The Poet and the Pendulum
Capitulo I
Amalia POV
Teclee un código mas y los datos comenzaron a bajarse
-Listo...- sonreí mientras los códigos se descargaban, me gire en la silla para encontrar a Naty, la loca morena que nos proveía las coartadas, tenía un cerebro prodigioso pero mal utilizado... demasiado flashes le afectaron, a Paula, encerrada en su burbuja frikki de Happy Popottes y a Jenny, la pobre estaba loca con su violín; esas éramos nosotras, los "fenómenos" del instituto de Fork, los fenómenos que alguna vez fuimos populares pero con la llegada de las "princesitas mosquitos", véase por las "gemelis" Ashley y Amber Crowler, Lady Morgan Newton y las "mellis" Alice y Amy Chenney.
-¿Ya está?- pregunto Paula saliendo de su burbuja, todas me observaban
-¿A ustedes les parece que voy a decir Listo cuando no es Listo?- les pregunte exasperada.
-Nopo...- comento Jenny sonriendo.
-No me puedo enojar con ustedes, es un caso perdido...- comente mientras regresaba la vista a la computadora, de apoco en la pantalla empezaban a aparecer un listado de alumnos de los diferentes cursos, nosotras estábamos en 2do...
-¿Pasaron?- pregunto Naty... busque entre el listado los nombres...
-Morgan y su hermano Harvey Newton pasaron...- seguí buscando -las "gemelis Crowler" también... y las mellis Chenney también... ¿Por que teníamos dudas? era obvio que sus "papis"...- mis amigas rieron ante las mímicas que hacia -... pusieron Money para que pasaran...
-En las demás creo, pero en Alice y Amy no... Ellas lamentablemente tienen un IQ intelectual aceptable...- comento Paula, siempre tan buena y justa.
-Si... el IQ de un mosquito...- todas nos empezamos a reír pero nos detuvimos al escuchar unos golpes.
-¿Se puede?- pregunto mi tía desde el otro lado, mi tía Halley era la dueña del cibercafé del pueblo, lo mas tecnológico que teníamos por allí, ella siempre había vivido en el pueblo, con mi familia me había mudado hacia unos años desde Valencia... demasiados cambios.
-Pasa tía...- mi tía entro, no era ni flaca ni gorda, era normal, de piel blanca cabello rojo y ojo azules como yo, pero yo me parecía mas a mi otra tía, a la tía Anna.
-¡Hola Halley!- saludaron mis amigas
-Hola chicas... ¿Otra vez entrando en lugares confidenciales Amy?- me pregunto observando la pagina
-Era solo para saber que nos tocaba este año Halley...- se disculpo Naty, como siempre...
-Eso espero... el jefe Swan nos invito a comer a su casa... tu madre te quiere en la casa dentro de media hora
-No es mi madre...- respondí tranquilamente mientras me giraba a la mesa.
-Bueno... la esposa de tu padre, pero tiene ese lugar...- comento Halley.
-Nosotras nos vamos Am... Nos vemos el miércoles en el instituto...- comento Jenny.
-Las acompaño ninhias...- comente, con tal de zafar de esa bendita charla, cualquier cosa.
-Esto no se acabo Amalia Eloísa Cortez, tenemos mucho de qué hablar- me espeto.
-Las acompaño y después regreso...- dije mientras subía las escaleras, las acompañe hasta la puerta del local donde estaban nuestras bicicletas.
-¡Nos vemos el miércoles!- me gritaron desde la calle, las salude con la mano y regrese al almacén.
-¿Por qué siempre a la defensiva?- me pregunto una vez que estuvimos solas.
-No estoy a la defensiva, soy realista, ¡tú sabes cómo me trata!- le espete mientras recogía mis cosas y las guardaba en la mochila.
-Debes entenderla...
