Los personajes de Inuyasha le pertenecen a la fantástica Rumiko…la historia si es mía.

Como seducir una miko del futuro

– Otra vez…. — susurra molesto el inu-hanyou al sentir una molestia en su entrepierna.

Maldición esto se está volviendo cada vez peor, ya ni siquiera puedo disfrutar de su embriagante olor sin que me ponga duro…y me den ganas de tirarme encima de ella y rasgar con mis garras las ropas tan extrañas de su tiempo….

–Perra maldita, todo es tu culpa – Gruño molesto por el dolor que le provocaba la erección sin atender.

Esta situación se había vuelto común desde que el hanyou de intensos ojos dorados descubrió que su instinto y su necio corazón reclamaban a la miko del futuro como su hembra. Y ella tan distraída e inocente, no tenía la gentileza de fijarse, en lo terrible que lo pasaba y el martirizante problema, del "inocente hanyou".

–Kej, perra, mírela hay riéndose con Sango y el resto de las chismosas aldeanas sobre esos estúpidos y debiluchos humanos de su época, que ella tontamente considera apuestos. Malditos si los tuviera aquí los destazaría con mis propias manos. –Gruño celoso y molestos viendo como las jóvenes comentaban sobre esas "pinturas" donde aparecían hombres con poca ropa.

Y todo por culpa de esas bullosas y chillonas amigas que tiene Kagome en su mundo y sus estúpidos regalos grrr…

/FLASHBACK/

En el mundo actual Inuyasha cansado de esperar en la habitación de Kagome, tomo la gorra de beisbol que la miko de futuro le dio para cubrir sus lindan orejitas, y salto por la ventana tomando una profunda aspiración, y con la nariz pegada al asfalto rastreo el inconfundible olor de la escurridiza miko del futuro.

1 hora antes

En las concurridas calles de Tokio, Kagome camina distraídamente junto sus animadas amigas, que no paran de hablar del nuevo calendario que obsequia la revista JP-teens, de los hombres más apuestos del momento.

–Oe Kagome, apresura mas el paso. –gruño Yuka al ver lo rezagada que se quedaba su "enfermiza" amiga.

–Si…a este paso, nunca conseguiremos la revista…y lo peor seremos las únicas de todo Japón y tal vez el mundo en no tenerla. –Decía Sayuri mientras pequeñas lágrimas de cocodrilo se formaban en sus ojos y dando la apariencia de melodramática.

–Vamos chicas no es para tanto. –Kagome trato de tranquilizarlas, mientras pequeñas gotas de sudor se escurrían en su nuca.

–Que nos tranquilicemos dices!...como puedes ser tan insensible Kagome. –La acuso Eri apuntándola con el dedo índice y continuo con su monologo alanzando las manos para enfatizar sus palabras –que acaso no sabes que no tener ese calendario seria como cometer ¡SUICIDIO SOCIAL! Todas las jóvenes que se respeten saben que es esencial tener la revista, no solo por el calendario y los hermosos, perfectos y sexis hombres que saldrán ahí. Si no porque, si no lo tenemos esos apuestos jóvenes que pasaron horas posando y sacrificando sus tiempos libres por nosotras, para que chicas normales como nosotras podamos soñar con ellos y que tal vez algún día encontraremos en un joven valiente y apuesto el príncipe azul, sexi, con músculos de acero y de cuerpo de semental que tanto las jóvenes inocentes, puras y castas soñamos. –Las tres jovencitas con sus manos en su corazón y mirada soñadora empezaron a tener hemorragia nasal, de solo imaginarse a los hombres que describía Eri tan apasionadamente.

–Son peor que Miroku. –Murmuro por lo bajo la miko del futuro, mientras en su rostro tenía una sonrisa forzada y cientos de gotitas de sudor la recorrían, al ver como el resto de personas que pasaban por ahí murmuraban sobre las tres jovencitas con cara de dementes y pervertidas. Alejando a sus hijos y diciendo cosas como que nunca se acerque a personas asi.

