¿…Que hubiera pasado…?

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Orihime Kurosaki se encuentra recargada en el marco de la puerta de la habitación de su hijo, está mirando cómo Ichigo lo recuesta y se queda a su lado incluso cuando este ya se encuentra dormido.

Mira por la ventana de la habitación y ve el cielo oscuro con una luna menguante, sin estrellas, y ella no puede evitar pensar en ese mundo tan distante y frio donde lo conoció. A ese Espada que fue su carcelero en su estadía en el Hueco Mundo.

Niega con la cabeza y trata de quitarse su imagen de la cabeza, pero es imposible. Aún recuerda su piel, tan pálida y fría como el mármol, su cabellos tan negros como del mundo al cual pertenecía, y sus ojos, esos ojos tan vacíos pero tan llenos de curiosidad por saber porque creía en esa fantasía llamada corazón.

Lo recuerda todo, todo sobre él, incluso que ya no existe.

Niega nuevamente con la cabeza y se reprehende mentalmente por pensar en él, ya es adulta, su sueño se hizo realidad ¿no? , está con el hombre que ama ¿NO?, y tiene una feliz familia con este ¿no?... Entonces ¿Por qué piensa en ese chico de mirada vacía? ¿Por qué no puede dejar de pensar en lo que pudo ser y no lo que es?

Porque ella sabe que su vida está incompleta, lo sabe cuándo ve a Ichigo mirar el mismo cielo oscuros y sin estrellas, pensando en Rukia. Lo sabe cuándo sueña con su mano extendida tratando de llegar hacia ella y luego se despierta con lágrimas en los ojos al ver que todo es un sueño y que nunca pudo llegar a tomar su mano.

Pero aunque lo sepa no cambiara nada, Ichigo sigue con ella, Rukia sigue en la Sociedad de Almas, y el sigue muerto. Sin embargo en un rincón muy profundo en su alma siempre se preguntara…

¿Ulquiorra-kun...

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..que hubiera pasado...

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... si hubiera podido alcanzar tu mano?

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Fin

¡Hola! No me conocen, soy Azuki Tsukiyomi y esta es mi primera historia de Bleach que me atrevo a publicar.

Me he dado cuenta que después del final de Bleach hay muchas historias con referencia al final en donde uno u otro personaje siempre piensa en otra persona que no sea su pareja y bueno no encontré ninguna en donde Orihime piense en Ulquiorra, por lo que decidí hacerlo yo.

Recibo de todo, flores, besos y tomatazos.

Bye!

Pd: ¡Viva el UlquiHime y el IchiRuki!