Delicadeza || AsaNoya

Fue una fría noche de invierno la de aquel día. Karasuno había ido a Tokyo a una concentración de nuevo, en conjunto con Nekoma y Fukurodani, como resultaba usual. Era apenas la primera noche, y aunque ya pasaba de las once, el líbero de Karasuno era incapaz de dormir como bien podía el resto de sus compañeros.

A su lado izquierdo estaba su mejor amigo, Ryuu, y al derecho se encontraba Asahi. Ambos dormían sin dificultad alguna, notoriamente cómodos. Takana se rodaba de forma constante, se quitaba el cobertor y después lo buscaba. Azumane no hacía nada de eso, una sola vez se giró, dándole la espalda a Nishinoya. De esa posición él tuvo una vista francamente agradable: el cabello de Asahi.

Lo observó durante algunos segundos, quizá minutos enteros. Después un inexplicable impulso le hizo desear tocarlo. Se movió lentamente, sin dejar de mirar la nuca del otro, hasta llegar a su espalda, a escasos centímetros. Ya allí, elevó su mano y acarició las puntas del cabello frente a sí, fue subiendo poco a poco, para así hundir sus dedos en las raíces, los adentraba y regresaba en una acción constante. Se detuvo. Volvió a adentrar los dedos en el cuero cabelludo de Asahi y, sin retirarlos, aproximó su propio rostro, sumergió su nariz para percibir el aroma que él desprendía. Tomó una larga inhalación y lo soltó por la boca, el aire caliente que exhaló fue sentido por el mayor de ambos, rio suavemente.

Yuu temió haber despertado a su superior, cautelosamente se sentó y volteó a ver el rostro del muchacho, seguía dormido, para su suerte. Se recostó nuevamente, ya un poco más calmado.

Sin embargo, Azumane se dio la vuelta y atrapó con uno de sus brazos al líbero, haciéndolo incapaz de salir de ahí. Inicialmente se asustó, creyó que lo había despertado, pero no era así, fue un simple movimiento inconsciente, similar a los muchos que estaba teniendo Ryuu. Se rindió. Le restó importancia y se acurrucó en el pecho de Asahi, lo abrazó y lo rodeó con una de sus piernas también. Finalmente, y tras unos segundos, Yuu pudo conciliar el sueño.

Habría sido su imaginación o una simple parte de un sueño, porque no mucho tiempo después de haberse dormido, sintió que su frente era tocada con delicadeza.

No se equivocaba, se trataba de los labios de Asahi.


No estaba muerta, andaba de parranda.

¡Regresé!

El fandom de haikyuu está más muerto que mi inactividad, pero bueno, eso no significa que no le escribiré cosas bonitas a mis niños.

¡Quizá, solo quizá, agregue una que otra crack ship! Es extraño, porque antes las odiaba, pero ahora comienzo a tomarles cariño lol

¡Gracias por leer!