¡Hola!, ¿Qué tal les va?
Espero que no me apedreen por esto pero bueno… ¡Nueva historia!, ya saben que a mí se me ocurren cosas locas, bueno esta es un poquito más normal, creo. Es Clasificación M así que están advertidos.
Con el "Chico de mis sueños", tengo un dilema (para los que lo leen), Pues tengo el capítulo, como en 12 paginas. Y siento que en ellas está lo que quiero expresar; pero también siento que es muy cruel de mi parte, que aparte de no actualizar en mi buen tiempo, dejarles un capítulo tan corto.
#Dilema; me cuentan en los RR los que quieran opinar sobre esto.
Ahora enfocándome en esta historia, pues habrá Lemon y Lime. Y como "A pesar de todo", se me ocurrió de la nada, mientras estudiaba xD. Bueno los capítulos serán cortos y los publicaré cada semana. Serán menos de 10 capítulos, les digo porque he escrito hasta el 5 y ya le estoy buscando el final apropiado (:. No me quiero saturar, pero la vida es así :D
En fin espero les guste, esta nueva idea y nada. Me cuentan en los RR, ya saben que siempre los leo y respondo.
Naruto le pertenece a Masashi Kishimoto, yo solo me divierto haciendo historias alternativas
**Importante
Mis disculpas si hay errores ortográficos.
La pareja principal es NaruHina
—Yei— = Diálogos
"Yei"= Dichos de otros en las palabras del narrador
Líneas horizontales son cambios de escena (Ojo aquí también, RECUERDEN: solo las líneas horizontales)
**Los recuerdos están en cursiva
Sin más, a leer (:
.
.
.
No Lo Niegues Más
Capítulo 1
.
.
.
Cerré mi mano en un puño, aún apoyada en el mármol de aquella ducha, debido a la atención que Naruto le daba a uno de mis pechos con sus dedos. En tanto la otra empujaba de mi cadera para aumentar la fricción entre su miembro y mis paredes. Mordí fuertemente mi labio inferior, conteniendo los gritos de satisfacción que demandaban salir de mí. Tenía que ser más cuidadosa, ya que no quería que ellos nos escucharan.
Sus labios besaban con parsimonia mi espalda dejando chupetones donde quería y la sensación del agua sobre mi piel y sus besos era única. ¡Rayos! Quería gritar, era tan frustrante. Mordí mi mano en un intento de acallarme
―Ah…―solté de pronto―Na…
―Shhh, amo que me llames―Lamió el lóbulo de mi oreja―pero debemos ser cuidadosos.
¡Este hombre!, totalmente contrario a relajarme, incito mi placer al hablar tan seductoramente sobre mis oídos.
—¡No me imp… Ah!—envistió dentro de mi rudamente— yo… yoo ah… ¡quiero más de ti!
—¿Ajá?—coloco una mano en mi boca e introdujo uno de sus dedos, aumentando mi erotismo— No te importa que… se despierten todos en esta casa.
—¡uhmm n... noo! por mí que nos vean todos—Salió de mí interior, para darle la vuelta a mi cuerpo y mirar mis ojos—¡No me importa nada Naruto!
—¿Entonces, no te importa que todos se enteren Hi-na-ta?
Sentí como su miembro volvía deslizarse lentamente dentro de mí.
—¡No!—gemí, apresurando el placer con que mis caderas— ¡Te quiero sólo para mí!
—Calma—detuvo todo movimiento, llenando la ducha de quejas sollozadas—quiero hacerte el amor muy… lentamente.
—¡Es injusto!, eres malo… Naruto
Mis manos resbalaban en su piel, frustrando mis intentos por reiniciar la fricción de su miembro en mí centro. Me detuve en su rostro, notando su ceño fruncido. Detalle que hizo a un lado la seguridad de su voz y sus palabras. A Uzumaki Naruto le costaba más mantener su promesa, le costaba mucho más de lo que estaba dispuesto a aceptar.
—Soy todo lo que dese… ¡ugh!
