Este es mi primer Fan Fic, esta situado antes del epilogo de CoHF, contiene spoilers.
Los personajes corresponden a Cassandra Clare, Cazadores de Sombras, Los Instrumentos Mortales
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Isabelle contemplaba Nueva York desde la ventana de su habitación, sus ojos negros brillaban por las lagrimas que habían logrado colarse, estaba sola así que no importaba, estaba de más una que otra lagrima, ya era hora de ir aceptando que se sentía devastada por dentro, había sido un año en el que había perdido a su hermano menor Max, había luchado hasta la muerte por no enamorarse de nadie, y había perdido, había amado, la habían amado, y ahora, había sido olvidada, por él, por Simon.
El llamado en la puerta de su habitación hizo que se secará las lágrimas rápidamente, intentando borrar todo rastro de ellas. – Siga. – Contestó con la voz medio fallándole, Alec abrió la puerta e ingresó a la habitación, sus ojos azules la miraban preocupado.
- Izzy, quería saber cómo estabas.
- Veo que aprendiste a llamar a la puerta. – Respondió ella con una sonrisa llena de recuerdos.
- Estás en tu habitación. – Dijo él mientras se sentaba en la cama, sus ojos azules seguían mirándola, como si quisieran hallar más de lo que revelaban sus palabras.
- Estoy bien. Creo. Sobreviviré supongo, siempre lo hacemos.
- Estaba asustado, mucho, en Edom, cuando te vi herida, no digas que siempre sobrevivimos, hubieras muerto si…
- No digas su nombre, por favor. – Había cierta urgencia en la voz de la muchacha
- Izzy tienes que salir de esta habitación, te extraño.
- ¿Piensas en Max alguna vez?
- Sí siempre, pero esto no es acerca de él Iz.
- No estoy lista aun.
- Llevas semanas. Estoy preocupado.
- No abandonaré mis obligaciones como cazadora de sombras, no te preocupes por eso, además no es como si nunca saliera del instituto.
- No se vale si sales a eso.
- ¡Alec!
- ¿Qué? ¿Me dices que miento?
- Él es feliz, Alec, muy feliz. No lo soporto, me quiebra por dentro, él es tan feliz y yo tan… desdichada.
- Estarás bien, lo prometo. – Dijo él mientras se levantaba de la cama rápidamente para abrazarla. – Eres la persona más fuerte que conozco. Vas a estar bien.
Izzy asintió y Alec la soltó. - Si sigues haciendo esto enviaré a mamá, lo prometo Izzy.
Isabelle sonrió sinceramente esta vez mientras veía como Alec abandonaba su habitación.
- Ver que has hecho saludos Magnus.
- Se las daré.
El mismo sueño una y otra vez, una cortina de cabello negro como la noche, unos ojos oscuros tan brillantes como un fuego encendido, un látigo, sangre. ¿Qué estaba mal con él?, se preguntó Simon otra vez mientras emprendía su camino a Saint Xavier, ¿por que de repente sentía ganas de beber sangre? No como una necesidad, como si le hubiera gustado alguna vez, definitivamente estaba enloqueciendo. Aunque no solo el tema de la sangre le inquietaba, le inquietaba más esa sensación de no pertenecer, de no estar en el lugar y momento adecuado, y estaba aquella silueta que solo lograba ver de espaldas, una chica, alta, cabello oscuro, piel blanca, totalmente fuera de su liga.
- Oye Simon, ¿sucede algo? Preguntó Eric. Ambos caminaban fuera del colegio, había pasado un día de clases y él ni siquiera lo había notado.
- solo estoy distraído, intentando recordar un sueño de anoche.
- ¿una chica?
- la misma de todos estos días, solo logro verla de espalda, aunque a veces la veo herida, sufriendo, y otras veces solamente veo ojos oscuros brillando.
- ¿ Ojos oscuros brillando? Los negros no brillan Simon. Deberías dejar el tema de los sueños a un lado o vas a enloquecer.
- Quisiera hacerlo enserio.
- Bueno los sueños te dieron el nuevo nombre de nuestra banda, así que no esta tan mal supongo. Deberíamos irnos. – Añadió pero Simon ya se había distraído mirando hacia afuera del colegio, había sido un parpadeo solamente, como si hubiera visto la silueta de ella y su cabello suelto al ritmo del viento mientras se daba vuelta y desaparecía. Simon se levantó inmediatamente, pero así mismo la había perdido de vista, tan rápido que creyó que estaba divagando. - ¡Simon!
- Creí ver a alguien. Lo siento, es mejor que regrese a casa.
- Hey, recuerda que tenemos ensayo, el concierto se acerca.
- Nos veremos en la noche.
