Disclaimer: No soy Akira Amano, por lo tanto, Katekyo no me pertenece. Yo sólo uso sus personajes para mis ideas randoms, y eso. Y no, no me pagan por ello, ojalá lo hicieran... En fin, al fic…
Odio
Si a Hayato Gokudera le pidiesen describir lo que sentía por su compañero Takeshi Yamamoto (y tenía que pedírselo alguien muy, muy, realmente muy importante, o sea, sólo el Décimo Vongola, porque cosas como esas no se le revelaban a cualquiera, mucho menos alguien como el Guardián de la Tormenta), podía responder perfectamente con una palabra que lo englobaba todo:
Odio.
Claro, porque Hayato Gokudera odiaba a Yamamoto, aquel idiota que se obsesionaba con un grupo de estúpidos jugadores arrojándose una pelota de un lado a otro, aborrecía a aquella molestia que parecía estar siempre dispuesto a arrebatarle su legítimo derecho y deber de ser la mano derecha del Décimo. Detestaba con toda su alma a aquel imbécil, siempre amigable, casi ingenuo, y sobre todo sonriente. Sí, de todo el conjunto de cualidades por las que el guardián de la Lluvia merecía ser odiado por su persona, aquello se llevaba el premio mayor. Gokudera realmente odiaba aquella sonrisa que Yamamoto mostraba a todo el mundo, lo enfermaba...
Lo enloquecía...
Ok, no estaba siendo sincero.
Lo cierto es que sí, odiaba aquella obsesión por el beisbol, la que lo distraía de sus deberes como guardián y miembro de la Familia (y hacían que el idiota ignorara todo lo ajeno a la dichosa pelotita, incluyéndolo a él también). Odiaba que fuera tan amigable con todo el mundo, sobre todo con el Décimo, pues lo hacía sospechar que Yamamoto tenía "otras intenciones" para con Tsuna, y él no permitiría eso. Como su mano derecha, era su deber proteger al Décimo de cualquier pervertido que osase propasarse con él (y de paso recalcarle al idiota del beisbol que él estaba ahí también). Y también detestaba su rostro, su eterna sonrisa que parecía dedicarle a todo objeto o ser existente en este mundo (y no sólo a él)
Odiaba compartirlo.
En otras palabras, Gokudera estaba celoso. Celoso por culpa del idiota de Yamamoto.
Oh, pero eso no podía decírselo, ¿cierto?. Después de todo, dudaba que el Décimo permitiera ese tipo de relación entre dos de sus guardianes. Y por eso, para no levantar ninguna sospecha, él insultaba a Yamamoto cada vez que se le presentaba la oportunidad. Porque él amaba insultarlo, ya que así nadie se daba cuenta de que en realidad, todas esas palabras que le dedicaba no buscaban más que llamar la atención de Yamamoto. De que intentaba desesperadamente que ese idiota se fijara en él.
Lo que Hayato no sabía, era que Yamamoto ya lo había descubierto hace bastante tiempo. Pero eso es otra historia.
N.A: Holi~! Primero he de decir que este fue mi primer fic de Katekyo. Esto lo escribí apenas terminé el manga, y sin ver el anime, así que no me maten por lo random y falto de originalidad ;A;. Lo tenía escrito hace tiempo, pero mi pc me odiaba y no pude subirlo. Había descubierto hace poco mi gusto por el 8059, y esta idea se me ocurrió de la nada cuando me iba a dormir. En fin, espero que no haya quedado demasiado mal D:
... Review? Hace tiempo que no pido uno.