Esos ojos marrones que me hacen sonrojar cada vez que me comes con la mirada, porque tu sabes como mirarme para llegar hacerme sonrojar, esos pómulos tuyos que se sonrojan cada vez que te digo lo guapo que te vez haciendo eso, es tan gracioso, esa sonrisa especial que la haces cuando me capturas mirándote, y esa risa estúpida que aunque la odie también me hace reír, aunque no delante tuyo esta claro, y tu que siempre ries de cualquier bobada o cuando somos torpes en la intimidad, esa voz ronca que me da escalofríos cuando me susurras al oído la posición que se te antoja o cuando me dices un halago, esa piel que cada vez que tocó se eriza al contacto, con eso se que me extrañaste, y ronroneas en especial cuando descienden mis dedos hacia tus abdominales y siempre buscan más, esas manos tan ásperas pero a la vez tan deseadas y bienvenidas a invadir todo de mi, sabias o experimentadas ya que siempre saben lo que hacen, y me vuelves loca, todo de ti lo hace en cada encuentro que me entrego a ti, tus desordenados cabellos, esos hermosos ojos y esa singular sonrisa, despiertas en mi ese deseo que debo guardar para alguien mejor, pero no, es a ti a quien deseo con todos estos instintos hormonales, eres el mejor en este campo tan superficial, recuerdo cuando te dije que sólo sería algo casual y tu te sorprendiste pero me comprendiste, no te daría el tiempo que te mereces, y yo sé que si pasaríamos a ser algo más lo nuestro caería en rutina y dejaría de ser especial, ya que cada encuentro te encargas que sea algo nuevo y siempre me sorprendes, no quisiera preguntar si aprendiste con alguien mas, la verdad no me importa ya que ese día eres solo para mi y yo para ti. Nuestro acuerdo de confidencialidad terminaría si encontráramos a ese alguien, tu a una mujer en quien puedas confiar, y el mio seria... aun no lo se, tendría que verlo para saberlo, pero se que no eres tu, o al menos no tengo ese interés en ti, solo me vuelves loca cuando estamos encerrados en nuestro edén.
Esta ultima vez cometiste un grave error al decirme esas palabras que yo no siento, y te excusaste diciendo que fue el momento, espero así sea, porque es una verdad que no te amo, solo te deseo, más que a cualquier otro hombre, y no te cambiaría por otro ya que tu me das lo único que busco en un hombre, placer y sentirme mucho mejor, me siento tan complacida después de nuestro encuentro de cada semana, cuando cada vez te vuelves más experto y sabes lo que quiero, eres un completo extraño, ya que te dije que no deseo saber nada de ti, solo lo básico ya que me sentiría mas comprometida, me dijiste lo que quería oír, que eres soltero y sin compromisos, eso fue suficiente para mi, yo me siento bien así, y aunque haya pasado un año te deseo desde la primera vez que vi esos ojos marrones posarse en mi en ese cementerio.