Su reacción a mis movimientos casi me hace reír de satisfacción. Si había algo que me enojaba de este Idol, era su necesidad de mostrarse impasible; sus grandes esfuerzos por no demostrar lo afectado que estaba al tener relaciones. ¡Y es que cielos!, estábamos haciendo el amor, me disgusta demasiado que se haga el fuerte ante mí. Muy alejado de querer mostrarme sus deseos, su excitación. Por ellos siempre me disponía a desmentirlo. Me encantaba saber que lo disfrutaba, y estaba segura que él lo sabía, ¡uf! Sí que lo hacía; por eso me llevaba la contraria por eso no paraba de hablarme con esos gruñidos y esa voz tan hilarante, para ocultarlo.
Seguí dando vueltas con ligeros movimientos circulares alrededor de su miembro, mientras no apartaba los ojos de su rostro.
—Dulzura.
Mi sonrisa se amplió totalmente, al distinguir sus ojos cerrados forzadamente.
—No… te contengas… Naruto; quiero más… ¡Más rápido!
—Hmp
"Dame sus migajas"
Con un movimiento rápido, logró alzarme en tan pequeño espacio, sin tiempo de protestar lo sentí entrar mucho más profundo y ahogue otro de mis chillidos de placer. Mi visión empezaba a nublarse y supe que no me quedaba mucha resistencia. Pero con todo el orgullo de mi interior me aguante.
"Preciosa, no podrías dejar de tener orgasmos, si yo fuera él"
"Nunca digas nunca, Hinata Hyuga"
Odiaba su arrogancia, su desborde de confianza, en todo momento. ¡La odiaba completamente!. Nunca pensé, encontrarme en esta situación con Naruto Uzumaki, nunca siquiera paso por mi mente que le sería infiel a un chico.
"Probemos, Hinata"
"Me amas Hinata"
—No te resistas Hyuga—¡Lo odio tanto!—Estas demasiado apretada por aquí.
Apretó fuertemente mi glúteo, mientras sus embestidas seguían siendo lentas, manteniendo el compás que había prometido y yo me moría del coraje y del ¡placer!. Pero con la misma intensidad una rabia se me desenvolvía dentro de mí. Odiaba que siempre lograra cuanto quería conmigo. Que desde el primer día fuera de ese modo…
—¡Cielos, aún no!— en mis oídos escuche el sonido ronco de su sonrisa— ¡Me falta mucho para que pueda… ah!
—Terca…
"Me deseas Hinata"
"Todo lo que ves, lo tocaste la noche anterior"
Sus palabras se repetían en mi cabeza… ¡¿Cómo lo logró?!, prácticamente las grabó en mi cerebro, su voz… su maldita voz; me embrujó.
—Yo… ah, ¡no!, ah… Naru… Naru…
Mis esfuerzos se desvanecían y es que como no caer ante él. Por eso detestaba tanto, lo que provocaba en mí. El me moldeaba a su gusto. Con el mi cuerpo siempre terminaba cumpliendo sus deseos.
—Hyuga…
Allí venían, las palabras que nunca olvidaré, las que siempre mencionaba. Con las que me llenaba de irá, cada que las escuchaba salir de sus labios.
—No lo niegues más
"No lo niegues más, Hinata"
.
.
.
La luz tiritaba en la habitación oscura, aún con los ojos cerrados podía percibirlo. Era molesto, lo peor del mundo. Todos en este mundo odiamos que nos despierten, sin excepción a mí por supuesto. Tantee con golpes fuertes la mesita de noche, donde usualmente dejaba en aparato. Recargando sobre ella mis sentires.
—Diga
Solté secamente, con la intención hacer notar mi amargura.
—¡Cuanto más piensas dormir Naruto!
—Habla de una vez Konan
Mis ojos se mantenían cerrados y así planeaba que se quedaran aunque el elevado y cínico tono de mi manager insistiera en lo contrario
—¡Podría ser posible que crecieras de una vez!, ¡Hasta cuando vas a comprender, que estas tratando con personas ocupadas y que no todos, tenemos tu tiempo!
—Uhm… para eso llamaste.
—¡Por Dios!, desde cuando la fama te subió a la cabeza ¡insensato!. Los agentes y yo. Llevamos esperando por ti dos horas, ¡maldita sea!. ¡¿Dónde mierda estas metido?!
—Hmp, en mi cama por supuesto… Donde debería estar.
Anuncie lo obvio, sin caer en cuenta aún del motivo por el que ella me gritará
—¡Son las tres de la tarde Naruto!
