Al fin esta historia vio la luz, la verdad es que tarde bastante en el proyecto de Miku y Luka porque dos ideas llegaron a mí y comencé a escribirlas paralelamente, al final decidí publicar esta primero…espero que les guste ^^
Aclaración:Ninguno de los personajes de VOCALOID me pertenecen, ellos son propiedad de Crypton Future Media.
Capitulo 1: Una extraña noche que Luka no pidió
El vapor producido por la fluida cantidad de agua caliente empaña el espejo y la ventanilla del baño. La innumerable cantidad de gotas cae por el largo y levemente ondulado cabello rosa de una mujer de elegante figura y atractivas proporciones.
—Se supone que al tomar un baño tus preocupaciones se van…vaya mentira…al ducharme solo recuerdo mas y mas cosas desagradables…—Piensa mientras termina de lavar su cabello.
—Como sea, debo terminar rápido el capitulo para que Miki pueda elaborar las ilustraciones con calma… —Dice para sí misma mientras envuelve su cuerpo en una toalla, tomando luego otra para su cabello.
Con paso tranquilo sale del baño, cruzando la pequeña distancia que la separa de su habitación. La toalla con la que se está secando el cabello la deja sin visibilidad por unos instantes.
—Veo que ya está lista para nuestra fogosa y pasionaria noche Megurine-san. —Una voz suave y clara la hace reaccionar tirando rápidamente la toalla para su cabello.
Una chica de figura fina y un tanto inocente esta parada frente a ella, lleva una falda corta y una camisa sin mangas. Su cabello atado en dos coletas cae hasta un poco mas debajo de su cintura, es de un color aguamarina tan puro y brillante que fácil sería compararlo con las cristalinas aguas del Caribe. En su rostro esta dibujada una sonrisa que no encaja mucho con lo que acaba de decir. Sus ojos, del mismo color de su cabello la contemplan vivaces, llenos de vida.
—¿Ah?... —El rostro de la mujer que solo lleva una toalla como atuendo es invadido por una clara sorpresa.
El silencio se instala en la habitación. La recientemente nombrada deshace la expresión de sorpresa de su rostro cambiándola por una seria y un tanto desconfiada. Recorre la habitación con la vista. Su ropa de cama esta tirada hacia atrás. Su escritorio parece estar igual a como lo dejo. Lleno de papeles con diversas líneas, flechas y un par de manchas de café. Las notas pegadas en su ordenador portátil también parecen estar en su sitio. La voz del a extraña interrumpe su inspección.
—¿O prefieres que te llame por tu nombre, Luka? —La entusiasta chica se acerca aun mas rodeando con sus brazos el cuello de la pelirrosa.
‹‹Pensé que era más alta que ella pero solo nos llevamos por unos centímetros…pero ¡espera! No debería pensar en eso… ¡una extraña entro en mi apartamento con claras intenciones de tener relaciones conmigo!, ¡eso es lo importante aquí!…›› Piensa al tiempo que aleja suavemente a la chica.
—¿Quién eres? —Pregunta mientras intenta disimular su ansiedad.
—Oh, lo siento, gracias a la impactante primera impresión que me lleve de ti olvide presentarme. Mi nombre es Miku Hatsune, quizás mi apellido te suene, si no es asi te diré que mi familia es conocida por tener una empresa de…
—Una empresa de café-bar que han tenido excito porque sus empleadas exhiben sus piernas sin parecer vulgares…pero no entiendo como eso está relacionado con que estés en mi habitación intentando seducirme y… ¡Hey, no te quites la ropa! —Luka que había desviado su mirada para terminar la frase al girarse se encuentra con ni más ni menos que la hija del jefe de la popular franquicia bajando el cierre de su falda mientras que su camisa ya abierta deja a la vista un sujetador blanco.
—La franquicia de café es solo el lado visible de las inversiones de mi familia…la segunda empresa que está disponible para un numero restringido de personas es la que orgullosamente hemos heredado por generaciones. La Seiteki kon. —Miku sonríe sin detener la tarea de desnudarse, dejando caer su falda para luego deshacerse de su camisa. Luka esta vez presenta un semblante de incomprensión.
—¿Seiteki kon?... —Pronuncia confundida.
