"En un nuevo comienzo"

Advertencia: OOC, Baffy, critica hacia The Looney Tunes Show…

Solo es un fic… no se lo tomen tan enserio…

00000000000000000000000000000000000000000000000000 00000000000000000000000000000000000000000000000000 00000000000000000000000000000000000000000000000000 000000000000000

Recordabas a la perfección como era todo antes...

Pero mentirías si dijeras que todo era bello y armonioso, y más sin embargo resultaba mejor en ese entonces, mejor de lo que estaba ahora…

Tenías que aceptar el cambio que hacia el tiempo, sabias bien que no era posible que las cosas se mantuvieran como en un principio, sabias que tarde o temprano tu trabajo se hallaría en un rincón bajo un nombre de "clásicos" que pocos verían con entusiasmo, y más sin embargo era algo que aun hacia peña dentro de ti.

El trabajo ya no llegaba como antes y a pesar de que lograbas ver piezas de tu trabajo siendo trasmitidas por televisión, ya no causaban el mismo efecto en las personas. Desde aquella última película las cosas se habían visto un tanto extrañas, tus compañeros pasaron a ser solo complementos del panorama o a ocupar papeles pequeños que solo les daban unos segundos o un par de minutos frente a la pantalla… Por fortuna tu lugar seguía siendo intocable, mas por lo acostumbrada que se encontraba la audiencia a ti, que por el cariño que te tiene la Warner.

Aunque hoy las cosas cambiarían, lo sabias por que habían transcurrido cuatro años desde la última llamada que tuviste por parte de ellos. En otros tiempos habrías colgado el teléfono y esperado a que te enviaran a alguno de sus pobres representantes a que te viniera a rogar, pero ahora tuviste que aguantarte las ganas y escuchaste con atención.

No podías recordad con claridad lo que te habían dicho pero dos palabras se grabaron en tu cabeza "Trabajo" "Un nuevo comienzo" Eso significaba, una oportunidad de poder volver a las andadas de hacer tus grabaciones y ver las risas de la audiencia debido a tus locuras…

La emoción se acumuló en ti de tal forma que estuviste cerca de salir corriendo y renunciar al trabajo que habías tenido que tomar para continuar pagando las deudas, claro que no lo hiciste, ya que aún no sabías precisamente de lo que se trataba todo el asunto.

Por lo que fuiste a trabajar una vez más esperando que fuera la última y no tuvieras que regresar. No era que no te gustara hacerla de músico/cómico en aquel viejo lugar, al menos podías subir las bromas de tono por la edad de tu público, la pagara no le pisaba ni los talones a lo que alguna vez llegaste a ganar pero no era mala, y tenías que aceptar que te gustaba que el público te siguiera viendo con admiración "El famoso Daffy Duck", en secreto maldecías tu gusto por los halagos.

Apenas y el turno de trabajo se terminó, cuando saliste disparado del lugar, te aproximaste al carro (antiguo pero aun así mantenía un buen porte) y manejaste hasta el estudio…

Había crecido con el tiempo y no lucia como cuando ibas diariamente, se veía todo mucho más nuevo e imponente, y por supuesto se encontraba más plagado de personas que antes, personas que llegaron a mirarte con asombro como si fueras un espécimen raro que se había colado dentro del estudio. De cualquier forma los ignoraste, no tenías tiempo para dar un discurso de lo afortunados que resultaban todos ellos de tenerte por ahí.

Sacaste una hoja de papel donde habías mal escrito la oficina a la cual tenías que reportarte, pero dicha hoja no sirvió de nada ya que no sabías ni siquiera donde estabas parado.

Intentaste preguntar un par de veces fallando en ambas gracias a la velocidad con la que todos se movían, como si el tiempo se basara solo en segundos. Sin ganas de seguir haciendo el ridículo intentando preguntar, volviste a sacar la hoja y la miraste con más detenimiento, buscando descifrar tus propios jeroglíficos.

Y maldición, que mala idea había sido quedarse ahí de pie concentrándote en ese tonto pedazo de papel, porque si no hubiera sido así habrías logrado sentir su presencia detrás de ti... pero fue demasiado tarde…

'Eeeh… ¿Buscando algo….Duck?'-

Su voz llego como si fuera la voz misma de… no de Dios… sino del mismísimo dueño del infierno.

Te sobresaltaste y tras volverte, retrocediste un par de pasos casi tropezándote con tus propias patas. Y una vez más en un par de años lo tenías frente a ti… Bugs Bunny, y por segunda vez maldijiste en tu cabeza, habías sido estúpido al creer que solo te habían llamado a ti.

Sin quererlo una cara de disgusto se plantó en tu rostro.

'¿Qué haces aquí conejo?'- no era disgusto lo que sentías, era incomodidad….