–Entonces Kagome… No te atreverías a romperle el corazón, a esos apuestos y dulces hombres ¿verdad? –Pregunto Sayuri.

–No yo….no. –Trato de contestar.

–O acaso tú serias tan cruel. – Dijo Yuka. Bofetada mental para Kagome.

–Despiadada. –Continuo Eri. Otro golpe en la cara.

–Desalmada. –Corearon las tres. Corazón estrujado. Eri, Yuka y Sayuri siguieron dándole ese tipo de calificativos que eran como golpes a la joven miko que ya tenía los ojos en forma de espiral totalmente mareada por las acusaciones de sus amigas.

–Está bien chicas ustedes ganan…la revista y el calendario son importantes…son lo más ¡IMPORTANTE! –Gimió la miko desde el piso en abrazada a sus rodilla mientras se mecía de adelante hacia tras.

Las jovencitas no perdieron más tiempo y tomaron a Kagome de los brazos arrastrándola a una velocidad que la miko juro que superaba a la de Koga incluso cuando corría por su vida, la llevaron a rastras hasta el local donde montones de jovencitas hacían fila para adquirir la tan mencionada revista.

Kagome no podía creer lo que sus ojos veían, para conseguir la aclamada revista y el calendario sus amigas iniciaron una "batalla", que ella calificaba tan peligrosa como las que normalmente tenía al enfrentarse a los younkais, onis y hasta el mismísimo Naraku.

Era impresionante ver como tres jovencitas tomaban posición de batalla y se lanzaban hacia la multitud que estaba dispuesta a todo con tal de conseguir sus revistas antes. Con gritos de guerra que desgarrarían la garganta de cualquiera. Aruñones. Jaladas de pelo. Y hasta patadas voladoras.

Kagome no tuvo más opción que esconderse atrás de unos contenedores de basura mientras observaba, como salían volando cosas, como maquillaje, zapatillas, perfumes y hasta sostenes que le pertenecían a las jovencitas que trataban de defender sus puestos en la fila.

Una hora después solo quedaban de pie Yuka, Eri, Sayuri y una joven del tamaño de un ogro que despedía una aura demoniaca que le hacía competencia al aura de batalla de la amigas de la miko del futuro.

La joven del tamaño de un ogro fue la primera en atacar amenazando con atacarlas con un bate de beisbol, alzándolo sobre su cabeza y gritando como una fiera se precipito sobre las tres jovencitas que la esperaban con sus respectivas armas listas, una sartén, un zapato de taco de aguja y ¿una muñeca barbie? Y como escudo el libro de física del colegio.

Kagome cerró los ojos cuando colisionó la chica ogro contra sus amigas, por la luz cegadora que desprendió el impacto. Unos segundos después la miko parpadeo esperando que sus ojos se acostumbraran y se levanto de su lugar seguro atrás de los contenedores de basura para buscar a sus desaparecidas amigas que no daban ningún signo de vida.

La joven miko miraba sorprendida y algo desconcertada como las jóvenes en el suelo que hace apenas unos minutos peleaban como guerreras expertas, lloraban a mares por no haber obtenido la tan deseada revista y con ella el calendario. Y entre la multitud la que mas lloraba era la chica ogro que gimoteaba por no ver a "El Famosísimo Ranma Saotome" en bóxer.

Kagome no quiso seguir viendo la inquietante imagen de todas esas jovencitas y se dedico a buscar con la mirada al trió de locas amigas suyas. Hasta que la encontró saliendo de la tienda. Caminaban como si fuesen heroínas de guerra recién llegadas y siendo aclamadas y veneradas por la multitud, caminaban en pasos elegantes y valientes como celebrando que eran las ganadora indiscutibles de la batalla que ellas mismas desataron. Y con el premio, las revistas que descansaban en sus manos.

Las tres jovencitas se acercaron a Kagome, que se sorprendió aun mas al ver el desastroso aspecto de sus amigas, tenían la apariencia de haberse revolcado en el piso con el cabello enmarañado y la ropa desaliñadas.

–Lo, lograron chicas. –Exclamo la azabache.

