El Copyright y la Marca Registrada del nombre y del personaje Harry Potter, de todos los demás nombres propios y personajes, así como todos los símbolos y elementos relacionados, son propiedad de Warner Bros., 2000. A excepción de personajes, sucesos, lugares que yo misma saqué de mi mente perturbada. Esto es sin fines de lucro.
Aclaraciones: La historia contiene SPOILERS de 'Harry Potter and the Half-Blood Prince' así que cuidado para los que no hayan leído. También tengo que decir que la historia parte desde el mes de octubre en el séptimo año para Harry y cia. Y por último, he de decir que esto está basado en una retorcida idea de mi mente perturbada, así que ya saben que les advertí que es rara la historia. "Juegos de Amor"
Capítulo 1: 'Una relación ilegal'
Ese día no había pasado nada fuera de lo normal. Todos fueron a sus clases correspondientes de este día martes de enero. Y por supuesto, nuestro trío de protagonistas se encontraban en una: Defensa Contra las Artes Oscuras.
Este año había llegado un nuevo profesor, sorprendentemente inusual que haya uno nuevo, y era el preferido de todos. Para las chicas, él era guapo y rompía los corazones de cada alumna. Para los chicos, era algo arrogante, pero enseñaba muy bien y era simpático.
-¿Señorita, Patil?
-¿Qué? – preguntó Parvati sacudiendo la cabeza y viendo al profesor delante de él serio.
-¿Cree que podrá combatir a sus enemigos sólo con mirarlos con cara babosa? – le preguntó haciendo que todos estallaran en risas – Será mejor que ponga más atención. 5 puntos menos a Gryffindor.
-Sí, profesor Graham – asintió bajando la mirada Parvati para no ver cómo sus compañeros de casa la miraban.
-Y, como iba diciendo, el próximo lunes habrá un examen – continuó el guapísimo profesor James Graham - ¿Alguna duda?
-Sí – contestó Hermione alzando su mano como siempre hacía - ¿Entrará el tema de las maldiciones imperdonables?
-Claro, señorita Granger. Sólo espero que estudien y se concentren mejor en clases – y observó con detenimiento a Ron que estaba dado vuelta conversando con una chica de Ravanclaw de su club de admiradoras – Y que el señor Weasley dejé de hacérselas de galán. 5 puntos menos a Gryffindor.
-Bien hecho, Ron – le dijo Hermione viendo a su amigo a punto de replicar.
-Ahora pueden irse – y sonó la campana – Señorita Granger, debo hablar con usted sobre su pergamino que me entregó esta mañana – le pidió a Hermione cuando salía junto a Harry.
-Te espero en la sala común, Hermione – le dijo Harry viendo como Ron se iba con un tumulto de admiradoras.
-Vale, nos vemos – y todos los alumnos se fueron.
OoOoO
Parece que el hecho de que haya sido el mejor guardián del colegio en el equipo de Quiddittch había ocasionado que la gran mayoría de las muchachas de Hogwarts fueran sus admiradoras. Y debía admitirlo, le encantaba.
-¡Ron, yo te puedo hacer tus deberes con gusto! – le dijo una chica de Hufflepuff.
-No, gracias, Nicole – respondió Ron sonriendo y la muchacha casi se desmaya porque él le había dedicado esa sonrisa.
Pero, a veces, era tan fastidioso que estuviera rodeado de sus admiradoras. No podía hacer nada en completa tranquilidad. No podía hacer los deberes, como si los hiciera, en completa calma; cuando comía muchas se peleaban para sentarse a su lado ocasionando que Hermione les gritara que salieran de encima ella y por cada pasillo escuchaba suspiros prolongados.
-Bien, muchachas – dijo deteniéndose cerca del cuadro de la Dama Gorda – Tengo que ir a hacer asuntos personales, gracias por su agradable compañía... – y se fue corriendo para entrar a la sala común.
'Soy irresistible' pensó sonriendo satisfecho por su creciente popularidad.