—Sí, es normal que estés sorprendida, después de todo tú hiciste la solicitud indirectamente… —Miku se sienta en el borde de la cama dando una palmada a un lado para indicarle a Luka que se acerque. Esta sin embargo permanece de pie.
—¿Solicitud indirecta?, ¿Para qué?
—Para tener relaciones conmigo, ¿para qué más seria?, después de todo es una empresa prestadora de compañeros sexuales…me avergüenza tener que explicarte todo eso. —Miku desvía su mirada con un leve sonrojo en su rostro.
—Dices eso, pero no veo que te haya dado vergüenza desnudarte… —Luka comenta fríamente mientras sus cejas se arquean en una expresión de claro enojo.
—Ah, es que son dos cosas diferentes… —La joven de brillantes ojos aguamarina mueve su mano despreocupadamente.
—¿Bajo qué lógica?...como sea…dices que yo hice la solicitud indirectamente… ¿puedes decirme quien la ha hecho? —La pelirrosa se acerca al borde de la cama sentándose a una distancia prudente.
—Claro, ha sido tu jefe…si no hubiera sido por su padre que es amigo del mío entonces yo no estaría aquí…
—¿Y eso es algo bueno? —La pelirrosa mira a Miku con una asesina mirada. Intentado contener las ganas de lanzarla por la ventana para poder recuperar la paz y terminar su trabajo.
—Además ese desgraciado con complejo de samurái no tenía por qué hacer esto… —Concluye Luka para sí misma.
—No tienes que ser tan brusca conmigo…el hizo una minuciosa solicitud, digo que estabas estresada y que necesitabas relajarte, pero que no tenía que ser un hombre, tampoco una mujer….ya sabes…una mujer con… —La joven se detiene mientras dirige su mirada a sus senos, que pierden evidentemente ante los de Luka, esta al notarlo ríe.
—¿Una mujer con grandes pechos y prominente figura? —Pregunta bajando la guardia. La supuesta gigoló ha resultado ser bastante insegura acerca de su cuerpo.
—Umm… —Miku desvía su mirada hacia la estantería de libros que hay frente a ella.
—De cualquier manera estás perdiendo tu tiempo…no lo hare contigo…después de todo uno solo debe hacer esas cosas cuando hay amor de por medio. —Estas últimas palabras le resuenan como estacas en el pecho. Confiriéndole amargura a sus profundo y naturalmente sensuales ojos de un azul opaco. Se lanza hacia atrás instintivamente. La toalla se abre dejando al descubierto su cuerpo. Pero Miku no puede notarlo, puesto que se ha levantado para leer el titulo de un par de libros que están en la estantería.
—¿Pasa algo con mis libros? —Pregunta desinteresada mientras observa el techo.
—¿A ti también te gustan las novelas de Ruka?
—¿Ah?- Luka dirige su mirada hacia donde está la joven.
—No creo que pueda ser fan de mis propias novelas… —Contesta con ironía. Segundos después la joven se lanza sobre ella. Su mirada esta extasiada.
—¿Tu eres Ruka? ¿Enserio? es increíble, realmente valió la pena rogar para que me dejaran tomar esta solicitud, siempre he querido conocerte, pero solo tu dibujante asiste a las sesiones de autógrafos. —Miku yace sobre la pelirrosa con su rostro lleno de una indescriptible felicidad.
—¿No es un poco obvio?, quiero decir viste mi nombre al ver la solicitud o no, mi nombre puede leerse como Luka o Ruka, ademas mi jefe trabaja en una editorial…pero espera ¿no que habías sido seleccionada para venir? —Los ojos de la pelirrosa miran directamente a los de la joven, esta deja escapar un leve suspiro, su rostro ahora se ve triste. Por algún extraño motivo Luka siente culpa. Algo impropio de ella después de haber jurado que nunca más tendría compasión por nadie. De lo contrario podría herir otra vez su corazón.
—Bueno yo…no tengo mucha experiencia que digamos, solo he estado con una persona, mi tutora…asi que bueno, pedí que me dieran una oportunidad y prepare una forma de presentación que hiciera verme segura, pero en realidad…
—No tienes idea de que hacer…de cualquier manera no entiendo porque te instruyen en algo como esto si no quieren que lo hagas…
—Aunque ahora que lo pienso… ¿realmente existen tutores para esto? —Luka piensa mientras hace una mueca de incomodidad.
