Declaración: Los personajes de Naruto no me pertenecen, lo único mío aquí es la historia. –
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La mujer del Hokage
Capítulo único:
Escuchas los murmullos a lo lejos y por un segundo preferiste no hacerles caso, mas al saber de quién trataban los murmullos tu cabeza dio la vuelta para encontrarte con ella.
Esa mujer de delicada apariencia era una ninja. Te preguntaste cómo puede ser así si su sola presencia desborda ternura y tranquilidad. Tu vista la recorre entera, hoy vestía unas sandalias negras junto con unos pantalones azules. Sabes que todos los hombres –incluido tú- añoraban esas piernas. Su camisa de color lila con mangas largas solo hacía destacar indirectamente sus atributos, suspiraste.
Hinata Hyūga ya era toda una mujer.
Una leve sonrisa adornaba su rostro, todos en el mercado le saludaban y sonreían. Cómo no, si era ella. La viste detenerse justo cerca de ti y tu corazón no pudo evitar palpitar más rápido. Ella se acercó a donde tú comprabas manzanas hace un momento y eligió las suyas.
–B-Buenos días Hinata-san. –Tu tartamudeo no pasó de ser percibido por nadie ahí. Tus mejillas se colorearon al verla sonreírte.
–Buenos días. –Te respondió con su dulce voz.
Congelado en tu puesto la viste pagar por la fruta e irse con la bolsa no sin antes sonreírte a modo de despedida. Toda Konoha respetaba a esa dulce mujer.
–Hinata. –Se escuchó la voz grave de él y absolutamente todos en el mercado voltearon a verlo.
–¡Naruto-kun! –Ella caminó rápidamente la distancia que le separaba del rubio.
La viste abrasarlo y no pudiste evitar suspirar junto con otros de los presentes ahí. Escuchaste los susurros de las señoras y sus amigas sobre la pareja, ellos eran perfectos.
Los azulados ojos del rubio recién llegado te observaron penetrantemente produciéndote un escalofríos. Sentiste que sabía de tus sentimientos por ella y no te equivocabas. Él sabe lo que su mujer produce en otros hombres y aunque no tiene necesidad de reclamarla como su propiedad no puede evitarlo.
Ya que lo sabes, ella jamás se fijará en ti. Ni en muchos de otros hombres de la aldea que suspiraban por ella. Porque ella no busca amar a otra persona más que al rubio y el rubio no dejará ir a aquella mujer que siempre lo amo.
Ella no era Hinata Hyūga desde hace un tiempo. Ella era Hinata Uzumaki, la mujer del Hokage.
