Aviso: Todos los derechos sobre los personajes, lugares, etc, etc... de Harry Potter pertenecen a J.K.R. o a su editorial, o a quien sea...

-- SOLO AMIGOS –-

Un calambre recorrió la espalda de Ron, arrancándolo del tranquilo sueño en el que se encontraba. Instintivamente intentó cambiar de postura y seguir durmiendo, pero en cuanto trató de moverse, su estomago se retorció como si una serpiente estuviese intentando escapar de su interior. Un débil gruñido escapó de sus labios mientras abría los ojos, todavía medio dormido.

Esperaba ver unas gruesas cortinas escarlatas rodeando su cama, pero en vez de eso, un enorme techo blanco se extendía muy por encima de su cabeza. Durante unos segundos lo contempló totalmente desorientado. De repente todo volvió a su memoria: Estaba en la enfermería. Había estado a punto de morir. Harry le había hecho tragar un bezoar antes de que el veneno terminase de actuar; Solo por eso estaba vivo. Si Harry no hubiera leído esa estúpida nota del príncipe, o si el antídoto no hubiese estado en esa misma habitación o si simplemente hubiera tardado un poco más en reaccionar...

"Ron..." La voz era suave, casi un susurro, pero cortó sus pensamientos como un cuchillo. Después de lo horrible que había sido con ella, estaba ahí, al lado de su cama, preocupándose por él. Giró la cabeza lentamente sobre la almohada para mirarla. Estaba pálida, con el pelo alborotado y los ojos enrojecidos; le pareció que estaba preciosa.

"¿Cómo te encuentras?"

"Bien... bueno... Estoy mareado y me duele la cabeza... y todo el resto del cuerpo... y parece que tengo un hipogrifo pataleándome el estómago. Quitando eso, estoy perfectamente." Sonrió débilmente e intentó encogerse de hombros moviendo el cuerpo lo mínimo posible.

Hermione cogió una copa llena de una sustancia marrón verdosa y se acercó a su cama. "La señorita Pomfrey me a dejado esto para que te lo tomes en cuanto despiertes. Te ayudará a encontrarte mejor."

Intentó incorporarse sobre un codo pero tenía la espalda rígida como una tabla y no parecía tener un solo músculo en todo el cuerpo que no estuviera agarrotado o dolorido.

"No seas idiota... Todavía estas demasiado débil para moverte tu solo, espera a que te ayude."

Se sentó en el borde de la cama y pasó un brazo por detrás de su espalda, levantándolo lentamente. Ron apoyó la cabeza sobre su pecho y apretó los dientes intentando controlar las nauseas. Cuando estuvo incorporado, Hermione acercó la copa a sus labios.

"Toma. Tienes que bebértelo todo."

Por el aspecto se esperaba una cosa peor, pero solo sabía como a cal, sin duda alguna había probado cosas mucho peores. Mientras lo bebía no pudo evitar el disfrutar de la presencia de Hermione a su lado, del calor que desprendía su cuerpo, de como subía y bajaba su pecho con cada respiración, del olor de su pelo. Eran demasiadas sensaciones después de tantas semanas sin tan siquiera dirigirse la palabra. Ahora se daba cuenta de todo lo que la había echado de menos; mucho más de lo que quería admitir. Y había estado a punto de perderla, de perder absolutamente todo... Prefería no pensarlo... Ahora tenía una segunda oportunidad y por Merlín que la tenía que aprovechar.

En cuanto acabó la poción notó como las nauseas y los mareos desaparecían rápidamente. Seguía estando débil y con el cuerpo dolorido, pero se encontraba bastante mejor... lo suficiente como para no desperdiciar más tiempo. Si algo le había enseñado su –accidente- era que no puedes dar ciertas cosas por garantizadas.

"¿Me puedes ayudar a sentarme?"

"No creo que sea buena idea, todavía no estas totalmente recuperado."

"La señora Pomfrey dijo que necesito cambiar un poco de postura de vez en cuando... además, la espalda me esta matando."

Pareció considerarlo durante unos segundos. "Esta bien, de acuerdo... Pero solo un rato. Y después te vas a volver a tumbar y seguir descansando." Hermione trajo un par de almohadas y las puso en su cama, recostándolo sobre ellas. "¿Qué tal? ¿Más cómodo?"

"Sí, mucho mejor."

"Bien." Se sentó otra vez en la silla sin saber muy bien donde mirar o que decir.

Había llegado el momento. Aunque solo pensar en ello le aterrorizaba, tenía que hacerlo. Apretó los puños y se armó de valor. "Hermione... Tenemos que hablar."