Entonces abrí mis ojos, notando que el único motivo por el que mi habitación siguiera oscura; era porque mi ventana seguía tapada por las gruesas cortinas, todavía.
—¡Demonios!
De un salto corrí por ropa, dejando el móvil atrás, pero fue cuestión de segundos tomarlo de nuevo y notar que Konan aún seguía insultándome.
—Es que no puedes cuidar de ti, por ti solo. Sabes cuánto me ha costado convencerlos de que un asunto muy importante se te presento para que esperen por ti!
—¡Y te lo agradezco, eres la mejor!—solté efusivamente saliendo del departamento, sin olvidar mi gorra y mis lentes oscuros— Ya casi estoy allí, en menos de cinco minutos estaré con ellos.
—Eso espero Namikaze…. Eso espero.
Corrí escaleras abajo, recordando exactamente el motivo de tanto trajín. En primera cuenta, reparando en que debía descontarle este día a la empleada que se encargaba de ordenar mi habitación. Ella solía levantarme y al parecer el día de hoy. Uno de los más importantes de mi carrera, se le ocurría faltar.
Por suerte era cuestión de callejones, los que tuve que recorrer para poder cumplir mi palabra ante mi muy eficiente manager.
Frente a mi vi el hotel de puertas de cristal, donde pude ver mi aspecto. No estaba nada mal para haberme despertado de repente.
—¡Aquí estoy!
Llegue ante la enojada peli azul, que golpeaba insistentemente sus zapatos de tacón contra el suelo. Al verme, apartó mis gafas y mi gorra pasando por mi rostro. Lo que supuse que era un paño húmedo e introducir como una rutina, un chicle mentolado en mi boca.
—Eres un desastre Uzumaki Naruto.
—Un desastre con suerte de tenerte
Konan bufó y me arrastró ante la puerta que me daría encuentro con los inversionistas y accionistas de la disquera, que se encargaba del famoso cantante… Kurama.
.
.
.
—¡Nunca estuve de acuerdo con ese concurso!— estampe mis manos sobre la mesa— ¡Me ofrecen como si fuera una pieza de carne!, ¡¿Cómo podría aceptar aquello con una sonrisa?!
—Naruto… tranquilízate— Konan halo de mí, sentándome de nueva cuenta— Señores, él tiene razón, recuerdo haber estipulado como una condición al aceptar esa inversión; que le premio al ganador fuera cambiado. No pueden simplemente escudarse de que uno de ustedes no hizo su trabajo como debía y someter a mi cliente a esto.
—Sentimos decirlo, pero la información se filtró antes de poder cambiar los planes y eso fue el principal motivo del éxito de la contienda—el viejo Sarutobi tomó un poco de su café—Sería muy mal visto echarnos para atrás.
—En primer lugar, solo me presente aquí porque me dijeron que la fecha de la gira ya fue estipulada. Pero me doy cuenta que no es más que otro de sus trucos para que acepte ese estúpido concurso. Me niego señores y no podrán obligarme a ello.
—Aunque no sepa hablar, tiene razón—Konan se puso de pie— Solo le faltó agregar que una demanda también sería debida en un caso como este. Si el fallo es suyo, ¿por qué Kurama debe pagar por los errores de su disquera?
—Tal vez porque nosotros fuimos lo que logramos que esté en la posición en la que se encuentra ahora
En ningún momento disimule mi bufido, no soportaba a ese tipo…. Danzou, el viejo que no le importaba pasar de quién fuera; después de conseguir dinero.
—Lo sé, no se me olvida. Mi carrera inicio con ustedes; pero eso no significa que deberá seguir para siempre con Konoha.
—¿Piensas abandonar, quién te hizo lo que eres?—escupió prácticamente el avaricioso anciano
—Sí y más, si estoy tratando con personas que me obligan a hacer trabajos que no quiero
—Naruto…
Konan intentó aminorar la discusión.
—El chico tiene razón Danzou —miré al jefe por el que acepte entrar a esta compañía— No podemos obligarle, si no está de acuerdo; no tendremos más remedio que cancelar todo y enfrentar a los fans de frente—soluciono en un suspiro— Después de todo te di mi palabra al contratarte Kurama.
—Gracias Hiruzen—mi manager habló por mí, obligándome a inclinar la cabeza— Bueno, si esto era todo, nosotros….