-¿Entender qué? ¿Qué me quiere encerrarme en una correccional para el resto de mi vida para poder quedarse con papa? Por mi que se lo quede, hace tiempo que se dejo de preocupar por nosotros...- le espete mientras cerraba la mochila -no hay nada que aclarar, esa mujer me odia, papa no nos quiere, nos ve solo como sus sirvientes y una carga, fin de la discusión...- me cerré la campera y me puse la mochila al hombro, la vi intenta acercarse a mí para abrazarme pero me aleje rápido de ella -...nos vemos en la casa del jefe...- ella asistió y me dejo marchar.
Recogí mi bicicleta del almacén y me fui andando hasta mi casa.
Debes en cuando sentía una gota que caía de cielo que amenazaba con derrumbarse, apure el pedaleo pero de la nada sale un auto negro rozando la rueda de atrás de mi bicicleta provocando que pierda el control de esta y me fuera de bruces contra el guardarrail que seguía la carretera...
Carlisle POV
Hacia mínimo una semana que habíamos llegado, Fork seguía igual de como lo recordábamos pero con quince años más, ese era el tiempo que habíamos estado lejos de allí.
Toda la familia ya estaba instalada en la casa, solo faltaba yo, que debido al trabajo en el hospital tuve que retrasar un tiempo...
Mi Mercedes se deslizaba por el asfalto suavemente como siempre, doble en una curva para tomar la carretera principal pero una bicicleta se cruzo, le roce la rueda de atrás causado que su ocupante perdiese el control y terminara contra el guardarrail que reseguía el camino, me apresure a bajar y me acerque a donde estaba la bicicleta.
-¿Estas bien?- le pregunte, era una chica, debía de tener entre 12 muchos 15 pocos años.
-¿A usted que le parece?- me espeto levántadose del suelo y empezándose a sacudir la ropa que la tenia llena de hojas, una ráfaga de viento paso y arrastro consigo el dulce aroma que despedía la chica -¡Argh!- se quejo, en eso me di cuenta que estaba sangrando y por primera vez en más de doscientos años, el monstruo de mi interior quiso salir y alimentarse de esa muchacha de sangre tan exquisita.
La observe sentarse en el suelo y abrir su mochila para verificar que todo estuviera en perfectas condiciones y sacar una toalla para limpiarse la sangre
-Bueno... entonces, si estás bien me voy...- no espere respuesta, me abalance sobre mi auto y acelere hasta perderla de vista, cuando pare frente a la casa pude respirar tranquilo...
"Mi tua Cantate" pensé... otra cosa no podía ser, me estremecí inconscientemente y roge por todos los dioses que eso no fuera y no cruzarme más con esa chica en la vida, pero Fork era un pueblo muy pequeño, y que no me la cruzara era como pedir peras al olmo...
Amalia POV
Vi como el Mercedes se perdía de vista y suspire abatida, agradecida y enojada... demasiadas emocione para mi propio bien. Cuando me sentí mejor tome mi bicicleta, la pobre ya estaba por dar su último suspiro pero tenía que durar por lo menos cinco años mas... hasta que fuese mayor de edad y me pudiera ir de la casa de mi padre, de repente recordé que María, la esposa de mi papa, me esperaba en media hora, mire mi móvil... había pasado una hora y tenía tres llamadas perdidas.
El buzón de mensajes también tenía tres nuevos correos
"-¿Donde estas?-"
"-Si no llegas en veinte minutos nos vamos sin ti y no queremos verte... pasaras la noche afuera-"
"-¿Ami donde estas? ¡Papa está furioso! Te esperamos en la casa del jefe-" suspire cansada, monte en la bicicleta y pedalee con fuerza hasta la casa del jefe, mi familia recién estaba llegando.
-Lamento la tardanza, tuve un percance...- enfrente del porche de la casa del sheriff habían mas de dos autos y entre ellos note el auto que me había pasado por encima "¡maldito! ¡Por su bendita culpa ahora me voy a ligar una tremenda bronca! ¡Argh!"
-¡No hay disculpas que valgan!- me espeto María, mi padre me observaba con odio desmedido, por primera vez en años deje de lado mi temor y lo enfrente.
-¡No es mi culpa que el chófer de ese bendito auto viniera corriendo carreras por la carretera y me llevara puesta!
