HOLA!

Esta historia es una traduccion autorizada por el autor...(En estos momentos no recuerdo el nombre del autor original ( que verguenza) luego lo busco y lo pongo aqui...

Harry Potter NO me pertenece al igual que esta historia.

Que tengan una buena lectura :D


La plataforma 9 ¾ estaba llena esta mañana. El expreso de Hogwarts tiraba vapor blanco al aire haciendo gritar y silbar a la multitud. La gente no noto que estaba ahí, no con todo los chillidos de las lechuzas, los gritos de los diferentes familiares y el parloteo de los estudiantes. El ruido que hacia su baúl al cargarlo se perdía en la multitud. El dio un paso hacía atrás, mirando la escena caótica frente a él, con los ojos muy abiertos.

Nunca había visto tantos búhos, ratas, y gatos, excepto en un zoológico. Había otras aves también, un par de palomas gordas y uno o dos halcones. Los halcones se veían muy incomodos en sus jaulas con sus capuchas. Vio a un chico que perdió el control de su jaula y el pájaro que estaba dentro chilló y le mordió el dedo. El chico le grito, y le grito, al pájaro. Eso fue estúpido, fue su culpa que la jaula se cayera .

Observo en silencio como los padres se despedían de sus hijos, dándoles abrazos y besos. Vio como un muchacho pelirrojo gruñía y se alejaba de su madre, claramente avergonzado por haber recibido un beso en la mejilla de su madre en publico. Si ese hubiese sido yo, no me hubiese alejado, pensó con envidia.

4 Sus padres lo ignoraban, dándole toda su atención a su hermano gemelo (que era mayor que él). Lanzo una mirada a sus padres que, con gusto, abrazaban y besaban a su hermano al mismo tiempo que le decían que tuviera cuidado y que les esbribiera si necesitaba algo. El resoplo, lo mas probable es que recibieran una carta de el dentro de unos días, diciendo que había olvidado alguna pieza esencial de su equipo de Quiddicht o algún precioso articulo que quería presumirle a alguien. Su "maravilloso, perfecto, guapo, y famoso hermano". El camino en frente de su familia arrastrando su baúl negro con detalles en color plata detrás de él.

5 Su madre frunció el ceño. Oh, bien, aquí viene otra conferencia, pensó. Lily Potter solo fruncía el seño cuando estaba apunto de regañarlo por algo que supuestamente había echo.

6 –Harry, no se porque no compraste un baúl en color rojo y oro. No hay posibilidad de que entres en otra casa que no sea Gryffindor. No con tu hermano ahí- Agregó mirando con cariño a su hijo mayor.

–No me gusta el rojo y oro, mamá. Ya te lo dije- Replico Harry con exasperación, pensando en que no había manera que el entrara en Gryffindor, No con Zachary allí.

–Cuida tu tono cuando hablas con tu madre madre muchacho- Dijo James Potter amenazadoramente, entrecerrando sus ojos marrones con disgusto.

–Si, Señor- Harry gruño. Su padre nunca lo llamaba por su nombre, el no recordaba que alguna vez lo haya llamado Harry, siempre era Niño o muchacho.

Él se alejó de ellos y saco su varita del soporte de muñeca donde la guardaba, murmuro Locomotor Mortis y vio con satisfacción como el baúl comenzó a moverse hacía adelante. Harry subió al tren, dirigió su baúl hacía un compartimiento vacío y con un Wingardium Leviosa , lo llevo hasta el estante de arriba.

Se sentó en el compartimento, sintiéndose satisfecho con sus hechizos. Él había estado practicando cada vez que podía. El hechizo de levitación fue el único hechizo que no estaba seguro de haberlo echo bien, el pequeño movimiento "Agitar y golpear" había sido difícil de practicar sin una varita. El había estado practicando con un palito de su patio trasero.

El estaba muy emocionado. Finalmente iba a poder asistir a la famosa escuela Hogwarts. Tendría que haber estado asistiendo desde hace tres años, pero sus padres le habían puesto un muy potente encanto supresor de magia sobre el cuando había comenzado a mostrar signos de habilidad mágica. Lo único que les importaba era su pequeño y perfecto Zachy.

Cerró sus ojos esmeralda con irritación, tratando de sacar a sus padres de su mente. En su lugar, volvió a pensar en las casas de la escuela. Las casas eran cuatro, Gryffindor, Ravenclaw, Hufflepuff y Slytherin. El no quería estar en Hufflepuff ya que todos decían que los de esa casa eran un montón de idiotas indecisos. Gryffindor estaba inmediatamente descartado. Ravenclaw era la casa para la gente con inteligencia y valor, y los Slytherin eran famosos por su astucia y lealtad hacia su casa. Esas eran sus dos opciones. Aunque de las dos casas, Slytherin, sonaba como la mejor opción.

