(Después de Gea y antes del oráculo perdido)


En tan solo tres días la nieve había cubierto totalmente a toda New York, hacía mucho frío y a pesar de eso, toda la ciudad se encontraba en pleno ajetreo. Incluso en el campamento estaban ajetreados, al parecer algún Olímpico había perdido algo y era necesario su recuperación y para esta misión se había asignado a Nico Di Angelo, quien antes de irse, decidió pasar un momento junto a su novio -Will Solace- disfrutando del agradable calor de la gran fogata; odiaba la idea de dejarlo solo en navidad, en especial cuando la nieve caía y había una especie de ambiente romántico, pero sabía que no se podía negar si quería conservar un poco más de paz en su vida.

Will, había conseguido un tazón de palomitas de maíz -cortesía del Stoll que quedaba- y hablaron de tonterías hasta que se acabaron, entonces Quirón -ah, bendito centauro-, llegó con trote suave seguramente a recordarle que tenía que partir antes de que anocheciera por completo. Nico miró hacia el cielo y si, hasta la nieve empezaba a adquirir un tono azulado oscuro; suspiró molesto por su suerte e hizo un ademán al centauro, que se adelantó hacia el portal del campamento.

Al llegar al portal que rezaba "Camp Half Blood" los dos muchachos se miraron fijamente con las mejillas encendidas cual luces navideñas y cuando Quirón tuvo la sutileza de darles su espacio, Will le plantó un dulce "beso para la suerte" –como lo llamó él- a Nico y le pidió que regresara "por órdenes del doctor", ante esta frase Nico rodó los ojos y sin poder reprimir una sonrisa, asintió -aún sonrojado- y miró hacia la tormenta de nieve con una mueca; aún con el artefacto mágico que le habían dado los hijos de Hefesto... No parecía un buen inicio para una misión, al menos tenía ese "beso para la buena suerte" fresco.

Nico terminó de despedirse sin mucho entusiasmo, Will lo notó al instante así que le dio un caluroso abrazo, uno que, de seguro le daría el suficiente calor como para que fuera y volviera al campamento con una de sus inusuales sonrisas torcidas, aún con tanto frío y tanta nieve cayendo.


Rayos... Cada vez escribo menos palabras, pero este tiene una excusa buena: es de un reto en el que tenía que escribir menos de 500 palabras con la temática de la canción del título "Let is snow" de Rod Stewart y como me gustó lo que hice... Quise compartirlo por este buen sitio

Felices fiestas, les deseo un buen año y gracias por leer