-¿El Dr. Cullen?- pregunto el jefe -¡pero que dices niña! Él nunca te hubiera dejado...
-¡Pero lo hizo!
-Tiene razón Charlie... pero fue una emergencia...- en eso vi al hombre, que antes no lo había podido ver con mas atención allí parado, abrazado a una mujer de aspecto dulce.
-Podría haber tenido la decencia de alcanzarme hasta aquí, ¿no le parece?
-Lo sé... pero tenía una emergencia... millones de disculpas...
-No hay disculpas que valgan.
-¡Amira!- me espeto María.
-¡ES AMALIA! ¡A-M-A-L-I-A!... ¡AMALIA, NO AMIRA!- (PLAFF).
-¡No te voy a permitir que le hables así a tu madre mocosa insolente!- me espeto mi padre.
-¡¿Ahora yo soy la insolente? ¡Váyanse todos al mismísimo infierno!- sin más, sin escuchar a mis tías, ni a mi hermano tome mi bicicleta y me perdí por el sendero que iba al bosque... anduve por él un largo tiempo hasta llegar a un pequeño arroyo que corría por las inmediaciones, saque el móvil y marque el n° de Naty
-¿Ami?- me pregunto la voz de ella del otro lado.
-La misma que viste y calza... escucha... puedo quedarme en tu casa hoy... las cosas se pusieron feas en la mía y no ten...
-¡Eso ni lo preguntas! ¡Ven! A la abuela no le va a molestar...- sonreí, eso era una amiga; después de colgar guarde el móvil en mi mochila y anduve hasta la casa de mi amiga, que quedaba al otro lado del pueblo, sobre una vieja librería que atendía su abuela, las dos me recibieron y allí pase la noche, sin pensar en otra cosa que no fuera ¡el bendito medico arrogante! ¡Y su Mercedes del demonio!
La mañana del sábado amaneció nublada como siempre, durante toda la noche no pude pegar un ojo por dos factores, el primero y más preocupante, problemático, era el hecho que no podía quitarme de la cabeza al bendito Dr. Cullen y el otro, que mi amiga no paraba de susurrar el nombre de su novio Nahuel…
Cuando se levanto desayunamos y cada una se fue a su trabajo.
-¿Donde estuviste?- me pregunto Halley apenas entre.
-Por ahí…- le respondí dejando mis cosas en el almacén y poniéndome el delantal.
-¿Vos pensás seguir sin aparecer por tu casa?
-Para que si, si llego a aparecer me van a sacar antes de que pueda decir algo…- comente mientras preparaba el talonario para pasar por las mesas.
-Bastian está preocupado…
-Ya lo llamare, no te preocupes…
-Me preocupas tu, Anna tuvo una visión de lo que ocurrió ayer…
-No es momento…- la corte y me aleje para atender las mesas. El día paso lento, sin muchos contratiempos, esquive todo el día a mi tía para que no pudiera hablarme pero sabía que no la podría detener por mucho, cuando la hora de cerrar tocase ella me acorralaría y me pasaría factura como hacia siempre.
-¿La señorita Cortez?- pregunto un joven con un ramo de rosas y una tarjeta.
-¿Cuál de las dos?- le pregunte, este miro el sobre.
-Amalia Cortez…
-Soy yo…- dije rodeando el mostrador, el chico me tendió unas hojas que firme y después se retiro.
-¿Un admirador secreto?- Pregunto Halley preparando una orden, negué, debía de ser de Ángel, ¿quien más me podría mandar rosas?
Amalia: quería disculparme por el incidente del otro día, mi actitud no fue la más acorde pero no lo pude hacer personalmente debido a que te fuiste demasiado aprisa.
Espero que no me guardes rencor, espero que me perdones y que podamos llegar a llevarnos bien.
ATTE Carlisle Cullen.
-Si esto es una broma… es de muy mal gusto…- susurre.
-¿Que es una broma?- pregunto tía Anna saliendo de la cocina.
-Esto...- comente señalando las rosas y la carta -... pero ahora lo voy a arreglar.
