No sé a cuantos le gusten las historias de piratas, pero mí me fascinan. Me puse a pensar y dije "Wow, de los tantos universos paralelos, no hay ninguno de ese tipo" y desde entonces he estado pensando en ello y se me ocurrió hacer esta. Espero que la disfruten.
Este fic no tiene NADA que ver con el manga. Solo tomé prestados los personajes para crear una historia con mi imaginación.
Saqué muchas ideas para este fic de El Corsario Negro de Emilio Salgari, uno de mis libros favoritos.
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen. Le pertenecen a la gran Yoshiki Nakamura-sensei que me tiene con la tortura de tener que esperar todo un mes para ver el capítulo del manga.
Pensamientos
Narraciones
- Conversaciones -
Capítulo 1 Lo que empezó todo
A altas horas de la noche y en el medio del mar hay un barco que no porta bandera alguna que indique de que reino procede, en cambio, si se mira con detenimiento, se puede ver una bandera negra con una carabela y un par de huesos cruzados, blancos los tres elementos, una bandera pirata sin duda alguna; pero para cuando llegues a identificar la bandera ya será demasiado tarde. De alguna manera parecieran que festejan debido a que se oyen voces, solo ellos tendrían el valor de festejas a altas horas de la noche, aunque es difícil saber si realmente están festejando, pareciera más bien que discuten.
- ¿Por qué huimos enseguida? – Protestaba un hombre joven, de unos veinte años, cabello rubio y ojos azules.
- ¿Cómo que por qué? ¿Es que acaso querías que nos atraparan y nos ahorcaran a todos? – le contestaba una mujer joven, demasiado joven, con suerte llegaba a los veinte, de ojos dorados, y cabello negro y largo que llevaba sujeto con una cita a la altura de los hombros – tuvimos suerte de salir vivos de allí.
- Si hubieras traído más hombres eso no hubiera pasado.
- ¡¿Más hombres?! ¿Cuánto tiempo crees que me hubiera tomado ir a Tortuga, reclutar gente – haciendo énfasis dando a entender que no solo existían los hombres – y volver para salvarte la vida? Te hubieran ahorcado a ti y a toda tu tripulación y todavía hubieran tenido tiempo para prepararse en caso de que nosotros buscáramos venganza. Aunque no es que haya muchos dispuestos a arriesgar su vida por ti.
- Pudimos al menos haber saqueado alguna que otra casa para no volver con las manos vacías.
- ¡¿Estás loco?! – gritaba la chica – ¡Tienes suerte de estar vivo! Si dos de tus tripulantes no hubieran escapado y llegado hasta mi barco ni siquiera tendrías esperanza de vivir. ¡Ahora te quejas de que vas a llegar con las manos vacías! Ruega porque tu padre no te recrimine por haber perdido el barco y a casi toda tu tripulación contra vete a saber quién.
- Era un barco de comercio. No es mi culpa que fuera una trampa.
- Lo que tú digas – la chica soltó un suspiro – Estoy cansada. Rescatar piratas no es lo mismo que atacar barcos. Me voy a dormir, y es tarde. Descansa.
- Eh, espera.
- ¿Qué quieres?
- ¿Dónde voy a dormir yo?
- Mi barco no está preparado para recibir "invitados" y ni sueñes que vas a dormir en mi camarote.
- ¡Kyoko!
- Buena suerte encontrando dónde pasar la noche Sho – dijo burlonamente mientras se retiraba y dejaba al chico murmurando lo que parecían maldiciones.
Todo ese tiempo nadie, absolutamente nadie se atrevió a interrumpirlos. Y ningún pirata lo haría en su sano juicio. El chico era Fuwa Sho, quien a pesar de tener solo veinte años llevaba un par de años atacando barcos, y siempre que volvía lo hacía con algún botín. Su padre era uno de los piratas más temidos en Tortuga, y le había "cedido el negocio familiar" a su hijo siempre y cuando este fuera capaz de hacerlo.
La chica se llamaba Kyoko, solo Kyoko. Nadie sabe de dónde había salido, solo que el Señor Fuwa se había aparecido un día hace doce años con una pequeña niña de seis años diciendo que sería su protegida, lo que significaba que si alguien se atrevía a hacerle algo a la niña se las vería con él.
Los dos chicos se criaron juntos, por lo que ella también aprendió el sobre el "negocio de la familia". Ella era capaz de defenderse sola a pesar de estar rodeada por piratas, literalmente, y el Señor Fuwa lo sabía. De hecho, Kyoko lo había probado al enfrenarse a unos chicos mayores que ella y vencerlos. Hace un poco más de un año Kyoko también quiso seguir el camino de su amigo y después de mucha insistencia hacia su protector, este finalmente cedió. Al principio fue difícil. Nadie confía en que las mujeres sean capaces de hacer lo mismo que los hombres. Muchos todavía ponían en duda que una chica de 17 años derrotara a los hermanos Ishibashi, por lo que muchos la desafiaron, aunque después terminaban huyendo de ella. Fue así cómo Kyoko pudo reunir suficientes personas para la tripulación que necesitaba y comenzó con la piratería.
