PASION O DESEO

Autora: Marin Silivant

Serie: Naruto

Claim: Neji/Hinata/Naruto

Obviamente la serie ni los personajes me pertenecen, esto es sin fines de lucro simple entretenimiento… espero sus comentarios para continuar…

Como advertencia hay lenguaje provocativo, la lectura la dejo a consideración esto esta marcado para mayores ^^

¸¸,ø¤º°º¤ø °°º¤ø,¸°º¤ø,¸¸,ø¤º°°º¤ø,¸ °º¤ø,¸¸,ø¤º°°º¤ø,¸°º¤ø,¸¸,ø¤º°°º¤ø,¸

Siempre creí que el amor y el deseo iban de a mano, que no se podía desear a una persona si no se amaba, y si se amaba a alguien se deseaba también, esa era la lógica, ¿Cómo podía haber otro?, ¿Cómo podía desear a alguien que no amaba y amar a otro a la vez?

Estoy completamente segura de mi amor, amo a ese rubio con todo mi corazón, cada vez que lo veo me invade una emoción indescriptible, le admiro más que a nadie, por su fuerza, por su entrega, por su corazón… Lo espere tanto tiempo, siempre viéndolo desde lejos y apoyándolo en silencio, siempre esperando el momento para que me mirara, para que me hablara, para estar cerca de él, hasta que al fin mi amor fue correspondido. No podía desear nada mas cuando el fin Naruto me había visto como mujer y habíamos comenzado a ser una pareja, aun recordaba con emoción la primera vez que me había besado, fue algo tan electrizante que estuvo apunto de desmayarme en sus brazos…

Pero cuando aquel otro me beso…

Nunca lo imagine, nunca lo vi venir, él y yo… ¿Cómo pudo surgir?, en un principio él ni siquiera me soportaba, como imaginar que despertaría eso en mi.

**************

Todo había pasado un día que mi querido Naruto estaba en misión, llevaba algunos días fuera de la aldea y yo aunque lo extrañaba trataba de seguir con mis obligaciones, me disponía a ir a entrenar al bosque cuando lo mire, no era la primera vez que lo hacia lo había visto entrenar muchas veces pero en esa ocasión sus movimientos eran aun más suaves… estaba perfeccionando aun más el golpe suave y me detuve a observarlo, era increíble la manera en que controlaba sus movimientos, cada uno calculado, cada uno meditado y dirigido gracias al Byakugan. Sin darme cuenta había hasta dejado de respirar para no interrumpir y mi concentración en él era tanta que no percibía nada más, lo observaba con mi propia técnica para imitarlo después, no tardo mucho en notar mi presencia y se detuvo para mirarme de frente.

Se quedo en silencio sin decirme nada, simplemente con la mirada fija en mi, me puso nerviosa, como nunca antes… Siempre había tenido una mirada penetrante muy a pensar del kekkei genkai, me quede paralizada por unos instantes antes de pedir disculpas y volver a mi primera intención, entrenar en el bosque.

- ¿te gustaría entrenar conmigo? – me pregunto deteniéndome en seco.

Me volví a él aun tímida y balbucee indecisa, él se giro perdiendo contacto visual y haciendo una mueca que reconocía de fastidio, sabia que le molestaba esa inseguridad mia siempre me lo había recalcado y sin pensarlo más camine hacia el centro de entrenamiento de la casa de la familia Hyūga.

- Si, claro – y me coloque frente a él.

El combate de entrenamiento transcurría como otras veces, entre los golpes él me hacia observaciones, comentarios, o indicaciones… hasta ese momento nunca le había derrotado y no pensaba que fuera diferente, termine contra la pared y con su mano a centímetros de golpearme.

- Eres más rápida – comento alejándose un poco de mi para que me incorporara – pero hay algo que mejoraría tu posición

Me indico que me acercara y me rodeo por la espalda con sus brazos para colocarme en una posición ligeramente diferente a la habitual, los brazos un poco más pegados al cuerpo y más flexionada de las rodillas

– Esto te dará un mayor empuje

No había tenido la consciencia hasta que me hablo que su rostro estaba junto al mío, no pude ignorar la cercanía de su cuerpo con el mío, escuchaba claramente su respiración guiando mis brazos con sus manos y sin darme cuenta realmente me había agitado, se notaba en mi aliento. Sentía un calor cundir por todo mi cuerpo como si me fuera a desmayar, pero no por nerviosismo sino por ansiedad…

- ¿estas cansada? – Pregunto alejándose de mí, casi me dolió que lo hiciera y la confusión me invadió… - ¿Qué te pasa? – insistió perspicaz

- nada… - dije bajando la mirada nuevamente rehuyendo la suya – no te preocupes hermano

¿Qué me pasaba? No podía sostenerle la mirada, me sentía aturdida… él lo debió tomar nuevamente como un signo de debilidad y su expresión me reflejo nuevamente enfado, no sabia que hacer y solo pude caminar apenada fuera de su alcance… Pensé que estaría fuera de su alcance pero no fue así, aquella sensación me persiguió todo el día y aun más por la noche. Al estar recostada con el silencio de la oscuridad rememoraba vividamente esos escasos segundos en que su cuerpo estuvo cerca del mío, al hacerlo nuevamente sentía el calor quemar mi piel y acelerar mi corazón… al cerrar mis ojos sentía con más claridad su rostro cerca del mío, su alienta acariciándome… Me levante con sobresalto con la respiración entre cortada, lleve la mano a mi boca cubriéndola ¿Por qué no podía dejar de pensar en él? ¿Cómo me había alterado de esa manera? No podía entenderlo, pero tampoco podía dormir, así que me levante y prendí la luz…