-¿Quien es tu admirador?- pregunto Halley.
-No es admirador...
-Debe de ser de Ángel... es un amor ese chico.
-No fue Ángel... fue Cullen, el Dr. Cullen.
-¡ ¿QUE?- me pregunto mientras comenzaba a recoger mis cosas para salir
-Eso...- respondí.
-¿A dónde vas?
-A devolverle el gesto...
Carlisle POV
Llegue al hospital, todo seguía igual. Después de pasar por la recepción para buscar algunos archivos me quede en mi despacho, el mismo que la última vez.
Desde donde estaba aun podía escuchar las conversaciones de las enfermeras en la recepción que hablaban de mí. Mire las carpetas pero una me llamo mas la atención.
-Amalia Eloísa Cortez...- la abrí, mas por curiosidad que por verdadero interés me repetía como si intentase negar algo, dentro del archivo había biopsias, análisis de sangre, radiografías, tomografías, resonancias, etc. Leí todos los análisis horrorizándome cada vez más pero antes de que pudiera profundizar mas unos golpes en la puerta me distrajeron.
-¿Dr. Cullen?- pregunto una vieja enfermera, tenia rostro tierno y sencillo, me observaba como una abuela mira a su nieto... me sentí humano después de mucho tiempo - tiene una visita... la señorita Cortez quiere hablar con usted...- la mire extrañado pero no por mucho.
-Hágala pasar...- pedí... ¿es que acaso esa chica quería que la matase? ¿Que la mordiese? ¿Por qué me perseguía? El sonido de la puerta abriéndose y ese aroma perfecto me advirtieron que ya había entrado, me gire y la observe, tenía el cabello largo negro suelto, un sobretodo negro que resaltaba su palidez, su piel blanca estaba perlada por la lluvia que caía fuera, tenia puesto unos jeans y una especie de corsé remera roja, sus ojos azules se fijaron en los míos.
-No quiero sus limosnas... con que se hubiera hecho un minuto para pedirme disculpas hubiera estado todo bien...- comento dejando el ramo de rosas que le había mandado en mi escritorio.
-Creo haber mandado una carta...
-Si si... leí la carta, pero ya se lo dije antes, no quiero ni la limosna ni la lastima del mundo, si hubiera querido un perdón, hubiese ido a mi casa o al local...
-No tuve…
-¿Tiempo? hágaselo... como yo lo acabo de hacer para aclararle esto... ahora sí, yo le pido un favor, preocúpese por su familia y por sus pacientes, no por mi...- iba a agregar algo pero se mordió el labio para acallarlo, en eso me di cuenta de la herida que tenía en la comisura de su labio -... bueno, eso es todo...- la vi tomar el pomo de la puerta, una parte de mi me gritaba que no la dejara irse, salió sin otra cosa que decir y yo la observe sin nada más que hacer...
Naty POV:
Me pase todo el día en la librería ayudando a mi abuela con los quehaceres de esta y atendiendo a los clientes, hubo muy poco trabajo a diferencia de otras y es que debido a las vacaciones muchos se fueron de excursiones y no había casi gente en todo el pueblo. La puerta del local se abrió y por ella entro mi vida, Nahuel.
-Hola hermosa...- me sonrió como siempre y yo solo le correspondí, me dio su regalo, un perfecto ramos de rosas... por esos gestito insignificantes yo lo amaba.
-Hola amor... ¿cómo te fue en el hospital?- debido a un incidente que tuvimos a finales de curso el jefe Swan lo había mandado a hacer trabajo comunitario al hospital.
-Bien... como siempre, pero extrañándote horrores... ¿sabes a quien vi?- negué permitiéndole continuar -... al nuevo médico del hospital... parece modelo el hombre jaja... todas las enfermeras están locas... también me cruce a Ami... ¿sabes si le paso algo? Ángel también la vio pero cuando le quiso ir a hablar ella no le respondió y se fue…
-Esta extraña desde ayer, pero no me dijo nada... debe ser por el padre...