–Sí, chillaron las tres jovencitas emocionadas y mira lo que te trajimos Kagome, dijeron extendiéndole la revista a la miko del futuro.

–Gracias.

–Es por habernos acompañado. –dijo Eri. –Mas te vale que la leas y disfrutes del calendario.

No muy lejos de hay un impactado hanyou veía como quedaron las tres jovencitas y haciendo una nota mental de nunca hacer enojar a las amigas de Kagome, decidió no interrumpir a las jovencitas pero se quedo cerca para cuidar a la miko y por curiosidad de ese "libro" que las chicas atesoraban tan celosamente.

Varios días después…

500 años en el pasado mientras la miko del futuro se encargaba de calentar el agua para preparar las sopas instantáneas que tanto adoraba el hanyou, le pidió la exterminadora de monstruos que buscara la sopas en su mochila amarilla sin sospechar que se toparía con el regalo que le habían dado sus tres locas amigas y que por ser apresurada por su adorado hanyou no había tenido tiempo de ver.

–Oye Kagome ¿Qué es esto? –Pregunto Sango mientras mostraba una revista con el nombre de JP-teens.

–Es una revista.

–¿Una revista? –pregunto el pequeño zorrito saltando al hombro de su mama adoptiva para que le explicara.

–Si verán una revista, en mi época es un libro con muchos colores que anuncia productos de venta y tiene todo tipos de consejos de moda….ose de ropa, perfumes y hasta de belleza. –trato de explicarse la miko del futuro. –aunque de esa no estoy muy segura, mis amigas me la regalaron hace unos días y no eh tenido tiempo de leerla.

Esa ultima frase llamo la atención del hanyou que se había mantenido al margen de la conversación mientras esperaba sentado sobre una rama a que su ramen estuviera listo.

–¿de verdad? Kagome, me la podrías prestar.

–Si Sango. Adelante. –Contesto la miko mientras ella continuo con la preparación de los alimentos.

La exterminadora empezó a ojear las diferentes páginas de la revista y a emocionarse con todos los colores y diferentes cosas que decían en ella, desde como conquistar al amor de tu vida hasta como terminar con alguien sin lastimarlo, cuando llego a la mitad se encontró con otra revista y llena de curiosidad la abrió esperando encontrarse con consejos o recetas para el cutis como las anteriores.

Pero para su sorpresa lo que encontró fue a un hermoso hombre de imponentes ojos grises y cabellos cobrizo con solo una toalla colgando seximente de su cadera y dejando a la vista todo su bien formado torso, y un mensaje en la parte superior de la hoja que dice: "Soy el dueño de mi destino, pero también quiero ser el dueño del tuyo". Firmado por Christian Grey.

Sango se quedo sin palabras y con la garganta seca, giro la pagina sintiendo como sus mejillas se encendían de rojo carmín, en la siguiente pagina había un muchacho más joven que el anterior pero no por eso menos apuesto de impresionantes ojos azul cobalto y sonrisa egocéntrica, que solo vestía un par de bóxer, dejando a la vista su muy bien trabajado cuerpo lleno de duros músculos y un abdomen de tabla de chocolate y con los brazos atrás de la nuca dando un aspecto relajado, que lo hacía ver irresistible, en la parte superior de la hoja decía : "Te ves linda cuando sonríes". Firmado por Ranma Saotome. El rostro de la exterminadora brillaba como farolito de navidad y aunque se sentía como una total pervertida no podía para de ver al joven de ojos azules, sin esperar más paso la página otra vez.

Y se encontró con un apuesto hombre de cabellos rubios y rostro cincelado por los mismos dioses, eso fue la gota que derramo el vaso y la ya demasiado emocionada exterminadora se desmallo y con una pequeña hemorragia en la nariz, frente a sus desconcertados amigos que habían estado viendo el cambio en las facciones de Sango y que varias veces trataron de llamar su atención y preguntarle qué pasaba.