OoOoO
El profesor Graham cerró la puerta mientras Hermione dejaba su mochila encima de un banco junto al escritorio del maestro.
-¿Qué quiere, profesor? – preguntó ella en un tono inocente.
-Me gustaría hablar... – dijo él acercándose con una sonrisa picarona.
-¿Sabe? Más que hablar me gustaría... – y la muchacha le dio un beso corto en los labios.
-Creo que podré empezar a pensar si Gryffindor puede recuperar los 10 puntos perdidos – y se volvieron a besar.
¿Cuántos meses llevaba teniendo esa relación oculta con James? Serían ya unos tres meses, a principios de octubre. Siempre era difícil que se pudieran ver, porque no podían decirle a nadie para que después vaya con el chisme a Dumbledore. Así que Hermione salía a escondidas de su dormitorio para encontrarse con él o James la llamaba para conversar de sus deberes.
Como lo quería. En principio, él es muy guapo, simpático y tan tierno que le fascinaba a la castaña. Le encantaban sus ojos azules y su cabello rubio. "Perfecto" como decían algunas de sus compañeras. Y lo que más agradecía era que no se ponía muy celosa cuando la mitas del colegio babeaba por él y él no se ponía celoso cuando algún muchacho en plena clase la invitaba a salir.
-James, estoy preocupada – le dijo Hermione cuando se habían separado para respirar.
-¿Qué pasa, Herms? – le preguntó tiernamente quitándole un mechón de su rostro.
-¿Te has dado cuenta que muchos me piden salir y yo digo que no? – a esto el rubio asintió – Es extraño, algún día sospecharán que rechazó a todos, porque estoy contigo...
-También he pensado en eso – dijo él pensativo y pasó una de sus manos por sus hombros – Debemos tomar medidas en el asunto.
-¿Alguna idea?
-Sí – y la besó.
-Vaya, que grandiosa... – dijo sonriendo la castaña.
-Creo que le pondré 10 puntos a Gryffindor, porque la señorita Granger es muy hermosa.
-¡Lindo! – y lo abrazó – Te quiero mucho.
-Y yo a ti.
-Tengo que ir a la sala común o se darán cuenta que algo no anda bien – y se bajó del escritorio – Nos vemos en la noche...
-Hasta la vista – y se besaron por última vez para después Hermione irse.
OoOoO
Ahora estaba solo. Ron con su grupo de chicas superficiales y Hermione siempre desaparecida haciendo que sabe cosa. Y eso era siempre, este año había sido uno de los más complicados.
Harry estaba sentado en su sillón preferido cerca de la chimenea y con un vaso de agua en su mano. Pensando en que sin sus amigos, él no era nada.
-Harry, andas muy solo – le dijo Ginny sentándose a su lado.
-Que gran novedad – comentó Harry dejando el vaso de agua en una mesita junto a él.
-Vaya, alguien amaneció con el pie izquierdo... ¿Sabes? Me caes mejor cuando eres Harry el simpático, alegre, algo patético y callado, así que llámame cuando pueda conversar con él – y se levantó.
El año pasado había terminado con Ginny. Lo había pasado muy mal en el verano sabiendo que la quería y que estaba sufriendo mucho para que ella estuviese con vida y no le pasara nada.
Desde que llegaron al colegio todo parecía normal, parecía como si ella no estuviese afectada. Habló con ella sobre el tema y la pelirroja le había dicho que no pasaba nada, que estaba bien y que ahora eran amigos; sólo amigos.
-¡Disculpa, Gin! – Harry la detuvo – Es que no estoy bien...
-Sí, eso lo acabo de notar – y se sentó nuevamente - ¿Algún problema?
-Mis amigos me han abandonado – respondió para después beber un sorbo de agua.
-¿Por qué dices eso? – preguntó haciéndose la loca, ella era la única que sabía que Hermione estaba con el profesor Graham.
-Ron anda rodeado de su grupo de superficiales niñitas y Hermione desaparece a cada rato.
