"Rise of the Guardians"

Believing in you

Daniela A.

Copyrigth to Dreamworks.

"A todo el que quiera adentrarse en una Aventura diferente, de amor, aventura, misterio y también para el que desee distraerse del mundo y dejarse llevar por la imaginación y el camino al saber"

PARTE I: AMOR Y AVENTURA.

Capítulo 01: Volviendo a creer.

Este día eran uno de tantos en los que Jamie esperaba a que su mejor amigo Jack Frost llegara a su ciudad e hiciera aparecer nieve, tan solo había transcurrido una semana desde la última vez que lo vio, él en verdad lo extrañaba. Levantándose de su cama abrió la ventana con todo su entusiasmo y observo todo su entorno, en efecto, había nieve y muchos niños conocidos para él estaban jugando en ella.

— ¡Jamie, tu prima vendrá hoy! —Habló su madre desde la cocina— Así que date un baño antes que llegue —Culminó ella volviendo a sus labores caseros. Jamie corrió hasta el baño y comenzó a ducharse, hacía mucho tiempo que no veía a su prima y el solo hecho de contarle sus aventuras le emocionaba, planeaba contarle la gran aventura que había pasado con Jack, el cómo fue el único niño que había creído en Jack Frost a la primera que él dio señales, la derrota de Pitch y como supero su miedo hacia él y la oscuridad, volviendo a creer en la esperanza y en sus guardianes favoritos. En cuanto terminó de arreglarse corrió apresurado a la cocina tomando asiento en una silla, tomo los utensilios y vio esperanzado la comida que le ofrecía su madre con alegría pero todo cambio cuando vio lo que el plato llevaba consigo.

— ¿Sopa? —le preguntó el indignado a su madre. Ella asintió y él bufo molesto antes de comenzar a comer. El timbre de la casa sonó de improviso con un gran "tilín" resonando por toda la casa sorprendiendo a Jamie, a Sophie, su madre y hasta el perro quedó sorprendido con aquél sonido ensordecedor— ¿es ella? —preguntó Jamie emocionado dejando la sopa de lado.

—Puede que lo sea Jamie pero sigue comiendo —Dijo su madre, mientras se dirigía calmada hacia la puerta, acerco su ojo a el agujero de la puerta y observo lo que había tras de allí— Que curioso…

— ¿Qué sucede, es ella? —preguntó Jamie más emocionado que antes.

—No hay nadie… —Murmuro ella, abrió la puerta y observo todo el entorno helado, repentinamente sintió como algo saltaba sobre ella dándole un abrazo cálido lleno de vitalidad y alegría— Puede que tú seas… —Habló ella con una sonrisa.

—Sí soy yo… —Hablo una chica de unos 16 años, cabellera negra reluciente y unos ojos marrones que irradiaban niñez, extrañamente para sorpresa de todos ella no llevaba consigo un traje invernal, solo vestía una camisa de tirantes y un short además de unas botas que llegaban hasta sus rodillas, la chica observó dentro de casa con una sonrisa de oreja a oreja— Bien… ¿¡Quién de estos niños consentidos extraño a la prima Lucy!? —Gritó alargando sus brazos, se agachó para estar a la altura de los niños y recibir con gran alegría la bienvenida dada por Jamie y la pequeña Sophie, los cuales corrieron con todas sus fuerzas a abrazar a su prima, su madre sonreía por la escena, adoraba cada vez que esa chica volvía, era como la guardiana "real" para los niños, no como las historias que ella les contaba sobre el conejo de pascuas, el hada de los dientes, santa Claus, esta heroína era real ella la podía ver y lo mejor era que estaba en su propia familia dándole luz y esperanza a sus hijos. Cerró la puerta tras ella y se dirigió nuevamente a la cocina— ¿Quién se portó mejor este año? —preguntó Lucy a los pequeños.

— ¡Yo, yo! —Dijeron ambos levantando sus manos con entusiasmo.