'vaya forma de saludar a un viejo amigo, Daff.'-

'perdona, olvide hacer una reverencia'-

Lo viste molestarse un poco pero lo dejo pasar rápido.

'¿Perdido, Duck?'-

'Se precisamente donde estoy, solo estaba admirando el lugar, puedes irte ya, gracias.'-

Se cubrió un poco la boca al soltar una risilla, y dios… hacia tanto que no lo escuchabas reír ni hablar….

'Ssiguess con tuss problemass al hablar "sss"'- recalco salpicando un poco de saliva en tu rostro.

'Sigues siendo tan irritante como siempre'- dijiste mirando hacia un reloj invisible en tu muñeca. – 'Lo lamente pero tengo mejores cosas que hacer que hablar contigo'-

Te alejaste sintiendo la mirada del conejo aun sobre ti.

'Yo sé el camino por si quieres acompañarme.'-

Seguiste caminando esperando a que no te vieras tan patético frente al conejo por optar por acompañarle, y en cuanto pasaron unos cuantos segundos te diste la vuelta solo para darte cuenta que el conejo te había estado siguiendo de cerca todo ese tiempo, haciendo que acabaras por chocar contra su cuerpo.

'Deberías de ver por donde caminas, Daff. Podrías lastimar a alguien'-

Un guiño y la risa burlona que no habías visto en todo ese tiempo creo un cosquilleo en tu interior.

Lo seguiste de mala gana, primero caminando un paso detrás de él, permitiéndote el mirarlo. El conejo no había cambiado en nada (no era como si en verdad esperaras que lo hiciera después de todo eran caricaturas) sus trazos seguían siendo los mismos y para tu desgracia no era fácil el borrar los recuerdos de sus juegos de antes donde te era tan fácil el tocarlo y tan difícil el apartarte…. Los llamabas "juegos" porque nunca pudieron llegar a ser algo más serio, la disposición de ambos estaba presente, pero a veces el que alguien te tuviera bajo su poderío gracias a un contrato era un verdadero fastidio, y por más que le agradecieras a la Warner, existía una lista de cosas que podrías replicarle si alguna vez el contrato se llega a romper, la primera seria tu relación imposible con el conejo. Acabaron por distanciarse con el tiempo, pero helo ahí otra vez, con su colita esponjosa, caminando confiado de sí mismo y por alguna razón tu corazón estaba latiendo cada vez más rápido.

Lo viste detenerse y apartaste de inmediato tus ojos de sus largas piernas para mirarlo a la cara, viendo ahora una sonrisa coqueta en su rostro.

'¿P…P…Por qué te detienes conejo?'- lograste decir con la voz más arrogante que pudiste conseguir.

El conejo intento acercase a ti, pero tras mirar alrededor se dio cuenta de lo mismo que tu habías notado en un principio… había demasiadas personas…. Por lo que solo te sonrojaste un poco y esquivaste su mirada.

'¿Es aquí?'-preguntaste mirando hacia el edificio al que habían llegado.

'si'- respondió Bugs también mirando a la puerta.

Ambos respiraron hondo y el conejo fue el primero en entrar para dejar la puerta abierta para ti, el muy "caballero"

Se adentraron a un elevador y compartieron un silencio que se podia sentir plagado de conversaciones que deseaban tener, pero que no era ni el momento ni el lugar para tenerlas, y entonces te atreviste a dejar una nota mental a ti mismo… llamar al conejo para salir no estaría tan mal ¿cierto? Lo harían como amigos… ¿cierto? Notaste que compartían el mismo pensamiento cuando atrapaste al conejo con sus ojos claros puestos sobre ti y sonreíste burlonamente haciendo que Bugs también lo hiciera pero con un poco de vergüenza…

No paso mucho para que acabaran llegando al piso indicado y a la puerta indicada. Bugs toco un par de veces y esta se abrió rápidamente, dejando ver una sala de juntas con al menos quince hombres y cinco mujeres dentro, ahora todos viéndolos con una sonrisa e impresionados por tenerlos ahí.

El conejo permaneció tranquilo y se adentró con una sonrisa confianzuda, mientras que tu dejaste que la arrogancia se apoderara un poco de ti, entrando como si fueras una de las más grandes estrellas de la actualidad.

'Señoras y señores, es un honor presentarles a Bugs Bunny y Daffy Duck'- anuncio el mismo hombre que había abierto la puerta.

'eeh… ¿Qué hay de nuevo, viejo?'- dijo el conejo saludando al que parecía ser el jefe.

'Geee todos están aquí por nosotros? Esto es un honor'- tomaste la oportunidad para guiñarle el ojo a una de las mujeres en el lugar. Nunca estaba de más el ganarse el cariño de las personas con un poco de coqueteo ¿cierto?

