Bien, hola a todos! este proyecto nacio gracias a mucho tiempo libre luego de dar mi examen de ingreso a la universidad xD

Los protagonistas seran LATINAMERICAN HETALIA xD y muchas de las descripciones y nombres aqui usados nacieron de demasiado vagar por photobucket, asi que el aspecto fisico de muchos personajes no me pertenece.

Es un FEM!chile y FEM!peru... porque a ambos paises los veo ciertamente muy femeninos xD y sus peleas me suenan a peleas de gatas.

Este fic no pretende ofender a nadie de ninguna nacionalidad en especifico, y pretendo burlarme mucho tanto de mi propio pais (Chile) como cualquiera de los otros.

sin mas que agregar, disfruten su pasada por:

.:It's summer baby!:.

Summary: Nunca mas iba a creer en Diego, nunca mas. Nunca mas iba a caer en su trampa y dejarlo cruzar la frontera con tal facilidad… ¡y menos dejar que con el entrase el resto de Latinoamérica a su país!

EP 1/ de hermanos y hermanas

El calor del verano azotaba el sur del continente sin merced alguna y La República de Chile, Fernanda Corrales, estaba tan molesta que hasta el calor parecía infernal. Era cierto, amaba ir a la playa y pasarla bien contemplando sus playas… y naturalmente a los bañistas.

Si, ella estaría disfrutando todo eso, si cierto rubio teñido no la estuviese mirando fijamente en ese preciso instante, tratando de parecer lo más inocente posible.

- che, Feña, no podes ser tan estirada… son solo dos semanitas – dijo el rubio tratando de acercarse a la morena de cabello rizado, pero ella dio un brinco defensivo y miro a La República Argentina, mejor conocido por esos lares como Diego Fernandez.

- ándate a la cresta, Diego… ¿¡eres weon o te haci!? ¿¡Como chucha me traes a Perú, Bolivia, Colombia, Brasil y Venezuela!? – Le siseo señalándolo con odio - ¡¡tu sabi muy bien como están las cosas entre yo y Perú ahora mismo!! ¡¡No podi ser tan imbécil!!

- mira que sos fina, vieja amiga – le respondió ignorando los insultos que soltaba la morena - ¿Qué tiene de malo? Unas vacaciones en forma son lo que necesitan los hermanos para dejar de lado sus diferencias – le solto teatralmente, acercándola hacia él con aire seductor.

Fernanda se sonrojo y trato de sacarse al rubio de encima, bastante difícil, tomando en cuenta que el era tres veces su delgado y larguirucho cuerpo.

- ¡¡déjame tranquila maricon!! ¡¡y no soy tu hermana concha de tu madre!! – le grito con rabia acumulada.

- solo si nos dejas pasar. Si no lo haces… bueno, creo que podría quitarte algo… - bajo su mano por la espalda de la morena, luego por sus caderas e, inclinándose, levanto la pierna de la morena para tocar la pantorrilla – más que la Patagonia…

Fernanda se alejo tan sonrojada y furiosa que ni siquiera sus elocuentes insultos podían expresar el odio que sentía por Diego en ese mismo instante. Por suerte no había atinado a tocarle el rulo parlante que adornaba parte de su cabeza, o sino ahí ni las relaciones internacionales le habrían salvado de una paliza a la chilena.

- no estai en posición de amenazarme, weon – le gruño entre dientes…

En eso, un moreno mucho mas oscuro que Fernanda salió al encuentro de ambos.

- ¡FERNANDINHA! – le grito con un acento portugués mientras le daba un fuerte abrazo a la chica de ojos verde oscuro. Cada vez que Brasil, Cauân Dos Santos, le abrazaba la pobre delgaducha perdía todo el aire de sus pulmones y temía por sus costillas y otros huesos de su cuerpo.

- hola, Cauan… - dijo ella con una pobre pronunciación. El hombre de casi dos metros se rió ante el rostro adolorido de la mas pequeña.

- ¡gracias por invitarnos a vacacionar! – exclamo con alegría - ¡para el carnaval de Rió do Janeiro tu también estarás invitada! – aseguro el enorme hombre.

'¿carnaval de Rió?... hm… tal vez invitar a Caui no esta tan mal…' pensó imaginándose a la cantidad de mulatos cortos de ropa que estarían bailando por las calles de la ciudad… y la enorme fiesta en la que estaría metida.

