Disclaimer: Inazuma Eleven no me pertenece, le pertenece a Level 5.
Como en los libros
El mundo le sonreía, ella era feliz. Por supuesto, era Nanobana Kinako, la chica que estaba dispuesta a sacarle una sonrisa a todo lo que estaba a su alcance, podía ser un amigo lejano, un gato o hasta una piedra que a su parecer estaba desanimada. Pero a diferencia de otros días su sonrisa era más brillante (y eso que su sonrisa normal hacía parecer un tormentoso día de lluvia en un cálido día de verano), ¿y qué era lo que sucedía? ¡Pues que estaba enamorada! Su pecho latía con fuerza de la emoción. Aquel chico peliverde, tal vez unos pocos años mayor y alto (muy alto para ella), era la razón. Desde el momento en que lo vio, supo que era amor y se decidió. Cueste lo que cueste.
Pero la conquista había resultado algo difícil, primero porque ella recién iniciaba secundaria y él, preparatoria. Segundo, porque habían ciertas dudas que la asaltaban, como por ejemplo: ¿Y si a él le gustan las chicas altas y desarrolladas?, lo que la dejaba dudosa pero aun así no se rendiría. Y tercero, Asurei Rune era muy (pero muy) tímido, hasta el punto en que ella se confesó (solo después de verlo), se había puesto rojo como un tomate (o una manzana para la mente creativa de Kinako) había tratado de evitarla, lo que dejo un poco triste a la adorable castaña. Pero como siempre, ella no se rendiría, los días en los cuales gastaba todo sus ahorros solo para comprar panqueques para ambos, realmente tenían su recompensa. Solo con verlo, mostrando una adorable expresión de sonrojo súbito y vergüenza, sabía que valía la pena. Después de todo, tanto esfuerzo mostraba sus frutos. Hoy finalmente saldría con Asurei.
Como novios.
La primera cita oficial le resultó reconfortante a la chica. Asurei, últimamente, se acostumbraba a su compañía, sin mostrar signos de arrepentimiento o de querer alejarse (pero era serio cuando la situación lo ameritaba, como en clase). Todo lo contrario. Aunque debía admitir que los 'descomunalmente' fuertes abrazos de oso de su pequeña y linda novia lo dejaban sin aliento. Literalmente. Concluyeron la cita, sentados en bancas, comiendo taiyaki: de judías dulces para él, de chocolate con queso para ella. Al despedirse, fue cuando Kinako se dio cuenta de algo. Un pequeño detalle importante. ¡Era como en los libros! La típica historia del caballero valiente, (interpretado por Kinako) que protegería a su princesa, arriesgando su vida incluso. Y su princesa era nada menos que una chica linda, tímida y hermosa. Justo así, Asurei era para Kinako. Pero… ¿no debería ser al revés? Meh, daba igual, ella lo amaba y haría lo que sea con tal de protegerlo de cualquier enemigo.
Nota del Autor: Bien para los que seguían las otras historias, no voy abandonarlas pero no sé cómo continuar,inspiración (soy mejor haciendo oneshot)…por otra lado…AHHDHSHFSDFLKDHGLKJ ¡Envíen en PM o review sus pedidos! ¡Los espero!