Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto. En cambio la historia es 100% mía, escrita solo por diversión y sin fines de lucro. Cualquier copia total o parcial será considerada plagio.

Enjoy!


Capítulo 1 – "Escápate Conmigo"

La música estaba a todo lo que daba, gracias al excelente equipo de audio se perdía la capacidad de establecer una conversación normal sin gritarse el uno a otro.

Las típicas luces de distintos colores irrumpían en la obscuridad dando un ambiente sensual al lugar, bastante forzado pero parecía funcionar o al menos los comensales no reparaban en eso.

Una barra al fondo atascada de personas ansiosas por satisfacer sus ganas de alcoholizarse hasta que no pudieran mantenerse en pie (y eso si no congestionaban su organismo con algo más "fuerte").

Por supuesto no podía faltar la pista de baile situada en el centro del recinto, donde únicamente se distinguía una masa de gente sudorosa pasando el momento al máximo, disfrutando de las canciones de moda o simplemente buscando con quien pasar la noche no precisamente bailando.

Pero a Sasuke Uchiha eso le importaba en absoluto, pues su mirada estaba fija en una exótica cabellera rosada y un par de piernas bonitas que se encontraban en medio de todo el tumulto de ebrios moviéndose al ritmo de la música. La chica en cuestión no se encontraba sola, un joven bastante atractivo la acompañaba desde hace rato y disfrutaba de la atmósfera llena de insinuaciones y promesas, lo que tampoco molestaba a la pelirrosa.

– ¡Hey, Sasuke! ¿Qué carajos es lo que estás viendo tan interesado desde hace rato?– Tenía que ser el estúpido de Naruto el que rompiera su momento de contemplación – ¿Esa de allí es Sakura? Quien diría que la encontraríamos tan entretenida. Seguro las chicas y mi Hinata están cerca– Al parecer lo habían descubierto infraganti, aunque su mejor amigo ignorara este hecho.

–Hmp– Fue lo único que contesto el chico pues no pensaba gastar saliva en un tema tan irrelevante. Decidió que había observado suficiente a la chica, así que prefirió fijar su atención en algo más interesante, como la exuberante castaña que no le había despegado la vista desde que lo vio entrar –De todas formas volverá

Así era siempre, su "relación" con Sakura (si es que podía llamársele así) era de ese modo y no es como que ninguno quisiera cambiar las cosas. Se encontraban por "casualidad" en algún club de moda y fingían no percatarse de la presencia del otro mientras pasaban tiempo con su conquista de la noche. Al menos hasta que alguno encontraba el momento oportuno en el que ninguno de sus amigos los viera irse juntos. Aparentaban todo el tiempo.

Conocían la vivienda del otro casi como la palma de su mano pues ahí culminaba el juego que empezaban todos los viernes por la noche (a veces incluso los sábados). Su casa o la suya, eso no importaba ya que el resultado era el mismo, terminaba con Sakura entre sus brazos. Claro que las cosas no siempre fueron así, siendo sinceros no sabría decir en qué momento llegaron hasta este punto.

Y es que a pesar de compartir el mismo círculo de amigos, Sasuke y Sakura no podían considerarse como tal. Lo suyo era puramente sexual y había comenzado cuando ambos estaban por terminar el último año de la escuela media, en una de esas fiestas de adolescentes donde ambos bebieron de más. No hay que ser genios para deducir en que desembocó el exceso de alcohol que inundaba sus cuerpos y nublaba sus sentidos en ese momento.

Lo que aún no entendía Sasuke después de 4 años era porqué seguían teniendo esos encuentros; cómo es que aún no se cansaba de Sakura y todo lo que ella le ofrecía semana tras semana –Quizá sea que se entrega como ninguna otra lo ha hecho– Por lo menos eso había sido lo que había concluido en una de las tantas veces que meditaba sobre el tema. Aunque no es como que le diera muchas vueltas al asunto, pues solo sentía por la chica una fuerte atracción física que era mutua y, según él pensaba, era lo único que los unía.

Terminó de un trago la cerveza que llevaba bebiendo desde hace una media hora y se levantó de su asiento para dirigirse hacia su "presa" de la noche. Pensaba entretenerse hasta que el momento llegara y que mejor con una chica completamente dispuesta a lo que fuera con él.


Sentía la insistente mirada del pelinegro desde hace rato, pero prefería pensar que le importaba un bledo lo que el pensara de la escena que estaba protagonizando. Ni siquiera recordaba el nombre del chico con el que "bailaba" en ese momento, pues más que bailar estaban más interesados en ver hasta donde podían meterse mano. Claro que, después de varias copas, lo último que se le cruzaba por la mente a la pelirrosa era mantener las manos de su acompañante quietas.

De un momento a otro decidió que tenía suficiente del idiota que tenía sus manos en su trasero, así que se apartó sin nada de delicadeza y se dirigió a la mesa que ocupaban sus amigas. Las únicas que se encontraban ahí en ese momento eran Hinata e Ino (aunque dudaba que la última permaneciera ahí por mucho tiempo).