-Mira, Hermione siempre anda de un lado a otro y piensa que están en su último curso, así que está más estresada que nunca – Harry asintió – Y Ron, es Ron... Déjalo aprovechar sus momentos de gloria.
-¿Su momento de gloria? Ha estado así desde el año pasado... – y no lo podían negar, el verano antes de ese curso había sido insufrible por las millones de cartas que esas bobaliconas le mandaban a su hermano.
-Es mejor no darle importancia... – y luego sonrió - ¿No será que estás celoso que tu club de admiradoras te haya dejado y se hayan ido al lado de tu amigo?
-¡Claro que no!
-Vamos Harry, el año pasado eras el más popular y cotizado del colegio. Ahora, eres un simple estudiante más.
-¿Cómo yo voy a estar extrañando todo eso? – preguntó incrédulo.
-Si te hace sentir mejor, yo seré una de tus admiradoras persiguiéndote para que se te pase esa cara de funeral – Harry la vio como si estuviera más loca que nunca.
-Ginny, no quiero tenerte como una psicópata siguiéndome y, además, no creo que hagas el ridículo.
-¡Harry! – gritó Ron poniéndose a su lado – Necesito que me digas que tienes que hablar algo importantísimo conmigo antes que ellas me maten – le pidió Ron viendo de reojo a las muchachas.
-Ron, necesito pedirte que hablemos sino me moriré – dijo alzando las cejas y en un tono poco creíble.
-¡Claro! – y arrastró al niño que vivió a los aposentos de los chicos.
OoOoO
La cena era como de costumbre, a exceptuar por la razón que Hermione no había llegado. Eso se hacía más frecuente y le desconcertaba mucho a Ron y Harry.
-¡Ron cierra la boca, nadie quiere ver tu proceso digestivo! – chilló Hermione sentándose junto a Harry.
-¿Dónde te habías metido? – preguntó Harry.
-Estaba en la biblioteca...
-Te fuimos a buscar allá y no estabas – le interrumpió Ron viéndola a los ojos.
-Y después fui a hablar con Ginny.
-¿Qué hablan de mí? – preguntó Ginny al escuchar su nombre.
-¿Verdad que yo fui a hablar contigo después de ir a la biblioteca? – le preguntó Hermione observando a la menor de los Weasley nerviosa.
-Eh, si eso pasó debo tener amnesia, porque no lo... ¡Auch! – gritó Ginny viendo su pie – Claro, que sí, hablamos de muchas cosas y tenemos que seguirlo haciendo. Hermione, sígueme.
-Por supuesto – dijo sonriendo la castaña sacando una manzana de la fuente que estaba frente a Ron – Nos vemos – y las dos se fueron.
-Como si algún día la viéramos, parece que sólo asiste a clases – comentó negando con la cabeza Harry - ¿Ron?
-¿Qué? – preguntó Ron que se había dedicado a conversar con Lavander.
-Nada – y siguieron con la cena.
OoOoO
Se detuvieron cerca de la salida del castillo que daba a los jardines donde algunos alumnos recién entraban a cenar.
-¿Querías dejarme sin pie? – preguntó Ginny aún adolorida.
-¡No! Pero debía salvarme de las preguntas de esos dos – le explicó sonriendo nerviosamente.
-No siempre voy a estar para protegerte, Herms – replicó la pelirroja – Te juro que me da miedo que algún día no puedas contar conmigo y te descubran.
-Yo también tengo miedo, no sé qué hacer.
-Mira, yo pensaré en algo y en la noche te lo cuento¿vale?
-Vale – y las dos se abrazaron en forma de complicidad.
OoOoO
Estaba sin nada de sueño. Tenía un dolor de estómago que no le podía conciliar el sueño y ahora andaba como alma en pena por todo el castillo dudan si debería molestar a las dos de la madrugada a la enfermera.
Se sentó en un sillón quejándose en voz baja de su desgraciada suerte.
-¿Por qué yo? – se preguntó.
De pronto, escuchó unos pasos que se aproximaban donde ella estaba y unas voces conocidas. Como siempre ha hecho en su vida, se levantó rápidamente y se tiró al suelo debajo de la mesa para que nadie la viera.