El monje, que era el que estaba más cercano, la tomo en brazos remeciéndola para que despertara. –¿Sango que paso?- pregunto preocupada la miko que se sentó a lado del monje que la sostenía.

Inuyasha que había estado observándola se acerco disimuladamente a la revista que hasta hace unos segundo la exterminadora observaba como si fuese la cosa más interesante del mundo, y se encontró nada más que con un hombre sentado en un sofá, sin camisa y los pantalones semi abiertos mastranto el inicio de su ropa interior. Y en la parte superior decía: "Déjame sostenerte. Tus pies te llevarán a donde está tu corazón. Te traerán a mí." Firmado por Acheron.

–Kagome. –soltó el hanyou en un gruñido.

– ¿Que sucede Inuyasha? –Pregunto la miko inocentemente.

–Me puedes explicar que significa esto! –Le dijo mostrando la pagina que estaba viento, la misma que ocasiono el desmallo de la exterminadora.

A Kagome se le subieron todos los colores a la cara y en pocos segundos su rostro supero el rojo del traje de la rata de fuego de Inuyasha.

Inuyasha viendo como se puso la miko y en un ataque de celos estuvo a punto de hacer trizas en aclamado calendario, si no fuera porque la miko lo mando a besar el piso, de un osuwari.

/FIN DEL FLASHBACK/

Desde ese día, el hanyou ha tenido que soportar los comentarios de SU miko del futuro y del resto de aldeanas diciendo lo apuestos que son los hombres de la época de Kagome, y el hanyou ardiendo de celos que no deja ni a sol ni a sombra, ni un solo segundo solo a Kagome por miedo a que se encuentre con uno de esos débiles humanos y quiera quedarse con uno de ellos.

El hanyou harto de soportar, la falta de atención de la miko del futuro por estar distraída platicando sobre chicos con el resto de jovencitas de la aldea, comenzó a trazar un plan para atraer de nuevo la atención de su querida Kagome y que por fin complacer su instinto que le pide que la tome a la miko del futuro como su hembra.

…oOo…

Era una mañana tranquila en la época antigua y una joven miko se despedía de sus amigos, pues se le habían terminado las provisiones y no quería desaprovechar la oportunidad de regresar a su época, después de todo Naraku se encontraba desaparecido e Inuyasha no mostraba intenciones de reunirse con Kikyo. De hecho lo que tenia sorprendida a la joven miko del futuro fue la buena actitud que el hanyou mostro cuando ella le anuncio su idea de ir un par de días a su época, hasta se ofreció a acompañarla hasta el pozo y le prometió que iría a molestarla mientras ella asistía al instituto. Claro que para que la miko no levantara sospechas le pidió una ración extra de ramen.

Luego de que Kagome cruzara el pozo devorador de huesos que conecta ambas épocas, el hanyou decidió poner su plan en función. Seduciría a su miko hasta convertirla en su hembra y luego de que estuviera debidamente marcada. Le EXIGIRIA que NUNCA más volviera a ver otra revista de esas. No mejor aun. LE PROHIBIRIA acercarse a cualquier macho que él considere una amenaza. Osea TODOS. Bueno tal vez le permitiría acercarse a Shippo…si solo a Shippo, aunque también a su pequeño hermano y al abuelo. Pero solo a ellos y a nadie más. El hanyou ya moría de ganas por ver el rostro del lobo apestoso cuando se enterara que Kagome es su hembra, casi hasta podía saborear la victoria.

–JA..ja..jajajaj. –Reía Inuyasha en forma diabólica con sus garras hacia el cielo como si fuera uno de esos villanos de película donde siempre el malo termina embarrado de alguna sustancia de dudosa procedencia y siendo el hazme reír de todos en la película.

–Oye Miroku creo que esta vez Inuyasha se volvió loco. –Dijo el pequeño zorrito viendo como el hanyou se destornillaba de la risa sin razón alguna.

–Tienes razón, creo que el estar lejos de la señorita Kagome lo está afectando seriamente. –Dijo el monje tratando de sonar sabio.