Estaba claro que no se esperaba eso. Levantó la cabeza y le miró sorprendida. Por primera vez sus miradas se encontraron pero ella apartó la mirada rápidamente. "No creo que sea el mejor momento... cuando te hayas recuperado ya tendremos todo el tiempo del mundo para eso..." Intentaba parecer indiferente pero le pareció que su voz sonaba asustada.

"Ayer hubiera pensado lo mismo que tú... pero hoy no. Estoy vivo por pura suerte. En realidad tendría que estar muerto, solo... "

Hermione le interrumpió con los ojos brillantes por las lagrimas. "¡No digas eso! ¡Estas aquí, estas vivo!... y te vas a poner bien."

Ron alargó el brazo y tomó una de sus manos entre las suyas, apretándola suavemente. Hermione dio un pequeño respingo, pero inmediatamente se relajó y respondió el gesto.

"Lo sé. Pero quiero aclarar las cosas... entre tu y yo. De una vez por todas."

"No tienes por que..."

"Hermione. Quiero contarte... mi historia, y después... después querría que tu me contases la tuya."

"¿Mi historia?..." Hermione parecía totalmente confundida.

"Después lo entenderás... pero me tienes que prometer que no me vas a interrumpir, que me dejaras acabar antes de decir tú lo que sea."

"Ron..."

"Por favor, Hermione... Esto es muy importante para mí... ¿Por favor?"

Hermione se mordió el labio inferior. "Esta bien. Te lo prometo."

"Bien..." Ron suspiró profundamente y fijó la vista en sus manos entrelazadas. Era más fácil si no la miraba. ¿Por donde podía empezar?... Quizás lo mejor sería por el principio.

"¿Te contó Ginny lo de nuestra discusión?"

Hermione la miró extrañada.

"¿Una discusión que tuvimos hace unos meses?... No, ya veo que no." Cerró los ojos y se concentró. "Todo empezó... Bueno, cuando volvíamos de uno de los entrenamientos, antes del partido con Slytherin, nos encontramos, yo y Harry,..."

"Harry y yo... Lo, lo siento. Continua." Hermione se ruborizó y Ron no puedo evitar apretar suavemente su mano y sonreír nerviosamente. Era agradable volver a las antiguas costumbres.

"Harry y yo nos encontramos con Ginny y Dean detrás de unos tapices, morreándose como si les fuera la vida en ello... Bueno, ya no me acuerdo exactamente lo que dije, pero supongo que sería algo así como que lo dejaran... Entonces Ginny y yo empezamos a discutir... Me dijo que me parecía asqueroso porque nunca me había besado nadie, que tenía la experiencia de un niño de doce años... Se dedicó a humillarme y a burlarse de mí durante un buen rato... Es muy buena en eso... Antes de irse decidió restregarme por la cara que, de los tres, yo era el único idiota que no había besado nunca a nadie, que Harry se había besado con Cho y tu te habías estado morreando con Krum."

Hermione palideció visiblemente. "Era un secreto..." De golpe se quedó rígida y alzó la cabeza bruscamente, lanzando a Ron una mirada de incredulidad. "¿No... no ha sido por eso, verdad?" Solo un vistazo a la cara de Ron bastó para confirmar su sospecha. "¡No lo puedo creer!... No ha sido todo mas que una... venganza? ¡Por algo que paso hace más de dos años!" Hermione se había puesto de pie e intentaba soltar su mano.

Ron la sujetó con todas sus fuerzas. "¡Déjame acabar!... Me lo prometiste."

"¿Que más hay que contar? ¡Esta todo clarísimo!" Dio un tirón de su mano con todas sus fuerzas. Ron se tambaleó encima de la cama pero la siguió sujetando firmemente.

"Me estas haciendo daño."

Por fin dejó de forcejear y se quedo quieta, jadeando ligeramente. "¡Pues suéltame!"

"Por favor... siéntate y déjame terminar... Por favor..."

Hermione permaneció de pie, mirándole como si fuera la cosa más repugnante que hubiera visto nunca. "Esta bien... Pero antes suéltame la mano." Su voz se había vuelto fría y cruel. Una voz que por desgracia le era muy familiar.

En cuanto logró liberar su mano, se sentó con los brazos y las piernas cruzadas, mirando al frente como si no existiera nadie mas en la habitación. Toda la ternura y la calidez de antes había desaparecido, reemplazada por un odio y dolor intensos. "Ya estoy sentada. ¿Qué más tienes que decir?... y date prisa, tengo otras cosas que hacer."

Ron se recostó sobre las almohadas con un gesto de dolor y bajó la cabeza dejando que su vista se perdiera entre las arrugas de las sabanas.

