Hola los personajes no me pertenecen, si no a Disney. Yo solo creo un mundo de fantasías con los personajes. :)


Elsa, quien estaba con un hermoso vestido blanco de novia, estaba corriendo mientras lloraba porque su prometido, Kristoff, la había dejado abandonada en el altar.

Todos sus familiares, empezaron a correr tras ella, pero nadie la alcanzaba.

Elsa tomo un taxi, el cual la llevo a su casa.

-Tome - dijo Elsa dándole 50 dólares y salió corriendo.

Cuando entró a la casa de su tia, se dirigió a su habitación, allí empezó a llorar fuertemente, luego se quito los adornos y el vestido y sefie a bañar.

Su tía Jennifer, quien acaba de llegar a su casa, buscando a su sobrina, decidió dejarla sola unos momentos.

Subía las escaleras silenciosamente, sin que su ,madre la oyera, Anna se dirigía su habitación , allí dejo su mochila, con la cual escaparía con el prometido de su prima Elsa.

Cuando su madre la llamo, ella se asusto.

-Anna ¿donde estabas? - pregunto Jennifer - no te vi en la boda de Elsa.

- Estaba ahí, pero como en esta casa solo tienen ojos para Elsa, ni notan mi presencia - dijo Anna ofendida.

Anna desde pequeña había odiado mucho, mucho con toda su alma a Elsa porque Anna sabía que cuando ella crezca solo se quedaría con esta casa pero también sabia que Elsa iba a heredar decenas de empresas, cientas de haciendas y casas por todas partes del mundo y una cantidad inalcanzable de dinero y por eso la detestaba desde eso momento decidió hacerla sufrir y como no con lo que mas amaba, su prometido.

Anna y Kristoff, habían estado juntos a escondidas de Elsa y de todas las personas.
Anna se ha a escapar con Kristoff, pero el luego decidió pensarlo.

Al anochecer, todos ya estaban dormidos, pero Elsa no, así que decidió bajar a la cocina por un poco de agua.

Cuando estaba de regreso a su habitación, escucho a su prima hablar con su amiga por la computadora.

-¿y como esta?- pregunto Alexa la amiga de Anna.

- Esta de lo peor, no salio de su habitación todo el día - dijo Anna riendo - Lo bueno es que no sabe de que Kristoff y yo teníamos una relación a escondidas.

Elsa quien estaba afuera de cuarto empezó a llorar porque no podía creer que su prima le haya hecho eso.

- Y por eso Kristoff la dejó - dijo Anna riendo mas fuerte. - lo bueno es que ya le arruine la boda a la estúpida de mi prima, la odio, lo tiene todo no le falta nada. - dijo Anna molestandose.

Luego de eso, Elsa se fue a su cuarto y empezó a llorar descontroladamente y decidió que mañana por la mañana se iría de acá a una de las cientas de haciendas que tenia.

Eran las 5 am y Elsa ya se habia levantado y en silencio saco su maleta y empezo a meter su ropa, sus perfumes, sus cosas personales y su dinero escondido en el colchon. Se puso unos leggins y un polo floreado. Dejo una nota en la puerta:

Me voy a vivir a otro lado, no me busquen, voy a estar bien.

Luego de esto tomo un taxi hasta la hacienda en la cual estaban los papeles de las empresas y el abundante dinero que heredó.

Durante el camino, Elsa se entristeció porque lo que habia hecho su prima le habia afectado demasiado. Estuvo recordando cuando junto con su tia Jennifer, ayudaba a la gente que mas necesitaba.

Elsa a pesar, de ser millonaria, no le gustaba tener los lujos que la gente de ese tipo normalmente tenia, ella se conformaba con poco, era humilde, bondadosa y solidaria.

Cuando llego y vio la hacienda, vio que esta era inmensa, cuando entro la recibieron dos empleadas que ya conocia porque esta era la casa donde vivia cuando era pequeña, antes de que sus padres murieran.

La casa estaba casi vacia ya que nadie vivia aqui, los cuartos estaban vacios tambien.

Elsa subio y fue a la terraza, en la cual se veia un hermoso paisaje de arboles y la ciudad. Alli Elsa estaba tranquila reflexionando sobre lo que habia pasado y tambien de lo que pasara ya que ahora tenia que ir a trabajar desde mañana, o sea lunes, en las empresas de sus padres.