—Pues yo veo que ninguno ha terminado su sopa —Dijo levantándose, colocó su mano en su cintura y les sonrió— ¡Quien termine primero dormirá conmigo esta noche! —Dijo entusiasmando a sus primos con una gran sonrisa.

— ¿Solo eso? —preguntó Jamie haciendo ojitos junto con Sophie.

—De acuerdo ustedes ganan —Habló Lucy— Les daré un chocolate luego —Les murmuro a ambos con la intención de que solo ellos escucharan.

—Eso será después de que tú también comas sopa —Habló la madre de los niños.

—Woops, al parecer escucho —Dijo ella en un tono de burla provocando una risa furtiva en los niños— Pero... si termino de comer antes que ustedes no habrá chocolate para ustedes —Dijo sonriendo y corriendo hacia la mesa dejando a los niños algo atrasados.

—No es justo —Dijo Jamie en cuanto logró llegar a la mesa junto a su prima y su madre, las dos soltaron unas risillas en cuanto lo vieron, Sophie con dificultad logró subirse a la mesa para continuar con su comida. Lucy intentaba comer lo más lento posible para que ellos le ganaran aunque si ellos perdieran ella de igual forma los compensaría a ambos con un gran chocolate.

— ¿Y dónde está la mayor de los Bennett? —Pregunto la Sra. Bennett, madre de los niños, refiriéndose a su hermana y madre de Lucy.

—Pues en casa… —Hablaba Lucy mientras probaba bocado por bocado la sopa— enviará mis maletas aquí mañana para pasar un tiempo con estos pequeños —Dijo dándole una sonrisa pícara a sus primos.

—Ni sueñen que harán travesuras, jovencitos —Dijo su madre haciendo que los niños comieran con desgana nuevamente, Lucy sonrió por ello— ¿Por qué llevas tan pocas ropas? Te resfriaras si te quedas así…

—Pues… la verdad amo el frío invernal, la nieve es estupenda —Le contesto Lucy con una sonrisa.

— ¡Es gracias a Jack Frost! —Dijo Jamie emocionado.

— ¿Jack Frost? —le preguntó ella.

—Sí, él es muy divertido y tiene el cabello blanco como la nieve al igual que los dientes lo que vuelve loca a Tooth y entonces esta conejo, los dos no se agradan mucho y norte, norte es genial tiene tatuajes es grande y… —hablaba Jamie apresuradamente por la emoción.

—Volverás loca a Lucy con tanta emoción Jamie —Dijo su madre relajándolo un poco.

—Está bien… —Hablo Lucy— terminemos de comer e iremos a jugar con Jack Frost afuera ¿de acuerdo? —le pregunto ella a Jamie con una sonrisa, este asintió entusiasmado y continuo con su comida.

Cuando todos terminaron de comer Lucy tomó prestada una chaqueta para el frío de su tía Bennett y salió fuera de la casa a esperar a que los niños estuvieran listos, pateo un poco la nieve y vio como unos niños jugaban con bolas de nieve lo cual le saco una sonrisa.

—Así que…Jack Frost —Dijo ella nostálgica, tomando un poco de nieve con sus manos formo una bola de nieve la agito un poco en sus manos fijando cuál sería su objetivo, habían unos cinco niños a los cuales podría lanzarles una bola de nieve y ellos ni se darían cuenta, pero había un joven con ellos, cabellos blancos y unos ojos azules que también jugaba con los pequeños— Quizás a él tampoco le importe… —Dijo mientras apuntaba a su nuevo objetivo— Bien… haya va mon amour —Culminó por decir al lanzar la bola de nieve que dio a parar justo en la cara del chico, los niños comenzaron a reír sin parar por la cara que había puesto su compañero de juegos. Lucy sonrió de igual forma.

— ¡Aquí estoy! —Dijo Jamie al salir de su casa.

—Bien… —Habló ella, cuando sintió algunas miradas en ella, los niños la habían declarado culpable, con sus dedos inocentes la apuntaban con una sonrisa en su rostro, el chico la observaba asombrado— Creo que mejor nos vamos antes de que hagan un juicio conmigo —Murmuro a Jamie el cual sonrió.