'tomen asiento, muchachos'- dijo el hombre.

Sus lugares estaban puestos justo del otro lado de la mesa, en la cabeza de esta, donde todos podían verlos y aquello comenzaba a parecerse más a los viejos tiempos…

'Bugs y Daffy son, como ya lo saben, las cabecillas de los Looney Tunes, los más alocados de todos y…'-

'oh, vamos, Doc. Vas a hacer que nos sonrojemos'- bromeo el conejo y tú le seguiste el juego.

'los hemos traído aquí porque sabemos que no hay otros Looneys a los que estén sus amigos dispuestos a escuchar más que a ustedes... así que, este es el plan…'-

Dejaste de lado todo pensamiento con respecto al conejo y te adentraste de lleno en el tema, escuchando (ahora sí) con verdadera atención.

Lo que proponían era una nueva historia donde lanzaran a los Looney Tunes dentro de una vida normal, que vivieran con personas comunes y otros Looneys, y que pasaran problemas que fueran una revoltura entre lo normal y lo lunático…

Lo llamaría "El Show de Los Looney Tunes", y por más que todo pareciera estar adornado con excelencia, sabias que no podia ser así de bueno… y te diste cuenta de la razón que tenías cuando comenzaron a mencionar los cambios…. Era un nuevo show con un nuevo estilo, con nuevas historias, y principalmente con uno que otro cambio en sus personalidades…

Y fue en ese punto donde te atreviste a interrumpir…

'a que se refiere con nuevas personalidades?'-

'Bueno…'- lo viste buscar las palabras correctas antes de continuar. – ' Una que otra modificación en su carácter y papeles… es algo sencillo. Aquí tengo un libreto por si desean leerlo, es solo el primer capítulo…'- saco de su maletín un montón de hojas bien acomodadas y las puso sobre la mesa para pasarla hacia ustedes.

Bugs se acercó más a ti tras tomar las hojas, para que ambos pudieran leerlas…

Dentro de ese libreto estaba escrito lo que te temías pero incluso era peor de lo que llegaste a imaginar. Si antes te hacían quedar en ridículo por ser burlado con la astucia de Bugs o de Speedy o de cualquier otro, ahora harían eso y le añadirían una "pisca" de lo que parecía ser estupidez, tu locura estaba siendo recargada en tu tonta forma de ser. Diciendo frases absurdas, incapaz de comprender cosas sencillas, actuando como todo un egoísta y como si no fuera suficiente… parecía ser que ahora no solo tendrías envidia del conejo, sino que serias como el amigo arrimado de este que vive a costas de él.

No lograste razonar las cosas por un segundo cuando tomaste el libreto y lo tiraste al suelo dejando que las hojas se desacomodaran.

'no pienso hacer nada de eso! ¿Qué tipo de "show" es este? ¿se supone que tengo que ser el amigo arrimado de ese conejo tonto!? Olvídenlo! Yo me largo de aquí'- gritaste y saliste de la sala tan rápido como te fue posible.

Toda la emoción que se había acumulado en ti ahora estaba por los suelos, no era eso lo que te esperabas. Creías que las cosas mantendrían su mismo rumbo con uno que otro cambio sin verdadera importancia, pero todo lo que venía en ese libreto era un cambio demasiado radical. Tenías un respeto por ti mismo y era posible que tu orgullo se haya roto unas cuantas veces antes, pero esto sería ir demasiado lejos.

Adentrándote en el ascensor apretaste el botón hacia el último piso, dispuesto a irte decepcionado y molesto contigo mismo por haberte ilusionado de forma tan ingenua. ¿Era mucho pedir que trajeran de vuelta aquella serie de Duck Dodgers? No te molestaría en absoluto el que tus demás compañeros también aparecieran, pero no querías hacer algo como la tontería que te habían presentado.

Esperaste a que la puerta del elevador se cerrara, pero antes de que esto sucediere una mano enguantada se puso en medio.

'Daffy'- menciono el conejo adentrándose una vez que las puertas se volvieron a abrir.

'no pienso aceptar un trabajo como ese! Es absurdo Bugs, no…'-

'Daff, ¿quieres venir a tomar algo conmigo? Podremos hablar entonces, cuando estemos en un lugar más privado' -

Lo miraste inseguro por un momento, no te esperabas esa propuesta, pero tampoco eras tan tonto como para no darte cuenta de lo que el conejo haría, lo había hecho antes y no dudas de que lo hiciera otra vez, iba a intentar convencerte de aceptar el contrato….

Acabaste por salir del estudio Warner en compañía del conejo, ambos sin cruzar palabra y de la misma forma se dirigieron a la casa de este. Hacia demasiado que no ibas y parecía que cada vez que la mirabas se hacía más grande.