–¿Ya te cansaste de manosearte con ese pobre incauto?– Se burló la rubia mientras que Sakura solo ponía una expresión de fastidio y Hinata se sonrojaba por el comentario –¿O es que te diste cuenta que Sasuke Sexy Uchiha y los chicos ya llegaron?

–No sé de qué carajos me hablas, cerda– Si, el alcohol le desinhibía la lengua también –Voy por un trago ¿Alguien quiere algo?–

–Te acompaño porque no creo que puedas mantenerte de pie por mucho tiempo– A Ino le encantaba burlarse de ella cada que se ponía hasta el tope de alcohol, pero aun así no podía dejar de considerarla su mejor amiga.

–Lo viste entrar ¿Cierto?– insistió la ojiazul– ¿A quién?– Ni aunque estuviera ebria pensaba admitir que estaba al pendiente de lo que hiciera el Uchiha – ¡No finjas conmigo, Haruno! Soy tu mejor amiga y soy quien te cubre para que nadie sepa que te vas con el todos los viernes.

–¡Esta bien! Si lo vi entrar y he estado sintiendo su mirada todo este tiempo– Respondió un poco irritada y sintiéndose patética por su absurda forma de darle "celos" al pelinegro.

–¿Hasta cuándo piensas seguir con esto?– Preguntó la rubia enfrentando como cada semana a la pelirrosa. Si bien sabía casi desde un principio el tipo de relación que llevaban ambos, no es como si lo aprobara, sobretodo porque sabía que su amiga solo terminaría más lastimada mientras la situación se prolongara.

–Mi problema ¿De acuerdo, Ino?–

–Será muy tu asunto, pero sabes que no me gusta que sufras. Si no piensas decirle lo que sientes entonces es mejor que le pongas punto final a todo de una vez– Contestó empezando a desesperarse, pero es que por más que hablaba del tema con la chica, nunca llegaban a nada.

–Sabes perfectamente como yo que esa no es una opción– Por supuesto que lo sabía, entendía perfectamente que por más que Sakura amara a Sasuke, este último no le correspondía, y había escasas posibilidades de que lo hiciera en un futuro.

–¡Claro que lo sé! Y es por esa razón que te insisto tanto con que dejes esto de una vez por todas– Afortunadamente para Sakura habían llegado a la barra para pedir sus bebida, lo cual ponía fin a esta incómoda conversación. Apreciaba la preocupación de su amiga, pero no le gustaba que se metieran en sus asuntos, más específicamente en ESTE asunto.

–¿Qué vas a pedir?– De esta manera Ino comprendió que la charla había acabado, así que solo le dijo a Sakura que pidiera una margarita para ella y le avisó que la esperaría en la mesa con Hinata.

Después de decirle al barman su pedido, Sakura decidió observar a su alrededor para entretenerse un rato y volvió a ver la misma escena que se repetía frente a sus ojos cada semana. Era de dominio público que Sasuke atraía a las chicas solo por su cara bonita y su físico espectacular, por eso no era raro verlo con una chica diferente. Aun así, eso no evitaba que Sakura sintiera esa punzada en el pecho cada que se repetía la situación y ella estaba en primera fila para verlo.

Sin embargo, no podía hacer otra cosa más que aparentar –Al fin y al cabo siempre vuelve a mí– Es lo que se repetía mentalmente para sentirse mejor consigo misma, porque a veces era más fácil engañarse que enfrentar la realidad.

Conocía a Sasuke desde que eran niños y casi toda su vida, desde los últimos años de primaria, habían compartido el mismo espacio y los mismos amigos; pero eso no quería decir que el reparara en ella. Llevaba tanto tiempo prendada del Uchiha que sabía y veía más allá de lo poco que veían las demás chicas en él, fue por eso principalmente que aceptó sin condición alguna la relación que llevaban. Aunque eso significara quedarse con las migajas que le ofrecía, pues eso era mejor que nada, o por lo menos eso pensaba la Haruno.

–¡Hey, rosita!– Sakura giró inmediatamente la cabeza reconociendo al instante quien la estaba llamando –¿Qué quieres maldito pescado?–

–Parece que alguien se está de muy mal humor hoy–

–¡Habla de una vez!– Sakura no era precisamente la persona más paciente del mundo y menos si se trataba de Suigetsu.

–Solo vine a darte el pedido de cada viernes– Dijo con una sonrisa socarrona mientras sostenía una pequeña bolsita de plástico con 5 pastillas en su interior –No me lo agradezcas, con que me pagues es suficiente–

–¡Cállate y sígueme si quieres tu dinero!– Contestó la chica para después tomar sus bebidas que ya habían sido colocadas en la barra y dirigirse hacia su mesa.

Al llegar se dio cuenta que sus suposiciones sobre Ino eran correctas, pues la rubia ya no se encontraba ahí. Seguro había encontrado al rarito de su novio Sai y se habían ido a perder a algún lugar obscuro y apartado. Por otro lado, lo que le sorprendió en demasía fue ver a la tímida y educada Hinata Hyuga dándose el lote con su novio, al parecer no era la única que se desinhibía con el alcohol, y por supuesto eso tenía más que encantado a Naruto.

