Disclaimer: Umineko no Naku Koro ni y todos sus personajes son propiedad intelectual del equipo de 07th expansion
Extensión: 484 palabras.
Advertencias: Universo Alternativo, Fluffy y sin sentido 8D
Resumen: Aunque la mayoría de los rumores sobre Beatrice fueran con mala intención, no todos podrían ser falsos.
Rendición
Los observó desde la lejanía, oculta detrás de algunos arbustos aledaños al parque. Hubiese dado lo que fuera por escuchar pero, dada la distancia, no podía pedir tanto. Aguzó la vista, tratando de identificar las acciones que llevasen a cabo los dos en el parque, quienes parecían estar comenzando una discusión.
— Señorita Ange, ¿no nos deberíamos ir a casa?— le sugirió Mammon, quien se encontraba detrás de ella y añadió, dándole más peso a sus palabras—. Si el joven Battler llegase a notar que lo está espiando, de seguro se enojara con usted más tarde.
La pelirroja sólo la hizo callar y volvió la vista al frente, esperando el momento que aún no se daba. Le había advertido a Battler los rumores que corrían sobre esa chica, los cuales no eran nada alentadores ni, mucho menos, favorecedores para la rubia y esperaba que su hermano tomase cartas en el asunto.
Notó que, apenas Battler dijo algo, Beatrice se alteró exageradamente, dándole la espalda y caminando, enojada al parecer, por los senderos de la plaza, dejando a su hermano solo, con las palabras en la boca.
— Al parecer, tenía razón…— murmuró Ange para sí, mirando con un poco de tristeza a su hermano, quien había quedado petrificado en el parque, mientras Beatrice se alejaba de él, sin siquiera volver la mirada. El sol del atardecer parecía darle atributos mágicos a esa mujer, gracias a los rayos que se topaban con los cabellos dorados de la susodicha, dándoles una luminosidad especial.
Sin embargo, la hermana de Battler no podría haber sospechado, ni siquiera por asomo, que su hermano, casi en un acto desesperado, saldría corriendo en pos de ella y la abrazaría por la espalda. Beatrice intentó separarse de él y marcharse, con nulos resultados.
— Mi hermano es un tonto… no se da cuenta que ella lo está engañando…— masculló, con rabia.
— Señorita Ange— la interrumpió su empleada—. Cómo usted sabe, antes trabaje en la casa de la señorita Beatrice y no es tan mala como usted piensa. Siempre la han rodeado los rumores insidiosos, provocados sólo por la envidia de la gente. Además, se nota que la señorita Beatrice ama a su hermano.
Mammon había dicho eso varias veces pero ella era incapaz de creerle pues, aunque fuesen a causa de malas intenciones, no todos podrían ser falsos, ¿no? Dirigió su vista nuevamente a la pareja, topándose con el beso que se daban bajo ese atardecer.
— Yo… sólo quiero que Battler sea feliz… — susurró, Ange, levantándose e indicándole a Mammon que ya era hora de regresar a casa—… si es feliz con ella… no haré nada para impedir su relación. Sólo espero que no se equivoque.
Mammon sonrió, al darse cuenta que Ange algo había entendido finalmente y juntas, regresaron a casa. De seguro, Battler regresaría varias horas más tarde, con una sonrisa de oreja a oreja y hablando como un idiota.
Fin drabble: Rendición
Por: Nana Walker
N/A: De antemano, muchísimas gracias por leer. Comentarios, críticas constructivas y sugerencias son bien recibidos.
Bye bye y cuídense mucho :3
