Ladybug saltaba por los tejados de Paris, sentía el viento acariciar su rostro y alejar su mente de la realidad.
A Marinette le encantaba la libertad de ser una superheroina, no cualquier persona podía moverse de aquella manera por el cielo parisino, sabía que había sido una persona sumamente privilegiada al ser elegida la portadora del miraculous de la creación, por lo que siempre intentaría superar las expectativas que la gente tuviese sobre su persona.
Decidió parar a descansar sobre una fábrica abandonada, Chat Noir no había aparecido a la patrulla nocturna y eso la tenía un poco preocupada, intentó comunicarse nuevamente con él, pero fue en vano.
Miró la torre Eiffel y suspiró, en su interior sentía que se avecinaba algo. No era que siempre sus presentimientos le afectaran, pero desde hace unos días sentía una presión extraña en su pecho, Tikki le había advertido que a veces, el universo intentaba prepararnos para alguna noticia trágica con esas sensaciones y así evitar sucumbir en la oscuridad.
Había estado pendiente de todos sus seres queridos, hacia tres días había obligado a su padre a llevar el auto al mecánico, le contó sobre su presentimiento y él entendió, finalmente, los frenos estaban desgastados, si no hubiesen llevado el automóvil a mantención, probablemente el señor Dupain no estaría contando esa experiencia.
Marinette pensó que con ello, el pesar se iría, pero no fue así. Se acentuó cada vez más hasta el punto en que tuvo que usar la patrulla como excusa solo para despejar su mente. Ni siquiera le prestó atención a las calles, sabía que con solo avistarla, los maleantes huirían.
—My lady —Se sobresaltó al escuchar la voz de su compañero a sus espaldas—. Tranquila, soy yo —Dijo soltando una risa forzada.
Marinette se levantó y le sonrió. —Lo siento, no te oí llegar, ¿estás bien? No llegaste a la patrulla hoy.
—Tuve que atender unos asuntos sobre los que quiero hablarte, ladybug.
La seriedad en la voz de Chat Noir la hizo ponerse alerta, nunca había visto a su compañero hablar tan seriamente.
—¿Qué sucedió?
Hubo una pausa larga, Chat intentaba articular alguna oración pero se le hacía imposible, por su parte, ladybug estaba al borde de la histeria, la duda comenzaba a carcomerla, el aura densa y deprimente con la que llegó su compañero no era normal, sabía que algo estaba verdaderamente mal, además, la presión en su pecho aumentó de un momento a otro.
Si sus manos no hubiesen estado cubiertas, probablemente estaría comiéndose las uñas.
El superhéroe la tomó de los hombros y la miró directamente a los ojos. —Por favor Ladybug, entrégame tu miraculous.
La chica palideció al instante y se zafó del agarre tomando una distancia prudente. —Déjate de bromas, gato tonto —Dijo con una risa nerviosa.
Él la miró con lástima, casi con dolor. —Por favor, no quiero hacerte daño, no quiero tener que luchar contra ti.
—Chat, me estas asustando, ya basta.
Comenzó a acercarse lentamente a la chica, haciendo que esta retrocediera.
Ladybug jamás había temido de su compañero, sin embargo, ahora mismo se encontraba horrorizada.
—Déjame explicarte, prometo hacerlo luego de que me entregues tus aretes, my lady —Seguía acercándose peligrosamente.
—¡Basta de bromas!
—¡No estoy bromeando! —Y se lanzó contra ella.
Marinette esquivó el golpe y le tomó el brazo intentando hacer una llave, pero Chat Noir fue más rápido e hizo que la muchacha cayera, extendió su mano hacía sus aretes y ella reaccionó, lo golpeó duro en el estomago y comenzó a correr.
—Perdóname mi lady, pero esto tendrá que ser así —Lanzó un golpe que a duras penas la muchacha logró esquivar debido a la sorpresa, no la estaba dejando huir.
—¡¿Qué demonios te pasa Chat?! —Gritó con desesperación mientras bloqueaba un golpe de la vara con su yoyo—. ¡No lucharé contigo!
El corazón del felino se encogió mientras seguía ejerciendo fuerza con el arma. —Entonces dame tu miraculous y esto acabará.
Un nudo firme se anidó en la garganta de Ladybug, sus ojos se llenaron de lágrimas. Buscó alguna señal de que su compañero fuese víctima de un akuma, algo diferente, pero no encontró nada. —¡¿Hemos luchado por un año contra Hawk Moth y ahora estas de su parte!? —Su voz se quebró y empujó con fuerza el yoyo, lanzó una patada certera y el antes héroe voló por unos cuantos metros—. ¡Dame una maldita explicación!
El gato negro se levantó y gruñó, no pensó que Ladybug se resistiría tratándose de él. —¡Lo haré si me entregas los aretes!
Marinette soltó un grito de frustración y se echó a correr, usó su yoyo para intentar perder de la vista a su compañero… o ex compañero de batallas, este la seguía con su bastón, ciertamente, Ladybug era más rápida y decidió irse a un barrio concurrido de la ciudad, después de todo, era sábado por la noche. Se ocultaría y saldría con su forma de civil de su escondite.
Llegó a una calle llena de bares y discos, vio a su compañero a unos edificios de distancia y se ocultó en un callejón.
Su corazón estaba acelerado, tenía mucho miedo, tanto de Chat como del lugar en donde se encontraba.
Habían tres tipos inconscientes por la borrachera, los miró fijamente y al ver que no reaccionaban se ocultó entre las sombras para des transformarse. Tikki la miró con lástima y se escondió rápidamente en su bolso sin decir nada.
Comenzó a caminar tranquilamente, estaba haciendo esfuerzos inhumanos por no llorar, no entendía que le ocurría a Chat, él no era así, él no la traicionaría. Mordió su labio inferior y siguió caminando, las lagrimas se acumulaban en sus ojos contra su voluntad.
Jamás se había sentido tan abandonada, indefensa e impotente. Ese gato callejero se lo pagaría, tantas veces le confió su vida, tantas peleas y aventuras juntos, ella realmente lo consideraba como una parte importante en su vida, no podía creer lo que estaba pasando, las lagrimas comenzaron a caer por su rostro y corrió, corrió como jamás lo había hecho.
Llegó a su casa en un abrir y cerrar de ojos, se transformo brevemente y entró por el techo a su habitación, a penas entro a su cama, lloró y lloró como una niña. Tikki intentó consolarla, la pequeña kwami tampoco entendía el actuar de portador de Plagg, estaba realmente confundida.
Marinette lloró gran parte de la noche, cuestionó su posición como heroína, si todo había sido una farsa de parte de Chat, no sabía si eran amigos aun, lo único que entendía era que debía proteger más que nunca a Tikki y su miraculous, Hawk Moth ya se había hecho con el de la destrucción, si conseguía el suyo, todo estaría perdido.
Buenas! Esta es una idea super random que llegó a mi mente, tengo un par de cosas en mente, pero sobre todo me gustaría saber si les llama la atención la trama.
¿Lo dejo en OS o hago un Long Fic?
Saludos!
