La verdad
Después de mucho tiempo tu has sido mi motivo para luchar, los fragmentos de la shikon no tama son solo una excusa en mi viaje, tu ya me has dicho lo que sientes por mi, pero, yo solo he aceptado el que estés cerca de mí, no malinterpreten esto, tu presencia cercana es lo más preciado que tengo, la búsqueda de tales fragmentos, las batallas, las largas caminatas de sol a sol carecerían de sentido sin ti.
A lo que me refiero es de cómo después de tanto tiempo yo no te he dicho lo que siento, o si te he dicho algo, tal vez..., no definitivamente no te he dicho lo que quiero que sepas, lo que realmente siento, es que... te amo, no hay otra palabra que describa lo que siento por ti, quiero que siempre estés a mi lado y nunca te vayas, tu eres la única razón de todos estos viajes.
Pero ¿porqué no te lo he dicho? Eso es fácil de responder, tengo miedo, miedo de perderte, todo por el recuerdo de Kikyou, aquella a la que le profesaba tanto y que después de cómo terminamos, no niego que no la quise y tampoco el guardo resentimiento pero ahora tú eres lo único en mi corazón y el perderte eso sería devastador en mi vida, esa es la razón de mi silencio, el que te parezcas a ella puede ser coincidencia, sin embargo tu tienes tu propia forma de ser y aunque intentes ser a veces cruel se nota que eres una buena persona me has perdonado tantas veces las cosas que digo y hago, el rosario que pusiste en mi cuello desde el cual puedes controlarme, tu conjuro de OSUWARI ya no son más una maldición sino un lazo que nos une.
En el momento en el que atraviesas el pozo que une nuestros mundos solo espero el que vuelvas, para poder volver a estar a tu lado pero no puedo seguirte ya que eso demostraría lo que siento por ti sin embargo a veces tardas tanto en regresar que yo no lo aguanto y tengo que ir por ti.
Recuerdo el día que liberaste mi corazón de aquella maldición hecha por Kikyou en el árbol sagrado, curaste esa herida sin que me diera cuenta, lo único que buscaba en ese entonces era la Shikon no tama para transformarme en un demonio completamente y así poder olvidar a esa persona que esperó a que bajara la guardia para atacarme.
Sólo tu aparición me hizo cambiar de opinión hacia mis objetivos, cuando comenzamos a viajar fue por obligación, y no éramos del todo compatibles, sin embargo en algún momento empecé a acostumbrarme a tu presencia, me di cuenta de lo importante que era para mí el tenerte cerca, al principio era algo sofocante pero poco a poco esa sensación fue desplazada por otra más cálida y tenue. Ahora necesito tenerte a mi lado para sentirme a gusto.
Creo que... esto es lo siento.
Fin.
