Tú eres mi alma gemela.

Declaimer: Los personajes de BNHA no me pertenecen, Kohei es su autor y este es un pequeño pasatiempo.

Dedicación: A todos los que quieran a la pareja.

Parejas: TamaNeji — Todoraka— KatsuMomo (BakuMomo) —DekuTsu —KiriMina—etc.

Prologo. Destinados.

El tema de parejas destinadas, le fascinaba hasta cierto punto y gustaba escucharlo, más que nada al ser una chica tan ingenua. Una vez escucho que los pequeños rayones con las tintas de sus bolígrafos, podía verla la otra persona y lo espero con ansias que llegara a suceder en algún momento.

Escuchaba cada vez con más anhelo, las palabras dichas que castañeaban en sus oídos y dicho como tal, mantenía su cabeza en el suelo aun con las frases dichas de un destino tan impredecible. Percibió todo lo dicho, justo como lo decían los mayores, lo creía tan impotente y a la vez imposible, a su edad no llegaría a nada.

Solo espero en un profundo silencio, aquel que invadía su inquietud por conocer más de aquello y dichosa se llegó a sentir en el momento cuando una pequeña sensación invasora, leve pero a su vez, responsable de tener nervios. Su corazón latía demasiado rápido, una torcida sonrisa apareció en sus labios e intento calmar cada uno de sus nervios, todo apuntaba que su alma gemela le había ocurrido algo; aquello le demostraba lo conectados que estaban.

— ¿Senpai? —Ochako le miro un tanto curiosa—. Ocurre algo, la veo inquieta

—Nada, nada —contesto Nejire con esa torcida sonrisa en sus labios—. Creo que llego el momento de pensar seriamente sobre lo que ocurrió con tu compañera

—Ah, cierto —asintió Ochako soltando un bufido—y no es por nada, pero la persona que le respondió sonó grosera, me cae mal ahora

— ¿Qué apareció en su piel? O ¿Tuvo ese mismo sueño? —Nejire le observo curiosa a la castaña

—Parece que apareció un simple, vete a la mierda y el sueño es el mismo donde ella, le conoce de una forma singular —comento Ochako con una leve mueca—. Se supone que eso debe ser de temer, pero ella le contesto tan natural, yo no quiero saber de eso

—Pero, ¡Es interesante! Haz pensado las posibilidades, nosotras estamos en el inmenso Japón y que vivan en la misma prefectura —movió sus brazos con su mochila en sus manos, Nejire parecía entusiasmada—. Es como el hilo rojo del destino, pero este es más de conocerse por medio de cosas tan inspiradoras, una forma única y llevadera

—Igual, suena aterrador —dijo Ochako negando con la cabeza—. Sientes lo que la otra persona, algunas veces yo llego a sentirme melancólica de la nada

— ¿Melancólica? ¿Qué sucedió con Midoriya? —Nejire observo a la chica un momento arqueando la ceja —. Pensé que te gustaba

—Eso fue hace meses, ahora estoy centrada en mis estudios —hablo Ochako con un leve sonroso en sus mejillas

Nejire soló dejo escapar un leve suspiro, recordó la charla de aquella vez con el maestro de filosofía, Aizawa Shouta; un hombre que parecía desinteresado de esas cosas y solo pronunciaba que la juventud era muy lenta para entender sobre esas cosas. Lo interpretaba como mera comparación con lo torpes que eran ellos, su maestro de filosofía solo estaba enseñándoles acerca de esos pensamientos tan confusos.

¿Qué era el amor? Un concepto universal, definido de diversas formas según las diferentes ideologías y puntos de vistas. Sí, en algún punto llegaba a preguntarlo a su maestro de filosofía, le respondería que era una virtud, la cual representa todo el afecto, bondad y la compasión del ser humano. Complejo y a la vez, algo que se vinculaba con algo tan magnifico en conjunto de aquello que explotaba con lo distinto que eran los demás sentimientos; llegaba a un punto disparejo donde sus pensamientos chocaban entre sí, se diversificaban entre tantos puntos en el efímero ocaso y culminaban en el nuevo amanecer que le alentaba a seguir preguntándose de esas cosas.

Era irreconocible que para chicos de su edad, no tuvieran esa gran inquietud de emocionarse e inútilmente, el tema se les complicaba a grandes rasgos y entonces, la nota consciente de las almas gemelas se quedaba a la par que un tema visto durante el día. ¿Gemelas? Podría existir acaso algo con ese contexto igual, en este mundo eso era su día a día cuando comenzaban a presentarse tan las llegadoras respuestas y conexiones que se presentaban.

Llegaban a sentir lo mismo que la otra persona, sus inquietudes, alegrías y mucho más; soñaban con la persona pero no recordaban su rostro, solo su voz que les hablaba como si conocidos de años fueran, compartían algunas veces marcas de nacimiento, tatuajes o pequeñas cicatrices que llegaban a marcar a piel del contrario. Pero, lo más emocionante era cuando llegaba la respuesta marcada en la piel de la persona, con el color de la tinta de bolígrafo o incluso sus garabatos que podía llegar a hacer para no aburrirse y eso era emocionante para cada uno de ellos.

—Nos vemos, Nejire-senpai —comento Ochako levantando la mano para despedirse de la chica

—Mándame mensaje, Ochako-chan —respondió Nejire con una sonrisa de lado a lado

Ambas tomaron caminos distintos, dirigiéndose a su casa como acostumbraban cada tarde de regreso de la escuela y mientras charlaban, sus temas de conversación variaban. Ese día había sido distinto, Uraraka había salido de su salón de clases corriendo en dirección del piso donde estaban los de tercero, llego exaltada y con el cabello hecho un mar de desastre. Su voz salió torpe, balbuceo muchas veces, moviendo las manos y aun sosteniendo sus cosas; fue cuando las palabras fluyeron como una fuerte corriente de agua, su compañera de clases, la cual era la presidenta de la clase había escrito algo en su mano y solo recibió esa respuesta un tanto agresiva.

El maestro de filosofía que salía de esa última clase, observo a ambas chicas y solo dejo salir un leve bufido como respuesta ante esas inquietantes miradas de ellas. La única respuesta era obvia, intercambiaron miradas, Nejire corrió hasta su asiento a guardar sus cosas e incluso al salir del salón tropezó con algunos de sus compañeros. Entonces, comenzaron a charlar hasta el punto que salió todo a flote como una conversación sin importancia, pero para ese entonces; ya en su casa, ella sostenía el bolígrafo entre sus manos decidiendo si escribir algo o esperar a la noche para soñar con aquel chico de voz cálida.

Hola, buenas queridos lectores.

He querido comenzar un long-fic de tal vez unos 12 o 14 capítulos y pués, no se. Me gusta el tema de las almas gemelas y eso, la verdad quería publicar esto antes de lanzarme al vació contra wattpad.

Tengo algo existencialista con el prologo, me salió mi lado filosofo y tambien un tanto extraño. Pero bueno, ¿Pareja principal? TamaNeji y tal vez KatsuMomo, aunque igual me centrare en las demás, con mucho gusto lo hago. Además ando mentalizada para escribir cosas fluff y sin sentido (?) XD

Espero que les haya gustado, la portada viene un tanto extraña porque no sé. Me gusto como quedo xd, pero bueno.

Nos vemos en el capítulo 1.