'Pasa Daff, Te diría que te sintieras como en casa, pero ya lo sabes'- volvió a abrirte la puerta dejándote pasar primero.

No tenías que ver alrededor como si fuera la primera vez que estabas ahí dentro, pero aun así lo hiciste y solo para darte cuenta de que no había cambiado mucho desde tu última visita en una navidad ¿Por qué habían dejado de verse en días festivos? Sabias la respuesta… era frustrante el verse y tener que recordar que siempre serian simplemente amigos, nada más.

Sentándote en el comedor del conejo esperaste a que este regresara de la cocina a la que había entrado. ¿Cuántas veces no te habías sentado en esa misma silla para comer con el orejón, mientras hablaban de cualquier cosa que hubiese pasado en el estudio durante sus grabaciones? Los recuerdos comenzaron a aflorar con más claridad ahora que se encontraban solos y lo único que deseabas era irte lo antes posible.

El conejo regreso con una botella de jugo de zanahoria en mano y un par de vasos. Coloco uno frente a ti y otro lo dejo para él, para después servir el jugo.

'geee… es mejor aquí, podemos hablar con más tranquilidad y con menos miradas sobre nosotros'- se sentó.

'¿Qué fue lo que les dijiste?'- preguntaste atrapándolo a medio trago de su jugo.

'Que nos dieran tiempo para pensarlo. Nos dieron una semana para que lo comentáramos con los demás y tomáramos un decisión.' –

'No me refería eso, Bugs'-

Sabías que de cualquier forma les darían un plazo para pensarlo, pero querías saber la excusa que había sacado para justificar tu reacción.

'Lo de siempre…'- sonrió levemente. – '"yo me hago cargo del pato." No sé en qué sentido lo hayan tomado pero…'-

'En el único sentido en que está permitido que lo tomen'- replicaste sin querer escuchar las bromas de Bugs.

La sonrisa calmada en el rostro del conejo decayó un poco, haciendo que te arrepintieras de tus palabras. A veces olvidabas que para Bugs fue tan difícil como para ti el tener que aceptar la idea de que nunca podrían ser nada más…

'No pienso firmar ese tonto contrato por algo tan absurdo como ese tonto "show". Estas perdiendo tu tiempo Bugs…'-

'No es la primera vez que me dices eso, Duck'-

Pero si el conejo no iba a quedarse callado tras haber recibido tú replica. Si habías dicho algo parecido la primera vez que el orejudo te planteo la idea de que tuvieran una cita… "No pienses que voy a salir contigo, orejón. Estas perdiendo tu tiempo…" Y bueno, acabaron teniendo lo que tuvieron.

'Pero esta vez es enserio, conejo estúpido. Leíste mis diálogos? Me han vuelto estúpido! Y no solo eso! ahora tendremos que vivir juntos y yo como el pato que tienes de mantenido. Yo soy una estrella y no…'-

'Basta Daffy!'- golpeo contra la mesa haciéndote callar en el acto. – 'No se trata solo de ti y de mí. Esta es una oportunidad para todos, si aceptamos los demás también lo harán y muchos de ellos realmente necesitan el trabajo…'-

'Yo tengo otro trabajo, no me interesa si los demás solo quieren volver a grabar. No pienso rebajarme nuevamente y dejar que tú me…'-

'Deja de pensar solo en nosotros, Doc.'-

Volvió a subir su tono de voz y por la expresión en su rostro podías decir que lo estabas orillando a perder el control.

Te quedaste en silencio por unos segundos viéndolo con frialdad, demostrando que sus palabras no te hacían nada…

'Comenzaran a olvidarse de nosotros si no hacemos esto… y sabes bien lo que les pasa a las caricaturas olvidadas…'-

¿Cuántos cartoons olvidados no te habías topado en tu camino? Eran los suficientes como para necesitar un par de manos más para lograr contarlos todos. Se volvían pálidos, perdían lentamente su gracia y en poco tiempo se volvían parte de solo un recuerdo… desaparecían. Era mentira el decir que una caricatura no podia morir, lo hacían en vida; sus trazos se quedaban en tierra pero su esencia que los hacia ser ellos se iba.

Esquivaste la mirada de Bugs porque sabias que tenía razón, tal vez ustedes no lo podían ver aun pero sin duda había algunos de sus compañeros que lo comenzaban resentir… el comienzo de ser olvidados….

Bugs tenía su mirada puesta en ti y por desgracia estabas consciente de que el podia darse cuenta de que estabas entrando en razón.