—Un momento—Danzou tomó nuestra atención de nuevo— Siento infórmate Uzumaki Naruto, que tu firmaste un contrato y que ese contrato para esta ocasión no da la razón a la empresa ahora.
—¡Qué!—mire a Konan que parecía tan sorprendida como Hiruzen
—Deberías conseguir una nueva representante Kurama; ya que esta olvido leer las típicas letras pequeñas.
—¡De qué letras pequeñas hablas Danzou!, yo hice ese contrato y el chico no tiene…
—Me tomé el trabajo de modificarlo a último minuto, por supuesto. Siento haberlo hecho a tus espaldas pero como imagine, era necesario. Los artistas al llegar a la cima siempre se ponen difíciles.
—Eso es fraude señor— intervino la peli azul— exijo que me muestre el contrato original que firmamos Naruto y yo al iniciar su carrera
—Y ese es del que habló señorita.
Extendíó el papel sobre la mesa y como su fuera poco nos brindó una copia a cada uno, donde se resaltaba en letras muy pequeñas que yo debía evitarle escándalos públicos a la disquera.
—Como pueden ver de lo que les habló. Espero entiendan mejor, la posición en la que se encuentran ahora.
Mis puños y mi mandíbula se tensaron y es que si de eso constaba el contrato. Cancelar el maldito concurso implicaba un escándalo y legalmente estaría incumpliendo las reglas.
—Maldita sea
Solté saliendo del ese lugar
.
.
.
Apagué el horno al oler el muy característico queso derretido, que me avisaba que la lasaña ya estaba en su punto.
—¡Shion deja de saltar y ven a comer!
Mi voz hizo eco en la gran casa y no exagero esta casa era demasiado espacio del que estoy acostumbrada. Shion es una niña con la que vivo y es toda una montaña de hormonas. Suspire, nunca fui muy buena con los niños y bueno nunca trate con adolescentes, siendo hija única no se me presento esa oportunidad. Mi vida constó de siempre estar rodeada de adultos y de personas de mi edad por lo que comprenderán que esto era algo totalmente nuevo.
Una de las tantas cosas nuevas… para mí.
—¡!Hinata!—la chica chillo corriendo por las escaleras que daban a la cocina— ¡Ganééé!, ¡No lo puedo creer!; ¡Gané!.
Con mis manos en mis oídos, miré a la chica con una sonrisa incómoda.
—Vaya, ganarse la lotería siempre es una gran noticia.
Quise adivinar el motivo de sus gritos y es que para mí, un montón de dinero era uno de los motivos más comunes que justifican tanto alboroto.
—¡No!—volví a llevar mis manos a mis oídos—¡Me gane algo mucho mejor que la lotería, me gane algo demasiado a alucinante; no lo puedo creer. Quiero llorar, voy a morir de tanta felicidad Hinata. Y lo mejor es que lo gane por mí misma; mis amigas se van a morir de la envidia, cuando se enteren!— me tomó de los hombros y comenzó a dar vueltas conmigo— ¡Ah Hinata! Soy tan feliz.
—Vaya— la intriga me inundó—¡Para un momento!. ¿Qué fue lo que te ganaste?
—¡No me lo vas a creer!
—¡Pues dime!
—¡El vocalista de Kurama!, Uzumaki Naruto. ¡Vivirá con nosotros por tres meses, desde mañana! ¡Y obviamente se enamorará de mí y nos casaremos!
—Espera Shion.
—Wau debo prepárame para decírselo a mis padres y así de paso entienden que los niños deben irse del nido.
—¡Stop niña!—puse mis manos en su cabeza— ¿Quién es Kurama?
—¡Ash! Hinata. Bueno pobrecilla te entiendo. En tu país seguramente aún no están tan avanzados en las redes sociales—rodé mis ojos— para hacer conocer al artista del momento. ¡El más guapo y la mejor voz, de todo el mundo!
Puf, ¡¿quién para a los japoneses y sus Idols?!
—Ya… si tú lo dices.
—Buenas, ¿hay alguien en casa?
—Hola, amor… aquí estamos Shion y yo—mi novio, Kiba. Llego a nuestro encuentro— ¿Qué tal tu semana?