-Harry, te prometo que a veces ese grupo de psicópatas me tiene harto – le dijo Ron en pijama apoyándose en el sillón donde momentos antes se encontraba su hermana.
-Te comprendo, pero tú has subido tu ego hasta las nubes, así que no sé cómo podrás deshacerte de ellas.
- Necesito alguna forma de mandarlas a volar para que pueda tener una vida normal.
'¿Vida normal?' pensó Ginny sonriendo con una de sus geniales ideas 'Creo que ya sé la forma en que Ron podrá deshacerse de esas locas y Hermione ocultar su relación con el guapísimo Graham'. Se levantó del suelo sin darse cuenta que estaba escondida y supuestamente nadie tenía que saber que estaba allí.
-¡Ginny!... ¿Qué estás haciendo aquí? – le preguntó Harry viéndola en un camisón corto.
-Yo...
-¿Estabas escuchando nuestra conversación? – esta vez inquirió su hermano arrugando el ceño.
-¡Qué va! No me interesa escuchar sus conversaciones de "hombres", no deben tener nada bueno para que después iniciara un chisme.
-¿Entonces qué hacías acá?
-Bueno, me dolía el estómago que decidí bajar para ir a la enfermería, pero por el dolor me desmayé – dijo Ginny tocándose la frente como si se sintiera mal.
-¿Te sientes bien? – le preguntó Harry preocupado.
-Claro que me siento genial – respondió la pelirroja dirigiéndose a las escaleras – Buenas noches y gracias caballeros – y subió como huracán hacía el cuarto de séptimo año.
OoOoO
-¿Qué quieres? – le preguntó Hermione sentándose en su cama después de que Ginny se pudiera a su lado llamándola.
-Acabo de descubrir que debo ser actriz – dijo feliz Ginny.
-¿Para eso me despiertas a esta hora? Eres increíble – y se volvió a tapar bajo las frazadas de su cama.
-Además, ya tengo un plan para que cubras tu relación Romeo y Julieta – así había llamado a la relación, porque se veían a escondidas.
-¿En serio? Dime – dijo más entusiasmada la castaña deshaciéndose de las frazadas.
-Mañana, tienen que estar las dos personas implicadas para que después tú le digas a James...
-¡Argh! Está bien...pero déjame dormir que esta noche ha sido muy agitada.
-Picarona, has estado haciendo cosas no propias para una prefecta.
-Te callas ahora mismo y te vas.
-Ok, ok. Ya me voy – y se fue del cuarto.
OoOoO
Miércoles en la mañana y ya estaba nevando afuera. Todo tranquilo, muchos Gryffindors ya bajaban para desayunar y después tener las clases correspondientes.
-¡Ron, Harry! – gritó Ginny cuando bajaron los dos mientras Hermione se tapaba los oídos.
-¿Qué pasa? – le preguntó malhumorado su hermano.
-Sí, Gin. Has estado como loca esperando que estos dos bajen – agregó ya harta la castaña.
-Es que se me ha ocurrido una idea de lo más fenomenal...
-¿Otra de tus días¡Ah, no!
-Ron tiene razón, Ginny. No quiero meterme en problemas – dijo Harry ya sabiendo la popularidad de ella con sus ideas.
-Tú no te vas a meter en problemas. Mi idea implica a Ron y Herms – explicó sonriendo y sentándose.
-¿Nosotros¿Qué se te ha ocurrido? – preguntó confusa Hermione tomando asiento frente a ella.
-¡Habla! – replicó su hermano ya sentado al lado de Hermione.
-Bien. Yo sé Ron que tú quieres deshacerte de tu grupo de psicópatas admiradoras – su hermano asintió.
-¿Cómo sabes tú eso? – preguntó Harry.
-Tuve una visión en un sueño – dijo sin importancia – Y ya sé cuál es la solución...
-¿En serio?
-Claro, hermanito.
-¿Y cuál sería? – preguntó sin saber nada Hermione.