Y así toda la mañana estuvo pensando, hasta que paro de llorar.

- Juro que las empresas que he heredado van a ser las mejores del mundo, y voy hacer lo que sea para conseguir lo que quiera, no me importa si tengo que engañar, robar o matar, nadie pero nadie va a ser más que yo- dijo Elsa sonriendo con malicia.

-Juro que me voy a vengar de las personas que un día me hicieron daño- dijo Elsa.

-No voy a estar regalando el dinero a la gente que no trabaja como antes lo hacia y no voy a creer en nadie- dijo recordando cuando ella ayudaba a gente que mas lo necesitaba.

- Voy a vivir diferente y mejor, siempre tratare de superar a los demás y superarme a mi misma para obtener lo que quiero.- dijo Elsa.

-Ya no voy a ser es chica tímida, humilde y tranquila- dijo Elsa - Ahora voy a ser una mujer, una a la que no le teme a nada, una a la que no le importe lo que pase, una mujer a la que nadie le haga daño y supere- dijo Elsa sonriendo, cambiando su tono de voz y parándose.

- Me voy a olvidar de mi vida anterior y voy a comenzar de nuevo.- dijo Elsa entrando a la casa.

Al atardecer, Elsa se fue al centro comercial, fue a comprar ropa para ir a trabajar, todo elegante y formal.

Al llegar a su casa botó toda su ropa de su vida anterior y ocupo su closet de su nueva ropa.

Desde ese momento Elsa se volvió fría y altanera, creyéndose ser mas que los demás.

Elsa al día siguiente fue a trabajar a una de las empresas que tenia.

Cuando llegó caminando contoneando sus caderas, todos tenían la costa en ella, llamaba la atención su vestido negro ajustado que le llegaba mas arriba de las rodillas, su belleza y que ella fuera la hija de los difuntos dueños.

Entro a su oficina y empezó a realizar sus trabajos, eran muchas cosa que tenia que hacer, lo cual la cansaba mucho, para ser el primer día era muy agotador.

Al anochecer ella salio rumbo a su casa, sintiendose alguien nueva, y feliz.

Al llegar cenó y se metió a la ducha y luego de un relajante baño se puso su pijama y al caer en su cama también cayo en un profundo sueño.

Elsa se levanto, se ducho, se vistio como toda gente millonaria y altanera lo hace, y tomó desayuno en la gran mesa de su gran casa.

El chofer que conducía el gran carro, en el cual llevaba a Elsa a un vecindario, hoy llegaría mas tarde de lo normal a su empresa.

Luego de una hora, a llego al lugar, un lugar que no era de su agrado, era sucio donde vivía gente de bajos recursos.

Puso una cara de asco mientras caminaba a unas pequeñas escaleras. La gente de aquel lugar la miraba, les llamaba la atención que una mujer de diferente nivel social estuviera aquí, miraban como ella miraba con desagrado, como caminaba, con altanería. Cuando puso su delicada mano en el barandal de la escalera, la saco rapidamente y la miró, vio que estaba lleno de suciedad, se limpió y sin tocar el barandal, siguió subiendo por la vieja escalera de metal.

Llegó a una pequeña casa en mal estado, tocó la puerta dos veces y le abrió una señora de unos 60 años, esta le cedió el paso, Elsa entro mientras sonaban los hermosos tacones que llevaba.

La señora estaba asombrada, ya que ella conocía a Elsa cuando era pequeña y lo que le asombró más es como había cambiado, porque sus padres venían a visitarla poquísimas veces pero hablaban entre ellos. Pero se preguntaba si la recordaba porque no la saludo y porque estaba aquí.

-Toma asiento - dijo la señora dulcemente.

-No, gracias - dijo Elsa fríamente.

- ¿Quieres algo de tomar?- pregunto la señora.

- Yo no he venido acá para jugar al té - dijo Elsa con un tono frío y directo - He venido para que usted me page el alquiler de esta casa. - dijo mirando la casa con disgusto.

- Le pagaré despues lo que falta - dijo la señora entregandole a Elsa 200 dólares.

