Hola a todos, soy nueva aquí y este es el primer fic que escribo, y la primera historia que completo jeje.

Por mucho tiempo he estado leyendo fics en esta pagina, y a decir verdad los amo; bueno, ahora soy yo quien escribe el fic, finalmente he decidido escribir.

Puesto a que es mi primer fic, no tiene la mejor ortografía del mundo, pero me esforcé en que por lo menos lo entendieran :)

Consta de 10 capítulos; ya que este es el primer capítulo es un poco corto.

ACLARACIÓN: En este fanfic han pasado 5 años desde el ataque del Muerte Roja, por lo cual tienen 18 años.

Y, es en primera persona, en pasado y en cada capitulo narra un personaje diferente, es decir, comenzamos aquí con Astrid, por lo tanto, en el siguiente capitulo narra Hipo, luego Astrid y así sucesivamente.

Bueno, aquí les dejo el Fic.

¡espero que les guste!

DISCLAIMER: Nada de esto me pertenece, todo pertenece a DreamWorks Animations y a Cressida Cowell.

JUST TONIGHT

NIGHTMARE

Me desperté a media noche, casi ahogándome en mis gritos, tan asustada que pensé que moriría en el acto. El pánico invadía cada centímetro de mi cuerpo, hasta el más recóndito rincón de mi ser...

Lo que una sola pesadilla podía causar.

Solo fue un mal sueño Pensé, tratando de tranquilizarme, aclarar mi mente, me incorporé lentamente, recostándome en la cabecera de pino, pero por más que quisiese...me era imposible.

La oscuridad invadía mi habitación, solo la tenue luz de la luna a través de la ventana iluminaba mi cuarto... y daba forma a las cosas. La oscuridad no me asustaba, pero...una pesadilla...sí... mi madre nunca ignoro una estas...pesadillas, siempre creyó que estas eran de mal augurio- lo cual le parecía ridículo a mi padre-... yo también lo creo...por que el día en el que mi madre se canso de ser humillada por su miedo a las pesadillas, el día en el que dejó de creer en su superstición, ese día... murió; desde entonces jamás he dejado de creer que las pesadillas no son tan solo un mal sueño, y creo también que mi madre tenía razón... y no dejare que estas...lastimen a quienes quiero.

Rápidamente me levanté de la cama, y sin dar importancia al inminente frío del piso de madera, atravesé la habitación y agilmente baje las escaleras...bueno, no tan ágil realmente, abajo estaba muy oscuro...pero bajé. Cuando mis ojos lograron adaptarse a la oscuridad, y pude ver más claramente, crucé a tientas todo el trayecto hasta la puerta de entrada y salí, tratando de cerrar la puerta haciendo el menor ruido posible...creo que ya había hecho bastante, y despertar a mi padre no estaba en mis planes. Al salir un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, realmente hacía frío afuera; uno a uno bajé los escalones de piedra del umbral de la gran casa, mi casa.

Bien, ahora espero no tropezarme con las piedras del sendero, tan solo la luz de la luna estaba para iluminar mi camino

Caminé, bueno...corrí por todo Berk como una loca, y finalmente terminé enfrente de la casa de Hipo. Me aproximé a tocar su puerta como si fuese a tumbarla.

A mis dieciocho años jamás creí terminar en frente de la casa de él, haciendo esto, a estas horas...o sea, nunca me imaginé esto...pero así los dioses quisieron...