Ich-hana: Naruto no me pertenece. Poque si no yo me llamaría Masashi Kishimoto (y creo que ni siquiera sabría escribir mi nombre)
A veces te enamoras de la persona más inusual y de manera más inusual. Bueno no que fuera amor, talvez solo simple curiosidad, o algo mas que eso y menos que lo otro.
La vio por primera vez cuando acompañó a Ino a ver a su novio, Sai, que acostumbraba estar horas y horas en la salón de la escuela de arte, pintando. Ese día estaba despejado, esa fue la única razón por la que aceptó ir con su amiga, sino lo más probable es que estaría tumbado por ahí observando las nubes.
Subieron las escaleras a la parte superior y menos iluminada del viejo edificio hasta la habitación donde los alumnos de dibujo y pintura realizaban su propia arte, a Shikamaru nunca le había causado curiosidad lo que había en esa salita, así que no cambió su semblante aburrido al entrar en ella hasta que notó lo que el moreno dibujaba sobre el lienzo. Sobre una tarima estaba una joven sentada, prácticamente desnuda, puesto que lo único que llevaba era un trozo de tela sostenida por una de las manos de ella, mientras la otra se posaba en la pequeña tarima, dejando al descubierto su espalda y brazos, unas piernas firmes y suaves, y su rostro, con el entrecejo fruncido dando una imagen entre delicada y ruda, donde flequillos de su cabello de color arena, caían sobre su frente y sus ojos color verde oscuro, como un par de océanos profundos, tan profundos que guardaban algún misterio. El joven Nara quedó anonadado observando la figura que tenía delante, nunca pensó que una mujer podía trasmitir tanto sin siquiera moverse, sin siquiera hablar, cuando siempre había creído que las mujeres cotorreaban mucho por nada. Ni se inmutó cuando Sai se movió de su asiento y saludó a una sonriente Ino, ni cuando Ino saludaba a la misteriosa y enigmática joven con un chillón "Konichiwa Temari-san", solo volvió a la realidad cuando Temari se movió un poco cubriéndose mejor y sonriente saludaba a la otra rubia.
-¿Quien es este?- preguntó ella al artista mientras se paraba, miraba a Shikamaru.
-Él es Nara, Shikamaru, Nara-san ella es Temari-san- los presentó el moreno sonriendo. Temari le sonrió al castaño provocando que él se sonrojara.
-Un gusto, Shikamaru, espero que quedamos conocernos mejor-dijo la muchacha, haciendo que él se sonrojara aun mas, aunque esta vez pudiera disimularlo. Y recuperando su expresión de siempre asintió.
-Me encantaría-susurró arrancando una sonrisa seductora de los labios de la joven y al mismo tiempo de los suyos propios.
Después de ese día Shikamaru no pudo dejar de pensar que es lo que ocultaban los ojos de esa extraña mujer cuando ella posaba para su amigo, talvez eso había sido lo que le había atraído en ella, y fue por eso que no podía dejar de pensar de ella, solo simple curiosidad o talvez amor, no, definitivamente ninguno de ellos.
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Este es mi primer intento de fanfiction, espero que no piensen que han perdido el tiempo leyendo. Por favor reviews, por lo menos para decirme que me debo jubilar...o algo así.