-Que ustedes dos – señalando a Hermione y Ron – se hagan pasar por novios.
La reacción fue inmediata. Hermione abrió los ojos y casi se le cae la quijada de la impresión. Ron se quedó en shock y Harry comenzó a reírse como loco.
-¡Qué estás diciendo! – preguntó molesta Hermione.
- Miren, si Ron quiere deshacerse de ellas debe tener novia para que lo dejen en paz y que mejor que tú, su amiga y de las que no pertenecen a ese grupo de lunáticas.
-¿Y por qué debería ser con ella? – preguntó ésta vez Ron mirando como si fuera un bicho asqueroso.
-¡Hey! No me mires así... – Hermione bufó.
-Ella tiene sus razones y necesita un novio para encubrir sus asuntos.
-¿Saben? Creo que la idea de Ginny es excelente, eso de verdad les servirá a los dos – opinó Harry, pero se arrepintió cuando Hermione y Ron casi se le tiran encima a ahorcarlo.
OoOoO
Draco vigilaba que nadie se asomara por los pasillos. Desde que intentó asesinar al profesor Dumbledore el año pasado la nueva directora, Minerva McGonagall, le había quitado el puesto de prefecto. Y lo puso condicional, o sea que si hacía cualquier cosa podrían expulsarlo del colegio. Así que ahora se dirigía con cuidado a los jardines sin que ningún estúpido prefecto lo sorprendiera.
-¿Sabes que me encanta de ti? – preguntó Graham.
-Dímelo – esa voz se le hacía tan conocida.
-Que eres inteligente y tan guapa...
-¡James! Te juro que si sigues con esos besos me vas a tentar.
-Veamos qué pasa con esto, Hermione.
Impacto. Una alumna estaba saliendo con un profesor. Y esto si que venía en un tiempo conveniente. Desde que entró Graham le había caído pésimo y Granger también; ahora tenía la oportunidad perfecta para arruinar su imagen pública.
El jueves tenía clase de Defensa Contra las Artes Oscuras con los de Gryffindor, por lo que después podría encarar a la parejita del año. Esa sería la gran oportunidad para que su imagen pública mejorara un poco y las personas volvieran a confiar en él. El plan perfecto se estaba desarrollando en su maquiavélica mente.
'Mañana será el gran día' sonrió triunfante saliendo del castillo.
OoOoO
Jueves. La clase había terminado hacía unos quince minutos y como era costumbre Hermione se quedó "charlando" con el profesor Graham después. Ron y Harry estaban ansiosos por irse a la sala común para que ella los ayudara con sus deberes.
Ginny había salido de Encantamientos y fue donde los muchachos evitando que entraran al aula. Ella sabía que los dos no estaban precisamente hablando y si se enteraban de eso, sería la noticia más escandalosa del mundo.
-Me da miedo que alguien venga – dijo entre besos Hermione.
-Lo sé, pero es que no puedo estar sin ti.
-Yo tampoco, James – y le correspondió el beso.
-¡Ajá! Entonces Ginny quería que fingiéramos porque tú sales con Graham – dijo Ron entrando al aula junto a Harry y Ginny.
-Yo puedo explicarlo... – dijo Hermione arreglándose la falda.
-¡Hermione! Eres una prefecta. ¿Cómo es posible? – le preguntó Harry impresionado y los libros se le cayeron de las manos.
-Intenté detenerlos para que no pasaran, pero estaban muy preocupados porque te demorabas – explicó Ginny a Hermione.
-Alumnos, les pediría guardar la calma – intentó tranquilizar un poco los ánimos – Todo esto tiene explicación.
Pero, de repente, Draco había entrado estrepitosamente en el aula. Pasó su vista entre Ron, Harry y Ginny: cuando posó su mirada en Hermione y Graham sonrió de una forma que cualquiera diría que había encontrado su presa para comérsela.
-Señor Graham, me temo que hay un problema acá – dijo Draco avanzando hasta él.
-¿Cuál sería? – preguntó el rubio.