–Es eso o todos los golpes que le han dado al pobre en la cabeza, ya lo están afectando. –Sentencio la exterminadora de monstros mientras sostenía en sus brazos a la pequeña gatita de dos colas.

–Si creo que Sango tiene razón, después de todas las veces que Kagome lo ha mandado al piso de un osuwari alguna consecuencia tenía que tener. –Dijo el pequeño zorrito saltando hacia el hombro de Sango, mientras que los dos adultos y la gatita asentían con sus cabezas señalando que estaban de acuerdo.

El grupo cansado de ver a Inuyasha haciendo el ridículo riendo como loco decidieron que lo mejor era regresar a la aldea y consultar con la anciana Kaede si había algún tipo de medicina que le trajera de vuelta la cordura al inu-hanyou.

Luego de un par de horas de reír como desquiciado Inuyasha se dio cuenta que se había quedado solo, saco una pequeña libreta que guardaba celosamente dentro de una de las mangas de su traje rojo hecho de ratas de fuego, que tomo "prestada" de la mochila de Kagome y empezó a leer las anotaciones en las que había estado trabajando toda la noche.

*PLAN PARA SEDUCIR A MI HEMBRA*

1. Conseguir información sobre como seducir a la hembra (interrogar "sutilmente" o utilizando la fuerza a Myoga y a él pervertido de Miroku")

2. Poner lo aprendido en práctica y seducir a la escurridiza perra.

3. Tomar y marcar a la hembra, para que ningún macho pueda volver a acercarse.

4. Preñarla.

Los dos últimos puntos en la lista del hanyou le causaron un furioso sonrojo que competía con el rojo de su traje. El oji dorado después de revisar cuidadosamente los puntos de su plan, se puso en marcha y fue a buscar al monje para preguntarle ya que la pulga anciano como siempre se encontraba desaparecida.

Cuando el hanyou llego a la aldea lo primero que hiso fue preguntar por el monje.

–Oye enano sabes ¿donde se metió Miroku? –Le pregunto al pequeño zorrito que se encontraba disfrutando de una paleta que le trajo Kagome del futuro.

El pequeño kitsune puso una mano en su mentón y elevo su vista al cielo como si estuviera tratando de recordar algo. –Creo que siguió a Sango al rio cuando ella iba a darle un baño a Kirara, ¿Por qué lo buscas Inuyasha?

–Kej, enano no tengo porque darte explicaciones. –Dijo en hanyou antes de irse saltando.

–Perro tonto ni siquiera me dio las gracias. –Dijo el kitsune sacándole la lengua cuando el hanyou ya se había marchado.

El inu-hanyou de plateados cabellos fue saltando apresurado en busca del monje, en la dirección que le indico el pequeño kitsune. Cuando llego al rio en que se encontraban sus amigos, se encontró con uno de los panoramas más normales del lugar, un monje desmallado por haber recibido un fuerte golpe en la cabeza y una exterminadora que se marchaba renegando sobre monjes pervertidos con manos malditas.

–Oye, Miroku. –Lo llamo el hanyou mientras lo agitaba de los hombros para que el monje despertase.

– ¿Que paso?

–Kej te volviste a propasar con Sango, y ella como siempre te dio tu merecido.

–Ah ya veo…. Que le vamos hacer, ella no entiende que como monje es mi deber adorar cada parte del templo que es nuestro cuerpo, en especial uno tan bien formado como el de mi Sanguito. –Dijo el monje con una expresión pervertida en el rostro. –Pero en mi fin mi querido amigo me dirás que es lo que se te ofrece. –Pregunto Miroku.

–Lo yo…lo yo…quiero… es que me ayudes a seducir a una mujer…

Continuara….

Hola como están se…que tengo varias historias sin actualizar….pero es que no eh tenido inspiración ni tiempo perdoooonnnn….espero que esta historia les guste les aviso que va a ser corta y q solo contara co capítulos más incluyendo el lemon….por favor espero sus reviews… si no….pensare que no les gusto y demorare en actualizarlo hasta el próximo mes…pero si llego a diez hasta el sábado lo actualizo el lunes….