresa, tío? —Pregunta Karic con una gan sonrisa.

—Así es. —Responde animado.

Ambos niños van a sus cuartos corriendo. Los dos están a solas. Korra se sienta en el sofá y suspira.

—¿Fue un día duro? —Le pregunta un poco preocupado.

—Lo normal, salvo que hoy vino mi jefa. —Se recuesta en el sofá y mira al techo. —Creo que hice el ridículo.

—Lo dudo. Asami es muy buena como directora.

—Eso lo pude ver —Sonríe apenas, luego mira a Bolin extrañada —¿De qué sorpresa me ibas a informar?

—Oh, eso. —Se rasca la nuca. —Pasa que me invitaron a una cena mañana, y me dijeron que podía traer a una amiga. Y adivina —La señala con sus dos manos —Dije que quería traerte ¡Y aceptaron!

—Alto ahí, Bolin. —Lo detuvo seriamente —Si ambos vamos ¿Quién se va a quedar con los niños? ¡No los voy a dejar con un extraño!

—Tranquila, Korra —Calma a su amiga. —La anfitriona save de tus hijos, y dijo que no tenía problema en que los trajeras contigo.

—¿Eso es cierto? —Pregunta la madre, aún teniendo dudas.

—Ella es muy agradable, incluso nos ayudó a mi hermano y a mí cuando estábamos en la calle. —Le aseguró con una de sus mejores sonrisas.

—Está bien, Bo. Confiaré en ti.

—¡Excelente! —Exclama el joven y se levante del sofá de un salto. —¡Le avisaré a los niños de la noticia!

Korra intenta detenerlo, pero él ya está lejos para que la escuche.

Una cena... Espero que mis hijos no hagan escándalo en una casa ajena.


1. Armadura: consiste en un electroimán que puede girar libremente entorno a un eje. Dicho rotor está rodeado por un imán permanente, cuyo campo magnético permanece fijo.

2. Cubierta: es la parte superior de un motor de combustión interna que permite el cierre de las cámaras de combustión

3. Conmutador: es un interruptor eléctrico rotativo en ciertos tipos de motores eléctricos y generadores eléctricos que periódicamente cambia la dirección de la corriente entre el rotor y el circuito externo.

4. Inductores: es un componente pasivo de un circuito eléctrico que, debido al fenómeno de la autoinducción, almacenaenergía en forma de campo magnético.

N. A.: Espero les haya gustado este capítulo. A diferencia de mi historia anterior, va a tener mayor capítulos. ¡Hasta la próxima! :]