¡HOLA! Volví con una nueva historia... Será sobre Morrilla en este caso. Será un multi-chapter pero no tendrá demasiados capítulos, a lo sumo serán unos 4 o 5. Espero que lo disfruten y sí, sé que el primer capítulo es bastante corto :_ Prometo hacer los demás con mayor longitud. ¡Gracias por leer! Espero ansiosa sus reviews.

Claramente los personajes no me pertenecen. Todo es una historia de mi autoría, basada en actores y/o actrices que caracterizan a los personajes de la serie Once Upon a Time.


·1·

Era un día increíble para estar a bordo de un crucero junto a su familia y Lana lo sabía. El sol se encontraba en el punto más alto de ese hermoso cielo que las acompañaba donde sea que fueran. Las nubes eran como el más blanco y suave algodón... Simplemente, maravilloso.

Lana tenía todo un mes de vacaciones, al fin libre de trabajo. Nada de entrevistas, nada de viajes a otros países para asistir a convenciones, nada de reuniones... Nada relacionado con su empleo. Por ese motivo decidió pasar tiempo con su familia y comprar cuatro pasajes para un crucero por el Caribe. El mismo duraría siete noches, partiendo desde Houston a bordo del hermoso Allure Of The Seas con visitas a Costa Maya, Belice y Cozumel, y teniendo el Caribe Occidental como destino. Decidió escoger la Suite Presidencial, la cual tenía dos habitaciones principales con camas King-size; dos baños principales, dos habitaciones adicionales con dos camas individuales convertibles, ambas habitaciones con baño; balcón con jacuzzi; comedor y un pequeño pero completo bar; y un sofá cama en el living.

- Estar aquí es como estar en el cielo... ¡Miren este lugar! ¡Es maravilloso! - Deena dijo entusiasmada. Ella recorría la suite de punta a punta seguida por su pequeño Sammy, su madre y, claro, Lana.

- Deena, calmate. No actuarás como una niña de la edad de Sammy durante toda la semana, ¿o sí? - Dolores preguntó con burla en su voz, haciendo que Lana y su sobrino rieran y que Deena la mirara y le sacara la lengua como una niña pequeña.

- Después de un buen rato viendo cada habitación de la suite, las tres mujeres y el pequeño decidieron ir a la piscina para empezar a disfrutar del increíble y caliente sol y quizás obtener, al menos ellas, un lindo bronceado. Sammy sólo se concentró en hacer amigos y jugar dentro de la piscina.

Cuando su sobrino salió de la piscina, y luego de pasar una hora tomando sol con su madre y su hermana, los cuatro juntos comenzaron a explorar el lugar, caminando lentamente, mirando cada pequeña parte del crucero. Hablaron de lo perfecto y enorme que era... Estaban completamente fascinados. Lana estaba mirando hacia el cielo y aún así podía ver partes del barco, como si estas tocaran el hermoso azul sobre ellos. Se sentía pequeña en esa enorme máquina... Estaba tan distraída mirando todo a su alrededor que no notó que alguien caminaba justo delante de ella. De repente, chocó contra esta persona, casi cayendo al suelo pero la mujer la sujetó antes de que lo hiciera. La morena levantó la vista para ver el rostro de su "salvadora" y quedó completamente muda ante lo hermosa que esta era.

- ¿Estás bien? - La mujer de ojos verde-azulados preguntó. Lana sólo le sonrió. Su voz... Ella conocía esa voz, ella la conocía.

- Estoy bien, lo siento tanto... Estaba distraída. - Respondió.

- Yo también estaba distraída, no te preocupes. ¿Estás segura que no te lastimaste o algo? - Preguntó la rubia nuevamente. Lana asintió y, todavía entre sus brazos, le preguntó:

- Estoy loca o... Eres Jennifer Morrison, ¿verdad?

- Sí, soy Jennifer Morrison. - Rió tiernamente. ¡Oh, Dios! Su risa era completamente hermosa, casi tanto como ella. - Y tú eres la gran y hermosa Lana Parrilla... - Agregó mirándola a los ojos y haciendo que Lana mordiera su labio inferior.

- Sí... - Fue lo único que pudo decir.

- Es un enorme placer conocerte. - Jennifer dijo, agarrando su mano y besándola como lo haría el más grande caballero. Después miró a Dolores y Deena, quienes estaban mirando esa adorable escena en completo silencio y sonriendo tiernamente, entonces preguntó: - ¿Y las señoritas son? - Lana pareció despertar de su ensoñación y contestó:

- ¡Oh! Ellas son mi madre, Dolores, mi hermana Deena y él es mi hermoso sobrino Sammy. - Dijo abrazando al niño.

- Es un placer conocerla, señorita Morrison. - Dijo la madre de Lana. Sammy y Deena sólo sonrieron. Jennifer besó sus manos de la misma manera que hizo con la de Lana y estrechó la pequeña mano del niño con la suya.

- Llámeme Jennifer, por favor... Y el placer es mío. - Dijo. Después de eso volvió a mirar a la pequeña mujer frente a ella. - Debo irme... Espero volver a verte, Lana.

- Espero que sí... - Contestó la morena con voz casi inaudible. Se dijeron adiós y la rubia se fue.

En el camino de vuelta a su suite, Lana estuvo callada. No dijo una sola palabra después de que se tropezó con Jennifer. Ella la había visto en la televisión. De hecho, Doctor House era uno de sus programas favoritos. Claramente sabía que la rubia era preciosa, pero jamás imaginó que sería mucho más linda en persona. Deena miró a su hermana y rió antes de decirle:

- Es malditamente sexy. ¿Verdad, Lana? - Ella miró confusa a su hermana.

- ¿Qué acabas de decir? - No creía que Deena dijera algo así.

- ¡Dije que es malditamente sexy!

- ¡Deena, cállate! Alguien puede escucharte... - La cara de la morena se volvió roja como un tomate. - Y sí, es realmente sexy. - Añadió en un susurro.

- ¡Mi hermana está enamorada de una sexy actriz! ¡Oh, Dios mío! - Dijo la mayor de las hermanas Parrilla, saltando como adolescente alrededor de Lana y Dolores. Su madre sólo rió ante la extraña situación.

Durante lo que restó del día, incluso durante la cena, Deena molestó a su hermana menor hablándole de Jennifer y sobre lo hermosa que esta era. Parecía una niña, Lana no sabía si ella era la menor de las dos o lo era Deena, hasta tenía ganas de matarla... Claro, no literalmente. La morena sabía que si volvía a ver a Morrison, su hermana no cerraría la boca y no quería pasar vergüenza frente a la rubia.

Al día siguiente, Lana despertó temprano y decidió ir al área de juegos, el único lugar que no vio el día anterior. El sitio se encontraba lleno de niños jugando y corriendo, y gente hablando y riendo. Algunos de ellos la reconocieron y, en forma educada, se acercaron a ella para pedirle una foto o quizás un autógrafo que, por supuesto, ella estaría encantada de dárselos. La actriz siguió caminando hasta que unos pequeños accidentalmente la empujaron cuando pasaron corriendo a su lado. Sintió cómo perdió el control de su cuerpo y estaba a punto de caer al suelo pero, nuevamente... alguien la sostuvo fuertemente contra su pecho.