—Mi semana… pesada—sentí sus manos rodeando mi cintura— Aparte de que me hiciste mucha falta.
—Hola Kiba, que bueno verte por aquí de nuevo— el Inuzuka beso mi nuca, notando la ironía en la voz de Shion— ¡Tan empalagoso como siempre! ¡Ash!, deja por lo menos que me sirva el almuerzo.
—Me da gusto que estés bien Shion
Estos dos tenían una relación complicada. Bueno Shion en sí, era una persona muy difícil de tratar y ahora que con Kiba las cosas no empezaron tan bien. Y bueno con mi definición de "no tan bien", me refiero a que Shion acuso a mi novio de ladrón, la primera vez que vino a visitarme.
El detalle esta en que la chica es muy dramática y en uno de sus ataques, llamo a la policía y la situación ya no fue tan chévere.
—Lo mismo digo—reí al verlos y es que parecía un guerra eterna— Miento… en verdad no y entre menos vengas los próximos tres meses mejor… tendré un invitado muy exclusivo y no siento que sea agradable a la vista, que estés por aquí a todo rato.
—¡¿Ah sí?! , ¿Tan especial es?
—Uff, no tienes ni idea
—No… no la tengo. Tu estas como a otra orbita de la que comúnmente estamos los humanos.
—Bueno chicos, tómenlo con calma— intervine prediciendo en que terminaría aquello— Porque no mejor comemos todos en paz.
—Sabes... no escucho comentarios de nulos.
—Uhh, que exclusiva
—Ya vale amor, Shion. Compórtense.
—Hinata, yo me comporto es tu novio, el que siempre anda buscándome pleito.
—Bueno, ya está—palmee la espalda de la chica alejándome de Kiba—Haré que se controle un poco, contigo
Guiñándole un ojo a mi chico, le hice una promesa a Shion. Que francamente esperaba algún día cumplir.
.
.
.
—¿Y como están seguros de que no me sucederá nada, en casa de una fan?— exageré con mis brazos— ¡Es una locura!, ¿podré recibir visitas al menos?
—Naru, tampoco te vas a una cárcel de máxima seguridad.
—Es eso precisamente lo que me preocupa…—rasque mi cabeza— ¿Quién va a cuidar de mí en el tiempo que este lejos?, y no es que tema de que me secuestren o algo así. Más bien siento que es demasiado peligroso, para los propietarios como para mí.
—Como nos explicaron antes… Kurama. Ellos harán público los resultados del concurso y a la ganadora. Después de que ya se hayan cumplido los tres meses. Cosa que se pueda entrevistar a la chica, confirmando que su premio fue bien ganado.
—Bueno parece sensato; pero sigo creyendo que si se les filtró, en primer lugar la información por la que ahora estoy metido en un lio como no lo hará el hecho de que estaré por 3 meses en el hogar de esa niñita.
—De todas formas, no se te dejara solo. La casa estará vigilada todo el tiempo que estés allí y aún cumplirás los pocos compromisos; que se te tienen agendados para esos días.
—¡De qué lado estas Konan!, porque siento que del mío no es.
—Estoy del tuyo—suspiro cansada—Pero ya que caímos en esto por la jugarreta de Danzou. No puedo más que hacer que defenderte; con todo mi esfuerzo y para eso debo hacerte cumplir con tu contrato. Y te Juro Naruto que en lo que me sea posible; te libraré de esa disquera.
—Y como harás eso; según mis cálculos aún nos quedan unos dos años, aceptando sus caprichos.
—Encontrare una manera, te lo aseguro—algo en su mirada provoco mi confianza—Por ahora, prepárate para la última vez que ellos te obliguen a hacer algo Uzumaki.
Bufé cerrando la nevera del camerino.
—Por cierto; no logro contactar a Ino desde ayer. De hecho gracias a que no vino a trabajar esta mañana, no me levante a tiempo para la dichosa junta.
—Jum, deberías preguntarle a tu baterista por ella.
—Cabrón, nunca creí que se atreviera a liarse con mi empleada doméstica.
—Bueno, de Shikamaru hay que esperarse de todo.
—Y yo que creía que del único del que uno debe preocuparse es de Sasuke.
—Ese es otro—miró hacia otra parte—Ya intento sus patéticas tácticas conmigo la noche anterior.
