Encuentro nocturno.

Shion no podía decir que había pasado con rapidez lo que ahora sentía, fueron breves instantes en los que pudo estar cerca de Nezumi cuando él era un prófugo refugiándose en su casa, sin embago el conocerse desencadeno el destino entre ambos.

Fueron cuatro largos años en los que constantemente tenía a Nezumi en la cabeza, y mientras su tranquila vida transcurría en Lost Town , dispuso de tiempo suficiente para recordar una y otra vez .
Esos ojos grises y enigmáticos se asomaban en sus pensamientos, el misterio de No.6 era latente dentro de si, mas sin embargo, tampoco dejaba de pensar en el singular muchacho de brillantes cabellos con destellos azulados.

Y ahora que había huido de la comodidad de la ciudad y tenía la oportunidad de conocer el "mundo real" sentía que debía estar con Nezumi sin importar las consecuencias.
Tiempo atrás habia experimentado esa sensación de estar inevitablemente unido a él, así que muy adentro ambos sabían que su reencuentro era necesario, definitivo.


•••

Recostado, Nezumi recordaba esas torpes palabras dirigidas hacia él: "Me siento atraido por tí. "
¿Que clase de persona era? Tenía tantas interrogantes rodeandolo cuando pensaba en ese chico de blancos cabellos.

-Sion, estás despierto? - Se incorporó y lo vio dormido junto a esa pila de libros que intentaba ordenar.

Realmente le parecía extraño , al mirarlo con detenimiento se dio cuenta de que había algo inusual en el, aparte de su nueva apariencia.

Era como si el tuviera algo que nadie mas poseía, y aunque le costara admitirlo, le atraía de igual manera.

Se acercó a él en silencio, su rostro tan pacífico adornaba la habitación , era un chico tan puro en tantos sentidos, inocente, pulcro, sin malicia , y tan amable que le hacia perder los estribos en algunos momentos.

—Shion.— Susurró en voz baja al oído del muchacho, mientras acariciaba con lentitud su hombro, su pecho, su vientre debajo de las ropas.

—Tan suave, ¡maldición!. —
Con movimientos veloces y precisos, lentamente lo fué despojando de sus ropas, Shion por su parte dormía tan profundamente que no se percato de nada en ese momento. Lo que se temía estaba resultando mas que cierto, el ahora peliplata tenía la culpa de que se estuviera comportando así de raro.

Descubrió poco a poco y entre caricias las marcas que le rodeaban el cuerpo , realmente se veían adorable.

Lentamente y sin poder si quiera oponer resistencia se acercó a lamer los pezones, succionándolos un poco, mas sin embargo no se detuvo mucho tiempo en esa zona, quería probar el sabor de todo su cuerpo. Subió a su cuello, dejando pequeños besos al rededor de la cremosa piel. Su olor era agradable, deseable, le gustaba.

Aspiró hondo mientras seguía con la labor de aquellos besos que iban en aumento, acarició con cuidado ambas mejillas, quería besarle de inmediato, pero si no estaba despierto le daba una sensación de culpabilidad que no entendía del todo, después de todo estaba tocando su cuerpo sin consentimiento.

Pasando las manos por doquier, bajando lentamente por su vientre y las caderas, las piernas, todo su ser se sentía cálido, suave y apetecible. Acto seguido delineó con los dedos el camino de las lineas rojizas , la clara muestra de que era un sobreviviente de aquellas malditas abejas. Parecía como si una serpiente le rodeara por completo.

Miró con obvio con interés la entrepierna y acarició por arriba del pantalón despacio, estaba realmente deseoso por conocer lo que se encontraba debajo de las telas. Deslizó lo que quedaba de su vestimenta , dejándolo indefenso y convenientemente desnudo ante él, observando el cuerpo delgado unos minutos sin hacer nada mas, su piel brillaba casi dulcemente. Los latidos eran mas fuertes, decidió en ese momento que en definitiva no permitiría que nadie mas lo tocara de esa manera, le pertenecía.

Shion murmuró entonces , balbuceando algo apenas entendible.

Cuando terminó de abrir los ojos y asimilar lo que veía, soltó tremendo grito de sorpresa. Y no era para menos, el ratoncito mayor lo estaba rodeando con sus brazos mientras él estaba desnudo.
Nezumi rió un poco, decidió también que sería una molestia explicar aquello, así que se limitó a probar al fin aquellos tersos labios.

Shion apretó sus hombros un tanto extrañado, pero al final se dejó llevar pasados breves momentos.
Sus mejillas enscendidas le hacían ver mas adorable en ese instante, el ratón prosiguió con aquella intrusión en su boca, profundizando el contacto y adentrando con suavidad su lengua, moviendola entre los húmedos besos.

El muchacho citadino e inexperto estaba sorprendido , era la primera vez que alguien le tocaba de esta manera, pero las sensaciones no le permitían hablar demasiado mas que para pronunciar aquel nombre entre ligeros jadeos excitados y entrecortados.

Nezumi se encontraba realmente extasiado, su voz le hacia reaccionar de inmediato, así que pasó entonces de poseer su boca a seguir dando atenciones ahora un poco mas al sur, bajando para lamer su miembro necesitado, tomándolo con su mano lo metió a su boca moviendo de arriba a abajo, el ritmo era constante al principio , disfrutando de cada momento.

Paulatinamente aumentó la velocidad , el de blancos cabellos disfrutaba de la cálida boca del chico temblando y arqueándose por el placer que le brindaba.
Movió su mano a donde se encontraba la ajena para entrelazarla con él, quería sentirlo por completo; Nezumi accedio , un tanto mas sonrojado.

No faltó mucho para que Shion llegara al clímax , mientras Nezumi succionaba el miembro aún cálido. Después de todo era horrendo dejar sin atención el miembro cuando el semen seguía saliendo espeso y con húmeda lentitud. Cuando recobraron ambos el aliento, el ratón decidió que necesitaba algo más.

Los besos continuaron casi sin descanso, la química entre los dos ahora amantes era espectacular.

Nezumi abrió lentamente las piernas del muchacho para introducir su hombría en la estrecha cavidad, empezó despacio para no lastimarlo, recordando que era la primera vez de su acompañante.

Moviendo las caderas con cuidado empezó a embestirlo, se sentía tan completo adentrándose en él de una manera tan deliciosa, era una maravilla todas esas sensaciones en ambos cuerpos. Aumentó la velocidad poco a poco, moviendo placenteramente de arriba a abajo, Sion se abrazó a su espalda, juntando mas sus cuerpos y facilitando el acto.

Juntaron sus labios una vez mas sintiendo todo ese deseo en un beso, las embestidas continuaban llegando a un punto casi enloquecedor, los gemidos placenteros y ahogados llenaban la habitación.

Si..on— El mas alto de los dos gimió o sin poder contenerse.

De repente todo se volvió color blanco, un blanco tan puro que parecía distorsionaba todo a su paso.

—¿Nezumi, Nezumi?—

Una voz que parecía ser lejana iba acercándose , hasta que recuperó la conciencia.

—Ya es hora de levantarse, Nezumi-—

Shion le miraba con una sonrisa en el rostro. Solo necesitó entonces un minuto para procesar.

¡Que carajos! ¿Todo había sido un sueño? Estaba confundido y mas al tener esa cara sonriente tan cerca, definitivamente ese despertar lo dejaría confuso y enojado el resto del día.


Fin.

Hahahahaa... pues ahí tienen este pequeño y humilde lemon. Ya tenía un tiempo que no escribía algo así. Espero les agrade y me dejen sus comentarios , criticas o lo que sea, asadadadada. ¡Saluditos! -huye-