-No entiendo cómo pueden seguir Bastian y ella en esa casa... ni yo soportaría eso…
-Por algo les toco a ellos, porque son fuertes... conoces a Ami, sabes cómo es... no se preocupen de seguro que ya se le pasa, sino yo misma voy a tener una conversación con ella...
-Por eso te amo tanto... porque sos única...- yo sonreí como tonta, pero ese era el efecto que tenía en mi, el era mi todo -Bueno futura señora Dorrego... ¿para hoy en la noche tiene planes?- me pregunto, no pude evitar observarlo con pena -Noche de películas en la casa de Jenny...- asentí -bueno... no importa... ¿sabes por qué?- negué de nuevo saliendo de detrás del mostrador.
-Porque hoy no va a ser como cualquier noche de películas con Jenny, hoy va a ser noche romántica... idea de Gabriel... sabes cómo es...- los dos nos reímos, eso era lo bueno de nuestro grupo, todos nos llevábamos de maravilla, nos conocíamos de toda la vida y éramos las parejas perfectas...
Carlisle POV
Durante toda la mañana no pude dejar de pensar en ella, en sus ojos... en toda ella...
-¿Carlisle?- cerré la puerta tras de mí y observe a mi esposa -Carlisle no te hubieras molestado...- la observe unos minutos hasta que entendí, le extendí el ramo de flores y la bese como siempre lo hacia...
Naty POV
Toque timbre, me había extrañado la llamada de Anna, la tía de Ami, pero sabía que debía de ser algo serio.
-Que suerte que llegas Naty...- la salude y ella me invito a entrar.
-¿Y Ami?- le pregunte, ella suspiro cansada.
-Llego del hospital y se encerró en su habitación, no quiere hablar con nadie y eso me preocupa, no se escucha nada desde esta...- asentí mientras me levantaba y subía las escaleras hasta el desván. Toque la puerta y en menos de cinco minutos ya estaba dentro de la habitación, estaba hecha un desastre, ropa tirada, lápices, cd's, hojas... no había nada en su lugar y en la cama tirada estaba Amalia observando la nada.
-¿Y a que se debe esta babilonia?- le pregunte.
-Cullen...- respondió, mire la habitación había olor a sahumerio y algunas latas de gaseosas vacías...
-Me dijiste que dejaste el vicio...- comente mientras observaba el cenicero lleno.
-Y tú me crees... por eso te aprecio tanto...
-¿Lo vas a dejar? no se para que te lo pregunto pero es como que tengo la pequeña esperanza que lo dejes.
-Algún día... tal vez…
-¿Se puede saber porque te encerraste? ¿Qué paso para que te traumaras tanto?
-Podes creer que el muy careta me mando un ramo de rosas para pedirme disculpas por lo del accidente...- negué con la cabeza, ella se sentó en la cama, estaba despeinada, demacrada, etc. -... ¿Por qué no tuvo el valor para venir y pedirme disculpas en la cara?
-Tal vez te tiene ganas...- ella sonrió y la cara le cambio un poco.
-Si, claro... tiene esposa e hijos... no puedo hacer...
-¡Te gusta!
-¿Te estás escuchando?- me espeto levantándose de la cama...
-Entonces ¿por qué te jode tanto...?
-¡NO SE! ¡NO SE QUE ME PASA! ¡NO SE PORQUE REACCIONO ASI!
-¡Tranquilízate!- la abrase y deje que se desahogara... lloro como nunca en toda su vida y yo la deje, deje que se tranquilizara, después acomodamos el estropicio de su habitación y salimos para la noche de películas en la casa de Jenny con los chicos.
Nuevamente me decido a volver a postear esta historia de mi anterior cuenta... nuevamente editada.
Para que no tengan dudas yo soy su autora, mi otra cuenta LornaDane-Polarix o algo así fue hackeada por alguien y tuve que volver a crearme una nueva posteando lo que pudo sobrevivir...
Espero que les guste y espero que me dejen muchos Reviews y que muchos me agreguen la historia a sus favoritos.