Hace unos días mientras navegaba cerca de la costa divisó un bote con dos hombres que luego reconoció como parte de la tripulación de Sho. Ellos le contaron que, al atacar un barco de comercio y confiando que todo saldría bien, fueron atacados por sorpresa y perdieron la batalla. Los que sobrevivieron fueron llevados a tierra para ser ahorcados. Kyoko sin pensarlo dos veces seleccionó a los hermanos Ishibashi y a otros hombres más para rescatar a los sobrevivientes. Lograron llegar a la ciudad, pero solo quedaban cinco hombres vivos, entre ellos Sho, a quienes rescataron y salieron lo más rápido posible de allí hacia el barco, y luego rumbo a Tortuga lo más rápido posible, no quería arriesgarse a encontrarse con ese extraño barco de comercio, era suficiente con salir corriendo como alma que huye del diablo, más bien de los guardias de la ciudad.
Kyoko cerró la puerta de su camarote tras de sí y luego soltó un largo suspiro.
- Kanae, sé que estás ahí – dijo mirando hacia una esquina.
- Vaya, todavía sigues siendo capaz de percibirme, aunque me esforcé por ocultar mi presencia – dijo una chica joven, de un poco más de veinte años, ojos marrones y cabello negro.
- Es lo que obtienes cuando estas rodeada de chicos tratando de acabar contigo. Tienes que estar en guardia constantemente. Ahora no solo los chicos, cada vez que camino por Tortuga siente miradas recorrerme de arriba a abajo, es escalofriante, no puedo descuidarme ni un momento.
- Entonces, ¿cómo estaba el pueblo?
- Alegre por haber ahorcado a quince piratas. Tristes pronto al ver que los cinco restantes escaparon.
- Te ves agotada.
- Lidiar con Sho me agota. No me gusta entrar en las ciudades donde me superan en números.
- ¿Solo porque te superan en número?
- Sabes que sí. Solo lo hice porque se trataba de Sho. De haber sido otro no creo que hubiera hecho tal locura.
- Oh.
- ¡Ni se te ocurra decírselo! No quiero que se le suba para a la cabeza.
- Huelo amor en el aire.
- ¿Por qué sigues insistiendo con ello? Sabes que te he dicho que solo somos amigos. Además, sabes lo que pienso del amor.
- Sí, lo sé. No quiero tener que volver a escuchar la explicación de por qué el barco tiene un nombre tan raro como Skip Beat*.
- No es raro. Tiene su razón.
- Lo que tú digas capitana. Pero ahora creo que deberías dormir. Las chicas piratas también deben descansar. Ya me encargo yo de Sho – le dijo con un giño.
- Kanae – dijo Kyoko muy seria – no pensé que tú y Sho…
- ¡¿Estás loca?! – Kyoko rio – No deberías bromear con eso. Ni de broma me enredaría con él.
- Eso ya lo sé.
Kanae se marchó y Kyoko se acostó en la cama pensando en la conversación reciente.
El amor no es para mí. Además, los chicos son todos iguales, se piensan que son los mejores y que las mujeres no somos capaces de hacer nada. Ya verán, seré mejor pirata que se haya visto en la Isla Tortuga. Tampoco es que falte mucho, total, soy más fuerte que los chicos, incluso que Sho, por eso nunca me ha desafiado en público, aunque estoy cansada de darle palizas en casa. Rio ante ese pensamiento. Ya verán, seré la mejor. Después, me vengaré. Me vengaré de aquellos que nos abandonaron. Es una promesa mamá. Después de que una lágrima saliera de sus ojos se quedó dormida.
*Todo el mundo es libre de interpretar a su gusto. Un día me puse a pensar en por qué "Skip Beat", una de las posibles traducciones podría ser algo así como "omitir latidos", como queriendo decir que Kyoko no se volvería a enamorar. Aquí tiene un significado parecido, ya lo verán si siguen leyendo ;-)
¿Y qué? ¿Les gustó? Es algo diferente a TODO lo que he leído en fanfiction.
¿Quién es realmente Kyoko? ¿Qué pasó en el pasado? ¿Por qué y de quién quiere venganza? Tendrán que esperar para saberlo. Espero sus reviews. Volveré a actualizar cuando haya recibido reviews suficientes para mi locura. ¿Cuántos? Los que ella decida.