— ¡Jamie! —Le llamo una niña— ¿vienes a jugar con nosotros?

—En un momento… —gritó él.

—Ve a jugar si quieres… —Le dijo Lucy— Yo iré por los chocolates ¿de acuerdo?

— ¿en serio? —le preguntó él.

—Claro —Dijo ella dándole una sonrisa.

—Nos vemos luego entonces —Dijo Jamie cuando con mucha alegría corrió con todas sus fuerzas para jugar junto a sus demás amigos. Ella sonrió y en cuanto se aseguró que él estaría bien con sus amigos comenzó a caminar con mucha calma a buscar un sitio en donde poder comprar unos chocolates para sus primos.

— ¿Quién es ella? —Le preguntó Pippa, una chica de cabellos marrones y ojos de igual color.

—Oh, es mi prima Lucy… —Habló Jamie mientras hacía unas cuantas bolas de nieve.

—Pues tú prima Lucy —Dijo el nombre con enojo— no pidió perdón —Habló molesto el chico de cabellera blanca, los niños rieron ante la declaración del chico.

— ¿De qué hablas Jack? —le preguntó Jamie, el chico solo rodo los ojos molesto confundiendo aún más al pequeño.

—Es que tu prima… —Comenzó a hablar Claude— lanzó una bola de nieve a Jack —Dijo sin poder contener la risa.

— Ha, ha… búrlense, no fue… —Comenzó a hablar Jack— Espera, ¿tú prima puede verme? —le preguntó Jack a Jamie algo sorprendido, sorprendiendo aún más al niño.

—No lo sé… —Dijo Jamie.

—Debes preguntarle —Dijeron los demás al unísono.

—Quizás ella quiera jugar con nosotros también —Habló esta vez Monty.

—Pero si ella es mucho mayor que nosotros —Dudo Cupcake.

—Pues ella es especial —Hablo Jamie— De todas formas es una Bennett —Dijo con orgullo.

— ¿Qué esperas para preguntarle? —Le preguntó Jack emocionado.

—Es que… —Tartamudeaba Jamie— Ella fue por chocolate a la tienda… —Culminó por decir.

—Pues iremos a buscarla —Dijo Jack decidido haciendo que los niños sonrieran tan decididos como él, cada uno tomo algo con lo que deslizarse y se prepararon para la carrera de trineos que tan solo Jack sabía hacer. Y sin preguntarles nada comenzó a volar formando un gran camino de hielo que al ellos pasar sorprendían a todos los que pasaban cerca de ellos, algunos se quejaban por la rapidez con la que iban los niños, los pequeños mientras se divertían buscaban con la mirada a Lucy.

— ¡Hey, haya está! —Gritó Caleb, al momento de ver a Lucy en un local de comida— Haya estaba… —Dijo resignado al pasar el local.

Jack con su cetro de madera culminó de hacer la carretera helada, haciendo que los niños volaran al frenar y cayeran en la espesa y suave nieve.

— ¡Otra vez! —Gritó Jamie al salir de allí, provocando que todos sonrieran con su elocuencia. Se sacaron la nieve de sus ropas y se devolvieron nuevamente al local en donde estaba Jane, mientras ellos corrían Jack solo observaba atento mientras volaba muy lejos de la vista de ellos. Despidiéndose del vendedor ella salió del local con una bolsa en manos.

—Wow —Habló sorprendida al ver a los pequeños frente a ella— De haber sabido que habría tanta gente fuera esperándome hubiera actuado como famosa y los ignoraría —Dijo ella con picardía— Déjenme adivinar, vinieron por esto —Dijo alegremente alzando con entusiasmo la bolsa con dulces adentro.

— ¡Sí! —Gritaron todos al mismo tiempo causando una sonrisa en la chica y un disgusto al guardián, dejo de volar. Ya en el suelo fue hasta donde los chicos y los miró acusatoriamente— ¿Qué? —preguntaron todos nuevamente en unísono, Lucy giro su vista para saber con quién hablaban los niños. Cruzó su mirada con el chico de antes, al que le había lanzado la bola de nieve, sonrió para sí misma.

—Lo siento —Habló ella mientras sacaba algo de la bolsa que llevaba consigo— acepta esto como disculpa —Dijo extendiéndole un chocolate a Jack, él la miro sorprendido y asustado al mismo tiempo.

— ¿puedes verme? —preguntó él aun sorprendido, ella le miró extrañada.

— Que parezcas un fantasma no significa que lo seas —Dijo ella sonriendo por la elocuencia de aquél chico— ¿Lo tomaras…o…? —Preguntaba ella señalándole el chocolate que llevaba en su mano.

—Oh, gracias —Dijo el tomándolo sin darse cuenta de que había rozado su mano con las de la chica causándole un escalofrío.

—Vaya sí que estas congelado —Habló ella— Debe ser que Jack Frost te congeló… —Dijo sonriente, los chicos soltaron una carcajada por lo que había dicho ella.

—Pero que dices… él es —hablaba Monty hasta que Jack le tapó la boca con sus frías manos, el niño intentaba quitárselas ya que lo estaba congelando.

—Lo congelaras… —Dijo ella, él soltó al chico murmurando un "lo siento" mientras seguía observando a la chica confundido— Chicos será mejor que vayamos nuevamente donde estaban jugando antes este sitio es muy peligroso —Hablaba ella con los chicos mientras tomaba de una mano a Jamie y de la otra a Cupcake, los demás los seguían como si ella fuera la hermana mayor que siempre quisieron y nunca tuvieron, el chico de cabello blanco solo los veía sorprendido— ¿te quedaras allí hasta que Jack Frost te termine de congelar? —le pregunto ella sonriente mientras lo hacía entrar en razón.

—Espérenme —Gritó él mientras se colocaba al lado de ellos caminando como si fuera un humano— Entonces… ¿sabes quién soy? —Le preguntó Jack nuevamente a la chica.

— ¿Un hippie que adora la nieve y por eso anda sin calzado? —Pregunto en tono burlesco causando una risa entre los chicos, el chico solo se molestó un poco.

—Entonces…puedes verme pero no sabes quién soy —Dijo él nuevamente.

—Sí, puedo verte señor maravilla —Dijo ella guiñándole un ojo— pero no te conozco quizá porque ha pasado mucho tiempo desde la última vez que vine… ¿nos conocemos de algo acaso? —le preguntó ella esta vez.

—No —admitió él— pero… ¿tú crees en Jack Frost?

— Pues aunque te burles de mi luego… —Dijo ella sonriendo melancólica— sí, creo en Jack Frost —Habló ella al fin, el chico se sorprendió ante tal respuesta. El resto del transcurso ellos y los chicos caminaban en silencio mientras degustaban con delicadeza cada parte del chocolate como si de un elixir se tratara, en cuanto llegaron al sitio donde estaban antes comenzaron una batalla de bolas de nieve, a excepción de Lucy que solo quería observar los juegos de los niños mientras recordaba su niñez y sonreía para sí. Jack la observo sentada en la banca y se acercó a ella con curiosidad de saber más de por qué no lo identificaba como Jack Frost.

—Hey —Dijo él llamando su atención, ella lo observo con una sonrisa mientras él se sentaba a su lado congelando el sitio donde estaba— Y… ¿Qué sabes sobre Jack Frost?

—Muy poco… —Hablo ella— De niña me contaban historias de como él hace magnificas ventiscas —él la miraba alegre— sin embargo, he pasado la mayoría de mi vida en una ciudad de ambiente tropical… así que, me hice la idea de que nunca podría ver a Jack Frost en acción —Dijo ella con amargura en sus palabras— Pero sigo creyendo en él —sonrío ella— no solo por mí sino por ellos —Dijo señalando a los niños.

—Crees en Jack Frost… por los niños —Dijo Jack sin comprender, ella asintió— Ok, eso es extraño ¿Cuántos años tienes? —le preguntó él.

—Te burlaras de mí… —Dijo ella sonriente.

—No lo haré —ella le miró acusatoriamente— Lo juró —Dijo colocando una mano en alto.

—16… —Habló resignada, Jack se sorprendió ante tal confesión.

—16 —repitió él, ella asintió— ¿es en serio? —pregunto emocionado.

—Te golpeare si sigues preguntando… —Le dijo ella amenazadoramente— y… ¿tu porqué tienes el cabello blanco?

—En serio, ¿no me reconoces? —Preguntó el con brillo en sus ojos, ella quedó asombrada con sus hermosos ojos azules.

—Créeme si te conociera podría recordar esos ojos… —Dijo ella, haciendo que el chico se sonrojara.

—Ven conmigo —Le dijo tomándola de la mano y atrayéndola hacia él.

— ¿Qué piensas hacer? ni siquiera se tu nombre —Dijo ella alterada, él solo le dio una sonrisa y sin decir nada más comenzó a volar alrededor de todos asombrando a la chica —Espera… ¿co...Como es qué? —Balbuceaba ella sin poder creer lo que el chico estaba haciendo. Los niños la miraban desde debajo de ellos sonriendo sorprendidos.

— ¡Yo también quiero volar Jack! —Gritó Pippa.

Lucy se sorprendió al escuchar el nombre de aquél chico volador.

—Jack… —Balbuceo ella, mientras lo observó sorprendida— ¿Jack Frost? —le preguntó ella, él asintió. La chica quedó en shock por un momento para que luego apareciera una sonrisa que recorría todo su rostro— ¡No puede ser, eres Jack Frost! —Grito ella mientras se apegaba más a él e increíblemente en vez de sentirse incomoda por el frío se sentía segura. Jack sintiéndose ya complacido decidió bajar nuevamente al suelo, ella se separó de él y sonrió nerviosa observo por todo el lugar hasta encontrar a su primo y lanzarse sobre él para abrazarlo.

—Lucy… me avergüenzas —Habló Jamie algo sonrojado por el comportamiento de su prima mientras los demás niños sonreían.

—Fue genial Jamie —Habló ella emocionada— Jack voló sobre ustedes y, en verdad fue aterrador pero… espera —Dijo ella volviendo a sus cabales— Entonces… si tú eres Jack Frost —Hablaba mientras se acercaba y analizaba al chico— ¿el conejo de pascua, sandman, cupido, el hada de los dientes, Santa y los demás existen también? —pregunto ella felizmente.

—Bueno, en realidad solo conozco a Sandman, al hada de los dientes, al conejo de pascua y a Norte —Dijo apoyado en su bastón.

— ¿Norte?

—Oh, bueno él es Santa —Aclaró él, la chica sonrió sin poder creerlo. ¡Conocía a Jack Frost y él mismo la hizo volar y le confirmo en lo que ella creía por años… en Sandman, Santa, el hada de los dientes, el conejo de pascuas! Sin resistirlo más y en contra de su voluntad la chica se desmayó. Creyendo en él, pero sin creer en que lo había conocido.

Nota rápida antes de proseguir: los personajes de "Rise of the Guardians" no me pertenecen, mi única pertenencia es la historia y la "OC" –Lucy Bennett- la prima de Jamie (claro que en realidad es totalmente ficticia). No planeo un romance al inicio de las historia, planeo tomar las cosas con calma y mostrar un mundo hipotético y fantástico más allá de la imaginación para ello he tenido que revisar una y otra vez la escritura y gramática, aunque no soy una experta en ello, es el primer fanfic en el que he pensado detalladamente el procedimiento de la historia y puede que hayan spoilers acerca de los libros dependiendo del avance de la historia. Sin más que decir, ¡Suerte, amor y paz para todos!