El siguiente en salir fue Otro moreno, que usaba un sombrero de lana que le cubría las orejas que no dudo en quitarse cuando salió al encuentro de la involuntaria anfitriona, no muy convencido de estar ahí. Aun no resolvían sus diferencias respecto al norte.

- Fernandita… - le saludo – primera vez que te veo ser amable e invitarnos a pasar un rato contigo. Usualmente USA es quien se pasea a sus anchas por aquí – le siseo bastante molesto con la mención del gigante del norte.

Chile hizo lo posible por saludar a Bolivia, José Cartagena, lo más educada posible. Siempre era lo mismo con él y Venezuela; siempre se quejaban de su 'buena' relación con Alfred, y de la poca paciencia que tenia con ellos pero no con el 'rubiecito lindo' del norte a quien le besaba el trasero con usual rigor.

- siempre soy amable José… - le dijo con una sonrisa hipócrita – pero no estamos aca pa' hablar de esa wea, pasa, pasa…

El siguiente en salir fue el ya nombrado Venezuela, Gustavo Enríquez. Otro moreno a la lista, pero a diferencia de Bolivia, el no forzó el saludo y parecía realmente alegre de ir de vacaciones a un lugar fuera de su casa.

- Feña, un placer verte fuera del trabajo – le saludo con el típico beso en la mejilla y un apretón de manos – y gracias por invitarnos a Viña del Mar.

La aludida quiso rolar los ojos y echarle la culpa a Diego, pero ver tan alegre a Gustavo en tiempos tan difíciles como los que estaban viviendo, le quito todas las ganas.

- Buena, Tavo… claro, no hay problema… siempre estare feliz de tener gente de otro lados vacacionando aquí – dijo nuevamente forzando una sonrisa, pensando cómo se pondría la gordis* cuando se enterase que iba a tomarse unas largas vacaciones justo al final de su mandato.

Colombia fue tan efusivo como el brasilero a la hora de saludar a la morena, pero siendo Joaquín de una contextura más pequeña que la de el mastodonte amante del futbol aquel, el cuerpo de la delgada república de chile no sufrió mayormente.

- ¡¡Feñita!! ¡Cada día más bonita tu! – le dijo mirándole de arriba a abajo. Fernanda hacia mucho que se preocupaba por la salud de Joaco, con todo eso de la guerrilla el pobre se desgastaba tanto que a veces caía enfermo por días. Pero en esos momentos parecía estar muy bien.

- siempre contenta de tener por acá, Joaco… tu también te vei mucho mejor que la última vez que te vi…

- ¡claro! ¡nadie puede desanimar a Colombia!

Fernanda rió, pero la corto rápidamente, recordando quien sería la última en salir a saludarla… Peru, Rosaura Garcia.

Aquella morena era más bajita que Fernanda, y algo más oscura de piel (dado que Chile nació de tantas y tantas mezclas, no podía saberse a ciencia cierta de que etnia era realmente, en cambio Perú se veía bien definida con lo que era y muy orgullosa.), pero eso no aminoraba la mueca de desaprobación que traía en el rostro.

- Fernanda.

- Rosaura.

Ambas se miraron fijamente. Chile no sabía qué hacer… no quería llevarse mal con Perú, pero esta seguía quejándose por limites y derechos de mar y tal, y ella como La República de Chile, debía responder al llamado de su gente… y aquel llamado no opinaba muy bien de aquel conflicto no resuelto, según Rosaura.

- es… - prosiguió la recién llegada – extraño que nos invites a tu casa… sueles ser muy recelosa de tus… limites – le dijo con tono ironico.

- pues sí, mis limites son sagrados, Rosa… pero eso no significa que no pueda invitar a mis 'hermanos' a pasarla bien conmigo – le respondió secamente - ¿quieres, por favor, dejar el puto tema pa otro día y ahora irnos a mi casa pa poder comer algo y salir a caminar o ir a la playa? – le gruño. La más bajita asintió de mala gana, ante la mirada reprobatoria de Bolivia, quien era el más cercano a ella.

- ¡¡pues todo dicho entonces!! – salto Diego pasando la frontera con total descaro – chilito se pone con el trago y nos vamos de fiesta – dijo moviéndose divertido. Fernanda lloriqueo internamente y pensó si es que ola Trutruca de Mapuche-jiji podría ir también en contra de Argentinos culiaos.

'por la cresta… ¿en que chucha me meti?'