"Cuando supe que habías estado con Krum... me sentí traicionado, dolido, estúpido... no sé... desesperanzado... es difícil de explicar... Era como si no te conociera, como si de golpe fueses otra persona... Siempre pensé que solo te interesaban los libros y los estudios y cosas así... supongo que pensaba que no tenias tiempo para chicos..." Ron oyó un bufido, pero prefirió ignorarlo y seguir hablando. "Supongo que como siempre me equivocaba... Había una parte de ti que desconocía totalmente. Yo siempre lo he confiado todo en ti, pero estaba claro que para ti no era igual. Por lo que sabía, igual podías seguir con Krum... o quizás hubieras tenido otros novios después..."

Hermione se giró e hizo un gesto como para hablar, pero Ron siguió hablando, esta vez un poco mas fuerte, mirándola directamente a los ojos.

"También me sentí traicionado por que, durante todo este tiempo, siempre me dijiste que él solo era un amigo."

"¡Es que lo es!" Mas que hablar, le escupió las palabras.

"No soy tan idiota, Hermione. ¡Era tu novio!... o ex-novio, o lo que sea... Alguien con quien decidiste compartir tu primer beso, tu primer amor... ¡No solo un amigo¡"

"No, Ron... Viktor fue mi primer beso, no mi primer amor... ¡Mi primer amor fuiste tú! ¡Pero ni siquiera te dabas cuenta de que era una chica!"

Ron volvió a mirar sus sabanas, avergonzado. "Era un idiota... siempre lo he sido... De todas maneras... cuando me invitaste a la fiesta pense que quizás sentías algo por mí, algo mas que amistad. Pero después de lo de Krum... ¡Joder! Habías salido con un jugador famoso, un tío mayor, alguien que sabía como tratar a las mujeres... ¡¿Qué demonios podías querer de alguien como yo! Me acordé de todas las veces que habías prestado atención a Harry, y de lo alto y atractivo que lo encontrabas este año... ¿y yo? Lo único que hacías es criticarme... Estaba claro que si alguien tenía una oportunidad contigo era Harry, no yo... Además, habías tenido un novio, puede que más. Tenías experiencia. Si de verdad estuvieras interesada en mí, me lo habrías dicho directamente... Pensé que, si me habías invitado, era para que no me sintiera mal. No era una cita, ni nada parecido, era para que el pobre idiota de Ron no se sintiera dejado de lado y pudiera acompañaros a Harry y a ti..."

"¡De verdad crees que..."

"Y lo de Lavender... Nunca intente hacerte daño... Después del partido se me echó encima y me empezó a besar. Pensé que no tenía ninguna razón para rechazarla... Estaba deprimido y dolido... y ella me hacía sentir bien, querido... importante. Sé que a veces es inaguantable pero me ayudó mucho cuando más lo necesitaba."

Hermione se puso en pie como si estuviera agotada, su voz era tensa y dolida, pero por lo menos ya no parecía tan enfadada como antes.

"Estupendo. Me alegro de haber aclarado las cosas... Espero que seas muy feliz con ella."

"No es con ella con quien quiero estar."

Hermione ya estaba girándose para irse cuando oyó a Ron. Se paró en seco y se volvió. "¿¡Y con quién demonios quieres estar!"

"Cuando me atacaste con los canarios me di cuenta del daño que te había hecho... del error que había cometido. Solo podías estar tan enfadada si de verdad sentías algo por mí... Durante algún tiempo intenté no pensar en ello, justificarme de alguna forma, pero la verdad es que mientras más tiempo pasaba mas me arrepentía de... bueno, de todo. Si no hubiese sido tan idiota probablemente ahora estaría contigo... No quiero hacer daño a Lavender, pero no puedo seguir con ella... no después de todo lo que ha pasado. No quiero desperdiciar más tiempo."

Ron revisaba mentalmente todo lo que había dicho, no creía haber olvidado nada importante. "Bueno... Esto es todo lo que quería contar... mas o menos... ahora me gustaría que me contaras, ya sabes... tu historia... Si quieres..."

Hermione parecía a punto de tener una crisis nerviosa. Se derrumbó otra vez sobre la silla y apoyó los codos en las rodillas, ocultando su rostro entre las manos.

"¿Que quieres que te cuente?... No puedo creer que algo que pasó hace más de dos años nos haya perseguido de esta forma... Ron... Yo quería que me invitases al baile, pero no dejabas de decir que querías ir con la chica más bonita que pudieras encontrar. Era evidente que no significaba nada para ti. Estaba muy dolida, y Viktor era amable y galante. Siempre me trató como a una dama... Me hacia sentir femenina, adulta. Después del baile empezamos a vernos de vez en cuando. La verdad es que entre los estudios y Harry nunca tenía demasiado tiempo; normalmente hablábamos en la biblioteca o dábamos paseos por el lago... Y sí. Nos besamos alguna vez... Yo tampoco tenia ninguna razón por la que rechazarle. ¿No?"