—¡¿Qué!?, ese teme. No me vayas a culpar a mí, yo le deje muy claro tu matrimonio con Yahiko—volteó sin creerme— ¡si se lo dije!, pero el sufre de un retraso supongo.
—Mejor preocúpate de hacer tus maletas. Idiota
—¡En serio le dije!
Aunque yo insistiera en convencerla ella no me creería y no la culpaba. Konan ya había convivido con nosotros desde antes de lograr la fama. Ella nos conocía muy bien a cada uno y si algo aprendió con Kurama, es que yo no me involucraba en los ligues de mis amigos. Ya me lo hizo saber antes y a mí no era como si me incomodara, la verdad.
.
.
.
Saben algo, yo no creía las palabras de Shion, nunca las creería… a veces, hasta pensaba que ella se imagina un mundo paralelo, para luego creérselo. Entonces al verla discutir con sus padres por el supuesto hospedaje de esa "súper estrella". Me convencí de las palabras que me dijo antes. Mucho más al ver al agente del Idol en casa, poniendo con puntos y señales todas las reglas que se debían cumplir durante el tan esperado hospedaje.
—¡Por favor, papá!, No puedes negarme esto, sabes lo mucho que me encanta Kurama.
¿Lo sabe?
—¡Otra razón más para negarme a dejar a mi hija SOLA con un grupo de muchachitos adolescentes y con las hormonas alborotadas y además por TANTO TIEMPO!, de verdad que a ustedes como se les ocurre hacer semejantes "premios", ¿Qué no la ve?; ¡Shion tiene trece años, por el amor de Dios!
—Por esas mismas razones, al participar se solicitó una firma del consentimiento de los padres, en los documentos; señor.
Aunque en el rostro de esa joven manager, no se percibía una pequeña muestra de fastidio. Yo me atrevía hasta jurar que no toleraría un solo grito más en esa sala. Y es que, se pasan y yo la entiendo demasiado bien; la pobre hasta quedo involucrada en la disputa familiar por hacer su trabajo.
—¡Y yo la entregue!—chilló ofendida la niña— ¡Tú mismo la firmaste papá!
—¡Cómo iba a imaginarme que ganarás!, es más, pensé que era otra de tus tantas fantasías locas, de jovencita hormonal.
Una gota resbalo por mi cabeza, ya ven lo que les digo de Shion. Ni sus padres saben si tomarla en serio, en algún sentido.
—Si hay muchos inconvenientes familiares, es posible cederle el premio a otra par…
—¡Ni lo piense!, ¡mamá, por favor dile algo!
—Cariño deja que la niña, reclame su premio.
—Querida no puedo permitirlo, sabes que viajamos mucho y sería una locura dejar a Shion sola con un grupo de muchachos drogadictos.
—Con su permiso señor—la imperturbable representante alzo la voz— En primer lugar, el único que estará hospedándose en su hogar será el vocalista principal, Uzumaki Naruto. Creo haberlo mencionado ya, y en segundo lugar no puedo permitirle que suelte esas acusaciones sobre mis chicos.
—He dicho que…
—Cariño la niña no está sola…—la señora de Takaishi intervino en la conversación y algo en su tono, no me gustó nada— no olvides que Hinata está con ella, por lo menos hasta que termine el año. Siento que ella puede arreglárselas con Shion y esa estrellita por tres meses
Bueno… primero, sé que espiar conversaciones ajenas no está bien pero ¡fuck my life!, sabía que algo de todo este asunto no pintaría bien para mí. Empezando porque toman decisiones por mí y sé que estoy en su casa gracias al programa de intercambios, pero de allí a tratarme con su niñera/empleada; ¡claro que no!
—Hinata debe asistir a la universidad y estudiar, además no creo que sea correcto; sumarle más trabajos…
¡Ja!, por fin, algo de coherencia.
—Cuidar de la niña no es un trabajo.
¡Claro!, como ella ni siquiera convive con su hija. ¡No tiene ni idea!
—Nina, Hinata no debe descuidar sus estudios.
—Y no lo hará, ella solo verá que lo chicos estén bien y no estén solos. Se ve que es una chica capaz, si hasta se las ha arreglado para que ese romancito que tiene, no le afecte a sus calificaciones.