Elsa rió en forma de burla.

- ¿Solo esto me va pagar? - dijo Elsa sonriendo con arrogancia. - Esto no vale ni la décima parte de lo que debe.

Y con esto le tiró el billete en la cara, el cual cayó al piso.

- Es que no tengo más- dijo la señora timidamente.

- Desde que mis padres murieron no a pagado el alquiler, eso son casi 13 años, ¿No creo que en 13 años haya ganado 200 dólares?- dijo Elsa con su misma sonrisa.- Así que vaya desocupando la casa.

- Pero, mi niña n- Elsa le interrumpió.

- ¡Para usted Señorita Elsa! - dijo gritando.

- Pero es que no se a donde ir - dijo la señora nerviosamente.

- ¡Eso a mí no me interesa! - dijo Elsa - o paga o se va.

A Elsa le estaba llegando el limite la señora, no tenía tiempo para seguir discutiendo con una mujer que no es de su nivel, tenía cosas más importantes que hacer como ir a trabajar.

La señora estaba más asombrada que antes, la niña pequeña tranquila, solidaria, bondadosa, humilde que conoció hace más de 14 años, se había ido. Ahora era una mujer arrogante, egoísta, altanera y fría.

- ¿No me puede dar más tiempo? - dijo la señora tímidamente. - es que necesito cuidar a mis hijos.

- ¿Y que cree usted? ¡Que no tengo cosas más importantes que hacer! - dijo Elsa riendo con arrogancia.

La señora empezaba a llorar preocupada.

- Tu no eras así ¿Que te está pasando? - dijo la señora acariciando el brazo de Elsa.

- ¡No me toque! - dijo Elsa sacando su brazo de las manos de las señora. - Además, a mí no me esta pasando nada, a usted que le importa lo que me pase, ¡cuando sea igual que YO, recién me podrá decir que debo hacer o que no debo hacer! - dijo fríamente. - Y como veo que no me va a pagar mejor llamó a la policía.

Elsa empezó a marcar, mientras la señora arrodillada le rogaba que no.

- No por favor, le prometo que le pagaré lo que debo, pero no llame a la policía. - dijo la señora llorando.

Luego de un par de minutos la policía entro, Elsa conto lo que pasaba y ellos empezaron a sacar las pertenecias de la señora y sus pequeños hijos.

- ¿Y ahora que haré? tiene que ayudarme - dijo la señora llorando desconsoladamente.

- ¡Eso no me interesa! ¡Usted tuvo que pensar antes de no pagar el alquiler!- dijo Elsa gritando.

Cuando sacaron todas las pertenencias de la señora, Elsa se encamino a la puerta de aquella casa, pero al escuchar a la señora llorar paró pero no volteo.

- Ah, y le sugiero que vaya consiguiendo casa porque como se acerca el invierno en pocos minutos estará comenzando a llover y no creo que quiera estar empapada - dijo Elsa en tono de burla.

Luego de esto bajo las escaleras y mientras caminaba a la entrada principal del vecindario la veían con temor , ya que todos escucharon los gritos de la discusión y vieron como sacaban a la señora de avanzada edad de la casa alquilada.

Elsa al salir, se subió al carro y el chofer la llevo hasta la empresa.

Cuando la señora salió llorando de su casa, Elsa tenía razón empezó a llover, todas las personas que vivían ahí la vieron con lástima, y no dudaron en ayudarla a ella y a sus hijos, los abrigaban y les daban de comer a los tres.

Elsa llegó y siguió trabajando como normalmente lo hacía hasta la anochecer, volvió a su casa se recostó en su comoda cama, se encontraba muy cansada como para comer.

Sabía que trabajar en una empresa era muy dificil a su corta edad, pero ese fue su destino, no podía hacer nada para cambiarlo.


Hola, Esta es mi primera historia, bueno ya había hecho un one shoot, si lo quieren leer esta en mi perfil, con gusto acepto comentarios y sugerencias, son libres de opinar lo que me pueden preguntar cosas que quieran saber. Trataré de subir lo más antes que pueda, el problema es que empiezan las clases y aghhh, bueno los que van a la escuela, sabran que es sufrir ahí. Bye.