-Usted sabe que está prohibido que una alumna y profesor mantengan una relación – a esto todos casi se desmayan.
-¿De qué me está hablando? – preguntó James algo nervioso.
-Digo que está estrictamente prohibido que salga con Granger – y miró a Hermione que parecía una momia de lo pálida.
-¿Estás loco? Yo no estoy saliendo con la señorita Granger – y se rió forzadamente Graham – Además esa no es la forma de hablarle a un profesor, mejor cuide sus palabras.
-No le creo – siguió Snape.
-Profesor, creo que por estar todo los días planeando como asesinar a otra persona su mente no está muy bien…
-Tú cállate, Weasley – dijo Draco con molestia fulminando con odio a la pelirroja que levantó su rostro con altivez – Creo que tendré que informarle a la directora de todo lo que está pasando acá. Es increíble que una Sangre Sucia como ella y un profesor estén saliendo, es asqueroso.
Tenían que salvar de esta a Hermione; los tres bien lo sabían. ¿Cuántas veces ella había salvado a él y a Harry de una expulsión inminente? Y ahora debían ayudarla.
Ron miró nervioso a Harry. El pelinegro sólo le devolvió la mirada sin saber qué hacer, pero estaba apretando el puño por si debía lanzarse a pegarle a Malfoy. Hacía tiempo que quería deformarle la cara después de lo del año pasado y ya se había aguantado mucho tiempo.
La pelirroja le dio un codazo a Ron. Él sólo suspiró sabiendo qué idea tenía en mente la loca de su hermana menor.
-Eso no será necesario, hurón – dijo Ron acercándose a Hermione.
-¿Y se puede saber por qué?
-Es simple, Hermione y yo somos novios así que no veo cómo puede creer que ella anda con el profesor Graham – y pasó un brazo por los hombros de la muchacha que lo veía asustada - ¿No es cierto que tú me quieres, mi amor?
-Hum...claro, claro que te quiero. Por supuesto que yo no estoy con el profesor Graham – musitó la castaña bajando la vista nerviosa.
-¿Ves que sólo estás alucinando, pequeño engendro?
-¿Novios ustedes dos? – preguntó Draco haciendo muecas de asco – Creo que no podré dormir esta noche...
-Señor Malfoy, para mí también es una sorpresa que la señorita Granger esté con el señor Weasley – dijo James Graham observando con algo de enfado a Ron – Pero ahora sabe que yo no tengo ninguna relación con ella.
-Sólo de alumna a profesor – agregó Ginny después de intercambiar miradas cómplices con Harry.
-Será mejor que ellos se vayan, tenemos que hablar esto los dos solos – opinó Graham.
-Sí, cariñito – dijo Hermione a Ron con una mirada de profundo odio - ¿Por qué mejor no hablamos los dos solos?
-¿Solos?
-¡Claro que sí! – lo arrastró a la salida – Amor de mi vida...
Notas de la autora: ¡Hola! Y acá tengo mi nueva historia. Como ven, es algo extraña… Lo que pasa es que la empecé a escribir en enero del 2005 (a principios de año XD!) y nunca la publiqué porque estaba ya con muchas historias y debía terminarlas. Así pasó el tiempo hasta que salió el sexto libro, lo leí y me di cuenta que la historia quedaría mucho mejor si la modificaba para que esto fuera como lo que pasaría en séptimo año si le quitamos a Voldemort.
Hasta el momento tengo que profundizar mucho más en los sentimientos de los protagonistas¿Por qué Hermione está saliendo con un profesor? O ¿De verdad Ginny está bien? O ¿Harry extraña la fama? Y por último… ¿Ron verdaderamente es feliz siendo popular, pero dejando a sus amigos de lado?
Bueno, no tengo nada más que decir. Espero que les haya gustado, o que me dejen algún review contándome su opinión, dándome consejos para mejorar, reclamos, ideas, etc…
¡Cuídense, adiós!
PD: Les recomiendo que vayan a leer mis otras historias XD! (la que se hace publicidad).