También era bueno que la casa de Slytherin era el enemigo de la casa Gryffindor. La rivalidad entre las casas había estado ocurriendo durante siglos según "Hogwarts: una historia". Había leído los viejos libros de escuela de sus padres cuando aprendió a leer. Los elfos domésticos le habían enseñado a leer, ya que la única preocupación de sus padres durante los últimos 15 años había sido su famoso hijo mayor. Decir que sus padres no habían tenido tiempo para el sería eufemismo.

El tren había estado en movimiento durante unas horas cuando la puerta del compartimiento se abrió. Se dio vuelta para ver al recién llegado y vio a un rubio de rostro pálido con unos llamativos ojos grises mirándolo. El desconocido lo miro durante un rato mas, luego miro el baúl negro y plata donde, con una caligrafía elegante, H. Potter y dijo:

– Así que tu eres uno delos famosos Potter. Me sorprende no haberte visto antes. Mi nombre es Draco Malfoy.

Los ojos de Harry brillaron con irritación cuando dijo –Sí, resulta que soy uno de ellos. Aunque, desde luego, no tuve elección. Solo en caso de que te importe, me llamo Harry.-

– Así que... ¿No te gusta ser famoso?- Dijo Draco arrastrando las palabras, levantando una ceja con cortés incredulidad.

– Primero, yo no soy el famoso. Y segundo no, no me gusta. Mi hermano es un imbécil insoportable, y mi padre es un idiota engreído que destruye la reputación de los Sangre pura cada vez que abre la boca.- Espetó Harry

-Creo que tú y yo realmente nos podríamos llevar bien,Potter-

–Llámame Harry-

–Entonces, tu puedes llamarme Draco. ¿En que casa estas?

–No lo se-

-¿Cómo es que no sabes en que casa estás?- Pregunto Draco

–Yo nunca he estado en Hogwarts antes-Explicó Harry –Mis padres consideraban que no era necesario para mi recibir una educación Mágica.

-¿Cómo evitaron que recibieras la carta hasta ahora?- Preguntó Draco, con sus ojos grises iluminados por la curiosidad.

–Con un encanto de supresión de magia- Dijo Harry- No pude romperlo hasta hace poco. No tenia permitido estar cerca de una varita o un mago adulto desde que tenia seis años-

Draco soltó un silbido -¿Por qué tus padres hicieron eso?

–Lo único que les preocupa es mi famoso y perfecto hermano. Ellos no querían tener que preocuparse por su otro hijo- Dijo Harry venenosamente.

-¿Así que vas a estar en Gryffindor, verdad? Todos los Potter han estado ahí-

– De ninguna manera. No quiero tener nada que ver con mi familia o su preciosa casa.

–Espero que entres en Slytherin entonces. Esa es la mejor casa de toda la escuela. Casi todos los magos poderosos ,de los últimos 80 años, han estado ahí. Nosotros somos los únicos que velemos en esa escuela. Los Ravenclaws son inteligentes peor solo entraras ahí si tienes inteligencia.

–Créeme, tengo inteligencia de sobra- Sonrió Harry-M hermano solo tiene habilidades mágicas promedio, yo soy el que tiene el talento, lastima que no soy exactamente fiel al nombre dela familia.

–Encantado de conocerte, Potter. Espero verte en la mesa de Slytherin. Ya casi llegamos, es posible que quieras cambiarte-

–Gracias. Te veo luego, Draco-

-Hasta luego, Harry-

Draco dio media vuelta y se alejó. Harry se puso su túnica con una risita. Si sus padres se enteraban que había estado hablando con una Malfoy… ser rio entre dientes al pensar en las reacciones de sus padres. Todo el mundo sabía que los Malfoy eran los principales defensores del señor oscuro. Su madre lo habría mirado con los labios tan apretados que se le hubiesen puesto blancos y su padre… Corto la línea de pensamiento en ese instante, negándose a pensar en James Potter.

Cuando el tren paro, el se llevo su baúl a lo largo dela plataforma y luego camino por el sendero. Al final del sendero los esperaban carruajes sin caballos. Harry sabía que los carruajes eran tirados por thestrals y por un momento quiso ser capas de verlos. Sabía que era probable que pudiera verlos dentro poco tiempo porque los thestrals solo podían ser vistos por aquellos que habían visto a alguien morir.

Entro en el cuarto carruaje y se encontró a si mismo sentándose solo. Eso estaba bien con el, eso le daba tiempo para repasar su presentación. Harry sabía que la clasificación sería publica, luego de que el profesor lo presentara. El era el primer estudiante en ser aceptado en la escuela tres años tarde. Dumbledore y sus padres querían hacer publicidad con esto. El sonrió ligeramente, este era un truco publicitario que le gustaba. Sería bueno shoquear a sus padres y a sus amigos, por no mencionar a su estúpido hermano malcriado.

Harry Potter se echó a reír y fue bueno que este solo en el carruaje. Su risa le enviaría escalofríos por la espina dorsal a cualquiera que se atreviera a escucharla. La vida es buena, pensó, muy buena.


Espero que les haya gustado...

Bella