CANDACE & JEREMY
Él la estaba esperando con una flor amarilla.
Ella al verlo sonrió y fue hacia él andando despacio.
Él sabía que ella amaba las flores.
Cuando estuvieron juntos, ella, aún sonriendo, cogió la flor que él le alargaba y vio un brillo inusual en sus ojos azules.
Ella se ruborizó y no pudo articular palabra.
Él hizo lo que había pensado para ese momento.
Un segundo después ella sintió una alegría más grande de la que hubiera sentido jamás al notar que sus labios y los de él estaban juntos.
Solo un ornitorrinco pasó cerca y lo vio todo.
Dos cuerpos entrelazados y una flor amarilla en el suelo.
