Fall.
Inktober 2017
reto 28: otoño.
.
.
.
Algo en su pecho quiere brotar, fluir y explotar; no soporta el ardor quemándole los pulmones y se encuentra deseando no encarcelar a Bakugo pero sí adorarlo como es debido. —Entonces vete, que la puerta está bien abierta.
Kirishima lo sabe, que Bakugo puede escabullirse en la oscuridad en cualquier momento, pero no es lo que él quiere. Él quiere que se quede aún si tiene qué venderle su alma al diablo, aunque esta le pertenezca ya a mil demonios.
Y en su cabeza él se susurra a sí mismo: no te vayas, no me dejes, no te abandones.
—Quédate.