Hermione levantó la vista con rabia, desafiándole a decir algo pero Ron permaneció quieto mirando a los pies de su cama con una expresión derrotada y triste.

"De todas maneras, cuando me eligió para rescatarme en la segunda prueba me di cuenta de que se lo estaba tomando mucho más en serio de lo que creía... Yo no podía responder a sus sentimientos, así que poco después de la prueba le dije que era demasiado joven para tener una relación seria y que prefería que fuéramos solo amigos. Por supuesto, Viktor se comportó como un caballero y lo aceptó, aunque creo que siempre sospechó que la verdadera razón era que me gustaba Harry... pero no era él... eras tú, Ron. Siempre has sido tú... Desde entonces Viktor y yo no hemos sido mas que amigos."

"Lo siento... pero si me hubieras contado..."

"¿Después de la escena que montaste en el baile?... Tenia miedo que te enfadaras... que pensaras que os estaba traicionando o que no significabas nada para mí o algo así... Tenía miedo de perderte, de que renunciaras a mí... de que ocurriese algo como lo que ha pasado."

Ron soltó una risa sarcástica y triste. "Pues no ha funcionado muy bien tu plan..."

"Sí, tenía que haber sido más sincera, haber confiado en ti... y no en Ginny... Al final pasó justo lo que intentaba evitar, en el peor momento y de la peor manera."

"Que desastre..." Ron le cogió una mano y la apretó cariñosamente. Hermione le devolvió la mirada. En sus ojos había agotamiento y dolor, pero también algo de ternura y esperanza.

"Ron... Estas ultimas semanas han sido las peores de mi vida... No tienes ni idea el daño que me hacías cada vez que te veía con Lavender. Estaba convencida de que te habías dado cuenta de mis sentimientos y que te habías sentido horrorizado, asqueado ante la idea de que me gustases... y que para no tener que rechazarme directamente te habías liado con ella."

"Hermione, tú eres lo que más me importa. Siempre lo has sido. Soy un grandísimo idiota... Lo siento tanto... Perdóname, por favor..."

"Ron... no se trata de perdonar... Llevamos meses sin hablarnos... Necesito tiempo para olvidar el daño que me has hecho, para aprender a confiar otra vez en ti, a ser tu amiga... Además, tú todavía estas con Lavender. Creo que sería mejor que por ahora nos concentremos en volver a ser amigos... ¿De acuerdo?"

"Como quieras." No es lo que Ron esperaba, pero tendría que conformarse... además estaba el –por ahora-. Todavía tenía una oportunidad.

Se quedaron callados, mirándose, cogidos de las manos sin decir nada, simplemente disfrutando de la cercanía del otro. Se fijó en que Hermione tenía el labio inferior ligeramente inflamado de tanto mordérselo. Siempre se fijaba en su boca... no podía evitarlo. "¿Sabes? Me hubiera gustado que mi primer beso fuese contigo... que tu primer beso hubiese sido conmigo. Siempre lo había imaginado así, aprendiendo a besar juntos."

"Ron... a mí también me habría gustado, muchísimo... pero hay cosas más importantes. Tenemos que aprender a ser más sinceros, a confiar más el uno en el otro... y en nosotros mismos. Si queremos tener un futuro juntos no podemos dejar que nuestras inseguridades destrocen nuestra relación. Mucho más importante que un primer beso es que estemos preparados para tener una relación saludable y sólida entre nosotros... No creo que pudiera soportar perderte otra vez..."

"¿Sabes? Eres increíble... No comprendo como todavía puedes querer estar con alguien como yo. No te merecería ni en diez mil años."

"¡No digas tonterías! ¡Claro que me mereces! Esto es de lo que estaba hablando, de nuestras inseguridades. Ron, tú te mereces a cualquier chica con la que quieras estar. Eres tan bueno como Krum, como Harry... como cualquiera."

Ron sonrió con ironía. "Hermione, tú eres la bruja más brillante de toda Inglaterra. Harry es... bueno, es Harry Potter... y Krum es un jugador mundialmente famoso de Quidditch... ¿Qué soy yo? Yo no soy mas que el-idiota-de-Ron. ¿Que demonios tengo de bueno?"

"¿Que tienes de bueno? Por ejemplo: eres la persona más leal que conozco, y la más valiente. Probablemente la más valiente de todo Hogwarts."