—Mis padres dicen que mientras sea una mujer está bien…
—De alguna manera entiendo por qué… —La pelirrosa esta vez deja escapar un suspiro.
—No puedo irme sin completar lo que vine a hacer…
—No es mi problema…yo no te pedí que vinieras…ademas tengo trabajo que hacer y… —Se ve interrumpida por una rogativa mirada. Sus ojos no dejan de mirarla. Con el paso de los segundos una incomoda sensación recorre su cuerpo.
—Por favor…
—No, además podrían detenerme si lo hago contigo…
—¿Ah, porque?
—Pues porque ¿Cuántos años tienes?
—Que despreciativa, tengo 18 años.
—¡¿Enserio?! —La sorpresa una vez más se hace presente en el rostro de Luka. Miku en tanto hace un puchero desviando nuevamente la mirada. La pelirrosa deja salir un largo suspiro. Algo en Miku le impide ser cruel.
—¿Entonces?
—Ah…haz lo que quieras… —La pelirrosa contesta con desinterés, no quiere pensar más.
—Bien…entonces…con permiso… —Miku comienza a sonrojarse mientras se acerca al rostro de Luka. Tras un par de segundos de dudas sus labios se juntan. Intentando relajarse comienza la secuencia del beso.
—Eres realmente torpe en esto… —Piensa Luka mientras se deja llevar por los inexpertos labios de la de cabellos aguamarina. El beso continúa por un par de minutos, breves instantes para recuperar el aliento son los únicos instantes en los que ambas pueden ver el estado de la otra. Miku se sorprende al ver que Luka tiene un leve tinte rojo en sus mejillas.
—Aaaah, maldición…no entiendo como termine en esto… ¿realmente quiero hacerlo con una extraña?...no, claro que no…pero entonces ¿Por qué tengo tantas ganas de acelerar las cosas? —Luka siente la involuntaria necesidad de tener el cuerpo de Miku mas cerca de ella. Sus brazos se extienden hasta quedar en su espalda. Miku en tanto recorre con timidez el cuello de la pelirrosa notando la fuerte presión que esta hace en su espalda.
—Maldición…. ¿por qué?... ¿porque me siento de esta manera?…ah…ya entiendo…yo…necesito sentirme querida por alguien…incluso si es una farsa creo que quiero cariño…soy patética… —Luka reflexiona mientras de sus ojos escapan cristalinas lagrimas. Miku al notar esto detiene sus acciones mirándola preocupada.
—¿Pa-pasa algo? —La voz de Miku suena temerosa como si de preguntar de otra manera pudiese dañar a Luka. Sin embargo no obtiene ninguna respuesta. El silencio se impone nuevamente por un par de minutos.
—Abrázame... —Tras la petición susurrada de Luka, Miku siente de nuevo la presión en su espalda. Sin decir nada corresponde a la petición. Tras otros minutos de incomodo silencio Miku siente que las manos de Luka se deslizan hasta llegar a su entrepierna. Leves movimientos desatan en ella un extenso calor, un beso repentino detiene completamente sus pensamientos.
La noche de ambas transcurrió bajo caricias, gemidos y a veces declaraciones unilaterales de cariño por parte de Miku, puesto que Luka permanecía en un estado de fría satisfacción. Cuando todo acabo el sueño la domino y lo último que pudo ver fue a la pelirrosa sentándose en el borde de la cama.
—Y se suponía que estabas aquí para satisfacerme a mi…de cualquier manera creo que me siento mejor que antes. —Luka reflexiona en silencio mientras contempla a su temporal acompañante. Tras un leve titubeo lleva una de sus manos hasta el flequillo de Miku.
—No entiendo la razón por la que no puedo ser cruel contigo…pero no es un problema…si tú me desprecias entonces no volverás a mi… —Susurra tranquila mientras juega con sus cabellos. El sonido de su celular la saca de su contemplación. Viéndose obligada a levantarse observa una vez más a Miku. A llegar al escritorio cae pesadamente sobre la silla y toma su celular. Un nuevo mensaje de Miki, su talentosa ilustradora y más cercana amiga, que le pide que por favor revise los bocetos para la portada del próximo tomo de la novela. Dispuesta a reanudar su trabajo Luka comienza a releer el capitulo que estaba escribiendo. Pero la suave voz de Miku la distrae una vez más.