'Son solo 52 episodios, Daff… Podemos hacer esto y es posible que hasta nos divirtamos haciéndolo…'-

Las cosas no serían como Bugs las estaba pintando y a pesar de que lo sabias, algo en ti comenzaba a susurrarte que aceptaras la oferta y te arriesgaras a aceptar, de cualquier forma tendrías que hacerlo. En tu contrato estaban bien especificadas las cosas sobre las cuales Warner, tenía el control y dentro de esa innumerable lista se encontraba escrito que al ser parte de los Looney Tunes y del Warner Bros, tenías el deber de hacer las filmaciones que se te pidieran. El que pidieran el tomar una decisión no era más que el darte la oportunidad de "elegir" por ti mismo, si te negabas entonces acabarían por apartar tu decisión e imponerte la suya usando tu contrato como respaldo de sus acciones.

Te engañas al atreverte a pensar que tu opinión en verdad valija algo…

'¿Para qué quieren que yo esté ahí? Me botan cada vez que se les viene en gana y dicen que "no me soportan" pero quieren que aparezca en su absurdo "Show" junto a ti!'- no podías dar tu brazo a torcer, no aun, querías que Bugs mostrara un poco de comprensión.

'Somos una de las parejas más conocidas, clásicos que se supone que deben de actuar juntos'- respondió antes de terminar su trago y servirse otro. – ' Puede que no sea como antes Daff, pero piensa que los tiempos son distintos, y justo ahora muchos de nosotros no podemos darnos el lujo a ponernos quisquillosos con respecto a nuestros papeles.'-

'lo dices como si esto te afectara de alguna forma…'- murmuraste deseando no ser escuchado pero fallaste.

'Si me afecta a mi también, Duck! Me reclamas de no leer tus diálogos pero tú tampoco leíste los míos! Han cambiado mi estilo también, pero no por eso voy a negarme a una oportunidad de volver a hacer nuestro nombre escuchar.'-

Supiste que lo habías hecho salirse de sus casillas cuando estuvo a punto de tirar la botella al suelo.

Se quedaron en silencio y ahora que lo pensabas… el conejo había cambiado un poco o tal vez era el hecho de que en verdad estaba preocupado por cómo reaccionarían los demás ante la noticia, porque lo podías ver un tanto alterado ¿Dónde estaba el conejo que permanecía inmutable ante cualquier situación? Por lo general eras tú quien no podia contener sus emociones y terminabas por expresarlas, mientras que Bugs disfrazaba todo con una sonrisa y una mirada astuta…mas no esta vez.

El conejo paso sus manos por su rostro, buscando el calmarse y apenas las quito cuando sus ojos claros cayeron sobre los verdes tuyos haciéndote tragar saliva ruidosamente.

Se acercó a ti y sentiste su mano colocarse sobre la tuya que descansaba en la mesa, y no era necesario que dijera nada más, podías leer su mente sin siquiera esforzarte tanto.

El ser considerado el cabecilla, siempre implicaba una responsabilidad. El conejo no tenía forma de saber que iba a salir todo bien y que su regreso sería un existo… pero tenía que dar su mejores palabras de ánimos a sus compañeros, no podia presentarse titubeante ante sus decisiones… y aquí entrabas tú. Eras como la parte testigo de todo, el que todos podían ver como el rebelde que si algo no andaba bien o no fuera seguro, sería el primero en oponerse.

Confinaban en Bugs, claro, pero también sabían que el conejo llegaba a hacerla de títere en las manos de los jefes y el que tu respaldaras las palabras del conejo sabias que les daba cierta seguridad. En otras palabras… Bugs necesitaba de tu apoyo, ahora más que en cualquiera de las otras veces, más que en las anteriores dos películas en las que no estaban seguros de obtener los resultados correctos.

Era algo que sus jefes no comprendían, para la mayoría de ellos todo se limitaba en "negocios" y "ganancias", pero no se ponían a pensar que sobre todo "negocio y ganancia" debía de estar primero el resultado de sus esfuerzos. No había mejor premio que el poder hacer reír a los demás y hacerlos olvidarse por un rato de sus preocupaciones sirviéndoles de entretenimiento. Con el tiempo todas esas risas se convertían en un cariño hacia ustedes, un cariño que se había estado olvidando y cayendo continuamente.

'Está bien, lo hare'- apartaste la mano del conejo de la tuya.

'sabía que no eras tan egoísta en el fondo, Daff'- de repente la voz burlona del conejo había regresado y parecía que todo estaba mejor. – 'Tienes alma después de todo. y creo que también extrañas el ser llenado de "halagos" por tus admiradores'-

Querías decirle que estos habían ido disminuyendo desde el momento en que el llego con sus estúpidos dientes enormes y pegajosa frase, pero no lo hiciste. Te limitaste a mirarlo con molestia y una vez más querías salir ahí, pero no lo harías porque lo tenías frente a ti y el tenerlo tan a tu alcance hacia que lo vieras como un imán del cual eras incapaz de despegarte.