¡¿Y quién se cree que es para saber eso?!
—¡Si papi!, Hinata puede con todo, ella es así como la mujer maravilla, ni te imaginas.
Ay no, ay no. Es que me van a escuchar... no pueden pretender manejar mi vida, después de todo si estoy en su hogar es porque ellos mismos se inscribieron en esa organización de ayuda estudiantil.
.—Bueno, hablaré con ella sobre esto. Por lo pronto, creo que está decidido que el tal Kurama es bienvenido en mi casa, señora…
—Llámeme Konan, y pues ya visto esto. Aclaremos una vez más los puntos.
.
.
.
Tomé quinientas bocanadas de aire aproximadamente y es que este tipo de asuntos; se tratan con inteligencia. Más que coraje y fuerza bruta. No faltaba mucho para que la cabeza de la familia Takaishi, Makoto Takaishi; hiciera presencia en la cocina para "sugerirme" cuidar a su hija, etc.
Ya más relaja y sin afán de nada se me senté en el comedor y atendí los libros que previamente dejé de lado, al escuchar los gritos del salón principal del hogar.
—Siento, interrumpirte Hinata. Pero tengo un favor muy inmenso que pedirte.
Voltee con las intenciones súper claras a rechazar su petición cuando al ver la cara del hombre, me hizo reevaluar la situación.
—Veras, ya sabes como es mi hija de impulsiva y algo… peculiar—expreso un mueca al encontrar la palabra perfecta para describir a la niña con mucho tacto— Ganó un concurso donde su cantante favorito; podría convivir con ella por 3 meses y con convivir, estipula que deberá quedarse en nuestra casa y tenemos que mantener sus caprichos prácticamente.
Alcé una ceja al verlo discutir consigo mismo y es que el señor Makoto era muy distinto a su esposa, era un hombre muy humilde e ingenuo, a decir verdad. Siempre terminaba complaciendo los caprichos de su familia como… no podía ser la excepción este. Al fin y al cabo era un gran hombre y hasta me agradaba. Consta que dije gran hombre... porque como padre, daba mucho que desear.
—Bueno parte de eso, sabes que Nina y yo no pasábamos nada de tiempo en casa y dejar a Shion sola con un hombre. No es lo más sensato.
—Aja—parpadee rápidamente, al ver que esperaba que dedujera el final de su frase— Entonces usted me propone que la cuide durante esos tres meses. ¿No?
—Sí, exacto. Pero no creas que será sin paga, claro que te pagaremos por tus servicios. No faltaba más, por eso espero con todo el favor de mi alma que no te niegues; porque la niña está muy ilusionada con todo esto y me sentiría el peor de los padres porque aparte de no compartir mucho con ella. Le negaría que uno de sus extraños sueños se cumpliera.
Las palabras salieron de su boca con tal velocidad, que se me hizo imposible, seguir manteniendo mis intenciones. Suspire; y pues intentaba ser un buen padre… no le dedica nada de tiempo a su hija, pero intenta hacerla feliz; al fin y al cabo. Lo más triste era que no necesitaba escuchar, lo que ya era consciente y no hacía nada para repararlo.
—Yoo
—Por favor, Hinata. Sería de mucha ayuda.
—Bueno yo…
—No sabes, cuanta tranquilidad me daría que no te negaras
Achique la vista. ¡Igual, no parecía que pensara permitir que me negara!
—Uhm… señor está bien
—La paga será buena, no lo dudes.
—sí, lo entiendo y acepto.
—¿Si?
—Si…
—¿Segura?
—No me tiente.
Con una sonora risa y un formidable apretón de manos, Makoto Takaishi cerró el trato. Ni por un momento, imagine que esa decisión haría que mi vida diera un giro de ciento ochenta grados y todo terminara de cabeza. Pues aunque yo juzgara a Nina de Takaishi, sobre su poco conocimiento ante su propia vida, en realidad la que no tenía ni idea era otra.
.
.
.
¡Termino!
Bueno aquí tienen el capítulo 1.
Sí, en esta historia, verán a una Hinata infiel #OhGod
Cuéntenme que les parece. ¿Si lo amaron, lo odiaron, merece conti o qué onda?
¡Cuéntenme en los RR!
¡Nos vemos la otra semana!
RR = Yei (:
