Aquí su gran Asuna Ririchiyo-sama:D okno;-;

¡Vengo con esta no fantabulastica historia de una de mis parejas favoritas! ¡Redoble de tamboreeees! Tarataratarataratara~ ¡SHIYORI! Osea ShinjixHiyoriC:

Es la primera vez que escribo sobre ellos y todo gracias unos fics de esta pareja que me han encantado mucho. Así que crédito a todos esos fics y sus respectivas autoras.

En fin Una aclaración: Ésta historia se relata en los 17 (Creo no me acuerdo) meses en que Ichigo perdió sus poderes y dado que los Vizard no intervinieron en aquella Saga no importa lo que escriba todo será valido Hahahahaha:'D okyaparo.-.

Disclaimer: Nada por desgracia y mala ''Cuea'' mía nada me pertenece más que la trama de este fics

¡No los demoro más y a leer!

''Por tu culpa ¡Idiota!''

Cap. 1: Una llegada llena de celos

Mucho había pasado desde que los Vizard se volvieron menos unidos. Claro, todo empezó cuando Shinji, Kensei, Rose y Mashiro volvieron a la Soul Society provocando que cierta vizard rubia comenzará a guardarles rencor contra ellos llegando, incluso, a llamarlos ''Traidores''.

—Maldito día, maldita secundaria, malditos todos—Maldecía mientras pateaba una piedra.

Tanto como tiempo había pasado, también muchas cosas habían cambiaron, por su parte Hiyori comenzó a ir a la secundaria, para mantenerse ocupada y no morir de aburrimiento.

Sin darse cuenta llegó a su destino pero antes de entrar tropezó con alguien cayendo de bruces al suelo.

— ¡Idiota! ¡Fíjate por dónde vas... —Se puso roja de vergüenza al ver con quien había tropezado.

—Oh, pero si eres Sarugaki-san, Perdóname—Se disculpó un chico alto de ojos azules y cabellos castaños.

Extendió su mano invitando a que la tomase para ayudarla a levantarse.

—Gu-Gumiya-sempai—Tomó su mano y se levantó. Quedaron así unos segundos hasta que Hiyori de la vergüenza y nerviosismos salió corriendo.

Un Senkaimon se abrió en el cielo y salió una mariposa.

Lisa, Hachi y Love estaban en el refugio cuando sintieron un reiatsu muy conocido.

—Hola—Saludó el recién llegado con su típica sonrisa socarrona.

—Ah, Shinji, hola—Respondió desinteresada y siguió mirando su revista.

— ¿Y Hiyori? —Se atrevió a preguntar aún sabiendo lo que ella pensaba de él -Y los demás- ahora.

—Está en la secundaria ahora—Respondió Love llegando a la escena.

— ¿Secundaria?—Preguntó desconcertado.

—Sí, comenzó a ir un mes después desde que ustedes se fueron.

Shinji se quedó pensando un rato. —Vuelvo luego.

—Espera campeón, aún falta para que salga—Lo detuvo Lisa.

—Sarugaki-san ¿Estás bien? —Preguntó una tímida chica al verla toda roja y agitada de tanto correr.

—Sí—Respondió y se dirigió a su salón.

El bullicio la hartó de inmediato. Ahora estaba más agresiva e impaciente que nunca.

— ¡Cállense de una puta vez estúpidos! —Gritó haciendo que todos se callaran. Todos le tenían miedo, incluyendo a la maestra.

— ¡Cállate tú estúpida! —Gritó una chica en un arranque de valentía -y estupidez-

''Que valiente'' Pensaron la mayoría los otros sabían que su compañera moriría ese día.

— ¡¿Ha?! —Se acercó a ella con el ceño fruncido y una amenazadora y sombría cara. Se le podía ver una vena sobresaliente en su frente— ¿Qué... dijiste?

—Ah... Q-qu-e... Nada ¡Lo siento! —Sudó frío. Hasta ahí le había llegado la valentía.

-.-.-.-.-.-

Las clases ya habían terminado, y Hiyori salió mas apurada que nunca. No era secreto que muchas chicas -hasta chicos. oknoxd- estaban enamoradas de Gumiya Sakuraba pero, que a la pequeña Vizard le gustara era un secreto que debía resguardarse a toda costa.

Flash back

La clase estaba aburrida -como siempre- y se dispuso a dormir.

En el sueño~

Hiyori estaba sola en una oscuridad completa. Miró hacia todas partes pero no podía ver nada.

Una resplandeciente y cegadora luz apareció en frente de ella. Puso el antebrazo en sus ojos para disminuir la ceguera. Poco a poco fue quitando su brazo y abría sus ojos lentamente para acostumbrarse a la luz.

Comenzó a verse una silueta, luego otra y otra sucesivamente hasta verse 4 siluetas de personas.

La cegadora luz había disminuido considerablemente. Lo primero que vio en aquellas siluetas fue una melena rubia muy conocida; Shinji. Las otras; Mashiro, Kensei, Rose.

Le daban la espalda y caminaban con uniformes de shinigamis alejándose de ella.

—P-paren—Pidió pero como si no la escuchaban siguieron caminado-Ya basta... ¡No se vayan!... Por favor... No se vayan...—Arrodillada en el suelo, con la cabeza gacha y lágrimas cálidas cayendo de sus orbes color miel; escuchó:

—Adiós Hiyori—La voz de Shinji resonaba en la vacía habitación.

Extendió su mano derecha hacia ellos tratando de alcanzarlos, pero no podía moverse, intentaba levantarse pero le era imposible— ¡No! ¡Shinji! ¡Rose! ¡Kensei! ¡Mashiro! ¡Regresen! ¡No se vayan!... no se vayan...

Fin del sueño~

Se levantó de golpe de su banco sorprendiendo a su clase. Sin previo aviso salió de su salón. Caminó a paso apresurado y entró en el baño.

—Que estupidez—Miró su cara en el espejo— ¡Qué estupidez! —Golpeó el lavamanos con ambos puños.

Echó otra mirada a su cara a través del espejo. Se veía algo demacrada y cansada.

Salió del baño cabeza gacha.

—¡Oh! Casi chocamos—Dijo una voz a la que Sarugaki no puso la menor atención—Emmm... ¿Hola?

Cuando al fin la rubia había notado su presencia: — ¿Y tú quién eres? —Preguntó de forma hostil.

—Me presento. Soy Gumiya Sakuraba, segundo año y delegado principal. Y tu debes ser Hiyori Sarugaki-san ¿no? Eh oído hablar ti la pequeña violenta de primer año dic-

—Hablas demasiado—Lo cortó.

—Hehe—Se rascó nervioso la nuca—Perdón... ¿Puedo preguntarte que te paso? Sarugaki-san.

—Nada que te importe—Siguió su caminó.

—Espera, puedo ayudarte en algo si quieres.

—Pues no quiero.

—Pero...

— ¡Agh! ¡¿Qué tengo que hacer para que me dejes en paz!? ¡Pelado! —Masculló irritada.

—Puff... Hmhp- Jajajajajaja—No conseguía aguantar la risa. La pequeña ex-shinigami lo miró estupefacta. ¿Qué diablos le pasaba a ese tipo?

— ¡Pelado! jajajajaja—Se limpió una lágrimita que se había escapado.

— Me voy—Se dio la vuelta y se dispuso a marcharse.

— ¡Ah! ¡Espera! —Le tomó del brazo— Ya enserio. No me gusta ver mal a una chica—Su tono se volvió serio.

La pequeña se volvió a encararlo. —No es nada. Solo un... mal día.

—Esta bien pero si te pasa algo no dudes en contármelo—Le regalo una resplandeciente sonrisa. Nadie en ese instituto se había preocupado por ella desde que llegó. En cambio el parecía una persona de confianza.

Fin flash back

—Espera Sarugaki-san—Se escuchó una voz masculina.

''¡O no! ¡Es él!''Se puso nerviosa y no detuvo su caminar haciendo como si no hubiera escuchado.

Carraspeó —Sa-ru-ga-ki-san—La llamó pero esta vez agarró su hombro —Me gustaría llevar a Sarugaki-san a algún lugar en compensación de lo que ocurrió esta mañana— Le sonrió, y la rubia se roja tal cual tomate.

Un poco alejado de la escena -en el cielo- estaba el actual capitán de la quinta división Hirako Shinji; observándolos.

No sabía lo que le estaba pasando pero se sentía raro y enfadado; estaba obviamente feliz de ver a la Sarugaki otra vez. ¿Pero quién era ese?, ¿Y por qué Hiyori estaba sonrojada?

De alguna manera ese hecho lo molestaba cada vez más.

Su presión espiritual estaba aumentando bastante rápido, sin que él supiera el porqué.

Trato de controlarse pero se estaba volviendo notorio su incremento de reiatsu.

Gumiya se estremeció.

— ¿Qué sucede? —Le preguntó la ex-shinigami.

— ¿Sientes eso?

Fue entonces cuando Hiyori Percibió el reiatsu y miró hacia el cielo donde estaba Shinji. Ésta se sorprendió desde el día en que el rubio y los demás se fueron no habían vuelto al mundo humano.

Sin pensarlo dos veces tomó la mano -con mucha valentía- del chico y comenzó a caminar rápido.

—Saruga...

—Me gustan los helados—Comentó de la nada ''¡Demonios! ¡Qué patética soy! ¡No podía inventar una excusa más patética!'' Se enojó consigo misma. Además no es como si le gustaran mucho los helados.

—Entendido, entonces vamos por unos helados que yo invitó.

Dicho aquello el tema de Hirako quedó en el olvido. Por el momento claro.

Mientras caminaban a su destino.

—Sarugaki-san—Llamó.

—Ya basta—-Dijo de repente.

— ¿Qué? —Preguntó confundido.

—Ya basta de tanto ''Sarugaki-san'' Hiyori solo eso, Hiyori—Respondió sin mirarlo.

—Entonces Hiyori-san, resulta que—No terminó de hablar y se acercó más a ella, tan pequeña que apenas le llegaba al pecho —Se te está desatando tu coleta— Se la volvió a atar más firme.

''¡Muy poca distancia!''

Se separo inmediatamente. Escondió su mirada tras su flequillo.

''Que Linda'' Pensó el chico al verla. -¡Muy shoujo! lo sé, pero no durará mucho-

Al final después de ir por helados la noche cayó.

—Ya se oscureció, te acompaño a casa—Se ofreció el castaño.

—No—Se negó rotundamente—Gracias—Murmuró.

La pequeña ex-teniente estaba en frente a la guarida de los Vizard. Él estaba ahí razón más que suficiente para no entrar.

Suspiró y caminó. No había otra opción debía enfrentarlo.

Cuando entro se encontró con todas las miradas dirigidas a ella. Especialmente la de Hirako Shinji.

—Dejémoslos solos—Dijo Lisa y se fueron.

—Hiyori...

—No. Cállate. No me hables... yo no hablo con traidores—Dijo esto último en un susurro, aunque perfectamente audible para el rubio.

—No soy un traidor, Hiyori deja de pensar así de mi y de los demás.

— ¿A si? Capitán Hirako—Soltó con veneno. Agachó la cabeza —Sabes cuánto odio a los shinigamis y cuando se te presenta una oportunidad simplemente te vas —Wow lo había pensado durante tanto tiempo y ahora que lo decía en voz alta si que sonaba egoísta.

— ¿Qué dices?, Pero si ahora te mezclas con los humanos. ¿¡No los odiabas tanto!? ¡Estabas muy sonrojada con el tipo ese! —Exclamó; se sentía enojado cuando recordaba ese momento.

— ¡No estaba sonrojada! ¡Y a ti que te importa si me junto con Gumiya-sempai! —Masculló.

—Gumiya-sempai ¿Eh? ¡Pues bien quédate con tú Gumiya-sempai!

— ¡Maldición! ¿¡Qué diablos tiene que ver él en todo esto!? ¡Maldito pelado! ¿¡PORQUÉ NO SIMPLEMENTE TE VAS!?

— ¡Tengo todo el derecho, este era nuestro hogar!

—Sí, era, ya no. ¡Ahora puedes ir a vivir con tus lujos y hacer lo que se te dé la gana! —Apretó los puños con tanta fuerza que sus uñas se enterraron en su palma hiriéndola. Contuvo las lágrimas lo más que pudo pero sin permiso resbalándose por sus mejillas.

—Hiyori... —Intentó acercarse pero ésta retrocedió de forma violenta y desapareció con el shunpo.

Apareció en las calles de Karakura. Caminó en esa fría y oscura noche; llegó hasta una tienda.

La Tienda de Urahara para ser más precisos.

Si que no le apetecía encontrar con el pelado ése. Dio media vuelta para largarse de ahí e irse en otra dirección.

— ¡Oh!, ¡Hiyori-san! —El estúpido tendero apareció detrás de ella-¿Qué haces por acá?

— ¿Qué te importa?, estúpido pelado—El ex-shinigami avanzó hasta quedar frente a la chica.

— ¿Hiyori qué paso? —Era evidente que había estado llorando. Aún tenía el rastro de lágrimas secas en sus mejillas. Sus ojos, hinchados, su nariz y sus mejillas sonrojadas.

— ¡No es de tu incumbencia! —Contestó bruscamente y tapó sus ojos con su chasquilla.

—Ven—Abrió sus brazos hacía ella.

La chica se resistió.

—No es bueno estar solo cuando estás triste—Comentó.

Aquel líquido salado brotó otra vez pero las secó rápidamente y sin cuidado o delicadeza alguna.

—Estu... ¡pido calvo! —Saltó y dio una patada -con ambos pies- certera en el estomago del pobre hombre— ¡Creías que yo sería tan débil como para saltar llorando a tus brazos! ¡No me hagas reír! ¡Ha! ¡Tú y tus es—No terminó de hablar, o mejor dicho gritar, cuando sintió dos largos y cálidos brazos rodeándola.

Aquel abrazo de forma tan paternal, reconfortante, cálido y de confianza logró romper el muro de hierro que la rubia se empeñaba en mantener firme.

Años, muchos años sin llorar se desahogaron en ese momento después de haberse prometido no llorar otra vez luego de que la ex-capitana de la décimosegunda división Kirio Hikifune dejara la división para irse a la Guardia Real o División cero.

No supo cuánto había pasado quizás horas en los que lloró en su pecho mientras éste le acariciaba la cabeza. Subió la cabeza para mirarle, él le sonrió. Pero ella le borró esa sonrisa de un solo golpe.

—Pelado estúpido.

Como creo que ya se dieron cuenta no soy un experta en esto TTnTT pero es lo que salió~ ^^ En fin si les gusta háganme saber con un comentario o algo. Si hay por lo menos 2 reviews pondré lo más rápido que pueda el próximo capítulo.

Soy ChilenaxD lo digo por si de repente aparecen palabra ''Rara''

Chasquilla: Es el flequillo o fleco pero en Chile se dice chasquilla. -Ni siquiera el corrector reconoce la palabraxD-