—Luka…
—¿Qué?-
—¿No vas a dormir?
—El trabajo esta primero…
—Ya veo…
—¿Cuándo te irás? —Luka habla en tono frio y pesado.
—¿Ah? —La joven de aguamarinos ojos esta confundida.
—No pensaras quedarte aquí o si...
—Pero…ya es de madrugada y…
—Eres la hija del dueño de esta particular empresa…pídele a alguien que venga por ti…
—Es cierto que podría hacerlo pero… ¿Por qué quieres que me vaya tan rápido?
—Porque tu presencia es molesta…
—Pero si hace poco tú…
—No confundas las cosas…yo no tengo la mas mínima intención de seguir en contacto contigo…
Miku permanece en silencio detrás de la silla de Luka, esta está dándole la espalda mientras finge que revisa los apuntes en su libreta.
—Al parecer ya lo entendiste… —Luka se voltea para mirar a Miku, pero la imagen con la que se encuentra termina por devolverle los sentimientos de culpa que tuvo al principio. La chica tiene una expresión triste y confundida. Una pequeña parte de ella quiere levantarse y abrazarla, sin embargo sabe que eso no sería lo correcto.
—Deberías vestirte y llamar a alguien pronto… —Dicho esto Miku asiente, luego de vestirse toma su celular y marca un numero, tras una corta conversación todo esta listo.
—Llegaran en 20 minutos.
—Ya veo…
El resto del tiempo parece eterno, el silencio reina en la habitación y el sonido de las teclas es el único sonido de fondo. Luego de lo que parece una eterna espera el sonido de un mensaje entrante en el celular de Miku indica que el auto que la llevara de vuelta ha llegado.
—Luka…
—¿Qué?
—Tu… ¿realmente no quieres volver a verme?
—Asi es, no quiero volver a verte, no tengo intención de desarrollar algo contigo…
—Bien…entonces adiós…espero que encuentres a alguien que te haga feliz… —Dicho esto Miku le sonríe ampliamente aunque por dentro quisiera llorar por el extraño desenlace de los hechos. Camina con paso rápido hasta la puerta. Corriendo luego por las escaleras, sin importarle la cantidad de pisos. Llega a la entrada con la respiración entrecortada y las lagrimas fluyendo por su rostro. Le pide al chofer que por favor no pregunte nada.
Luka por su parte deja caer su cabeza en el escritorio, preguntándose si realmente la decisión que ha tomado esta bien. Después de toda aquella extraña le regalo sus emociones sin ningún tipo de falsedad. Lo que Miku le había dicho en uno de los intervalos que la pelirrosa producía a propósito para no cansarla tanto aun resonaba en su mente.
—Me gustas…
—Eso es ridículo, apenas sabes quién soy…
—Entonces déjame conocerte más...así no tendrás que estar sola de nuevo…
Aun se preguntaba como aquella chica había logrado ver a través de ella. Como había logrado dejar expuesta su soledad. La vergüenza y el remordimiento comenzaron a hacerse presentes. Ella había llegado a pedirle que por favor la abrazase, que por favor la quisiese, incluso si era una mentira. Ella era la responsable de darle esperanzas a Miku. Y por eso también tenía que ser la responsable de destruir dichas esperanzas. O eso es lo que había pensado. Pero ahora todo se revolvía en su mente haciéndola dudar.
—Es imposible que me guste alguien como ella…imposible… —Sin poder escribir nada Luka decide tirarse sobre la cama. Pero estando sobre esta sus pensamientos solo se incrementan. El lado en que ha estado Miku temporalmente se ha impregnado de su fragancia, haciendo que se inquiete más y más para luego caer en un sueño que detiene su tormenta interna de manera temporal.
Y aquí termina el primer capitulo, como siempre espero y acepto sus criticas, opiniones y otros siempre que sean dichas con respeto ^^
Nota: Seiteki Kon es una abreviación de Seiteki Konpanion, literalmente significa compañero sexual.