"Creo que te equivocas de persona... el héroe es Harry."

"Sí. Lo es... Pero Harry estuvo metido en esto desde que Voldemort mató a sus padres. Nunca tuvo opción, pero tú sí. Tú podías haberte apartado y vivir una infancia segura y normal, pero elegiste quedarte a su lado. Eso es increíblemente valiente y leal."

"Pero no es más de lo que has hecho tú."

"Sí que es más... ¿Quién se sacrificó en el tablero de Ajedrez con apenas once años? Y en segundo curso. ¿Quién se enfrentó a su mayor miedo por mí?"

"Bueno... habría sido difícil encontrar un nido de McGonagalls dispuestas a suspenderte en todo."

Hermione sonrió y sacudió la cabeza. "Y en tercer año... Sirius te dejó bien claro que no quería nada contigo, que solo iba a por Harry. Y aun así te levantaste sobre una pierna rota y le dijiste que si quería a Harry, tendría que matarte primero... ¡Jamás he visto a nadie hacer algo tan valeroso!... Ron, eres una persona estupenda. Tu peor rival no es Viktor, nunca lo ha sido... Tu peor rival eres tú mismo..."

"¿Nunca lo ha sido?"

"Por supuesto que no... Viktor con todos sus besos, todas sus galanterías y todas sus atenciones nunca tuvo ni una oportunidad. Le derrotaste sin mover siquiera un dedo. Tendría que ser él el que estuviera celoso de ti..."

"Gracias."

"¿Por qué?"

"Por ser mi amiga, por estar a mi lado todo este tiempo a pesar de lo estúpido que llego a ser."

"¡Que remedio, pero no creas..." El chirriar de una puerta retumbó por toda la galería. "Debe ser la señora Pomfrey... Se suponía que solo me iba a quedar unos minutos. Será mejor que me vaya antes de descubra que todavía estoy aquí."

"Espera... Hay una cosa... que quisiera pedirte... es una idiotez... pero la verdad es que cuando me estaba muriendo... bueno... lo único en lo que podía pensar era que me estaba muriendo, y que iba a morir sin haber podido... besarte. Hermione, me gustaría... bueno... ¿Podrías darme un beso?"

"Creía que estabamos de acuerdo en que lo importante era recuperar nuestra amistad."

"Y lo es. Estoy totalmente de acuerdo... pero... no puedo dejar de pensar en eso... en que si pasase algo. Mañana podríamos estar todos... ya sabes... no quiero volver a arrepentirme... volver a pasar por eso... y sería solo un beso... nada más."

"Ron... No nos va a pasar nada, aquí estamos a salvo..."

"¿A salvo?... Hermione... Katie todavía esta en San Mungo y yo casi muero envenenado... Ya no existen lugares seguros. Ni siquiera en Hogwarts."

"Aun así no sería correcto. Tu todavía estas con ella." Conocía bien a Hermione, estaba dudando. Solo necesitaba un empujoncito más...

"Sería solo uno... un beso entre amigos..."

Se mordió el labio inferior con saña. "Esta bien... pero que quede claro que es solo entre amigos... Esto no cambia absolutamente nada entre nosotros."

"Nada." Ron asintió.

Hermione se sentó en la cama y se inclinó poco a poco sobre él, se estaba poniendo roja como un tomate. Ron torció un poco la cabeza y sintió el calor de sus mejillas un instante antes de que sus labios se juntasen... eran suaves y cálidos. Hermione dejó escapar un ligero gemido, casi inaudible, pero suficiente como para hacerle hervir la sangre en las venas. Sin poder evitarlo empezó a profundizar el beso, Hermione al principio pareció responder a sus caricias, pero uno segundos después retrocedió, interrumpiendo el beso. Tenía la mirada perdida y los labios entreabiertos y ligeramente enrojecidos... Habría dado su escoba por poder besar esos labios otra vez.

Hermione cerró los ojos y carraspeo, intentaba parecer firme, pero su voz temblaba ligeramente y en sus ojos había otra vez ese brillo cálido. "No quiero que te hagas ideas raras... Que quede claro que esto no ha significado nada... seguimos siendo solo amigos... Nada más... ¿Esta claro?"

¿Que no había significado nada?... ¡Significaba todo! Ya nada podía ser igual entre ellos. No comprendía como podía estar tan equivocada... Pero no... no estaba equivocada. Era mentira, y ella lo sabía. Hermione necesitaba tiempo para curar sus heridas, y esa mentira se lo daba...

Ron siempre había sido un buen mentiroso; se había mentido a si mismo durante años... Seguro que podía hacerlo durante unos pocos meses más.

"Clarísimo... Solo amigos."