Aprovechando que el par de tortolitos no reparaban para nada en su presencia, Sakura tomó su bolso para sacar el dinero que le debía a Suigetsu –Aquí tienes cara de pez– Dijo mientras le tendía un par de billetes –Un placer hacer negocios contigo frentesota– respondió el aludido.

–Lo que digas, ahora largo– Murmuró entre dientes a lo que él solo le sonrió burlón y se alejó de allí. Con cuidado abrió la bolsita y sacó una de las pastillas que posteriormente dejó caer en su bebida. Porque qué método más efectivo existe para evadir la realidad que este.

Después de unos veinte minutos, en los que terminó su bebida casi como desesperada, se colocó el bolso apropiadamente y se dirigió de forma sutil hacía donde se encontraba Sasuke. El momento perfecto para escaparse había llegado y tenía que hacérselo saber al Uchiha.

Al llegar al lugar donde él se encontraba con la zorra esa restregándole el trasero, tan solo pasó suavemente su mano por su espalda en una caricia que podía pasar desapercibida para todos, pero no para Sasuke que de inmediato giró la cabeza para mirarla con un amago de burla en su rostro. Sakura le sonrió de vuelta, provocándolo con la mirada, para después girarse y emprender el camino hacia la salida.

El azabache podría haber notado su perfume a millas de distancia, al igual que su mirada fija en él y la chica con la que bailaba, es por eso que en cuanto sintió su vago intento de llamar su atención respondió al instante. Cuando la vio avanzar hacia la puerta del club, soltó a la castaña con la que había estado pasando el rato, importándole una mierda que ella se enfadara, y fue detrás de Sakura.

Después de librarse de la bola de gente que hacía cola para entrar al lugar, pudo visualizarla recargada junto a su auto, esperándole en la puerta del copiloto. Tranquilamente se acercó a ella y la sujetó por la cintura para plantarle un beso feroz y apasionado, ellos no tenían tiempo ni espacio para cursilerías. Cuando se separaron por la imperiosa necesidad respirar, tan solo bastó una mirada para comunicarse y saber que era hora de irse. Así que subieron al vehículo y salieron a toda velocidad de ahí con destino al departamento del pelinegro.

El trayecto fue en completo silencio, ninguno de los dos tenía nada que decirle al otro. Cuando arribaron, el chico dirigió a Sakura hacia el ascensor poniendo una mano en su espalda baja. Tan solo espero a que se cerraran las puertas para acorralarla contra la fría pared y apoderarse de sus labios nuevamente.

La pelirrosa simplemente se dejó hacer sumisa y cuando se separaron para respirar puso un poco de distancia entre ambos. Rápidamente sacó otra pastilla de la bolsita, que resguardaba celosamente en su bolso, y se la mostro a Sasuke que sonrió complacido. Si bien ella consumía aquella droga para olvidarse de todo y solo concentrarse en el momento, él la tomaba para ampliar sus sentidos pues todo tenía un matiz diferente y mil veces mejor de esa manera.

Sakura le colocó la pastilla en los labios y el la recibió gustoso. Una vez que había tragado la tableta, continuó con su labor de saborear a la ojiverde hasta cansarse. Solo se detuvieron cuando las puertas se abrieron nuevamente indicando que habían llegado a su piso. Con prisas, tratando de no tropezarse y algunas veces deteniéndose contra alguna pared; lograron llegar a la habitación del chico de donde no saldrían hasta el día siguiente.

Porque tan solo por esa noche, una noche más en la que se permitían dejar todo y a todos fuera de esas paredes, lanzando el decoro por la ventana se disponían a seguir disfrutando de la velada.


N/A:

¡Hola gente bonita! Aquí Yupi nuevamente por estos lares con un nuevo fic SasuSaku. De una vez les advierto que esta historia es completamente diferente a lo que solemos esperar en esta clase de fics. Lo cierto es que ya me había cansado de leer siempre el mismo tipo de historias así que decidí crear algo diferente para variar.

Como ya es costumbre mia, suelo inspirarme en canciones de diversos géneros para escribir y este fic no fue la excepción. Es por esto que les quiero proponer un pequeño juego, queridos lectores. El reto consiste en descubrir en que canciones me inspiré para escribir este fic, son varias y algunas están más ocultas que otras a lo largo de los capítulos (lo cuales estaré subiendo cada semana aproximadamente). La persona que adivine todas o la mayoría, y me las mande por PM o en un review, con gusto le escribiré algún pedido que tenga sobre cualquier pareja del universo de Naruto, así que estén atentos. :D

En fin, espero que les haya gustado este primer cápitulo y no se olviden dejar sus comentarios en un guapísimo review que estaré encantada de leer. De momento me despido y nos leemos en la siguiente entrega.

¡Chao! :D