Lo escuchaste hablar nuevamente, diciéndote una vez más que era la mejor opción y que era bueno también para los demás, mientras tanto te limitaste a tomar el jugo de zanahoria que te había servido. Hacia tanto que no lo bebías que habías olvidado la sensación de embriagues que dejaba.

Hiciste aparecer un reloj de bolsillo de entre tu plumaje y miraste hacia la hora. Tenías dos turnos, el de la tarde y uno durante las noches, pegándole a la madrugada, llegarías tarde para el segundo si no salías de su casa en ese momento.

'¿Alguna cita importante a la cual ir?'- te pregunto burlón.

'No todos tenemos millones para darnos el lujo de faltar al trabajo'-

¿Cuál era tu problema? No podías evitar el reaccionar hiriente hacia él, y es que era como si le estuvieras reprochando algo que ni siquiera tú mismo conocías. Pero a pesar de ello Bugs no le dio mucha importancia, estaba acostumbrado a tu personalidad.

'¿Te refieres al viejo restaurante-salón al que vas a tocar?'-

'También llego a tener mi espacio para tomar el micrófono, no solo voy a tocar…'- un par de segundos antes de que la pregunta llegara a tu mente. – '¿Cómo sabes tú donde trabajo? ¿Me has estado siguiendo, conejo despreciable?'-

'he ido un par de veces…'- se recargo en el respaldo de su silla y te dedico una mirada tranquila. –'Pero me siento hasta el fondo, no me hubiera gustado el serte de distracción'- he ahí la razón por la cual nunca lo habías visto.

¿De dónde sacaba la capacidad para seguir coqueteándote a pesar de que te esforzabas por tratarlo con frialdad?

'Ya no tienes que ir Daff. Aunque no estaría de más que los deleitaras con tus melodías una última vez'-

'¿Eso significa que mi presencia aquí no sirve para tu deleite?'- te metiste en el juego dispuesto a salpicarte un poco las patas en él. – 'Tienes a Daffy Duck, la más grande estrella de la Warner ¿Qué más podrías pedir?'-

El conejo se hubiera reído, pero solo rodo los ojos y sonrió un poco.

'Deberías de irte'- se puso de pie, invitándote a imitarlo y así lo hiciste.

Te acompaño hasta su puerta y te volviste a mirarlo por unos segundos… Dios, que el tiempo había pasado y a pesar de que querías tener una conversación más duradera con él, no ibas a presionar, tu orgullo sellaba tu pico. Pero en cambio recibiste un adiós y una sonrisa que te proponía el quedarte a pasar la noche… no aceptaste, no convenía para ninguno de los dos y él lo entendió porque solo se adentró en su mansión sin detenerse a mirarte por última vez.

Esa noche tus manos volaron sobre el piano como nunca, presionando las teclas sintiendo el ritmo de la melodía que se desenvolvía en tu cabeza, y era como si él estuviera ahí junto a ti, tocando a tu lado… como había ocurrido aquellos días que practicaron juntos para la presentación de "Carnival of the Animals." Fueron buenos tiempos.

Sin darte cuenta la melodía armoniosa se resbalo de tus manos y acabaste tocando algo más romántico y empalagoso. Miraste a tu alrededor y las mujeres ricas reían y se sentían mas cómodas con la melodía recién adquirida.

Habías sido estúpido y demasiado optimista alguna vez… pero lo disfrazabas a la perfección tras una máscara y antes de que pudieras darte cuenta esa mascara se volvió parte de ti y tu optimismo se difumino…. El por otro lado, lo tenía, lo conservaba puesto que sabía que no importaba la situación en la que se envolviera, siempre saldría victorioso.

Las diferencias de sus personalidades eran las que te hacían verlo a él como el fuego y a ti como el hielo, era lo que te permitía comprender porque el brillaba con tanta facilidad e inevitablemente te sentías atraído por ese brillo… pero él era de fuego y tú de hielo, podías verlo e incluso permanecer un poco junto a él, solo un poco antes de que su calor te consumiera. No podían estar juntos y más sin embargo tampoco lo suficientemente lejos….

La fama de ambos pareció alzarse con el mismo esplendor, siempre y cuando no estuvieran hombro con hombro frente a las cámaras, porque entonces el público tendría que decidir y tú los podías hacer reír hasta llorar, pero estaba escrito en su ADN el admirar al astuto que todo le salía bien, porque era lo que ellos querían ser. Pero el ser Bugs Bunny solo era un espejismo y no eran muy diferentes a ti.

Volviste a casa tiempo después y sin quererlo miraste al televisor, preguntándote como sería el verte en esa pantalla nuevamente.