- ¿Hinata que te esta pasando? – pregunte a mi reflejo sentada frente a él, solo podía reflejar una mirada de angustia, de perplejidad… escondí el rostro entre mis manos confundida ¿Por qué deseaba tanto que aquello se repitiera? Tenerlo cerca, sentir su aliento, su calidez… yo no era así…

Como si fuera un destello la imagen de Naruto vino a mi mente, levante la vista de golpe mirando nuevamente el espejo frente a mí… Naruto… sentía que le estaba fallando y eso me aterro, me dolió el solo imaginarme en lastimarlo; no pude evitar que lagrimas corrieran de mis ojos, me sentía horrible, culpable y al mismo tiempo confundida, mi corazón sufría por fallarle al hombre que amaba y mi cuerpo por desear a otro… Pude haberme ahogado en llanto toda la noche pero un llamado a mi puerta me saco del letargo, limpie mis lagrimas al tiempo que escuche la puerta abrirse, no tenia la costumbre de cerrarla con llave.

- ¿Hinata? ¿Estás bien? – Escuche la voz de Neji asomándose a la habitación - ¿Por qué estas levantada a esta hora?

No necesitaba una visión especial para notar preocupación en su rostro, mucho menos se me escapo el hecho de que su vestimenta no era tan formal como en el día su camisa descubría en parte su pecho y la imagen de ello me altero nuevamente volví la mirada cerrando los ojos. ¿Qué estaba haciendo aquí vestido de esa manera? La respuesta surgió rápido en mi cabeza, él era el encargado de protegerme, era de esperar que reaccionara ante una situación fuera de lo común… meditar sobre eso solo empeoraba las cosas, ¿siempre estaba tan cerca?...

- Lo siento… no podía dormir – hable para cortar el silencio que se producía entre los dos – apagare las luces enseguida.

Mantuve los ojos cerrados, era mejor si no lo veía; solo esperaba el sonido de la puerta que se cerro, me concentre en mantenerme tranquila respirando profundamente para despejarme, lance un suspiro tratando de que mis alteraciones se fueran con él soltando un anhelo que no podía ser y así poder irme a dormir. Pero mi plan no se concreto, al abrir los ojos y buscar mi imagen en el espejo encontrando que proyectaba su imagen detrás de la mía. Mis ojos se abrieron sorprendidos y casi podía escuchar el latido fuerte de mi corazón, contuve el aliento solo observándolo a través del cristal ¿acaso estaba imaginándolo?

- Has estado muy rara – dijo con su acostumbrado tono controlado que tanto me alteraba… ¿Qué podía decirle?

- No hermano… - dije por evitar el silencio, vi como cerro los ojos molesto

- No me gusta que me digas así…

Me sorprendió… ¿Qué quería decir con eso?, solo sabia que mi corazón se agito con más fuerza y el calor nuevamente rodeo mi cuerpo. Ya no cerraba los ojos, nos miramos en silencio por unos segundos, él con una mirada firme y yo aun anonadada… tenia que decir algo. Abrí la boca sin palabras que salieran, Neji reacciono más rápido, en un movimiento se inclino y se posiciono a un lado mirándome directamente, había colocado su mano en mis labios impidiéndome el hablar.

- No me recuerdes que somos familia – continuo - déjame solo… - cerro los ojos haciendo una expresión como reprochándose a si mismo – solo olvidarlo por un momento para poder verte como te veo.

Aquello no estaba pasando, quería convencerme de eso. Su mano dejo libre mi boca que siguió sin saber que decir, estaba conmocionada ¿Cómo me miraba entonces?...

- ¿Neji…? – pronuncie apenas y sin aviso él se acerco a mi como si hubiera llamado.

Con un impulso me había sujetado el rostro y sus labios cerraron los míos con una fuerza que me quito el aliento, me forcé a respirar dejándome llevar por el compás de sus labios y el roce de su lengua, todo mi cuerpo sucumbió ante la excitación de ese beso… me sujete de sus brazos no para quitarlos sino para asegurarme que aquello era real, que mi cuerpo estaba reaccionando ante su tacto… Con firmeza me sujeto de los hombros y me levanto para acercarme a su cuerpo, de haber tenido la oportunidad un jadeo pudo salir de mi, me abrace a él sin pensarlo mientras sus manos recorrían mi espalda intensificando aun más la pasión de ese beso…

Quería que siguiera, me aferre como si quisiera fundirme con él, con la decisión de no dejar escapar esa sensación, la sensación de sus manos recorriendo mi espalda, bajando y bajando… sus labios se separaron de los míos pero no interrumpieron la pasión, al contrario, siguieron quemándome recorriendo mi cuello y bajando en busca de mis hombros. Mi consciencia despertó cuando sentí sus manos trabajando para librar el camino de su boca hacia mi cuerpo, dejándome llevar por la sensación deje caer mi cabeza a mi costado dejando aun más libre su recorrido… al hacerlo abrí los ojos y mi mirada se impacto al ver la imagen de la realidad que el espejo me estaba recordando… sentí terror de mis propios actos, de lo que veía… ¿Quién era esa chica?

- Nooo – casi grite empujándolo con todas mis fuerzas

Me lleve las manos cubriendo mi boca pero mostrando mis ojos de terror, no podía permitir que aquello pasara… que la pasión me dominara… no podía… por Naruto…