HOLA GENTE! Tal vez no me reconozcan, pero yo hice un crossover entre Batman Y Teen Titans, Y poca gente lo ha leído porque todos los que buscan esa mescla son gringos, así que aprovecho de hacerle propaganda. Ahora, se me ocurrió la super idea de darle una nacionalidad o linaje distinto a cada miembro del bat-clan, y quedaría:

-Dick, gitano

-Cass, japonesa

-Lassy (mi OC) africana

-Sthep, francesa

-Tim, italiano.

Recuerden, esto es como lo que pasó luego de la muerte de bruce.

…

Vendetta significa venganza.

Mis padres me lo dijeron cuando tenía 5 años, en una de esas ocasionales lecciones de italiano que me daban antes de ir a ver a mis abuelos, a Italia. Eso terminó, naturalmente cuando murieron. Cuando mi madre murió, lo recordé. Me controlé, por mi padre, que estaba en el hospital, y por mi futuro trabajo. Luego, mi padre murió por capitán bumerang, aunque, esa vez no tuve las ansias asesinas de la otra vez. El ya había matado a Bumerang.

Luego, murió Bruce, Mi segundo padre.

Sentí las ansias de nuevo. Vendetta. El honor de la familia. La muerte del patriarca debe ser vengada. Miré los ojos rojos de mis hermanos, mi famila. Incluso los de Selina, que ya era de la familia, la viuda de Bruce. Mi segunda madre.

Vendetta significa venganza.

Esa noche, me escabullí de la mansión. Solo quería una cosa. La muerte del idiota que osó matar a mi padre. Ya me balanceaba por los edificios.

Llegué al lugar. No estaba acordonado. No tenía ninguna cosa que lo identificara como el sitio donde Batman murió.

Bajé en cuclillas, buscando alguna cosa que me ayudara a descubrir al asesino. Sentí una mano en la espalda. Me volteé. Stehp me miraba a los ojos. Ni siquiera me había puesto el traje. Ella tampoco. Ya eso no importaba.

-Tim.- dijo con la voz rota pero firme.

No le respondí. La miré desafiante.

-Para.- dijo ella.- No lo traerás de esa forma.

-No me importa.-¿qué no lo entendía? Lo mataría.

-Tim, yo…- le falló la voz, y rompió a llorar, y yo no supe que hacer. No me había puesto nunca en esa situación.

Le pasé un brazo por encima, y la acerqué a mí.

Habíamos salido. Por un corto tiempo, pero salímos como novios.

Yo la quería.

Siguió llorando en mi pecho.

Pasamos así unos minutos. Ella me pidió que nos fuésemos. Por algún motivo, la guié al parque. Nos sentamos en una banca, a la luz de una farola. Ella ya no lloraba.

La miré. Yo la consideraba mi mejor amiga, mi confidente. Nos habíamos transformado en hermanos, pero yo la seguía mirando como algo más.

Al fín, ella habló:

-no sé como lo soportas.- soltó un suspiro.

Le enseñé mi muñeca. Habían dos cortes en mis venas.

La tomó con cuidado.

-¿y es suficiente?- me preguntó, sin mirarme a los ojos.

-solo por unos minutos. Luego vuelve con más fuerza.

Siguió sin mirarme.

Luego, tan repentino como era todo en ella, me abrazó a mí. Yo me quedé estupefacto por unos segundo, hasta que mis brazos decidieron estrecharla contra mí. Sólo me costó unos segundos más ponerme a llorar como no lo hice desde la muerte de mi padre biológico.

Y ella me siguió abrazando, consiente de que si rompía el abrazo yo me seguiría recluyendo en mi mundo.

Cuando terminé de llorar, Ella me soltó con cuidado. Luego me miró expectante.

Le levanté la barbilla con la mano, y la besé. Supo salado, como nuestras lágrimas.

Volvimos de la mano a la mansión. Mis ansias asesinas fueron segadas. Desde ese momento, ella fue mi todo. Mi apoyo, mi amiga, mi consejera, mi guía. Yo lo fui todo para ella.

En otras palabra, Vendetta significa venganza, pero Amare significa amor.