-00000-00000000000000000000000-000000000000-000000 00000000000000-00000000000000000000000-00000000000 -00000000000000000-0000000000000000000000000-

Fue una sorpresa el que llamara, apenas escuchaste lo que tenía que decir cuando preguntaste si estaba bromeando. No lo estaba.

Iba a juntarlos a todos en su casa, mejor conocida como mansión, y ahí daría el anuncio del nuevo show. Pero antes tenía que discutirlo con unos cuantos más en privado y te quería ahí también.

Era de tarde cuando saliste de casa y te dirigiste a la de Bugs.

Llamaste a la puerta, pero no hubo respuesta, por lo cual entraste sin molestarte en llamar otra vez. Dentro pudiste escuchar la voz del conejo hablando posiblemente con alguien y por teléfono, porque solo se escuchaba su voz.

Soltaste un suspiro de fastidio y subiste las escaleras en busca del dientón.

En el pasillo que se extendía con varios cuartos, se hallaban colgadas numerosas pinturas de otros amigos Looney y una tuya en antiguo traje de "Duck Dodgers", luciendo tan glorioso y magnifico, te gustaba ese cuadro.

Te atreviste a tocarlo y este se movió un poco dejando ver que no se encontraba tan bien colgado como parecía, y fue cuando notaste que detrás de este se encontraba oculto algo más... ¿Qué era? ¿Una caja fuerte? Con curiosidad, moviste aún más el cuadro y acercaste tu mano a la caja, mas sin embargo, antes de que pudieras abrirla la voz del conejo llego a ti.

'Eeeh… No está bien andar curioseando en la casa de otro, Duck.'-

Diste un sobresalto y soltaste el cuadro permitiéndole volver a su antiguo lugar, casi haciendo que este se cayera, y te diste la vuelta. Un día de estos el conejo terminaría por causarte un infarto.

'¿Qué se supone que tienes ahí, Bugsy? ¿Todo tu dinero?'- tus ojos brillaron al mencionar el dinero, no podías ocultar tu fascinación por él.

'Nee… Zanahorias'- respondió con suma calma y sacando una zanahoria de la nada, le dio una mordida antes de contestar el teléfono que sonaba.

Tomo la llamada y te hizo señales de que lo siguieras.

Le echaste una última mirada al cuadro antes de irte tras el conejo, que termino por adentrarse en su cuarto.

Hablando por teléfono te llegaba a seguir con la mirada mientras te movías por su habitación ¿Cuándo fue la última vez que entraste? Cinco, seis años? Posiblemente más…

Bugs estaba recargado contra la pared junto a la puerta y por alguna razón camino hacia el pasillo. No lo seguiste, prefiriendo tomar ventaja del momento y echarte un rato en la suave cama del conejo. Aquel simple acto, trajo recuerdos demasiado viejos a tu mente… demasiado viejos e inapropiados.

El frio de las sabanas, el calor tuyo y del conejo… tu corazón comenzaba a acelerar con cada fragmento de recuerdo que llegaba a ti. Y fue peor cuando miraste a tu lado, viendo entonces en la mesa de noche del conejo, una foto tuya y de él. Olvidabas que Bugs podia ser estúpidamente cursi.

'Creí haberte dicho algo sobre andar curioseando'-

Te atrapo con la foto en tus manos. Sus colores tenían una menor definición y lucían antiguos comparados con el ahora.

Sonreíste ampliamente, viendo el ceño ligeramente fruncido del conejo, optando entonces por colocar la foto en su lugar y antes de que te pusieras de pie, el conejo se acostó junto a ti, y lo odiaste por eso, porque ahora los recuerdos chocaban uno con otro buscando atrapar tu atención, pero hubo uno en el que te enfocaste…

El conejo riendo a tu lado, burlándose de ti por haberte caído de la cama en tu intento por apartarte de él, tras tocar el climax. Estabas demasiado atontado y debiste de haberte quedado recostado sobre él, aunque fuera un minuto más antes de moverte, pero no lo hiciste y terminaste rodándote hacia un lado, buscando recostarte junto a Bugs pero acabando por caer de la cama. El acto fue tan gracioso que el conejo termino por apartar de golpe los restos que había dejado el orgasmo y en cambio se había echado a reír a todo pulmón.

'Daffy, Daff…. Duck…'- continuo llamándote el conejo hasta que saliste de tu mundito de recuerdos, sonrojándote al verlo al tan cercas. – '¿Recordando algo divertido, Daff?'-

Una mueca que podia pasar por sonrisa estaba pintada en tu pico sin que lo notaras.

'No…'- respondiste frunciendo el ceño, reprendiéndote por dejarte llevar por los recuerdos. – '¿Quién llamo? ¿alguno de los jefes?'- buscaste evitar el tema de lo que estabas recordando.

'Naa, solo mi novia'-

Te disgustaste al escuchar sus palabras y él lo noto porque una sonrisa traviesa hizo que la orilla de su boca se curveara un poco hacia arriba.

'¿Novia? ¿alguien se ha interesado en tus estúpidos dientes enormes?'-

'Si, es una conejita hermosa, con lindas orejas rosadas y…'-

Continuo hablándote de su "novia", describiéndola tan perfecta que sabias que mentía o tal vez solo deseabas que fuera así.

Tus ojos fueron de los suyos a sus labios. Querías besarlo, necesitabas besarlo y usabas cada átomo de tu ser para contenerte y no hacerlo… pero estaba tan cerca que su nariz prácticamente chocaba contra la punta de tu pico. Solo era cuestión de moverte un centímetro y esos labios serian tuyos.

Siguió hablándote de su "novia" y de lo mucho que la quería…. Tus celos estaban tomando control y menciono algo que no te gusto, causando que hicieras lo que intentabas evitar.

Tocaste sus labios con tu pico, cerrando tus ojos al hacerlo y con movimientos tímidos comenzaste a absorber sus labios y acariciarlos.

Estabas templando, sentías tu sangre hirviendo y tu cuerpo era atacado por corrientes eléctricas que pasaban dejando cosquilleos a su paso. Lo besabas y escuchabas su respiración y el sonido que causaba aquel beso húmedo, mientras que dentro de tu cabeza voces te gritaban que te apartaras, que habías llegado demasiado lejos, que se suponía que lo habías superado… pero el corazón se ponía contra la razón.

El conejo rodeo tu cuello respondiendo a tu beso con el mismo fervor que con el que se lo dabas y notaste que el también temblaba. Su cuerpo se acercó al tuyo moviéndose de tal forma que podías sentir sus deseos por ti y tu cuerpo respondía incrementando su calor y rodeaste su cadera sintiendo la necesidad de aquella cercanía.

La posición era un poco incomoda, por lo que entre besos te moviste para ponerte sobre él. Estando arriba tus brazos acabaron a ambos lados del rostro de Bugs, mientras que las de él yacían inquietas, pasando del plumaje sobre tu cabeza, a tu nuca, tu espalda, tus hombros… no querías que se detuviera. El ser tocado por esas manos ocultas tras los sedosos guantes, despertaba sentimientos que habían permanecido reprimidos.

Dios, lo extrañabas y no querías solamente sentir como él te tocaba, querías tocarlo tú también, pero sentías tu corazón latir como loco y lo pensaste… "más despacio"… no era como si tuvieran algo más que hacer o estuvieran en algún lugar donde alguien pudiera verlos.

Te apartaste de él poniendo tus manos sobre el colchón para levantar tu cuerpo del suyo y respiraste por el pico buscando controlar el bombeo de tu sangre. Él se irguió sentándose en la cama.

Te moviste deseando desarrollar todo más despacio, pero la conciencia tomo el momento para hacerte consciente de lo que hacías.

Estando de rodillas frente a Bugs te quedaste inmóvil…

'No, no lo hagas ahora…'- se acercó a ti y beso tu mejilla, para después abrazarte, dejando que su pecho chocara contra el tuyo. –'No lo pienses… Daff.'-

Algo dentro de ti se acongojo, le querías… ese era el problema. Si fuera solo por placer entonces te valdría, pero demonios… en verdad sentías algo por él, y era por eso que no podías hacerle ni hacerte esto. El enamorarte de él era la culpa con la que debías de cargar.

Lo abrazaste de vuelta…

'Tengo hambre… ¿Qué tal si salimos a comer algo?'- te apartaste.

'No, Duck…'- intento detenerte, pero fue demasiado tarde…ya habías tomado una decisión y saliste de su cuarto, bajando a la cocina.

-000000000000000000000000000000-000000000000000000 00-00000000000000000000000000000000000000000000000 0000000000000000000000000000000-00000

Quería probar un nuevo estilo de escritura, inspirada por un fic de "Sherlock" que lei que estaba escrito de esta forma.

Nota: NO tengo nada en contra de "The Looney Tunes Show" es una excelente adaptación de los Looney Tunes! Y sin duda he disfrutado cada episodio. Pero vamos, que todos notamos los cambios que hicieron y a mi parecer, creo que sería un poco difícil para los Looneys el aceptar los cambios…

Como decirle a Taz que será la mascota de Bugs, como decirle a Lola que se convertirá en una novia obsesiva psicópata, o a Gossamer que ahora será un monstruo con la mentalidad e inocencia de un niño de primaria…

Aun así los cambios que hicieron me parecen bueno y simpáticos… exceptuando el que ha Daffy lo pusieron un tanto más tonto y pues bueno.. Es mi opinión…. Solo es un fic….